Deja una luz encendida. | American Idol | Cookleta | I/III

Sep 25, 2009 18:02

Título: Deja una luz encendida. ( i. ii. iii.)
Fandom: American Idol RPS.
Pareja: David Cook/David Archuleta.
Notas: Para blendertest a cambio de una donación a DonorsChoose.org :) Perdona la horrible demora, guapa. TODOS LOS AGRADECIMIENTOS DEL MUNDO a newyorkangst (Su) y daniela_lynx, que hicieron un trabajo de beteo A+ (los errores que pueden estar quedando: todos mios) y más hand-holding del que me merecía.<3 Las fotos son anacrónicas a la historia, título por la canción Light On de David Cook. Comentarios habilitados en la parte final.
Advertencias: Diferencia considerable de edades, emo adolescente y no tan adolescente, se menciona varias veces a un familiar enfermo/muerto de cancer.
Rating: R.
Palabras: 13492.
Teaser:

No sabe qué haría él si su madre, su familia, hubiesen tratado realmente de limitarle; si pensara que Dios (el concepto de que llega a tener por "Dios", en cualquier caso) va a darle la espalda si no sigue las reglas de un juego que está por escrito. En algunos aspectos, de pronto concluye, como un golpe, Archie es más fuerte que él.

No sabe muy bien qué hacer con esa información.



i.



American Idol es delirante. Es como un viaje de LSD al borde de tirar por mal camino, y David lleva suficiente tiempo en encajarse a la vida del sexo, drogas y rock para que los alucinógenos no le sean materia desconocida. Y American Idol es peor y mejor y más extraño que cualquier cosa que recuerde, o sólo tenga impresión de recordar, o no recuerde en absoluto, pero le hayan contado. Demasiado, es lo que es. Demasiado. Los gritos, las cámaras, la gente.

Ha conectado con Johns, y Jason es un buen tío, y con la mayoría del resto de gente en la casa, colegas y visitas, pero aún le parece estar navegando en medio de un océano con una tabla de surf. Cada vez que piensa en Adam, en la última vez que vio a Adam, joder...
Se siente solo, es la cosa. Cada vez que piensa en Adam, en el hospital -- cada vez que sale de un ensayo y Johns va a llamar a alguien o algo, y Carly pasa de él con una palmada en el culo -

David se jacta de ser sociable. No ha olvidado el nombre de nadie (aún, cree) y sabe más o menos de qué va la vida de cada uno de sus colegas, sean treinta y seis, veinte o doce. Pero no le parece muy probable que vaya a encontrar un flotador en el niño mormón o el rasta-hippie, por agradables que sean. Es un competencia, por todos los cielos.

... cosa que se le olvida completamente cuando encuentra a Archie llorando en uno de los patios interiores. Estaba buscando un espacio para practicar. Archie no se da cuenta de que está allí por al menos un minuto. El minuto que David tarda en darse cuenta de que Archie no está sonriendo, de que le tiemblan los hombros y le brilla la cara; otro, para que su mente sume todas las anteriores. Cristo, joder.

- Archie.

Archie se sobresalta y sonríe, y Cook nunca ha sido un buen hombro para llorarle encima, pero puede comprender eso de tener diecisiete y pensar que la vida está explotando alrededor tuyo. Que Archie le sonría, aún secándose la cara, le desconcierta, pero no le parece realmente raro. Los segundos anteriores suman una de las primeras veces que no le ha visto sonriendo, si no la primera.

- Uhm. Oh, cielos. Hey. Hey, Cook.
- Hey, chico - saluda, sentándose en una banca frente a él y acomodando su guitarra al lado.

Archie sigue sonriendo, y sigue tratando de secarse la cara, medio histéricamente. David ni siquiera recuerda cómo iba esto, pero puede tratar. No va a ser difícil, es lo que piensa. Archie no tiene hermanos con cáncer, ni está vendiendo sus principios (por no decir alma) a los corporativos.

- ¿Quieres hablar?
- No. No, no, no, no te preocupes - Archie gesticula frente a su cara, en el aire -. Sólo. Uhm.
- ¿Te dejo solo? - David está levantándose, cogiendo su guitarra del puente, pero Archie vuelve a agitar las manos entre ellos.
- ¿No? Por favor. No.
- Vale - David vuelve a sentarse, tranquilamente, y observa mientras Archie se arregla la camisa innecesariamente y sigue secándose la cara, aunque ha dejado de llorar. Le brillan las mejillas y tiene los ojos rojos.
Es una visión casi cómicamente trágica. Archie tiene una cara muy expresiva, muy inocente. Parece un cachorro al que le han quitado su juguete favorito. Duda visiblemente entre quedarse en su espacio y caminar hacia David, balanceándose y dando medios pasos, pero finalmente se queda apoyado en la pared, con un suspiro muy callado.

- Es sólo. A veces ... - empieza, interrumpiéndose a si mismo - Las cosas que no puedo hacer, er. Debería estar agradecido -, asiente, y da un respingo, y David se inclina y asiente y trata de parecer confiable, al menos. Adulto, joder -. Papá dice que debería agradecer, cada día, pero. Y estoy agradecido, cielos, estoy. Pero. Uhm. No es. No es lo que esperaba.
- Está bien si a veces es demasiado, Archuleta.
- No es demasiado. Es. Oh, cielos - entierra la cara entre las manos y jadea, como si no hubiera dejado de llorar. Como si estuviera llorando, por dentro.

David comienza a ponerse algo nervioso. No es bueno dando consejos, no a gente que casi no conoce y a quienes sólo podría decir trastadas demasiado repetidas. Es bueno abrazando y dando un par de palmadas en la espalda, llevándoles a bares o a comer algo, incluso en una ocasión, a un bar de strippers. No es un mal amigo, pero no es amigo de Archuleta. No es realmente amigo de nadie en la puta casa, excepto quizá de Johns.

Archie hace un ruido gutural que regresa su atención a él, y le hace sentir algo avergonzado. El chico tiene apenas diecisiete años y ya no tiene a su padre en la casa, no tiene a nadie cercano en la casa, que David sepa, no más que él.

La competencia y el cansancio les están jodiendo la cabeza.

- Son las cosas que no puedo hacer - murmura Archie, tan bajito y apretado que David le escucha sólo por haber estado prestando atención.
- ¿Tienes algún problema con la lista?
- No. Uhm. ¿No realmente? - Archie mira a un costado, como nervioso, ojos brillantes y una mueca en la cara que ya, por lo menos, ni siquiera intenta ser sonrisa -. Es sólo. Me gustan algunas canciones, ¿sabes? Pero 19 escoge, y luego mi padre escoge, y después yo. Y no son sólo las canciones. Y mi familia, mi iglesia. Es... eso es demasiado. A veces. Aunque no debería. Quiero decir. No debería, oh, cielos. Estoy agradecido. Estoy.
- Oh.

Y algo en la cabeza de David se termina de desconectar y acaba al otro lado del desconcierto, rayando en la humillación útil. Útil en el sentido que de pronto David entiende lo estúpido que estaba siendo. Por supuesto que Johns es su amigo, Carly es su amiga, Jason es su amigo; David Archuleta es su puto amigo. Están todos metidos en la locura de American Idol, pero ninguno está solo. Humillación en el sentido de que el "niño mormón" tiene problemas más que comprensibles, y que dejan a David con la mente en blanco.
Pero Archie es su amigo, joder. Epifanía de epifanías.

- No sé qué decirte, Archie - empieza, aún algo vacilante. Cristo, ni siquiera puede imaginarse qué haría de tener más de una soga al cuello. 19 es mucho más que suficiente, mucho más que demasiado -. No soy parte de tu iglesia y realmente no entiendo cómo funciona. Pero querer ciertas cosas que nuestros padres no creen que sean las correctas... eso es normal. Puedes criticar sus opciones sin dejar de quererlos. O de estar agradecido.

No ha terminado de hablar cuando lágrimas empiezan a correr por la cara de Archie como contra su voluntad. David no se lo imaginaba llorando (no se lo imaginaba no sonriendo, es la verdad). Se levanta con un suspiro, y lo abraza porque es lo único que se le ocurre.

Archie se derrumba contra él, no sabe cómo más describirlo. No es como ha visto derrumbarse a otras personas, no es como él en el hospital, cuando por fin, por fin admitió que Adam podía... -- Archie tiene un llanto callado, excepto por pequeños "mm"s y "nn"s, jadeos y temblores en los hombros que trata de sostener. Es tan pequeño, mierda. Le tira algo en el pecho. No sabe qué haría él si su madre, su familia, hubiesen tratado realmente de limitarle; si pensara que Dios (el concepto de que llega a tener por "Dios", en cualquier caso) va a darle la espalda si no sigue las reglas de un juego que está por escrito. En algunos aspectos, de pronto concluye, como un golpe, Archie es más fuerte que él.

No sabe muy bien qué hacer con esa información.

Pero le sigue sosteniendo, hasta que los temblores se detienen. E incluso entonces, lo deja respirar sobre su camisa (que ahora necesita urgentemente un lavado). Empieza a bajar lentamente de la desconexión y sólo le queda el desconcierto, como algo frío en su estomago. Abraza a Archie un poco más fuerte, y si sus ojos se han humedecido un poco también, joder, nunca nadie dijo que no fuese emocional. Le desespera hallar una idea, alguna serie de palabras que vayan a arreglarlo todo. Archie es pequeño, es un niño de todas las maneras que cuentan, pero es una de las mejores y más talentosas malditas personas que David ha conocido.

Archie se separa de él empujándose suavemente con las palmas en su abdomen, riendo despacio, una sonrisa algo más sincera dibujada en la cara.

- Gracias - murmura, mirándole los botones. Tiene uno marcado en la mejilla.
- De nada - David le da un par de palmadas en la espalda y deja allí la mano, más por hábito que nada -. Literalmente. Creo que no te he dicho nada útil - su voz, áspera y algo cortada, le deja en evidencia, pero Archie no parece darse cuenta. Está otra vez arreglando su ropa, mirando a ambos lados, a cualquier parte menos a David.
- Oh, no. Uhm. ¿Realmente no recuerdo mucho? Tengo la cabeza como, er, revuelta. Aun. Pero hablar me ha hecho bien - toma aire, cierra los ojos, y con lo que parece un profundo esfuerzo, levanta la cabeza y le mira directamente -. Gracias. Por escuchar. Y por, er.
- De nada - David da un paso atrás, y Archie otro, y David le sonríe tan animosamente como puede, agitando una mano entre ellos, "no es problema".

Archie le sonríe también, sonrisa David Archuleta en total potencia, y David se encuentra sonriendo más, como un imbécil. Y se sonríen como tontos unos minutos más, hasta que Archie empieza a reír con hipo.

- Oh cielos, Cook - mira a su guitarra - ¿Venías a ensayar? Oh, lo siento. ¿Te dejo para que...? Uhm. Lo siento.

David le interrumpe levantando y agitando su mano otra vez.

- No pasa nada. No tenía mucho ánimo para cantar esa puta canción otra vez, de todas maneras - y entonces, se le cruza la idea, pequeña, brillante - ¿Quieres cantar un rato? Nada de la lista.

Archie se ríe, alto y cortado y aún un poco húmedo, y corta ese medio paso, ambos caminan hacia la banca. Archie se sigue secando la cara, como un tic nervioso, pero sonríe sinceramente.

Al final de la primera canción, David comenta a Archie que su hermano tiene cáncer, y que probablemente va a morir en un par de meses. Archie hace uno de sus ruidos, pero no dice nada, sólo pone una mano en su hombro. David empieza a tocar algo de Sarah McLachlan. Es trágico al punto del ridículo, patético y Archie se sabe cada palabra.

David también.

*

Después de esto, son él y Archie y Syesha, Cristo.

Cristo, joder.

David se siente mareado, aturdido. Sabía que podía llegar aquí. Ahora está aquí.

Ahora... Cristo, joder, mierda.

Syesha se ríe de él y le toca la cara y dice "oh cielo, oh cielos, oh Dios." Y Ryan les está dando indicaciones, pero con expresión de saber que no le están oyendo, así que no es importante. Archie está en su esquina sonriéndole a todo el mundo y hablando con su camisa y con sus zapatos y con la muralla. Todo el mundo quiere felicitarles. Syesha está preguntando donde mierda está Jason y entonces Archie también, aunque con un fraseo muy diferente y entonces se acerca y Syesha les toma a ambos las manos.

- Top tres - dice. Y ninguno está pensando en la competencia -. ¡Top tres!
- ¡Top tres! - repite Archie, levantando los brazos y haciendo algo como un baile de la victoria.

Ambos le miran expectantes, pero David sólo puede sonreír.

Alguien les dice, finalmente, dónde está Jason y Syesha corre, David y Archie tras ella, y David por fin recupera la voz.

- Buen trabajo, chico - dice y de pronto tiene un montón de Archuleta metido bajo el brazo.
- Gracias. Eeeh, gracias. Oh, cielos. Gracias.
- De nada.

Y es un gesto estúpido, pero le besa la sien y Archie se tropieza, aunque ambos están corriendo ahora. Syesha está el final de un pasillo, en un sofá, tirada sobre Jason.

David y Archie intercambian una sonrisa y ocupan el impulso para dejarse caer; Archie, a un costado del sofá y David, sobre todos ellos.

*

Como finalistas, su rutina cambia tanto como puede cambiar. Archie y él tienen ahora mucho menos tiempo para cosas sin importancia como respirar, comer y dormir. Tienen, en cambio, una cantidad ingente de tiempo juntos.

David trata de plantearse a Archie como un hermano menor, pero tiene suficientes para no poder imaginarse a alguien como Archie saliendo de su familia. Archie sigue siendo exactamente la persona que prejuzgó al principio: inocente, alegre y religioso. Es también terriblemente terco, lo cual le resulta tan inesperado que cada vez que Archie dice algo del tipo, "no, no, puedo hacerlo, está bien así, en serio, no, oh, cielos, no, así," David acaba riendo a carcajadas y todo el mundo le mira raro, excepto Archie, que se sonroja y esconde la cara entre las manos con una seguidilla de "oh, Señor" , que sólo hace que David se ría más fuerte. Archie hace a menudo eso de sonrojarse y tartamudear. Es adorable. Y la terquedad no es el único rasgo que David descubre, con su nueva segunda vista. Archie está lleno de detalles inesperados. Quizá es por la cantidad de tiempo que David pasó teniéndolo a un brazo de distancia, que ahora la mayoría de las cosas que Archie hace le parecen totalmente nuevas y curiosas. Quizá es porque David nunca se pensó capaz de respetar a una de esas personas con religiones dogmáticas y ahora no puede imaginar estar en la vorágine de su vida con ninguna otra persona. Con Johns, Syesha, Jason, cualquier de ellos, si hubiera sido el resultado, pero es Archie, que se lo merece quizá más que él mismo. David no puede imaginarse otra cosa.

Su madre le diría que está madurando. David prefiere pensar que es su propio y especial Síndrome de Estocolmo con toda la casa, todo el show. Amor a lo bestia. O lo adoras, o te acabas tirando del techo. Como a la música, más o menos.

- Cook - Archie asoma la cabeza por la puerta de su cuarto. David le sonríe, deja la guitarra a un lado y se sienta en la cama a piernas cruzadas.
- Hey.
- Hey - repite Archie, dudando un momento antes de que David de palmadas en el cobertor junto a él.

Archie sigue dudando, incluso después de entrar al cuarto. Hace todos sus gestos nerviosos juntos, desde reordenarse la camisa hasta morderse el labio. David lo deja, suficientemente divertido mirándolo.
Está la otra cama del cuarto, pero Archie se sienta donde David le indicó, ojos fijos en sus zapatos.

Es bastante obvio que Archie quiere o bien hablar o preguntarle algo, así que David le da su tiempo, cogiendo de nuevo su guitarra y acomodándola en su regazo, fingiendo afinarla, sacándola de tono a propósito hasta que Archie frunce el ceño y le da una mirada casi irritada, antes de sonreír. David vuelve a hacer el gesto de dejar la guitarra a un lado, pero Archie pone una mano en el cuerpo de madera y raspa las ultimas cuerdas con la uña.

- ¿Alguna vez...? Uhm - empieza, con los ojos en el hueco de la guitarra. David trata de parecer atento. Comienza a tener práctica en ello -. ¿Has...?

Archie toca una de las cuerdas con más fuerza de la necesaria y la nota que suena es como un golpe. Le hace saltar y David pone una mano en su brazo sin meditarlo, porque Archie parece a punto de salir corriendo.

- Oh, cielos.
- ¿Pasa algo?

Archie mira a la mano en su brazo y al brazo de David, antes de mirar en su dirección general y finalmente, muy, muy lento, a su cara, ojos muy abiertos y brillantes, como un animal asustado.

- No, quiero. Quiero decir. Oh, Señor. Uhm. Vale. Es mejor si... no. Carly dijo... es algo, uhm, tonto. Realmente.
- Pregunta - David le interrumpe, tratando de no echarse a reír, estrechando un poco su brazo antes de soltarlo.

Archie le sigue mirando por un largo, incómodo momento, aún con esa expresión abierta, pero que David no sabe descifrar. Sorpresas, sorpresas. No es algo agradable, en todo caso y al cabo de casi un minuto, David levanta las cejas y Archie salta otra vez. Se sonroja tan violentamente que David no puede no reírse. Archie baja la cabeza y su voz le pilla en medio de una carcajada, serenándolo como un cubo de agua fría.

- ¿Alguna vez has besado a un hombre?

El chico a veces hace esto donde llega a tal punto de nervios que cruza al otro lado y suena totalmente seguro, claro y firme. David lo oye pasar varias veces en entrevistas y a menudo cuando le toca oír a Jeff dándole sermones, en sus "sí, papá, por supuesto, papá". Siente la presencia de Jeff como un fantasma en el cuarto, y toma aire, profundo, casi agradeciendo su mente en blanco, por la sorpresa, por la rabia, por (¿Puede admitirlo? Claro que puede, mierda) el miedo.

Archie tiene los ojos fijos en la pared y respira tan pesado que es audible.

- Sí - contesta, en tono forzadamente casual -. Varias veces.
- Oh.

Archie no sale corriendo. Lo cual es bueno. Tiene las manos empuñadas y los ojos sólo medio abiertos, y David prefiere dejar de considerar la situación entera. Es demasiado extraña.

- ¿Eso es todo? - pregunta, tratando de prepararse para la peor, pero Archie sólo agita la cabeza.
- No. Es sólo... No lo sé - enrolla y desenrolla los bordes de su camisa -. ¿Por qué?

A David le toma casi un minuto ordenar sus ideas y luego bajarlas a terrafirme.

- ¿Por qué... besé a personas con pene?

Archie hace un ruido como de gallina muriendo, se pone rojo y mira fijamente a sus zapatos. David siente que algo en su garganta se deshace, le deja el estómago lleno de hierro, pero puede respirar un poco mejor, sonreír.

- Si no tienen barba, no hay mucha diferencia. Y si la tienen, no es una mala diferencia - intenta bromear, pero Archie no reacciona. David suspira, comenzando a sentirse incómodo él mismo -. No me importa. ¿Te importa a ti?
- ¡No! No. No - dice Archie, abruptamente, en esta voz pequeña y asustada, y a David le toma un momento muy corto, pero demasiado largo, entender. Entender más de tres meses de pequeñas líneas incomprensibles, entender tres o cuatro conversaciones que oh, joder, estaban plagadas de subtexto. Entender a David Archuleta.

No es un "no" de "no me importa lo que tú hagas, jaja, ¡somos amigos, Cook!". Es un "no me importa la idea, no me importaría hacerlo yo, no me importaría hacerlo un millón de veces, no". Es como un foco iluminando a Archie por encima, marcando las sombras en su cara. Cook siente el estúpido impulso de preguntarle si ya lo ha hecho, pero realmente. Sabe que no. Las manos empuñadas, las ojeras, la ridícula, triste sonrisa dibujándose en su cara: no. Nunca.

- Archie - dice. Trata. Archie se endereza y su sonrisa es lo más trágico que David ha visto en su puta vida.
- Buenas noches.

Se levanta y prácticamente corre hacia la puerta, dejando a David con una mano levantada, agitándola en el aire lentamente como un imbécil.

- Buenas... - murmura, con el cerebro lento, lento, ideas ahogándose en una muralla de lodo.

Hablando de sorpresas.

Suspira y echa de menos sus cigarros. Es un impulso que le pasa por encima, guía todas sus ideas, por el momento en que se lo permite. No puede fumar hasta que acabe el show, e incluso entonces, debe pensar en su voz, su reputación, su contrato. El cigarro produce cáncer, ese maldito bicho de mierda.

Queda tan poco para el final de la competencia... sólo un par de días.

Quizá Adam pueda estar allí, para verle perder ante el mejor niño del mundo. Que no es su hermano. Que es mormón. Que puede cantar cualquier porquería y hacerla sonar como un himno.
Quizá Adam pueda estar allí, para verle ganar y hacerse famoso, y cumplir sus sueños de la manera más tomada de los pelos del mundo. De todas las maneras que pensó que no ocurriría.

Adam ha estado mejorando. Mejorando y empeorando, pero un poco mejorando. Estará allí, seguro. Con Neal y Andrew y sus padres, y todo el resto de su gente.

Se consigue un paquete con uno de los guardias y lo fuma en el balcón. En el jardín, abajo, Archie habla con Jeff, hombros rectos y sonriendo demasiado.
Lo ven, por supuesto que lo ven y David no necesita estar cerca para reconocer que Jeff se pone lívido y corre hacia la casa, a chivarse con alguien. David se ríe y saluda a Archie con la mano que sostiene el cigarro. Archie saluda con el brazo en principio recto y lentamente más animado, más enérgico.

"¿Estamos bien?"
"Por supuesto que estamos bien, Archuleta."

No necesita estar cerca para saber que la sonrisa de Archie se hace más sincera.

A estar alturas ni siquiera necesitaría mirarlo.

*

[hey cook. qué tal? :)]

[Hey a ti. Bien. Grabando. Tú?]

[muy bien! grabando también. ocupado ocupado ocupado. sabes cómo es.]

[Una locura. Sigues en Utah?]

[sí. con mi familia. los echo de menos. has hablado con alguien? cómo están?]

[Awww. Como si Carly no nos acosara a todos por igual.]
[Johns vive cerca mío. Están todos bien hasta donde sé.]
[En caso contrario creo que TMZ te puede informar más que yo.]
[Archie?]

[>:(]
[¡carita! jaja. lo siento, me estoy durmiendo. zzz.]

[Vale. Los niños buenos se van a la cama temprano. Descansa por mí, Archuleta.]

[¿es eso algún tipo de insulto? ¡cook! trata de descansar :( buenas noches!]

[Nunca. Buenas noches, Archie.]



[ i. ii. iii.]

♥ cookleta, ♠ american idol, ♦ 2009

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