Título: Sin Ángeles
Estado: En proceso
Público: PG-15
Categoria: Son los Winchester, pero no son los Winchester... en fin ve la cabecera y sabrás hacia donde me dirijo.
Resumen... Que puedo decir para no develar la trama más de lo que la grandiosa cabecera realizada por Destielwinchi pueda darte a pensar... y si a eso le sumás el título... creo que se los deje fácil, no??
También podrán apreciar el excelente trabajo de Elghin, que no queriendo adelantarle nada solo le mande unos escasísimos párrafos para que ella me devolviera tan exquisitos dibujos!!
Warning!!: No apto para almas sensibles.
Gracias a todos los que colaboraron conmigo poniendo su tiempo para betearlo (Anna, Evian muchas gracias a ustedes!!!) como para los gráficos
http://nem-sa.livejournal.com/28837.html http://nem-sa.livejournal.com/28837.html http://nem-sa.livejournal.com/29371.html http://nem-sa.livejournal.com/29826.html http://nem-sa.livejournal.com/30389.html http://nem-sa.livejournal.com/30647.html http://nem-sa.livejournal.com/30948.html http://nem-sa.livejournal.com/32155.htmlFINAL DOS
Pero sea lo que sea que tengan pensado hacerles, si matarlos o someterlos a alguna nueva tortura que aún no hayan probado; le harían frente como lo que eran… cazadores.
Que no en vano habían sobrevivido a infinitas confrontaciones a toda clase de cosas fuera de lo común y en definitiva no se echarían atrás si una buena pelea les incitaba a participar.
Bobby era conducido por Lucifer, mientras que él era llevado por el demonio, el primero de los cazadores se percató que los conducían hacia la salida y busco que sus ojos conecten con los de su compañero para decirle de la manera más silenciosa posible que se prepare para la contienda. Si bien desde hace muchos años no cazaba con Bobby, la vieja dinámica no se había perdido, el ermitaño conocía cada gesto de Bobby así como Bobby conocía los suyos, y en menos tiempo de lo que dura un parpadeo ambos cazadores logran sorprender a sus captores moviéndose de una manera demasiado ágil para su edad e iniciando una lucha con los otros dos seres que hasta hace escasos momentos los creían bajo su poder.
- Uhuhuhu!!! ¡Exclama el de ojos verdes, esto va a ser más divertido de lo que suponía! A la vieja usanza… ¡Me encanta! - y sin más empieza una lucha cuerpo a cuerpo con el prisionero que llevaba.
Golpes iban y venían entre esos dos sujetos, certeros derechazos al rostro y distintas partes del torso que apenas podían ser bloqueados por el demonio, se podía observar las diversas técnicas de lucha mezcladas, desde tomas de karate, pasando por taekwondo hasta king boxing. Las barridas dadas por el demonio eran un claro ejemplo de que todo se valía. Un sinfín de golpes se podía ver que ambos luchadores se intercambiaban pero que al demonio no hacían más que divertir y llenar de adrenalina, se notaba que se contenía dado que todos los golpes que daba eran certeros y minaban el esfuerzo de Rufus, de vez en cuando dejaba de cubrirse para que se confiara y vuelva al ruedo de la lucha.
El rostro del cazador ya se parecía a un enorme mapa, pero eso no era señal de que se fuera a detener. No señor, si tenía que morir lo haría luchando y no huyendo como cobarde, como hace muchos años atrás creyó, como si por el hecho de encerrarse en su casa dejando de ver las atrocidades del mundo estas dejaban de suceder.
Sus pensamientos por esa época eran el de pegarse un tiro si no recibía alguna señal de que seguir luchando valía la pena. Un par de días después obtuvo su señal en la personificación de Dean Winchester. El mayor de los Winchester le había salvado la vida aquel día, así que esto era como devolverle el favor que sin querer le hizo; y mierda que el había jurado cumplir su cometido.
De reojo podía observar que su compañero también se había llevado lo suyo, no entendía como aún no estaban muertos si se notaba a leguas que tanto él como Bobby jamás podrían ganarles, pero intuía que al ofrecerles algún tipo de resistencia sin querer le habían otorgado una nueva forma de diversión.
Una nueva patada del demonio, esta vez dirigida al plexo solar del cazador lo deja completamente sin aire. Espera el siguiente golpe como remate que extinga su vida o como mínimo le provoque la inconsciencia pero este nunca llega.
Luego de unos minutos en el que trata de recuperarse del golpe, apenas puede levantarse, pero un leve clic hace que se gire con extrema precaución y lo que ve no sabe si creerlo o aducirlo a los golpes recibidos.
Mentalmente Bobby agradecía su velocidad de pensamiento y llevarlo a la práctica de inmediato. El haber dejado de ver las atrocidades que el demonio poseedor de Dean llevaba a cabo en ese cuarto y dirigirse hacía la salida para preparar una rápida emboscada contra los ocupantes indeseables de sus hijos adoptivos. Trataría de salvarlos a costa de lo que sea, y esa era una de las razones principales por la cual se había aislado de los sucesos sobrenaturales cada vez más frecuentes que ocurrían en su estado o en cualquier parte del país, incluso llegaban a sus oídos sucesos de otros lugares del mundo.
Pero él juro enfocarse en la raíz del problema y eso se reducía a Sam y Dean, es decir los ocupantes de estos. No le había resultado fácil ni mucho menos sencillo, estuvo muchos días, semanas, incluso meses leyendo todo tipo de libros, traduciendo viejos textos en idiomas que hasta Dios había olvidado, verificando la veracidad de la información, juntando millas de vuelo que si al final de todo las cosas saldrían bien utilizaría para un buen descanso.
Diablos, incluso aprendió a utilizar ese trasto del cual Sammy nunca se despega.
Pero todo ese esfuerzo pronto le rendiría frutos. Sólo esperaba poder llegar a utilizar las trampas - que en el momento que se separo de Rufus preparó rápidamente - y que estas sirvieran, solo debía esperar a que sus captores lo llevasen por ese camino.
Sonrió para sus adentros cuando confirmo sus pensamientos, todo estaba a pedir de boca. Miró de soslayo para donde estaba su compañero Rufus, esperaba que aún recuerde sus gestos, sus mudas palabras ya que su viejo cuerpo ya no estaba para una lucha cuerpo a cuerpo debería poder hacer que Lucifer entrara en el círculo y mantenerlo allí mientras Rufus daba pelea al otro demonio.
Lo que sucedió a continuación fue una rápida contienda, en la que Rufus entendiendo la mirada de Bobby comenzó a luchar con el demonio que poseía a Dean, mientras que Bobby se hacía cargo de Lucifer.
El sujeto más alto no salía de su asombro, pero enseguida empezó a luchar con el que fuera padre adoptivo de su envase. Además ¿Si quería divertirse quién era él para negárselo??
No ponía mucho esfuerzo de su parte para derribar al viejo cazador, solo lo esencial para lograr agotarlo y hacer que desista de su inútil lucha.
Veía a su mano derecha llevarlo de lujo con el otro cazador, reía por los esfuerzos de esos humanos para escapar. No quería intervenir, sino al contrario la estaba disfrutando como la mejor película de la historia.
Un fuerte empujón de su contrincante hizo que volviera a poner atención en él. Enarcó una ceja ante la sonrisa de suficiencia que el sujeto tenía, pese a la poblada barba podía notarla.
- ¡De que te ríes mono sin pelo! - le dijo Lucifer. Si te sigo el juego es porque me has ofrecido algo nuevo, puedo acabar con tu mísera existencia en un tronar de dedos, continua mostrándole la mano.
- Eso no te será posible, no ahí encerrado. Y sin que transcurra un segundo más arroja un fósforo al piso y de inmediato Lucifer es rodeado por un círculo de fuego.
Un círculo de fuego cuyo ingrediente principal era aceite sagrado, y si la ardua investigación de Bobby era verídica podría evitar que Lucifer se escape de la prisión por tiempo indefinido y aplicar en Dean los conjuros que fue apartando en todo este tiempo para tratar de revertir el proceso de demonización que sufrió en el infierno.
Una vez que tuvo rodeado a Lucifer se giro de inmediato hacía donde estaba la otra pareja luchando que al oír el sonido de un arma siendo cargada, lista para disparar se detienen y giran para ver cual de los dos debe rendirse.
- Tu, dice dirigiéndose hacia el demonio - quédate donde estas y no tendrás que lamentarlo. Créeme, no dudaré en usarla contigo. Sé que tiene efectos negativos contigo. Concluye, refiriéndose a la Colt que portaba.
- ¡Que le hiciste! - Grita enojado el demonio al ver a su compañero encerrado en esa trampa, y sin esperar respuesta se lanza hacía Bobby que en vez de dispararle aprovecha la fuerza con la que se proyecta hacía el y tomándolo de las solapas del abrigo que llevaba hace un medio giro y lo lanza hacía una de las habitaciones que tenía la puerta abierta.
El demonio quedo medio aturdido al estamparse contra el borde de la puerta, rápidamente Bobby se acerca hacía él y le propina un fuerte golpe con la culata del arma, consiguiendo caiga al piso y una vez allí descarga su furia en el rostro de este, diciéndose mentalmente que Dean se lo agradecerá una vez que logre hacerlo regresar.
Al ver que el demonio le costaba enfocar llamo a Rufus para que lo ayude a trasladar de inmediato hacía la trampa que tenía dibujada en esa habitación. Entre los dos los llevan dentro de la trampa de demonio atándolo luego a una silla.
- ¿Que pasa con el otro?, pregunta Rufus a Bobby.
- El otro puede permanecer allí hasta el fin de los días. Nada puede hacer desde ahí dentro y con este atado aquí y dentro de la trampa, tampoco podrá liberarlo. Y como no les hace falta alimentarse, no se morirán de inanición. Así me darán a mí el tiempo necesario para poner en práctica los conjuros que he encontrado para revertir todo este desastre.
Se vuelve hacía el demonio y comienza diciendo
- Espero disfrutes la estadía, tu amigo de allí afuera va a tener una larga estancia en ese círculo. Todo el tiempo que sea necesario para que yo pueda traer de vuelta al verdadero dueño de ese cuerpo - dice refiriéndose al cazador de ojos verdes.
Ante la cara de incredulidad del demonio, Bobby explica:
- Porque primero me ocupare de tu caso. ¿Qué? ¿Creías que me quedé en casa llorando sus pérdidas? No, he estado investigando a fondo y si bien los conjuros que encontré nunca fueron probados no pierdo nada en intentarlo. Traer a Dean es más sencillo, por decirlo de alguna forma, que traer a Sam. Además creo que con Dean de vuelta, me será más fácil recuperar al otro Winchester.
Muchísimos años después, cuenta la leyenda que mientras Bobby probaba día si y día también hechizo tras hechizo sobre el demonio que usurpo al cazador de ojos verdes, su compañero de lucha, Rufus, era el encargado de proveerle ingredientes y víveres indispensables para continuar sus intentos hasta que llegó el día en que por fin logró traer a Dean de vuelta.
Emotivos y escasos momentos fue lo que duró ese encuentro. El corazón de Bobby no aguanto tamaña felicidad, pero se fue con un sabor agridulce en la boca al no poder lograr en Sam igual resultado que el que obtuvo con el cazador mayor.
A Dean le faltaron palabras de agradecimiento y disculpas por todo lo hecho, pero le juró que no descansaría hasta terminar el trabajo que inicio. Si de alguna forma podría pagar una milésima del daño causado lo haría. Pagaría en vida el daño causado por haberse rendido tan pronto.