[REVERSE BANG] Invasión Capitulo 5

[darlin43]

Titulo: Invasión         
Autor: Darlin43
Fandom: Supernatural; Torchwood
Pairing/Personajes: Dean, Sam y Cass van a Cardiff siguiendo a un demonio en busca de un objeto sagrado religioso, pronto descubren que no están solos ahí.
Clasificacion: +15
Conteo de palabras: 13.111
Disclaimer: Ni Sobrenatural o Torchwood, junto con sus personajes o tramas me pertenecen, cada uno pertenece a su respectivo autor, yo solo tomo prestado el nombre de alguno de sus personajes para mi entretenimiento y el de los que lo quieran leer.
Resumen: Dean, Sam y Cass van a Cardiff siguiendo a un demonio en busca de un objeto sagrado religioso, pronto descubren que no están solos ahí.
Notas de Autor: (Los alienígenas Si me pertenecen ¬¬)

Capitulo 5




El coche chirriaba mientras avanzaba lo más rápido que podía por las infestadas carreteras, parecía que realmente había vuelto a llegar el Apocalipsis, la gente, saqueaba tiendas, algunos huían de los fantasmas, otros corrían sin rumbo fijo, aplastándose los unos a los otros.

Dean entendió rápidamente la felicidad del demonio, al ver tantas cosas que no podían entender las personas se habían entrado a sus más bajos instintos, robar, mentir, matar… Toda la visión era horrible, y sin embargo era imposible apartar la mirada.

-¡Atento a la carretera, no hemos venido a atropellar a las personas!- Gwen gritaba con la mitad del cuerpo asomado por la ventana mientras agitaba una barra de hierro que Dean había sacado del maletero para bloquear a los fantasmas que se acercaban a ellos.

-¿Cuál es el edificio?- Dean recuperó rápidamente el control mientras esquivaba tanto a vivos como a muertos.

-¡Aquel!- Gwen señalaba con la barra para indicarle a Dean un gran edificio gris con enormes ventanas negras.

Dean se acercó todo lo que pudo, pero pronto el pelo de su nuca se irisó con una horrible sensación de frío y malestar.

-Hola Dean…- La imagen de Gordon, estaba sentada en el asiento de atrás.

De repente una oleada de recuerdos acudieron a la cabeza de Dean, recuerdos no buenos precisamente, Gordon había sido un amigo, un compañero hace ya mucho tiempo, pero cuando descubrió que había algo raro con Sam, se convirtió en un enemigo, no paró de perseguirlos, de intentar dañarlos y en especial, de intentar matar a Sam con sus propias manos, se justificaba diciendo que era un monstruo, que Sam no era un humano normal, y eso era lo peor, porque en el fondo Dean sabía que tenía algo de razón, pero Sam le había enseñado que no todos son monstruos, que no todos son malos, y aun así Gordon parecía habérselo tomado como un asunto propio. No paró de perseguirlos, no les dio un monto de tranquilidad, incluso lo convirtieron en vampiro, y aun así, siendo el un monstruo no dejo de intentarlo hasta que acabaron con él, y ahora, estaba allí, con una sonrisa malévola en sus labios. Y por una vez, Dean se quedo bloqueado, no sabía que hacer.

El coche giró bruscamente por la calle y Gwen se agarró con todas sus fuerzas para no caerse. Pensó en gritarle a Dean, pero vio de reojo a un hombre negro sentado en el asiento de trasero ahogando a Dean con sus manos.

Dean empezaba a notar la falta de aire, intentaba soltarse y a la vez no estrellar el coche mientras intentaba evitar a los fantasmas, todo empezaba a confundirse en su mente y poco a poco notaba como la falta de aire estaba bajando sus reflejos.

Intentó hablar, pero el apretón del fantasma de Gordon era demasiado fuerte. Los pulmones empezaban a dolerle por la falta de aire, e intentó decirle a Gwen que se agarrará, pensó que tal vez un frenazo pudiera echar al fantasma a través del cristal. Pero de repente el apretón desapareció, tomó rápidamente aire y frenó con urgencia. Miró a su lado y Gwen estaba placidamente sentada, como si no hubiera pasado nada mientras portaba la barra en una mano. Normalmente cualquier chica se habría puesto histérica, cualquier chica que conocía se habría largado o estaría aterrada, y esta le miraba con una sonrisa de tranquilidad, le acababa de salvar la vida de un viejo enemigo fantasma y estaba tan tranquila como si estuviera sentada en un prado tomando té con pastas o lo que tomases los ingleses.

-Gracias…- Consiguió pronunciar por fin.

-No hay de que, pero te has saltado nuestro destino, es aquel edificio de atrás.- Dijo señalando con la cabeza el gran edificio con las antenas encima que estaba a solo unos metros detrás de ellos.

-Estaba buscando aparcamiento, eso es todo- Una sonrisita inundó el rostro de Dean, y no sabía exactamente por qué pero eso le animó el día.

Entraron con precaución en el edificio, pero no parecía quedar nadie allí, las puertas de salida estaban abiertas de par en par, era obvio que los que hubiera trabajando salieron corriendo, al menos no había vivos dentro.

-Vamos, debemos de ir a la sala de control, esta en el tercer piso.

La enorme habitación estaba plagada de pantallas y ordenadores, era un lío mirar todas las pantallas y sacar algo en claro de ello.

Gwen le pasó la barra de hierro que habían traído para cubrirse las espaldas, y rápidamente se sentó en la mesa central donde había tres pantallas y un solo teclado.

-Bien, a ver que podemos captar…-

Dean le miraba medio asombrado, el era un chico de acción, y estaba claro que ella no era menos, después de todo lo ocurrido, sin embargo era una chica llena de recursos, sabía manejar los ordenadores y las armas con la misma destreza, ese grupo, deben de ser lo mejor de lo mejor.

-Si, hay algo… Pero no es una señal de onda común, es más… como un sonido.

-¿Un sonido? ¿Y porqué no oímos nada?

-Al parecer esta en una frecuencia muy alta. Espera, haré una grabación y nos lo llevaremos, quizás en el ordenador de Torchwood pueda saber que es, con su programa no hay nada que se resista.