Título: Sin Ángeles
Estado: En proceso
Público: PG-15
Categoria: Son los Winchester, pero no son los Winchester... en fin ve la cabecera y sabrás hacia donde me dirijo.
Resumen... Que puedo decir para no develar la trama más de lo que la grandiosa cabecera realizada por Destielwinchi pueda darte a pensar... y si a eso le sumás el título... creo que se los deje fácil, no??
También podrán apreciar el excelente trabajo de Elghin, que no queriendo adelantarle nada solo le mande unos escasísimos párrafos para que ella me devolviera tan exquisitos dibujos!!
Warning!!: No apto para almas sensibles.
Gracias a todos los que colaboraron conmigo poniendo su tiempo para betearlo (Anna, Evian muchas gracias a ustedes!!!) como para los gráficos
Puff, tanta gente me hace recordar a cuando debía realizar en el secu los trabajos prácticos...
Uno era alto, muy alto. Tan alto, que para las chicas que llegaban a él era como encontrar la escalera al cielo.
Su cabello era de color castaño, algo largo pero de exclusiva propiedad del viento ya que nunca quedaba como su dueño quería y este era el motivo principal de ser el eterno objeto de burla por parte de su hermano.
Era costumbre que siempre le taparan esos ojos de color indefinido; ojos que utilizaba para convencer a su interlocutor de la sinceridad de sus palabras.
El otro también medía sus buenos metros, pero estando parado muy cerca del primer sujeto no lo parecía. Si lo observas bien, lo que más llamará tu atención o la de cualquier persona que se cruce con él serán sus resplandecientes ojos verdes, luminosos a más no poder... hipnóticos.
Esos ojos que transmiten el equivalente a miles de palabras, enmarcados por un exquisito rostro (y si tienes suerte, puedes ver las diminutas pecas que bailan alrededor… sólo si tienes suerte). A diferencia del otro, este llevaba el cabello corto, casi militar y su color era de un rubio algo oscuro.
Si el primero obtenía atención por su mirada de cachorro perdido o a través de esos enormes hoyuelos que surgían cuando reía o sonreía, el segundo provocaba la necesidad de querer recorrer milímetro a milímetro cada porción de piel expuesta, y ni que decir de esa curvatura mal disimulada que se podía vislumbrar en las extremidades inferiores (cuyo dueño pese a odiarlas, les sacaba el jugo mientras podía…) No ayudaba mucho que te desnudara con la mirada una vez entraras en su radar.
Pero estos chicos a los que la tragedia truncó sus vidas a muy temprana edad y que a partir de ese trágico día no volvieron a vivir una vida tranquila, esos a quien el destino los tuvo entre ceja y ceja y cada vez que se olvidaban de ella, la muy perra les hacía una nueva visita quitándoles aquellas escasas personas con las que establecían algún tipo de lazo… por mínimo que fuera.
Esos mismos que tuvieron que crecer y sobrevivir a reglas muy estrictas, las más rigurosas que puedas llegar a imaginarte. Desde niños sufrieron en carne propia torturas físicas y psíquicas; carecieron de todo tipo de cosas: Desde un hogar estable hasta de la más mínima de las caricias. Estaban solos en el mundo y aún así siguieron adelante, resguardándose las espaldas entre sí... luchando por la supervivencia de gente que no conocían, personas que no supieron ni sabrán jamás el horror que existe en el mundo. Y de saberlo, huirían como ratas en plena inundación.
Dar la vida por el hermano era la consigna, llevarlo a rajatabla fue la forma en la que el mayor de los hermanos claudicó su vida. Intentar hacerlo volver fue la forma en la que el menor encontró su final.
Me voy con la esperanza de que comenten!!! Ah y que les guste!!!