BON VOYAGE - HUNHAN (Trad. En Español) Capítulo 22

[yue_kissys]

~Primera Ola~
Capítulo 22
Sehun cambió su posición en su cama con tensión por estar sentado una hora con el teléfono entre su hombro y oreja, balanceando la laptop en sus rodillas con cuidado de no tumbarla mientras buscaba una posición más cómoda.

“Hubo un incremento del 2% el mes pasado, lo verifiqué dos veces.”

Por quinta vez esa tarde, Chanyeol lo observaba desde su cama donde se encontraba recostado sobre su estómago, comiendo papas fritas mientras cambiada los canales distraídamente.

“Sí, esos son los registros que tengo. Se discutió en la junta antes de irme.”

Sehun intentó no contestar con un quejido, dejándole saber al que lo llamaba; lo cansado que estaba cuando dirigió una mano hacia la bebida de Chanyeol, la cual estaba sobre su mesa de noche. Chanyeol se la pasó ofreciéndole también de su bolsa de papas fritas pero el otro solo negó con la cabeza.

“Tengo el archivo en mi escritorio.” Dijo Sehun acercando el vaso a sus labios, luego se aclaró la garganta y continúo. “Pero puedo mandarlo en unos minutos para la junta de la noche.”

Volvió a poner el vaso en la mesa, casi tirándolo por la larga distancia y Chanyeol solo se lo quitó antes que manchara la cama.

“Sí. Sí, señor.” Sehun entrecerró los ojos, observando el email en la pantalla antes de enviarlo. “Tendré todo listo para la otra semana. Sí, señor.”

Terminó la llamada y dio un suspiro muy fuerte mientras se quitaba la laptop de encima, para justo después recostarse a lo largo de toda la cama. Sintió sus articulaciones tronar al estirarse e hizo un gesto de disgusto al sentirtambién cuan adolorido estaba su cuello.

“¿Estas bien?” ´Preguntó Chanyeol, restregando más papas fritas en su cara y Sehun negó con la cabeza.

“No.”

No podía creer que su padre le acabara de dar toneladas de trabajo que hacer en sus vacaciones, de nuevo. Sehun cometió el error de permitirse contestar la llamada y de todas las personas que podían ser, era su padre, discutiendo con él sobre un nuevo proyecto de negocios.

Apenas se había acostumbrado al crucero y ahora debía pasar tiempo frente a su laptop de nuevo. ¿Por qué aun esperaba tener algún descanso?

“Si te hace sentir mejor, debo computar las ventas mensuales de cinco sucursales y mi fecha límite es en tres días y aún no he empezado.” Dijo Chanyeol y Sehun solo rió, en efecto, sí, lo hizo sentirse mejor saber que no era el único trabajando en el viaje.

“Estoy todo cansado.” Sehun hizo un puchero, giro fuera de su cama y subió a lado de Chanyeol recostando su cabeza en el trasero de su amigo. “Y solo son las ocho de la noche.”

“¿Qué quieres decir con ocho de la noche?” Sacudió su trasero haciendo que Sehun levantara su cuello para mirarlo. “Es la una de la mañana.”

Sehun se quejó de nuevo sentándose. “Es todo, voy afuera.”

“¿A dónde?”

Sehun encogió sus hombros y se puso su chaqueta. “A donde sea.”

“Es la una de la mañana.” Dijo Chanyeol de nuevo, moviéndose hacia su almohada para abrazarla contra su pecho.

“Lo sé.” Tomó su tarjeta de acceso y la puso en su zapato. “Solo no quiero terminar el día sabiendo que lo gasté todo trabajando, necesito relajarme.”

Su amigo lo despidió sacudiendo la mano cuando salía por la puerta. “Apaga las luces antes de salir.” Gritó. “Me voy a dormir.”

Este nuevo proyecto lo hacía refunfuñar mientras caminaba por la cubierta. Debería solo esperar a que terminara el viaje antes de checar sus llamadas y mensajes por que ahora realmente tenía algo qué hacer durante el viaje.

Ahora no podía zafarse, si su consejero hubiera llamado podría haber fingido que estaba enfermo o que la línea tenia estática, pero era su padre. Su padre, el único hombre al que no le podía decir no.

Se recargó en la pared del elevador al que acababa de entrar y golpeó ligeramente la parte trasera de su cabeza contra la misma. Necesitaba una distracción, algo en que pensar en vez del número de empleados que despedir, la cantidad de papeleo que hacer, el presupuesto para el marketing, ventas. Es como si estuviera de nuevo en su oficina y no podía pensar en eso por ahora, para eso estaba en el crucero en primer lugar.

El elevador se detuvo en un piso que no recordaba haber seleccionado y cuando salió se dio cuenta que era el área del teatro. Estaba callado y al principio lo encontró inusual cuando recordó que era la una de la mañana y la última presentación fue un musical que había terminado una hora y media antes. Las enormes puertas dobles estaban ligeramente abiertas y alcanzó a ver un atisbo del custodio limpiando todo.

No sabía porque estaba ahí y rió de sí mismo, divertido por el hecho de que aunque estaba estresado, incluso buscando una distracción, siempre estaba pensando en Luhan. Quizá Luhan lo estaba volviendo loco, haciéndolo pensar en él aun sin pensarlo.

Sehun se recargó en el pasillo, con los brazos cruzados, mirando al oscuro teatro y sonriendo cuando recordó la primera vez que puso un pie dentro, no había querido entrar pensando que el espectáculo de magia sería aburrido, recordó haberse quejado con Chanyeol y decirle que se dormirá durante el show, pero estaba feliz de no haberlo hecho. Tembló con sólo pensar que si no prestaba atención, se hubiera perdido de Luhan y jamás hubiera estado tan entretenido por él.

Caminó y tomó asiento en el mismo lugar que Chanyeol y él escogieron en la parte de atrás. Era divertido como aun recordaba eso y la iluminación era la misma, oscuro atrás y brillante al frente. El custodio que barría el área cerca de él, levanto su cabeza cuando él tomaba asiento y Sehun inclinó su cabeza en forma de saludo.

“El show terminó, señor.” Dijo dándole una sonrisa en disculpa.

“Sí, lo sé, pero me gustaría estar aquí por un rato ¿si eso está bien?”

El guardia asintió de vuelta. “Sé a lo que se refiere, señor, este lugar le da una sensación confortable, ¿no es así?”

Es más como una serie de recuerdos. Pensó pero estaba de acuerdo, se sentía cómodo ahí.

“Es hermoso.” Agregó recordando cómo el área complementaba la presentación de Luhan esa noche, recordaba la manera en la que las luces danzaban en la piel de Luhan haciéndola lucir como si brillara y centelleara. La música había sido tan acertada haciendo bailar a Luhan por alrededor tan agraciado y luego tan atractivo. El escenario había sido también su área de juegos, viendo como lucia tan divertido y cómodo moviéndose alrededor como le placía.

“Lo es.” Dijo el custodio a un lado de él y Sehun levantó su mirada hacia el sorprendido, olvidando que aún estaba ahí. “Le diré algo.” Empezó el custodio. “Porque no se queda aquí por un rato, no tengo que cerrar esta noche debido a que hay un ensayo temprano por otro musical en la mañana, así que puede quedarse todo lo que guste.”

“¿En serio?” Preguntó Sehun, sorprendido de cómo esta persona le permitió quedarse. Quería quedarse, aun no quería regresar a su camarote. Seguía estresado por todo el papeleo en su cama y la cantidad de trabajo que le esperaba.

“Solo asegúrese de no causar ningún daño.” Respondió el custodio. “Ya he limpiado toda el área, sin embargo sé que está enamorado de este lugar tanto como yo.”

Sehun rió sin negarlo.

“Veo como lo miras.” Dijo el hombre, refiriéndose al lugar y le dio un buenas noches antes de dejarlo en el oscuro y silencioso teatro.

Sehun estiró sus brazos sobre su cabeza, disfrutando la paz y el silencio, ya había pasado tiempo desde que tuvo alguno de los dos. No quería admitirlo frente a Chanyeol pero el crucero había sido una buena idea.

Observó el escenario vacío, recargándose y tomando buena vista. Hubo un tiempo que quiso presentarse, aun pensaba en cómo se sintió las veces que se presentó frente a la gran audiencia, las porras y los aplausos, sus rostros mirándolo con asombro.

¿A caso Luhan veía a la audiencia igual que Sehun? se preguntó. Viendo el cambio en sus rostros del asombro cuando veían que él era el asistente del mago a miradas llenas de lujuria mientras Luhan bailaba para ellos. Recordó la manera en la que Luhan se tocaba a sí mismo mientras bailaba,  lucia demasiado sexy la manera en la que arrastraba sus dedos a lo largo de su pecho hasta ponerlos en sus labios, silenciando a la audiencia para que el mago Kai se hiciera cargo después. Recordó a Kai estirando de regreso a Luhan mientras se iba bailando, con sus manos deslizándose hacia sus muslos y posicionando una pierna a lo largo de su cintura mientras la otra mano se pasaba detrás de su oreja y hacia aparecer una flor en el aire. Luhan la tomó con sus delgados dedos, arrastrando los suaves pétalos por la mejilla de Kai antes de juntar sus labios en un ligero y provocativo beso.

Sehun recordó como eso lo había excitado en exceso, también lo hizo preguntarse en qué estaba pensando antes de que su cabeza se dejara llevar por Luhan de nuevo.

Detente, se reprendió a sí mismo, no podía pensar en Luhan de esa manera, ahora eran amigos ¿no? Los amigos no piensan así, no piensan uno del otro de esa manera.

Pero realmente no era su culpa cuando no podía dejar de pensar en él. Y mientras, se sentaba en silencio, recordando más sobre esa noche y las demás en las que Luhan se presentó en su vestuario transparente y brillante color blanco que dejaba ver a Sehun un poco de ese pecho pálido y sin imperfecciones, no pudo hacer más que cerrar sus ojos y pensar en el resto de las cosas. Como que se sentiría el pasar sus manos por su piel haciéndolo suspirar mientras él llena de besos su cuello, con su lengua dejando una línea en su piel justo debajo de la oreja antes de que sus labios buscaran su boca y lo besara. ¿Entonces Luhan gemiría, dándole el placer a Sehun de escucharlo deshacerse bajo su agarre, mientras que lo desviste y empuja rápido bajo su mando?

Sehun se acomodó en su asiento, sus manos alcanzando su entrepierna y las comisuras de sus labios formaron una sonrisa al imaginar cómo se sentiría tenerlo. Los dedos de Luhan eran delgados, su fantasías eran tan vividas que imaginaba esos dedos envueltos alrededor de los dos, apretándolos fuerte, sus erecciones frotándose una contra la otra, imagino la mano de Luhan acariciando sus testículos mientras su boca tomaba a la suya empujándolo para bes-

Algo se escuchó caer desde lejos haciendo que despertara de sus pensamientos y saltara de su asiento. ¿Qué rayos? Lentamente se movió del asiento, girando su cabeza para ver que había causado el sonido de enfrente.

Nadie estaba ahí, el teatro estaba muerto, silencioso, pero no podía estar seguro cuando acaba de oír algo. ¿Lo habría visto alguien? ¿Aún seguía el custodio ahí? Porque si alguien lo vio sería algo vergonzoso.

“¿Hola?” Gritó Sehun, su voz haciendo eco a través de las paredes mientras continuaba observando alrededor. “¿Hay alguien ahí?”

Nadie respondió y dio otro paso cuando lo escucho de nuevo.

Algo susurraba.

Era tan débil que probablemente no lo hubiera notado pero siendo el único en el silencioso teatro podía escuchar el menor ruido con su alta audición, así que puso atención a la fuente del ruido, intentando ver de dónde venía cuando se dio cuenta que era del escenario. Con lentitud camino en silencio, subió y miro alrededor, pero no vio nada.

¿Qué fue eso? Se preguntó, sus ojos aun observando toda el área cuando lo escuchó de nuevo.

El pequeño susurro se escuchaba a través de las paredes y Sehun se acercó a la parte trasera del escenario, presiono su oído contra la pared, intentando saber que era fuera lo que fuera ese ruido cuando escucho un pequeño gemido.

Sehun retiró su cabeza y miro a la pared. ¿Qué dem…?

Y ahí estaba de nuevo ese ruido y algo tronando, intentó ver qué estaba detrás de las paredes cuando encontró un pequeño pasaje. Sehun sabía que era, era donde los artistas pasaban cuando llegaba su turno para presentarse.

Se deslizó por el hueco con facilidad y vio un cuarto con la puerta ligeramente entreabierta. La luz que salía de los huecos iluminaban el pasillo y siguió mientras el sonido se aclaraba cada vez más.

No debería estar ahí, obviamente esa área estaba fuera de los límites, el custodio no tenía por qué decirle eso, pero siempre había sido un curioso y de todas formas no tenía nada que hacer, solo echaría un vistazo y no tocaría ni quebraría nada.

Excepto que cuando se acercó al cuarto, se inclinó y se asomó por el espacio a través de la puerta, vio algo que jamás espero ver al final del pasillo.

Se trataba de otro vestidor, uno pequeño donde los artistas descansaban mientras esperaban su turno en el escenario. Muchos también lo llamaban cuarto de espera. En el piso había un montón de disfraces y una pequeña lámpara que se había caído de la mesa. Eso debió causar todo el ruido, pensó mientras sus ojos recorrían el vestidor, justo en el sillón a través del espejo con focos rodeándolo, había alguien muy hermoso y desnudo, gimiendo, tocándose, jugando consigo mismo.

Es como si Sehun hubiera encontrado la olla de oro al final del arcoíris o en este caso, al final del pasillo. Sentía como si sus ojos le estuvieran jugando una broma, después de todo estaba cansado, era la una de la mañana y una escena así es algo que solo había visto en su cabeza - lo había soñado - y no podía hacer nada más que observar a través del caos de ropa en el piso, su boca se secaba mientras Luhan arqueaba su espalda, su pecho contrayéndose de arriba abajo como si no pudiera respirar apropiadamente, con sus dedos desapareciendo lentamente dentro de sí mismo.

Sí, dedos, dos de ellos. Sehun tragó mientras su cabeza aun intentaba comprender lo que sus ojos estaban viendo, las cejas de Luhan estaban arrugadas en dolor y placer al jugar consigo. Sehun no podía verlo completo por el pequeño hueco de la puerta, pero podía deducir algunas cosas, como que los muslos eran tan blancos y suaves y se estremecían mientras se penetraba a sí mismo y Sehun comenzó a limpiarse las palmas de sus manos en el pantalón las cuales de pronto estaban sudorosas con una mano sujetando el marco de la puerta para no tropezar y ser descubierto.

El cuarto estaba alumbrado solo con los focos del espejo pero no estaba tan oscuro como para que no viera lo que el otro hacía. Luhan no masturbaba su pene y tampoco lo tocaba, solo yacía ahí entre sus piernas y Sehun no tenía que tocarlo para saber cuan duro estaba. El solo verlo jadeando y dejando salir profundos suspiros mientras se penetraba con los dedos, dejó un bulto duro en los pantalones de Sehun y este se movió en silencio disfrutando de la escena frente a él.

Todo esto es un sueño, pensó confuso con su respiración entrecortándose mientras Luhan soltaba gemidos profundos y pudo ver como sus pies se curveaban por la sensación de placer. Era tan hermoso estando desnudo y no se estaba tocando a propósito, pero sabía lo mucho que ese bulto entre sus muslos deseaba y necesitaba al punto de la frustración y le dio puntos a Luhan por tener el autocontrol para no correrse del todo. Su pene, el cual lucia divino a los ojos de Sehun, estaba derramando liquido pre seminal y deseaba tanto limpiar su punta y ser el único en tocarlo sí es que Luhan no lo hacía.

Todo Luhan era hermoso, vestido o desnudo, Sehun no podía escoger a su favorito, Luhan vestido sobre el escenario, deslumbrando y sonriendo a la audiencia era algo que amaba ver, pero esto, este Luhan desnudo y jadeante era tan… Sehun se lamió los labios al pensar en una palabra que describiera lo que Luhan era ahora para él y pareció sentirse un poco avergonzado por incluso verlo de esa manera. Por qué lucía tan pecaminoso, alguien a quien podía tener justo ahí, justo en el momento pero no podía porque eran amigos.

Pero no importó qué tan malo se suponía que era, no apartó su mirada, sus ojos aún seguían en sus muslos, en su pecho, en ese estomago delgado y bien definido, el ángulo de la línea de su quijada. Le gustaba la manera en la que sus labios era tan rosas y como abusaba de ellos manteniendo medidas drásticas para evitar gemir muy fuerte y Sehun lo deseaba con desesperación, quería tocarlo y ser el que lo hiciera gemir, llenar el cuarto con ese sonido y hacer que sus pies se curvearan, lo deseaba a él.

Pero fue su torpeza lo que hizo que Luhan dejara de hacer lo que hacía después de que su mano sudada resbalara de la pared, haciendo que empujara la puerta dejándola completamente abierta y revelándose parado ahí en el pasillo. Fue la torpeza de Sehun lo que hizo que Luhan levantara su mirada despacio para mirarlo con esos ojos que mostraban aturdimiento. Sehun no podía responder nada coherente con la erección de Luhan frente a él, las palabras se atoraron en su garganta. Fue la torpeza de Sehun lo que lo tenía pensando mierda, mierda esto es todo, mi amistad con Luhan termina aquí esta noche cuando Luhan se movió del sillón con lentitud, los dedos ya no estaban dentro de él y sus ojos estaban sobre Sehun mientras se paraba temblando, un pie en el piso y el otro apoyado en el sillón, las siguientes palabras que dijo dejaron a Sehun con los ojos como platos.

“¿Ayudarías a un amigo?”

Sehun no se movió, su corazón casi se para por lo que el otro preguntó. ¿Habrá escuchado bien? ¿Acababa de preguntar que…?

Luhan se tropezó cuando se dirigía a él y Sehun de inmediato camino hacia él para atraparlo en sus brazos, Luhan lo miro desde abajo y Sehun sintió el calor que irradiaba su cuerpo. El más bajo estaba todo sonrojado, sus mejillas y su pecho con una ligera sombra roja y con lentitud levantó un dedo hacia la mejilla de Sehun, tocándolo y provocando que su piel tuviera la sensación de quemarse en vida.

“¿Por favor?”

Sehun no lo pensó más dejando el autocontrol a un lado mientras levantaba a Luhan del piso con cada parte de su cuerpo llenándose de deseo cuando Luhan lo envolvió en sus piernas, con los labios en su oreja y los dientes pellizcándole la piel, Sehun no podía respirar apropiadamente cuando el otro lo acariciaba con la nariz bajando a su cuello e ignoró cómo su miembro estaba duro entre ellos dos, porque eso hacía más difícil para él concentrarse en lograr llevarlos al sillón.

Y no lo hicieron. Luhan estiró el cabello de Sehun y se frotó contra él, hizo que sus rodillas cedieran justo cuando alcanzaban el sillón. Fue bueno que no cayeran tan fuerte o se hubiera lastimado la espalda pero Sehun no tenía el tiempo para pensar sobre qué hubiera ocurrido cuando Luhan estiró su rostro contra él.

Se detuvieron por un momento, recuperando el aliento y observándose uno al otro cuando Luhan abrió su boca para decir algo, pero las palabras parecían no salir aunque Sehun no necesitaba escuchar lo que quería, no tenía que decir nada. Rozando su pulgar por el labio inferior de Luhan y al ver cómo sus labios se entreabrían recibió el único mensaje que necesitaba.

El cuerpo de Luhan ya estaba preparado por la actividad que hizo antes y no había necesidad de hacerlo pasar por todo eso de nuevo aun y cuando Sehun quería hacerlo. Deseaba muchas cosas en ese momento, deseaba tocarlo por todas partes, sentir su piel con la de él, besarlo hasta que los dos se quedaran sin aliento, pero no era el momento cuando Luhan parecía adolorido por la necesidad de ser tocado, de poder terminar, así que con una mano lo empujó para que se recostara en la orilla del sillón y con la otra envolvió la base de su pene, no perdió ni un segundo más mientras descendía y lo cubría con su boca.

Hacerle un oral a Luhan había sido su sueño más grande, poder probarlo todo, lamiéndolo provocativamente, llevándolo hasta el borde y mientras lo observaba con el delicioso y duro pene de Luhan en su boca, sabía que sus sueños finalmente se harían realidad en unos segundos.

Comenzó bajando más rápido, la punta del miembro golpeando el fondo de su garganta haciéndolo temblar, provocando un grito ahogado. Le hubiera gustado meter sus dedos en él y continuar lo que había empezado antes y hacerlo gemir, curveando sus dedos y rozando ese punto sensible hasta que Luhan no pudiera pensar más pero por la manera en la que respiraba y jadeaba, sabía que no duraría más, así que en vez de eso sujetó sus testículos, estirando y acariciándolos mientras tomaba más de él, succionando justo con la cantidad precisa de presión, sin dejar nada descubierto.

Usualmente Sehun no le hacía oral a otros pero tampoco era malo haciéndolo, simplemente le gustaba ser el que se recostaba y relajaba, pero Luhan era demasiado exquisito como para no tocarlo especialmente estando así, su cabello alborotado en los laterales de su rostro y la piel brillándole por el sudor, se veía tan hermoso extendido para Sehun, aun si todo esto no era del todo por él.

Hacerle esto a Luhan, hacerlo sentir bien y mirar cómo se caía a pedazos por el trabajo de su boca arriba y abajo, hacía sentirlo aún mejor.

“S-Sehun,” Luhan solo pudo tartamudear su nombre cuando se corrió con el alto aun apretándolo y tragándolo todo. Estiró el cabello de Sehun para que se despegara ya de él y dejara de tocarlo porque era demasiado, todo era demasiado y ver como Luhan reprimía los temblores que mandaba su cuerpo en vez de dejarlos salir, el sabor caliente en su garganta, hizo que Sehun se corriera en sus pantalones y un gemido de satisfacción pasó por sus labios al liberar el miembro, asombrado de haberse corrido sin ser tocado.

Luhan bajó la mirada hacia él, la neblina en sus ojos aun ahí y Sehun lamió sus labios sosteniéndole la mirada. Este apenas recuperándose del éxtasis cuando sus pensamientos ya estaban de vuelta. Hermoso, pensó por centésima vez y sabía que nunca dejaría de pensar eso sobre Luhan.

El más bajo lo alcanzó con los brazos estirándolo para que se levantara y eso hizo. No se besaron uno al otro pero sus frentes descansaban una contra la otra mientras recuperaban el aliento y Sehun sintió los delgados dedos de Luhan estirar un poco sus pantalones.

“Estoy bien.” Susurró Sehun, aun tratando de que sus pulmones tomaran oxígeno.

“Pero tú no has-“ Se las arregló para decir algo cuando Sehun susurró en su oído.
“Ya está.”

Luhan dejó salir una pequeña risa al reposar su barbilla en el hombro de Sehun, aun sin aire y el alto aprovechó esos pocos segundos solo para respirar todo de Luhan, sentir el latir de su corazón regresar a un ritmo normal, sentir el sudor y la suavidad de su piel y lo bien gastados que estaban ambos.

Fue el estrés de la tarea de su vida real junto con su orgasmo y todas sus frustraciones sexuales reprimidas que fueron de alguna manera; satisfechas, que se quedó dormido en el hueco del cuello de Luhan justo en el piso con su brazo alrededor de su pequeña y desnuda cintura. Pero también estaba ese matiz de culpa que se filtró en su cabeza haciéndolo pensar sobre lo que acababa de pasar pero por estar debilitado, hizo eso a un lado mientras se arrimaba más cerca de Luhan.

Porque no podía pensar al respecto en ese momento.

Y no quería hablar nunca de las consecuencias.

* * *

Las consecuencias llegaron justo después de que Sehun fuera despertado por un grito y un par de golpes en sus costillas al día siguiente y se fuera del vestidor todo mareado. Luhan se había ido de su lado y gritos de “¡Fuera de aquí pervertido!” de las bailarinas preparándose para su ensayo de la mañana, aun sonaban en sus oídos, además de retorcerse por los golpes que lograron darle.

Pero los golpes no dolían tanto cuando llego a su cuarto con Chanyeol aun roncando en la cama, no era tan doloroso como el sentimiento que tuvo mientras se desvestía para tomar una ducha rápida cuando una nota cayó mientras vaciaba sus bolsillos y leyó:

Perdón por lo de anoche.

Pero gracias.

-Tu amigo

Amigo.

Sehun solo pudo soltar una risa sin gracia, mirando a las palabras escritas sin cuidado en la nota, por un minuto más deseó que la noche anterior hubiera sido realmente solo un sueño.

Porque despertar en esa clase de realidad, apestaba.

Capítulo 23 →

←