[exo fanfic trans] STEP - capítulo 9
Step: Capítulo 9
traducción ing-esp, 3764 palabras, luhan centric, vvpp
"Con cada Salto se os restarán 15 años de vida"
La comisaría era un hervidero de actividad; los teléfonos y los faxes sonaban y zumbaban por todas partes, las mesas estaban sepultadas bajo pilas de papel y la gente iba de un lado para otro por los pasillos. Un policía joven se acercó a ellos rápidamente, dándole unas palmaditas a Jin en el hombro.
-Hemos dejado libres esas tres salas de interrogatorios para ti. La reunión del equipo de investigación del caso 233 será en 10 minutos, en la sala de reuniones pequeña del segundo piso.
-Gracias -dijo Jin, y se volvió para hablar con la secretaria que había tras él-. Lleva a estos dos a la sala de espera, dales un vaso de agua. Subiremos juntos en un momento -señaló a Kris y Luhan, y se volvió para hacerles un gesto a los otros tres-. Vosotros tres, venid conmigo.
Atravesaron un pasillo y acabaron en otro edificio, donde el número de personas era bastante menor. Las tres habitaciones que había al final del pasillo estaban abiertas.
-Tú entra en esta -le dijo Jin a Chanyeol, que miraba a su alrededor.
La persona que había dentro de la habitación que había señalado Jin estaba hojeando unos documentos sobre el caso, y levantó la vista con una sonrisa.
-Hola -dijo, e invitó a Chanyeol a entrar a la sala. Después, cerró la puerta.
Jin se volvió hacia las dos personas que tenía detrás.
-Antes de que empecemos con los interrogatorios, dejad aquí vuestras huellas digitales, por favor -dijo, y señaló a las máquinas que había en la entrada de cada sala-. De las dos manos, primero el pulgar y luego el resto de dedos.
Jongin frunció el ceño.
-¿Por qué Chanyeol no ha tenido que hacer esto?
Jin murmuró para sí mismo durante un instante.
-Él… de momento no nos hacen falta las suyas.
Baekhyun miró a Jongin. Los dos dejaron sus huellas en la máquina, espalda contra espalda, y ambas puertas se cerraron tras ellos.
*
Luhan estaba sentado en la sala de espera, incapaz de apartar de su mente la sensación de que el desconocido que no paraba de mirarlos era un poco raro, pero cada vez que se volvía hacia él, el hombre apartaba la mirada.
-¿Por qué ese tío no deja de mirarnos? -le preguntó Luhan a Kris en chino.
No pasaría de la treintena, no era feo, y llevaba un extraño guante en la mano derecha, apreció Luhan en silencio.
-¿Nos está mirando? -preguntó Kris, volviéndose él también para mirarlo-. ¿Lo conoces?
Luhan negó con la cabeza.
-Pero parece que él sí nos conoce a nosotros.
Kris se quedó mirándolo fijamente.
-¿Y eso no te parece normal?
Luhan no contestó. Vio cómo esa persona sacaba de su bolsillo un colgante de jade, que tenía la cadena rota, y lo miraba fijamente durante un momento antes de guardarlo otra vez.
La puerta se abrió y una señora entró, dirigiéndose a Kris y Luhan.
-Ya es la hora, tenéis que subir -dijo, y se giró hacia el hombre que había junto a ellos-. Usted sólo tiene que esperar un poquito más, su amigo enseguida habrá acabado.
-Mire, aún no se ha recuperado de la conmoción, pasar tanto tiempo en…
Sus palabras fueron interrumpidas por la voz de la señora.
-Será rápido, muy rápido.
*
En la sala de reuniones, había unas 7 u 8 personas sentadas en torno a una mesa rectangular, y un grueso fajo de documentos y fotografías frente a cada uno de ellos. En uno de los extremos de la larga mesa había un proyector, que mostraba el escritorio de un ordenador, y Jin estaba junto al ordenador, hojeando los documentos desde hacía un par de minutos.
-¿Ya estamos todos? -preguntó Jin.
Cuando vio que así era, cerró la puerta, y apagó las luces de la sala.
-Durante estas semanas, todos hemos trabajado muy duro en el caso 322, y hoy, vamos a resumir y revisar la información de la que disponemos. También tenemos a dos invitados especiales, a los que supongo conoceréis todos -dijo, señalando a Kris y Luhan-. Las dos personas involucradas en el caso 322, así como los supervivientes: Kris, Luhan
Todos saludaron amigablemente a Kris y Luhan; y ellos, sin saber muy bien qué debían hacer, les devolvieron los saludos.
-¿Entendéis este nivel de coreano? -preguntó Jin cuidadosamente.
-…Sí, está bien -dijo Luhan. Kris expresó su acuerdo asintiendo.
-De acuerdo -dijo Jin-. En ese caso, volvamos a los materiales iniciales del caso.
Mientras hablaba, abrió una imagen: el taxi que había chocado y había acabado contra un árbol tras dar varias vueltas de campana estaba deformado, y no demasiado lejos, estaba el camión, con la puerta del copiloto abierta.
-El 22 de marzo a las 23:25, recibimos una llamada del dueño de un Volkswagen. En ella decía que cerca de las afueras de la ciudad, en una carretera del sur, había habido un accidente en el que habían chocado un taxi y un camión, y que el conductor que había provocado el accidente había huido -Jin señaló la imagen en la proyección-. Se debería haber pasado la llamada a los servicios de emergencia de inmediato, y como todos sabemos, había un muerto y tres heridos. El fallecido, así como dos de los heridos, eran artistas chinos, empleados de SM Entertainment. El otro vehículo era un camión de transporte de mercancía de uso exclusivo por la cadena de supermercados PINT. El 22 de marzo, sobre las 22:45, el conductor de dicho camión lo aparcó en un supermercado PINT, no muy lejos del lugar del accidente, y entonces entró en la tienda para charlar con otros empleados. En algún momento después de que pasaran las 23:00, volvió a salir y se dio cuenta de que el camión había desaparecido, y contactó inmediatamente con la policía. Recibimos el informe a las 23:15 -mientras hablaba, señaló una fotografía del supermercado PINT, así como del restaurante que había al lado, Happy Family. Jin les pasó la fotografía a Kris y Luhan-. La sección de la carretera que se desvía hacia el sur se encuentra cerca de las afueras, y después de las 23:00, había pocos coches. Hemos eliminado la posibilidad de que se tratara de un simple robo, ya que un empleado de una tienda de reparaciones cercana, así como un transeúnte testificaron que este camión había estado aparcado un bueno rato ahí -Jin les pasó unas cuantas hojas a los que estaban sentados-. Los testigos eran un mecánico y un profesor de primaria que no se conocían entre ellos.
Jin miró a Kris y a Luhan, que tenían la mirada puesta en el documento del testimonio que les había pasado.
-Eso es. Ese hombre os estaba esperando -dijo con calma-. Echemos un vistazo a la información que hemos conseguido en relación a este supermercado.
Jin abrió un vídeo. Luhan miró a la pantalla, y frunció el ceño inconscientemente.
-En la tarde del 22 de marzo, a las 22:53, descubrimos una cara que nos resultó bastante familiar en las cintas de seguridad del supermercado -Jin miró a Kris y a Luhan-. Vuestro buen amigo Kim Jongin. En este supermercado, que estaba al menos a diez minutos en coche de vuestro dormitorio, compró tres cosas: un paquete de chicles, una revista y dos latas de cerveza.
Kris miró el vídeo.
-Otro de los miembros nos dijo que estaba en casa ese día, pero que salió -dijo.
-Correcto -contestó Jin-. A las 22:41, recibió un mensaje de texto de otro de los miembros, Byun Baekhyun, y después de eso, salió y fue directo a este supermercado. El conductor del taxi lo identificó cuando contactamos con él para la investigación. La cuestión es: para estas tres simples cosas que podría haber comprado en cualquier tienda más cercana a vuestro dormitorio, ¿por qué tuvo que ir tan lejos? -prosiguió Jin, mirando a todos los presentes-. Parece que, en aquel momento, tenía otra razón para ir hasta ahí, y que compró esas cosas por casualidad, de camino. Esta línea de pensamiento se pudo comprobar fácilmente, ya que después de eso entró en el callejón que hay entre el supermercado y el restaurante Happy Time. Allí descubrió a una persona inconsciente, y a las 22:55, llamó a una ambulancia -Jin abrió una imagen.
Luhan miró a la pantalla, con los ojos abiertos de par en par, como si se le hubiera parado el pulso de repente.
-Sung, la persona que Kim Jongin encontró desmayada en el callejón, es un agente de campo contratado por SME. A las 22:15 aproximadamente, él y un amigo acabaron de cenar en Happy Time, y según su propio testimonio, salió con su amigo del restaurante, y un desconocido con un gorro lo llamó desde el callejón para pedirle fuego. Fue entonces cuando le pegaron un puñetazo y le golpearon la cabeza contra la pared repetidas veces, y tras eso, perdió el conocimiento -dijo Jin-. ¿Reconocéis a esta persona?
Jin miró a las dos personas que había frente a él. Kris negó con la cabeza, y Luhan continuó mirando al frente, con ojos inexpresivos.
-La ambulancia llegó sobre las 11 y después se fue, y a Sung le diagnosticaron conmoción cerebral. Después, su amigo, otro agente de campo de vuestra empresa llamado Yun, llegó al hospital para pagar las facturas médicas. Seguramente lo habréis visto hace un momento, en la sala de espera.
Kris intentó recordar si había sido así, y se giró para mirar a Luhan, que seguía perdido en sus pensamientos.
-La reacción de este compañero fue algo anormal, como si tuviera muchas preguntas, y aún así no hizo ni una -comentó una de las personas que había sentadas en torno a la mesa.
-De acuerdo con la información que obtuvimos del personal de urgencias, después de que la ambulancia se fuera, Kim Jongin se quedó allí, caminando de un lado para otro, con un paraguas, bajo la luz de la farola de ese callejón -continuó Jin-. Y en cuanto a dónde se encontraba vuestro otro compañero, Byun Baekhyun… Esa es otra pregunta interesante. Además del paradero de estas dos personas; quién fue el que golpeó a Sung, quién robó el camión, si estos empleados de campo de SM tienen algo que ver o no con los hombres que os llevaron a ese cobertizo aquel día… -Jin miró a los demás-. Todas son preguntas que tenemos que contestar una a una.
-Los dos Buicks negros llevaban matrículas falsas, y aún estamos buscándolos -dijo la persona que estaba sentada al lado de Kris-. Hemos estado haciendo una búsqueda a gran escala por todos los talleres de chapa y pintura cercanos, pensamos que podrían estar repintándolos.
-¿El Happy Time es un restaurante familiar? -le preguntó Jin a Kris de repente-. Parecía que estabas muy interesado en esta fotografía.
Jin miró a Kris, que había estado mirando fijamente la foto durante todo este tiempo, y cogió la instantánea que había sido tomada desde fuera del supermercado y el restaurante.
-Sí -respondió Kris-. Lo abrió un sunbae de SM que era bastante famoso, así que vamos a veces, cuando tenemos tiempo libre.
-De algún modo, esto corrobora lo que dijo Sung en el hospital -dijo Jin-. Dijo que la razón por la que fueron a ese restaurante es porque es de un amigo suyo.
Jin inclinó la cabeza y recordó la escena en aquella habitación de hospital.
-¿Seguro que sois amigos? -inquirió Jin, calibrando cuidadosamente sus palabras-. Lo que quiero decir es…
-Ah~ Entiendo lo que quieres decir -replicó Sung, sin apartar la vista de las sábanas.
-Perdóname por pensar así, es que… incluso yo, que no sigo la industria del entretenimiento, sé quién es él -se disculpó Jin-. Aunque ahora esté mayor, era muy famoso.
Sung se echó a reír, mirando la pared.
-Tienes razón. Todos nos hemos hecho mayores.
*
Sala de interrogatorios A:
-Déjame preguntarte a dónde fue Byun Baekhyun después de que la cena terminara aquella noche.
-Volvió a casa conmigo -contestó Chanyeol.
-Mientes -replicó el policía, mirándolo fijamente-. El conductor que os llevaba nos dijo que se bajó del coche a medio camino.
Chanyeol miró a la mesa, incapaz de decir nada.
-¿Cuándo volvieron él y Kim Jongin al dormitorio? -preguntó.
-Por la noche. No recuerdo bien cuándo.
-Estás mintiendo otra vez. Estuvieron fuera toda la noche, y cuando volvieron a la mañana del día siguiente, dos fans los reconocieron. Les firmaron unos autógrafos y se hicieron fotos juntos que luego ellas subieron a internet.
-Si ya lo sabes todo, ¿para qué me preguntas? -inquirió Chanyeol, inclinando la cabeza hacia un lado.
-¿Y tú por qué estás mintiendo? -espetó el policía.
Sala de interrogatorios B:
-Después de que la cena terminara aquel día, ¿le enviaste, o no le enviaste a Kim Jongin un mensaje de texto? -le preguntó el policía a Baekhyun.
-Sí. Le dije que ya había terminado, y que me esperara donde siempre -respondió Baekhyun.
-¿Dónde es «donde siempre»?
-En el callejón que hay junto al restaurante Happy Time.
-¿Y para qué habíais quedado ahí?
-Después teníamos que ir juntos a un sitio -dijo Baekhyun.
-¿Por qué teníais que quedar en ese lugar? -preguntó el hombre, mirando a Baekhyun-. ¿A dónde fuisteis después?
Baekhyun desvió la mirada, sin responder.
Sala de interrogatorios C:
-¿Por qué Byun Baekhyun te pidió que te reunieras con él en el callejón junto a Happy Time? -el policía miró fijamente a Jongin.
-Nos gusta ir ahí -respondió Jongin, estirando las piernas.
-¿Adónde fuisteis después? ¿Qué hicisteis?
Las comisuras de los labios de Jongin se curvaron, y soltó una carcajada.
-¿A ti qué te importa?
Sala de interrogatorios A:
Chanyeol negó con la cabeza.
-Estáis equivocados, ellos no tienen nada que ver con el caso.
-Entonces es tu deber decirme a dónde fueron -dijo el policía, sin dejar de mirar a Chanyeol a los ojos-. Es la mejor manera de borrar todas las sospechas que hay sobre ellos.
Chanyeol se quedó callado durante unos instantes antes de contestar.
-Fueron a una habitación alquilada que hay cerca de allí -dijo Chanyeol-. Podéis comprobarlo, tengo la dirección en el dormitorio.
-¿Para qué tienes la dirección de esa habitación? -preguntó el policía.
Chanyeol cerró los ojos, desesperado.
-¿Por qué sabría Lay dónde estaban Kris y Luhan esa noche?
*
Una vez el interrogatorio acabó, a Jongin y Baekhyun les hicieron ponerse unos gorros y chaquetas idénticos, y los llevaron a otra habitación, para que esperaran con otras tres personas a las que no reconocían y que llevaban la misma ropa que ellos.
-Así está bien -dijo una empleada que asomó la cabeza por la puerta de una habitación adyacente.
El policía que había junto a ellos asintió, y les asignó un orden aleatorio. A Jongin lo pusieron el segundo, a Baekhyun el cuarto.
-Cuando os llamemos, entrad en el orden en que os hemos dicho. Tenéis que mirar hacia el cristal, sin hablar, y cuando veáis que se enciende la luz roja, salir -dijo el hombre, y se acercó para ajustarles los gorros a Baekhyun y Jongin.
Los cinco entraron en orden, y Sung empezó a inspeccionar minuciosamente a las personas que tenía delante, bajo la fuerte luz de la sala. Él podía verlos, pero ellos a él no.
-¿Está entre ellos? -preguntó la secretaria.
-Conozco a esos dos -dijo Sung, señalando a los números 2 y 4-. ¿Cómo es que los habéis hecho venir también?
-¿Es uno de ellos? -le preguntaron los empleados que había allí.
Sung negó con la cabeza, y empezó a inspeccionar cuidadosamente a los otros tres, pero parecía que las personas que había a su alrededor ya no prestaban atención.
-No es ninguno de ellos -dijo Sung.
-¿Aún recuerdas cómo era aquella persona?
Los ojos de Sung reflejaron una ligera sorpresa.
-Creo… que era casi igual de alto que yo, más o menos de la misma complexión, y por lo demás… Tampoco lo vi muy bien.
Después de un momento de silencio, la secretaria asintió y presionó un botón que había en la pared. La luz roja que había frente a ellos se encendió, y salieron uno detrás de otro.
*
La reunión que se celebraba en el piso de arriba terminó, y Luhan se acercó a Jin, con el rostro pálido.
-Quiero ver a Sung -dijo.
Kris estaba junto a Luhan, y lo miraba, dudoso. Desde hacía un momento, él también estaba blanco como el papel.
-Aún debería estar aquí, iré a preguntar.
Al decir eso, guió a Luhan y Kris al piso de abajo, y le preguntó a un miembro del personal.
-Él y su compañero acaban de marcharse -antes de que terminara de hablar, Luhan ya estaba corriendo.
La silueta familiar de ese hombre estaba justo frente a él. Parecía que Sung estaba ayudando a Jun a ponerse algo en el cuello. Luhan corrió delante de ellos, y le puso la mano en el hombro. Los otros dos se separaron, y el colgante de jade se le escapó de entre los dedos. Cuando Sung intentó coger al vuelo el colgante que había caído en el brazo de Yun, le bajó el guante accidentalmente, revelando una gran cicatriz de una quemadura en la mano y muñeca derechas de Yun.
El colgante de jade cayó al suelo.
-¿A qué debemos este honor? -dijo Sung mientras se agachaba para coger el colgante.
Ayudó a Yun a ponerse el guante y frunció el ceño, mirando a Luhan.
-Disculpe. ¿Me reconoce? -preguntó Luhan.
-Luhan, eres famoso. Por supuesto que te reconozco -al hablar, se giró para mirar a Kris, que estaba junto a él-. Si no queréis nada más, yo tengo que irme -dijo, y cogió a Yun para marcharse de allí.
-¡Espere! -exclamó Luhan, agarrándose a su manga, diciéndole algo sin emitir sonido alguno.
Sung miró a Luhan, perplejo.
-¿Qué? -preguntó.
-¿Luhan? ¿Qué pasa? -preguntó también Kris.
-El tiempo es relativo -dijo Luhan, mirando a Sung fijamente a los ojos, como si la respuesta que buscaba estuviera en ellos-. Y… el paso del tiempo que experimentamos no es absoluto… las puertas… -Luhan lo miró a los ojos, pero lo único que vio fue un par de pupilas vacías.
Kris miraba a Luhan en silencio, agachó la cabeza mientras pensaba en algo. Junto a él, Yun estaba mirando a Luhan y pareció que, de repente, quería decirle algo, las preguntas se agolpaban en sus ojos, incluso más que en los de la persona que tenía enfrente.
-¿Qué quieres decir exactamente? -preguntó Sung.
-Yo… -Luhan dio un paso atrás, decepcionado y sin palabras. Un momento después miró al suelo, sintiéndose derrotado-. No es nada. Perdón por molestarles.
Sung miró el rostro ceniciento de Luhan, y luego el de Kris.
-Entonces nos vamos -dijo.
Ambos pasaron junto a los dos chicos, dejando tras de sí un perfume desconocido.
-¿Qué ha sido eso? -Kris vio cómo los dos hombres se alejaban y cómo Yun giró la cabeza a medio camino para mirarles.
Luhan se agachó lentamente, hundiendo los dedos en su pelo, en silencio, con la mirada vacía.
-Lo que acabas de decir, esas cosas sobre el tiempo… ¿Eso no te lo dijo Clown? -Kris se agachó junto a él, observándolo.
Luhan estuvo callado bastante rato, y luego parpadeó lentamente.
-Tienes razón. Es Clown -Luhan miró el suelo de forma inexpresiva-. Pero sus ojos no mentían. No sabe nada.
Kris miró a Luhan, atónito, y se puso de pie para mirar a los dos hombres en la lejanía. Luhan pasó junto a él, y salió por la puerta principal para echar a andar en dirección contraria a la que habían tomado los otros dos hombres.
-Esto no ha sido una coincidencia. Ha sido una trampa -Luhan miró al suelo mientras caminaba-. Igual que el conductor del camión, esas personas estaban esperándonos para entrar en escena.
-¿Por qué? -Kris se puso al nivel de Luhan, no entendía nada-. ¿Quién es ese Clown exactamente?
-No lo sé -Luhan negó con la cabeza. Respiró hondo, y se detuvo-. Pero no importa… hasta aquí hemos llegado.
Kris se giró, mirando a Luhan, sin palabras.
-¿Y qué hay de los 60 años que ya hemos gastado? -preguntó.
Luhan tenía la cabeza agachada, y no contestó.
-¿No te parece que es un poco tarde para decir que paramos? -insistió Kris.
Luhan negó con la cabeza.
-Aún no es tarde. Para nada.
-¿Crees que sólo te quedaban 30 años de vida?
-¡Aunque Yixing volviera, no recuperaré esos 30 años! -dijo Luhan, mirándolo.
Kris le sostuvo la mirada, y se giró.
-No quiero.
-¡¡Pareces un puto ludópata, ¿lo sabes?!! -le gritó Luhan.
-¿¿Y quién es el que me ha traído a la mesa de juego?? -espetó Kris.
Luhan perdió el habla, y se giró, dándole la espalda a Kris.
-Yo -dijo en voz baja-. Te dije que no podría pagártelo.
Kris lo miró, y un momento después, extendió la mano para agarrar a Luhan del hombro.
-Lo siento. No quería decir eso.
Luhan levantó ambas manos, como si se estuviera rindiendo, como si dijera que no necesitaba que nadie lo tranquilizara.
-Quiero hacer esto -Kris cogió a Luhan por los hombros, testarudamente-. No me importa cuántos años pierda, aceptaré las consecuencias. Y tú también.
-No estaba enfadado por eso -Kris lo miró fijamente-. Si seguimos o lo dejamos, es cosa tuya, pero nunca me dices lo que piensas.
Luhan se quedó mirando al suelo.
-Ya te he contado todo lo que tiene que ver con esto.
Kris lo miró a los ojos, y de repente se quedó sin fuerzas para seguir manteniendo la cabeza en alto.
Era consciente de que no tenía ningún derecho a pedirle esto a Luhan, puesto que él también llevaba una máscara, la misma que le proporcionaba toda su seguridad.
-Parar ahora es lo correcto -dijo Luhan-. Y lo sabes.
-Sí. Todo lo que has dicho es cierto.
-Puedes insultarme por dentro, está bien -los ojos de Luhan estaban desenfocados-. Pero estoy tomando esta decisión por el bien de los dos.
Kris lo miró, sonriendo amargamente.
-No eres educado conmigo para nada.
Luhan tenía la mirada perdida en la distancia, su voz sonó tranquila
-¿Acaso tú has sido educado conmigo alguna vez? -¿Cuando me besaste, o cuando me pegaste? Pero no dijo esta broma en alto.
Kris miraba los coches que pasaban por la carretera, incapaz de articular palabra.
-Entonces está decidido -Kris le dio unas palmaditas en el hombro y empezó a cruzar la calle-. Tú escúchame…
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Créditos:
Fic original
Traducción al inglés por heecups en lj
Traducción de fenshen
Traducción de yixingdotjpg y oh_luhans
traducción ing-esp, 3764 palabras, luhan centric, vvpp
"Con cada Salto se os restarán 15 años de vida"
La comisaría era un hervidero de actividad; los teléfonos y los faxes sonaban y zumbaban por todas partes, las mesas estaban sepultadas bajo pilas de papel y la gente iba de un lado para otro por los pasillos. Un policía joven se acercó a ellos rápidamente, dándole unas palmaditas a Jin en el hombro.
-Hemos dejado libres esas tres salas de interrogatorios para ti. La reunión del equipo de investigación del caso 233 será en 10 minutos, en la sala de reuniones pequeña del segundo piso.
-Gracias -dijo Jin, y se volvió para hablar con la secretaria que había tras él-. Lleva a estos dos a la sala de espera, dales un vaso de agua. Subiremos juntos en un momento -señaló a Kris y Luhan, y se volvió para hacerles un gesto a los otros tres-. Vosotros tres, venid conmigo.
Atravesaron un pasillo y acabaron en otro edificio, donde el número de personas era bastante menor. Las tres habitaciones que había al final del pasillo estaban abiertas.
-Tú entra en esta -le dijo Jin a Chanyeol, que miraba a su alrededor.
La persona que había dentro de la habitación que había señalado Jin estaba hojeando unos documentos sobre el caso, y levantó la vista con una sonrisa.
-Hola -dijo, e invitó a Chanyeol a entrar a la sala. Después, cerró la puerta.
Jin se volvió hacia las dos personas que tenía detrás.
-Antes de que empecemos con los interrogatorios, dejad aquí vuestras huellas digitales, por favor -dijo, y señaló a las máquinas que había en la entrada de cada sala-. De las dos manos, primero el pulgar y luego el resto de dedos.
Jongin frunció el ceño.
-¿Por qué Chanyeol no ha tenido que hacer esto?
Jin murmuró para sí mismo durante un instante.
-Él… de momento no nos hacen falta las suyas.
Baekhyun miró a Jongin. Los dos dejaron sus huellas en la máquina, espalda contra espalda, y ambas puertas se cerraron tras ellos.
*
Luhan estaba sentado en la sala de espera, incapaz de apartar de su mente la sensación de que el desconocido que no paraba de mirarlos era un poco raro, pero cada vez que se volvía hacia él, el hombre apartaba la mirada.
-¿Por qué ese tío no deja de mirarnos? -le preguntó Luhan a Kris en chino.
No pasaría de la treintena, no era feo, y llevaba un extraño guante en la mano derecha, apreció Luhan en silencio.
-¿Nos está mirando? -preguntó Kris, volviéndose él también para mirarlo-. ¿Lo conoces?
Luhan negó con la cabeza.
-Pero parece que él sí nos conoce a nosotros.
Kris se quedó mirándolo fijamente.
-¿Y eso no te parece normal?
Luhan no contestó. Vio cómo esa persona sacaba de su bolsillo un colgante de jade, que tenía la cadena rota, y lo miraba fijamente durante un momento antes de guardarlo otra vez.
La puerta se abrió y una señora entró, dirigiéndose a Kris y Luhan.
-Ya es la hora, tenéis que subir -dijo, y se giró hacia el hombre que había junto a ellos-. Usted sólo tiene que esperar un poquito más, su amigo enseguida habrá acabado.
-Mire, aún no se ha recuperado de la conmoción, pasar tanto tiempo en…
Sus palabras fueron interrumpidas por la voz de la señora.
-Será rápido, muy rápido.
*
En la sala de reuniones, había unas 7 u 8 personas sentadas en torno a una mesa rectangular, y un grueso fajo de documentos y fotografías frente a cada uno de ellos. En uno de los extremos de la larga mesa había un proyector, que mostraba el escritorio de un ordenador, y Jin estaba junto al ordenador, hojeando los documentos desde hacía un par de minutos.
-¿Ya estamos todos? -preguntó Jin.
Cuando vio que así era, cerró la puerta, y apagó las luces de la sala.
-Durante estas semanas, todos hemos trabajado muy duro en el caso 322, y hoy, vamos a resumir y revisar la información de la que disponemos. También tenemos a dos invitados especiales, a los que supongo conoceréis todos -dijo, señalando a Kris y Luhan-. Las dos personas involucradas en el caso 322, así como los supervivientes: Kris, Luhan
Todos saludaron amigablemente a Kris y Luhan; y ellos, sin saber muy bien qué debían hacer, les devolvieron los saludos.
-¿Entendéis este nivel de coreano? -preguntó Jin cuidadosamente.
-…Sí, está bien -dijo Luhan. Kris expresó su acuerdo asintiendo.
-De acuerdo -dijo Jin-. En ese caso, volvamos a los materiales iniciales del caso.
Mientras hablaba, abrió una imagen: el taxi que había chocado y había acabado contra un árbol tras dar varias vueltas de campana estaba deformado, y no demasiado lejos, estaba el camión, con la puerta del copiloto abierta.
-El 22 de marzo a las 23:25, recibimos una llamada del dueño de un Volkswagen. En ella decía que cerca de las afueras de la ciudad, en una carretera del sur, había habido un accidente en el que habían chocado un taxi y un camión, y que el conductor que había provocado el accidente había huido -Jin señaló la imagen en la proyección-. Se debería haber pasado la llamada a los servicios de emergencia de inmediato, y como todos sabemos, había un muerto y tres heridos. El fallecido, así como dos de los heridos, eran artistas chinos, empleados de SM Entertainment. El otro vehículo era un camión de transporte de mercancía de uso exclusivo por la cadena de supermercados PINT. El 22 de marzo, sobre las 22:45, el conductor de dicho camión lo aparcó en un supermercado PINT, no muy lejos del lugar del accidente, y entonces entró en la tienda para charlar con otros empleados. En algún momento después de que pasaran las 23:00, volvió a salir y se dio cuenta de que el camión había desaparecido, y contactó inmediatamente con la policía. Recibimos el informe a las 23:15 -mientras hablaba, señaló una fotografía del supermercado PINT, así como del restaurante que había al lado, Happy Family. Jin les pasó la fotografía a Kris y Luhan-. La sección de la carretera que se desvía hacia el sur se encuentra cerca de las afueras, y después de las 23:00, había pocos coches. Hemos eliminado la posibilidad de que se tratara de un simple robo, ya que un empleado de una tienda de reparaciones cercana, así como un transeúnte testificaron que este camión había estado aparcado un bueno rato ahí -Jin les pasó unas cuantas hojas a los que estaban sentados-. Los testigos eran un mecánico y un profesor de primaria que no se conocían entre ellos.
Jin miró a Kris y a Luhan, que tenían la mirada puesta en el documento del testimonio que les había pasado.
-Eso es. Ese hombre os estaba esperando -dijo con calma-. Echemos un vistazo a la información que hemos conseguido en relación a este supermercado.
Jin abrió un vídeo. Luhan miró a la pantalla, y frunció el ceño inconscientemente.
-En la tarde del 22 de marzo, a las 22:53, descubrimos una cara que nos resultó bastante familiar en las cintas de seguridad del supermercado -Jin miró a Kris y a Luhan-. Vuestro buen amigo Kim Jongin. En este supermercado, que estaba al menos a diez minutos en coche de vuestro dormitorio, compró tres cosas: un paquete de chicles, una revista y dos latas de cerveza.
Kris miró el vídeo.
-Otro de los miembros nos dijo que estaba en casa ese día, pero que salió -dijo.
-Correcto -contestó Jin-. A las 22:41, recibió un mensaje de texto de otro de los miembros, Byun Baekhyun, y después de eso, salió y fue directo a este supermercado. El conductor del taxi lo identificó cuando contactamos con él para la investigación. La cuestión es: para estas tres simples cosas que podría haber comprado en cualquier tienda más cercana a vuestro dormitorio, ¿por qué tuvo que ir tan lejos? -prosiguió Jin, mirando a todos los presentes-. Parece que, en aquel momento, tenía otra razón para ir hasta ahí, y que compró esas cosas por casualidad, de camino. Esta línea de pensamiento se pudo comprobar fácilmente, ya que después de eso entró en el callejón que hay entre el supermercado y el restaurante Happy Time. Allí descubrió a una persona inconsciente, y a las 22:55, llamó a una ambulancia -Jin abrió una imagen.
Luhan miró a la pantalla, con los ojos abiertos de par en par, como si se le hubiera parado el pulso de repente.
-Sung, la persona que Kim Jongin encontró desmayada en el callejón, es un agente de campo contratado por SME. A las 22:15 aproximadamente, él y un amigo acabaron de cenar en Happy Time, y según su propio testimonio, salió con su amigo del restaurante, y un desconocido con un gorro lo llamó desde el callejón para pedirle fuego. Fue entonces cuando le pegaron un puñetazo y le golpearon la cabeza contra la pared repetidas veces, y tras eso, perdió el conocimiento -dijo Jin-. ¿Reconocéis a esta persona?
Jin miró a las dos personas que había frente a él. Kris negó con la cabeza, y Luhan continuó mirando al frente, con ojos inexpresivos.
-La ambulancia llegó sobre las 11 y después se fue, y a Sung le diagnosticaron conmoción cerebral. Después, su amigo, otro agente de campo de vuestra empresa llamado Yun, llegó al hospital para pagar las facturas médicas. Seguramente lo habréis visto hace un momento, en la sala de espera.
Kris intentó recordar si había sido así, y se giró para mirar a Luhan, que seguía perdido en sus pensamientos.
-La reacción de este compañero fue algo anormal, como si tuviera muchas preguntas, y aún así no hizo ni una -comentó una de las personas que había sentadas en torno a la mesa.
-De acuerdo con la información que obtuvimos del personal de urgencias, después de que la ambulancia se fuera, Kim Jongin se quedó allí, caminando de un lado para otro, con un paraguas, bajo la luz de la farola de ese callejón -continuó Jin-. Y en cuanto a dónde se encontraba vuestro otro compañero, Byun Baekhyun… Esa es otra pregunta interesante. Además del paradero de estas dos personas; quién fue el que golpeó a Sung, quién robó el camión, si estos empleados de campo de SM tienen algo que ver o no con los hombres que os llevaron a ese cobertizo aquel día… -Jin miró a los demás-. Todas son preguntas que tenemos que contestar una a una.
-Los dos Buicks negros llevaban matrículas falsas, y aún estamos buscándolos -dijo la persona que estaba sentada al lado de Kris-. Hemos estado haciendo una búsqueda a gran escala por todos los talleres de chapa y pintura cercanos, pensamos que podrían estar repintándolos.
-¿El Happy Time es un restaurante familiar? -le preguntó Jin a Kris de repente-. Parecía que estabas muy interesado en esta fotografía.
Jin miró a Kris, que había estado mirando fijamente la foto durante todo este tiempo, y cogió la instantánea que había sido tomada desde fuera del supermercado y el restaurante.
-Sí -respondió Kris-. Lo abrió un sunbae de SM que era bastante famoso, así que vamos a veces, cuando tenemos tiempo libre.
-De algún modo, esto corrobora lo que dijo Sung en el hospital -dijo Jin-. Dijo que la razón por la que fueron a ese restaurante es porque es de un amigo suyo.
Jin inclinó la cabeza y recordó la escena en aquella habitación de hospital.
-¿Seguro que sois amigos? -inquirió Jin, calibrando cuidadosamente sus palabras-. Lo que quiero decir es…
-Ah~ Entiendo lo que quieres decir -replicó Sung, sin apartar la vista de las sábanas.
-Perdóname por pensar así, es que… incluso yo, que no sigo la industria del entretenimiento, sé quién es él -se disculpó Jin-. Aunque ahora esté mayor, era muy famoso.
Sung se echó a reír, mirando la pared.
-Tienes razón. Todos nos hemos hecho mayores.
*
Sala de interrogatorios A:
-Déjame preguntarte a dónde fue Byun Baekhyun después de que la cena terminara aquella noche.
-Volvió a casa conmigo -contestó Chanyeol.
-Mientes -replicó el policía, mirándolo fijamente-. El conductor que os llevaba nos dijo que se bajó del coche a medio camino.
Chanyeol miró a la mesa, incapaz de decir nada.
-¿Cuándo volvieron él y Kim Jongin al dormitorio? -preguntó.
-Por la noche. No recuerdo bien cuándo.
-Estás mintiendo otra vez. Estuvieron fuera toda la noche, y cuando volvieron a la mañana del día siguiente, dos fans los reconocieron. Les firmaron unos autógrafos y se hicieron fotos juntos que luego ellas subieron a internet.
-Si ya lo sabes todo, ¿para qué me preguntas? -inquirió Chanyeol, inclinando la cabeza hacia un lado.
-¿Y tú por qué estás mintiendo? -espetó el policía.
Sala de interrogatorios B:
-Después de que la cena terminara aquel día, ¿le enviaste, o no le enviaste a Kim Jongin un mensaje de texto? -le preguntó el policía a Baekhyun.
-Sí. Le dije que ya había terminado, y que me esperara donde siempre -respondió Baekhyun.
-¿Dónde es «donde siempre»?
-En el callejón que hay junto al restaurante Happy Time.
-¿Y para qué habíais quedado ahí?
-Después teníamos que ir juntos a un sitio -dijo Baekhyun.
-¿Por qué teníais que quedar en ese lugar? -preguntó el hombre, mirando a Baekhyun-. ¿A dónde fuisteis después?
Baekhyun desvió la mirada, sin responder.
Sala de interrogatorios C:
-¿Por qué Byun Baekhyun te pidió que te reunieras con él en el callejón junto a Happy Time? -el policía miró fijamente a Jongin.
-Nos gusta ir ahí -respondió Jongin, estirando las piernas.
-¿Adónde fuisteis después? ¿Qué hicisteis?
Las comisuras de los labios de Jongin se curvaron, y soltó una carcajada.
-¿A ti qué te importa?
Sala de interrogatorios A:
Chanyeol negó con la cabeza.
-Estáis equivocados, ellos no tienen nada que ver con el caso.
-Entonces es tu deber decirme a dónde fueron -dijo el policía, sin dejar de mirar a Chanyeol a los ojos-. Es la mejor manera de borrar todas las sospechas que hay sobre ellos.
Chanyeol se quedó callado durante unos instantes antes de contestar.
-Fueron a una habitación alquilada que hay cerca de allí -dijo Chanyeol-. Podéis comprobarlo, tengo la dirección en el dormitorio.
-¿Para qué tienes la dirección de esa habitación? -preguntó el policía.
Chanyeol cerró los ojos, desesperado.
-¿Por qué sabría Lay dónde estaban Kris y Luhan esa noche?
*
Una vez el interrogatorio acabó, a Jongin y Baekhyun les hicieron ponerse unos gorros y chaquetas idénticos, y los llevaron a otra habitación, para que esperaran con otras tres personas a las que no reconocían y que llevaban la misma ropa que ellos.
-Así está bien -dijo una empleada que asomó la cabeza por la puerta de una habitación adyacente.
El policía que había junto a ellos asintió, y les asignó un orden aleatorio. A Jongin lo pusieron el segundo, a Baekhyun el cuarto.
-Cuando os llamemos, entrad en el orden en que os hemos dicho. Tenéis que mirar hacia el cristal, sin hablar, y cuando veáis que se enciende la luz roja, salir -dijo el hombre, y se acercó para ajustarles los gorros a Baekhyun y Jongin.
Los cinco entraron en orden, y Sung empezó a inspeccionar minuciosamente a las personas que tenía delante, bajo la fuerte luz de la sala. Él podía verlos, pero ellos a él no.
-¿Está entre ellos? -preguntó la secretaria.
-Conozco a esos dos -dijo Sung, señalando a los números 2 y 4-. ¿Cómo es que los habéis hecho venir también?
-¿Es uno de ellos? -le preguntaron los empleados que había allí.
Sung negó con la cabeza, y empezó a inspeccionar cuidadosamente a los otros tres, pero parecía que las personas que había a su alrededor ya no prestaban atención.
-No es ninguno de ellos -dijo Sung.
-¿Aún recuerdas cómo era aquella persona?
Los ojos de Sung reflejaron una ligera sorpresa.
-Creo… que era casi igual de alto que yo, más o menos de la misma complexión, y por lo demás… Tampoco lo vi muy bien.
Después de un momento de silencio, la secretaria asintió y presionó un botón que había en la pared. La luz roja que había frente a ellos se encendió, y salieron uno detrás de otro.
*
La reunión que se celebraba en el piso de arriba terminó, y Luhan se acercó a Jin, con el rostro pálido.
-Quiero ver a Sung -dijo.
Kris estaba junto a Luhan, y lo miraba, dudoso. Desde hacía un momento, él también estaba blanco como el papel.
-Aún debería estar aquí, iré a preguntar.
Al decir eso, guió a Luhan y Kris al piso de abajo, y le preguntó a un miembro del personal.
-Él y su compañero acaban de marcharse -antes de que terminara de hablar, Luhan ya estaba corriendo.
La silueta familiar de ese hombre estaba justo frente a él. Parecía que Sung estaba ayudando a Jun a ponerse algo en el cuello. Luhan corrió delante de ellos, y le puso la mano en el hombro. Los otros dos se separaron, y el colgante de jade se le escapó de entre los dedos. Cuando Sung intentó coger al vuelo el colgante que había caído en el brazo de Yun, le bajó el guante accidentalmente, revelando una gran cicatriz de una quemadura en la mano y muñeca derechas de Yun.
El colgante de jade cayó al suelo.
-¿A qué debemos este honor? -dijo Sung mientras se agachaba para coger el colgante.
Ayudó a Yun a ponerse el guante y frunció el ceño, mirando a Luhan.
-Disculpe. ¿Me reconoce? -preguntó Luhan.
-Luhan, eres famoso. Por supuesto que te reconozco -al hablar, se giró para mirar a Kris, que estaba junto a él-. Si no queréis nada más, yo tengo que irme -dijo, y cogió a Yun para marcharse de allí.
-¡Espere! -exclamó Luhan, agarrándose a su manga, diciéndole algo sin emitir sonido alguno.
Sung miró a Luhan, perplejo.
-¿Qué? -preguntó.
-¿Luhan? ¿Qué pasa? -preguntó también Kris.
-El tiempo es relativo -dijo Luhan, mirando a Sung fijamente a los ojos, como si la respuesta que buscaba estuviera en ellos-. Y… el paso del tiempo que experimentamos no es absoluto… las puertas… -Luhan lo miró a los ojos, pero lo único que vio fue un par de pupilas vacías.
Kris miraba a Luhan en silencio, agachó la cabeza mientras pensaba en algo. Junto a él, Yun estaba mirando a Luhan y pareció que, de repente, quería decirle algo, las preguntas se agolpaban en sus ojos, incluso más que en los de la persona que tenía enfrente.
-¿Qué quieres decir exactamente? -preguntó Sung.
-Yo… -Luhan dio un paso atrás, decepcionado y sin palabras. Un momento después miró al suelo, sintiéndose derrotado-. No es nada. Perdón por molestarles.
Sung miró el rostro ceniciento de Luhan, y luego el de Kris.
-Entonces nos vamos -dijo.
Ambos pasaron junto a los dos chicos, dejando tras de sí un perfume desconocido.
-¿Qué ha sido eso? -Kris vio cómo los dos hombres se alejaban y cómo Yun giró la cabeza a medio camino para mirarles.
Luhan se agachó lentamente, hundiendo los dedos en su pelo, en silencio, con la mirada vacía.
-Lo que acabas de decir, esas cosas sobre el tiempo… ¿Eso no te lo dijo Clown? -Kris se agachó junto a él, observándolo.
Luhan estuvo callado bastante rato, y luego parpadeó lentamente.
-Tienes razón. Es Clown -Luhan miró el suelo de forma inexpresiva-. Pero sus ojos no mentían. No sabe nada.
Kris miró a Luhan, atónito, y se puso de pie para mirar a los dos hombres en la lejanía. Luhan pasó junto a él, y salió por la puerta principal para echar a andar en dirección contraria a la que habían tomado los otros dos hombres.
-Esto no ha sido una coincidencia. Ha sido una trampa -Luhan miró al suelo mientras caminaba-. Igual que el conductor del camión, esas personas estaban esperándonos para entrar en escena.
-¿Por qué? -Kris se puso al nivel de Luhan, no entendía nada-. ¿Quién es ese Clown exactamente?
-No lo sé -Luhan negó con la cabeza. Respiró hondo, y se detuvo-. Pero no importa… hasta aquí hemos llegado.
Kris se giró, mirando a Luhan, sin palabras.
-¿Y qué hay de los 60 años que ya hemos gastado? -preguntó.
Luhan tenía la cabeza agachada, y no contestó.
-¿No te parece que es un poco tarde para decir que paramos? -insistió Kris.
Luhan negó con la cabeza.
-Aún no es tarde. Para nada.
-¿Crees que sólo te quedaban 30 años de vida?
-¡Aunque Yixing volviera, no recuperaré esos 30 años! -dijo Luhan, mirándolo.
Kris le sostuvo la mirada, y se giró.
-No quiero.
-¡¡Pareces un puto ludópata, ¿lo sabes?!! -le gritó Luhan.
-¿¿Y quién es el que me ha traído a la mesa de juego?? -espetó Kris.
Luhan perdió el habla, y se giró, dándole la espalda a Kris.
-Yo -dijo en voz baja-. Te dije que no podría pagártelo.
Kris lo miró, y un momento después, extendió la mano para agarrar a Luhan del hombro.
-Lo siento. No quería decir eso.
Luhan levantó ambas manos, como si se estuviera rindiendo, como si dijera que no necesitaba que nadie lo tranquilizara.
-Quiero hacer esto -Kris cogió a Luhan por los hombros, testarudamente-. No me importa cuántos años pierda, aceptaré las consecuencias. Y tú también.
-No estaba enfadado por eso -Kris lo miró fijamente-. Si seguimos o lo dejamos, es cosa tuya, pero nunca me dices lo que piensas.
Luhan se quedó mirando al suelo.
-Ya te he contado todo lo que tiene que ver con esto.
Kris lo miró a los ojos, y de repente se quedó sin fuerzas para seguir manteniendo la cabeza en alto.
Era consciente de que no tenía ningún derecho a pedirle esto a Luhan, puesto que él también llevaba una máscara, la misma que le proporcionaba toda su seguridad.
-Parar ahora es lo correcto -dijo Luhan-. Y lo sabes.
-Sí. Todo lo que has dicho es cierto.
-Puedes insultarme por dentro, está bien -los ojos de Luhan estaban desenfocados-. Pero estoy tomando esta decisión por el bien de los dos.
Kris lo miró, sonriendo amargamente.
-No eres educado conmigo para nada.
Luhan tenía la mirada perdida en la distancia, su voz sonó tranquila
-¿Acaso tú has sido educado conmigo alguna vez? -¿Cuando me besaste, o cuando me pegaste? Pero no dijo esta broma en alto.
Kris miraba los coches que pasaban por la carretera, incapaz de articular palabra.
-Entonces está decidido -Kris le dio unas palmaditas en el hombro y empezó a cruzar la calle-. Tú escúchame…
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Créditos:
Fic original
Traducción al inglés por heecups en lj
Traducción de fenshen
Traducción de yixingdotjpg y oh_luhans