Haec Olim - SEHUN/KYUNGSOO (Trad. en Español) {3/6}

Mar 10, 2015 23:27


{3/6}
"Oh, maldición," llora Sehun, sonriendo con entusiasmo. "Odio eso."

"Pensé que podrías. Deja esa maldita bebida antes que se te derrame."


Las manos de Kyungsoo en la cintura hacen de esta una tarea más difícil de lo que podría ser, pero Sehun logra aterrizar el vaso de plástico sobre una superficie plana, mientras que la otra mano se acerca a descansar en el cuello de Kyungsoo.

"Todavía voy a hacer toda la mierda de planificación mañana." Dice.

"Está bien", concuerda Kyungsoo y luego se inclina para besarlo.

Al día siguiente es sábado, así que tiene a Kyungsoo para él solo. Normalmente esto implicaría un montón de relajarse en diversas áreas del apartamento, sacando los juegos del XBox y Kyungsoo juguetea, pero hoy, Sehun tiene un plan. Se levanta temprano desenredándose de la pila de extremidades que finalmente habían acomodado en la noche anterior y tirando de un par de pantalones de chándal. Se pone de pie sin rumbo en la cocina por un momento, contemplando hacer el desayuno antes darse cuenta de lo espectacularmente mala idea que es esto. Van a salir a conseguir el desayuno, decide. El tiempo sigue siendo lo suficientemente frío de la lluvia por lo que estar afuera no es insoportable, por lo que Sehun planea para el día por empezar. Encuentra a Kyungsoo despierto y apoyado en un codo para comprobar el correo electrónico en su teléfono, por lo que Sehun colapsa dramáticamente hacia abajo sobre el colchón, haciendo que el otro hiciera un graznido indignado mientras su teléfono vuela de su mano. Sehun esconde su sonrisa en su muslo.

"¿Usando más ropa que yo?" Kyungsoo pregunta. "¿Es esto lo que sientes todo el tiempo?, porque lo siento."

"Ahora conoces mi frustración", asiente Sehun. "Es horrible."

Ducharse juntos resulta no ahorrar tanto tiempo mientras Sehun trata de argumentar que si lo hace, pero ninguno de ellos se queja de salir de la casa una media hora más tarde de lo que Sehun había planeado previamente. Se queja acerca de lo ocupado que la cafetería está causando que Kyungsoo señale que la mayoría de la gente de hecho, consume cafeína por la mañana y no, la una de la tarde no cuenta como mañana, incluso si es cuando Sehun se las arregla para arrastrarse fuera de la cama. Objeta en voz alta por sentarse adentro donde están rodeados de mesas llenas de gente y la línea de caracol que conduce hasta el registro por lo que vagan fuera para posarse en una pared de ladrillos cerca. Ninguna cantidad de curiosos o la petición por parte de Kyungsoo harán que Sehun divulgue sus planes para el día, así que se ve obligado a apaciguar con un gran bocado de su bollo de canela. Pasan el tiempo burlándose de las opciones de bebida de cada uno - "¿Bebes café negro? Sabía que tu paladar estaba defectuoso!" "Sí, bueno, ¿qué clase de hombre de negocios bebe un... vainilla latte de soya, de todos modos?" "Aquel que está supuestamente disfrutando de una excursión de fin de semana relajante." - Antes que tome la mano de Kyungsoo y le tire a lo largo de la acera a su próximo objetivo. Kyungsoo ha renunciado a preguntar a dónde van a favor de tratar de ir detrás de los zapatos de Sehun.

"Exactamente ¿cuál de nosotros es mayor, de nuevo?" Pregunta cuando tiene que detenerse para volver a atar sus zapatillas por tercera vez.

"Si se te permite ser el planificador responsable, se me permite ser el inmaduro por una vez." Dice Kyungsoo con anchos ojos inocentes.

Cuando finalmente se paran en frente del edificio, Kyungsoo mira hacia el signo con incredulidad.

"¿Un salón de belleza?” Dice. "¿Te vas a hacer un corte de pelo? ¿Me voy yo a hacer un corte de pelo?"

"Ninguno de los dos." Responde tirando de él por la muñeca.

Kyungsoo mira con confusión cambiando a asombro mientras su novio se sienta en la silla del salón con niveles de cloro en aumento aplicado en su pelo. Sehun arruga la nariz ante el cloro, el olor fuerte ácido quema de su nariz, mirando a Kyungsoo, quien ha puesto una distancia segura para reírse de él.

"Para de reírte." Demanda. "Ve a buscar a través de todos los colores de tinte de pelo por allí."

"¿Por qué?" Kyungsoo pregunta paseando por un estante lleno de pequeños y plásticos tubos.

"Porque tú vas a escoger el color."

Kyungsoo vuelve a mirar por encima del hombro bruscamente. "¿En serio vas a teñirte el pelo?"

"Sí." Toma una respiración profunda. "Sea cual sea el color que elijas, lo voy a poner en mi cabeza."

"Me halaga que pienses tan bien de mis opciones de color." Da vuelta algo marcado 'Blue Razzberry' y arquea una ceja. "¿No eres tú el que tiene experiencia en esa área? Quiero decir, yo podría diseñar un penthouse para tu pelo, pero creo que estoy un poco perdido ahora que estamos -" hace una pausa para entrecerrar los ojos a otra etiqueta "territorio Lagarto Eléctrico.”

"Si yo quisiera escoger mi propio color del pelo, simplemente lo hubiera hecho y esperaría para que tuvieras un ataque al corazón cuando me quité la gorra." Sehun intenta mirar bizco a su cabello, pero está demasiado lejos para echar un vistazo. "Sólo tienes que elegir un color, ¿de acuerdo? Lo que sea que elijas es lo que voy a utilizar."

"Eres tan confiado." Sonríe. "¿Qué pasa si atrozmente abuso de esa confianza? ¿Cómo te sientes acerca de naranja metálico? ¿O tal vez algo que brilla bajo luz negra?"

"No tenemos luces negras." Señala.

"Estaría dispuesto a comprar la novedad de bombillas sólo por ti," Aletea sus pestañas. "Oh, aquí vamos. Sehun, creo que vas a tener el pelo chicle."

Sostiene una bañera rosa pastel y sonríe al ver la expresión consternada de Sehun.

"Todavía te puedes arrepentir." Dice. "¿Seguro que no quieres tu escoger el tinte?"

"Estoy seguro." Responde con firmeza. "Voy a hacer el de color rosa."

El estilista, que ha estado observando todo el intercambio, toma el tubo de la mano de Kyungsoo. Cuando se enjuaga la salida lejía, deja escapar un silbido.

"Wow, eres platino.

Sehun pasa los dedos por los mechones, llevándolos a su visión periférica.

"Como que me gusta", dice.

"Podrías mantenerlo como esta", Kyungsoo sugiere, pero su novio sacude la cabeza.

"Escogiste el rosa, vamos al rosa."

Kyungsoo mira el tinte entrar en su cabello intensamente, sus ojos siguiendo las manos del estilista mientras el recipiente se vacía lentamente sobre el cuero cabelludo de Sehun. Este quiere retorcerse incómodamente pero las manos enguantadas en ejecución por el pelo lo mantienen quieto. Cuando está todo cubierto de espuma su cabello y guardado de forma segura bajo una capa de plástico, Sehun es finalmente capaz de romper su cuello para trabajar en la tortícolis en sus hombros.

"Estás muy tenso para alguien que, no hace más quince minutos, estaba gritando "sí, rosa, ponlo sobre mí 'y moviendo los puños" Kyungsoo señala.

"Me estaba convenciendo psicológicamente a mí mismo." Explica Sehun. "Estás poniendo rosa princesa por sobre toda mi cabeza, pero por dios, voy a ser varonil al respecto".

"Serás la envidia de las niñas de siete años de edad en todas partes." Asegura Kyungsoo, sacando su teléfono para tomarle una foto envuelto en la bolsa de aluminio.

Pasan la hora que tarda el tinte para establecerse dibujando bigotes en todas las imágenes en las revistas de la zona de espera y visualizando extensiones en la cabeza de los demás. Es el día más inmaduro que han pasado juntos en semanas enteras, y Sehun se encuentra sintiéndose más relajado de lo que ha estado desde que escuchó por primera vez indicios de la existencia de Junmyeon. Resulta que sólo toma un trabajo de tinte para colorear el pelo de Sehun, lo que confirma toda la investigación en línea que había hecho que hacía muy recomendable este lugar por encima de todos los otros de la ciudad. Su cartera está a punto de recibir un gran golpe, lo sabe, pero la alegría de incredulidad en el rostro de Kyungsoo cuando ve su cabello seco y peinado en curvas ascendentes vale al menos el sueldo de una semana. Kyungsoo se niega a que se cubra el pelo con un gorro cuando salen del salón y en su lugar, lo arrastra al restaurante más lujoso de la zona por sobre sus protestas.

"¡No estoy vestido para esto!" Entra en pánico.

"Solo luce furtivo y guapo y mantén puestas sus gafas de sol." Dice Kyungsoo. "A lo mejor piensan que eres un ídolo y toman fotos. ¿No sería divertido si aparecieras en blogs de chismes más tarde?"

Sehun silba, pero el agarre de Kyungsoo es el hierro. Lo patea debajo de la mesa cuando la camarera no lo deja de mirar, el rostro calentándose cuando ella les trae la cuenta al final de la comida junto con una petición de autógrafos. Si las miradas mataran, Kyungsoo sería un montoncito de cenizas derramadas sobre su silla ahora, pero la mujer se entusiasma cuando Sehun toma la pluma y garabatea su nombre en letras enormes en toda la página. Sehun piensa que ella se puede mojar cuando le pregunta su nombre para escribirlo correctamente y al mismo tiempo, le da un golpe contundente en la barbilla de Kyungsoo con el fin de sofocar la risa ahogante que le está dando. Kyungsoo instantáneamente los convierte en toz y toma la totalidad del agua del vaso.

Sehun se niega a dejar el apartamento de nuevo por el resto del fin de semana, los dos de ellos en su lugar, volviendo su ritmo habitual de conversación y bromas sobre las pantallas individuales. Todo vuelve a ser como era, como debe ser, tan familiar que olvida preocuparse sobre el trabajo pendiente de la semana hasta que Kyungsoo recibe una llamada la noche del domingo. Es de Junmyeon. Kyungsoo se levanta de su asiento en el sillón para tomar la llamada, mientras Sehun sacude lo rosa desconocido de sus ojos y no escucha en absoluto la voz baja pero animada de Kyungsoo con el corazón encogido. Cuando regresa, está casi temblando de emoción.

"¡Me dieron el trabajo!" Anuncia. Se pone de pie junto a Sehun, mirándolo como si no estuviera seguro de si quiere saltar arriba y abajo o abrazarlo o colapsar en un montón de huesos rotos o tal vez las tres cosas a la vez. "La reunión del jueves, ¿recuerdas? Le gustó mi presentación tanto, que va a contratar a nuestra firma para su próximo proyecto de construcción, ¡Y soy el encargado del diseño!"

El cerebro de Sehun parece estar en guerra entre el abrumador orgullo y la felicidad por Kyungsoo y la miserable frustración por la reintroducción de Junmyeon en sus vidas. El orgullo feliz gana en su mayor parte, lo que provocó ponerse de pie y envolver a Kyungsoo en un abrazo, acariciando la nariz en su cabello y presionando besos justo debajo de la oreja porque no confiaba en sí mismo lo suficiente para hablar.

Lunes por la mañana amanece nublado, el cielo cubierto con un manto irrompible de frío y gris. Le recuerda a acero inoxidable recubriendo los cielos, evitando que el sol siempre realmente reaparezca para secar después la tormenta. Durante toda la semana se mantiene justo al borde de la lluvia, nunca lo suficiente para reducir las temperaturas que comienzan lentamente a subir de nuevo, pero lo suficiente para que nunca sients que se seque por completo. Dentro de tres días cree que podría estar a punto de crecer moho, ya sea desde el nivel de humedad del bochorno constante o de estancamiento mental. Contrariamente a lo que habían esperado y anhelado, ahora que Kyungsoo tiene un proyecto pasa aún más tiempo fuera de casa. Aparentemente Junmyeon estaba involucrado en algo más que la introducción al cliente. Sea cual sea lo que Kyungsoo está haciendo ahora implica horas y horas de trabajo encerrados en la Oficina que va sobre las decisiones y planes, que Junmyeon mejora o apruebe antes de pasar en diseños e informes a su empleador. Intenta argumentar que no ve por qué Kyungsoo no puede dibujar y enviar diseños desde su sala de estar, como siempre lo ha hecho en el pasado, pero las explicaciones de Kyungsoo van más allá de la paciencia para escuchar a Sehun. Está dispuesto a creer que un empleado asalariado de una empresa tiene diferentes responsabilidades y expectativas que satisfacer y sin embargo. Sehun no puede dejar de resentir los días que pasa ​​solo. Incluso los días de reuniones con clientes interminables habían sido mejor que esto. Kyungsoo trabaja hasta más y más tarde, con apenas un momento compartido en el teléfono con un "hola ¿cómo estás?"

Sehun pica por su trabajo a lo largo de los días pasados ​​mirando las cuatro paredes o las páginas de sus libros. Ojalá que llueva. Pinta una escena callejera en escala de grises en una sola tarde, las líneas borrosas y ondulantes con el calor húmedo, hicieron todo más fácil ya que Sehun parece pasar todos los días ahora con un mareo sin aliento constante. Suda bajo el cuello de su uniforme del restaurante cada noche, hasta que se olvida de lo que se siente llevar ropa que no está pegajoso y aferrándose húmedamente a su cuerpo. Puede ser que sea atribuible al calor adherido en el que él se sienta jadeando frente a tres aficionados una noche, suplicando por teléfono a Kyungsoo que "No, realmente, podrían venir a trabajar aquí, no me importaría." Le daría a Junmyeon la bienvenida casi con los brazos abiertos si eso significaba la oportunidad de ver Kyungsoo por más de unos pocos momentos de somnolencia a altas horas de la noche, mucho después que ha dormido, agotado por la espera. Murmura un "te quiero" en el pelo de Kyungsoo cada noche, escuchando cada vez por algo más que un murmullo incoherente, que es todo lo que alguna vez llega. Kyungsoo rechaza su sugerencia, voz que viene a través cansado por los altavoces del teléfono.

"No sería un problema, hyung, realmente," Sehun persiste. "Sabes que este lugar es más grande de lo que parece. Va a funcionar."

"No tenemos las facilidades allí para hacer todo el trabajo que tenemos que hacer. Sé que estás tratando de ayudar, Sehun-ah... yo realmente lo aprecio. Interrumpiríamos tu proceso de pintura de todos modos. Lo siento, me tengo que quedar aquí”.

Kyungsoo está cansado, o habría que recordar que Sehun tiene nada que pintar. Él no tiene nada que hacer sino esperar y llenar sus días con distracciones de lo mucho que echa de menos a Kyungsoo.

"Está bien.” Y en su lugar, cuelga reclinando la cabeza contra el borde de la mesa.

Su apatía se convierte en resentimiento enojado como los días pasan, la breve tregua que había hecho con Junmyeon en su mente se estaba disolviendo. Junmyeon es el que está manteniendo a Kyungsoo lejos, fallando en ver en donde no es necesario. Kyungsoo nunca necesitó ayuda para crear sus edificios en el pasado, pero había algo en Junmyeon que ahora tiene a su novio colgando de cada palabra suya y pidiendo su opinión sobre todo. Ellos llegan a su primer hito, y lo primero que Sehun escucha sobre ello es cuando contesta su teléfono ansiosamente es escuchar que Kyungsoo va a salir esa noche. Junmyeon va a invitar a todo su equipo de diseño a cenar y beber. Sehun le da la espalda cuando finalmente se mete en la cama.

A medida que se mueve en la segunda etapa de su diseño, Kyungsoo comienza a hacer apariciones en el apartamento de nuevo, aunque esto es casi peor ahora ya que cada vez que lo ve, tiene apenas una palabra para hablar con él en medio de las llamadas y la construcción de modelos constantes. Las bromas quedaron atrás, apenas se miran. Las únicas cosas que llaman la atención de Kyungsoo son los comentarios mordaces que Sehun hace de Junmyeon sin que él escuche.

"Exactamente ¿De quién es este proyecto de todos modos?" Sehun suelta cuando ve el teléfono yendo al oído de Kyungsoo nuevo. "¿Tuyo o de él?"

El ceño fruncido que recibe se agrega a la cuenta de "Momentos en los que Kyungsoo ha reconocido mi existencia hoy." Pero aun así, no hace que se sienta mejor. Los rumores de que otra tormenta viene llegan a los oídos de Sehun unos días después lo ponen ansioso, como si estuviera a punto de arrastrarse fuera de su piel. A falta de otra cosa que hacer, empieza a pintar otra escena del calor opresivo gris. Se siente como que ha estado sucediendo desde siempre, la promesa de la tormenta es nada más que un espejismo en su cerebro reseco.

El cielo de hoy es completamente gris pero brillante, las nubes son como un velo muy delgado entre el sol y la tierra, difundiendo la luz y  suavizándola. Está cayendo neblina en vez de lluvia. Cada vello en su brazo tiene una pequeña gotita aferrándosele, toma varios minutos para que crezcan lo suficiente y puedan recorrer por su brazo una por una, tal como pinta las diversas texturas de gris y los halos multicolores que forma la neblina alrededor de la parte superior de los edificios de enfrente. Incluso sin los rayos directos, la niebla cae sobre su cara como una manta, por lo que es casi imposible aspirar una bocanada de aire. Kyungsoo todavía no ha estado fuera para ver su progreso, así que Sehun trabaja rápido. Es mezquino y lo sabe pero le sirve  el hecho de que venga lo suficientemente temprano para ver el trabajo antes que esté terminado. Los colores dispersos de la azotea de un edificio simplemente no están saliendo bien, lo cual lo está frustrando y enlenteciendo, pero los colores son muy débiles, en primer plano, no puede decir si el problema es que tiene demasiado verde o  si aún no es suficiente. Coloca un ocre más quemado y lo cree suficientemente bueno. Kyungsoo podría saberlo pero no ha estado por ahí todo el día y Sehun no va a buscarlo para pedirle ayuda ahora. La ilusión de  auto suficiencia se extiende lejos, por lo menos.

Es más que nada por casualidad y no del todo, el motivo por el cual lo está buscando de nuevo que regresa de haber salido al balcón así como Kyungsoo se deja caer en el sofá. Su teléfono está presionado contra su oreja, lo que provoca que Sehun se pregunte si ahora lo tiene adherido quirúrgicamente. No hay respuesta.

"¿De verdad crees que deberíamos tirar abajo el cielo raso por un conjunto de siete pisos?" Pregunta Kyungsoo, "Quiero decir, nosotros podemos hacer eso, sólo pensé que des-balancearía la habitación. No, eso está bien."

Está hablando con Junmyeon de nuevo, por supuesto. Sehun se para en la alfombra y Kyungsoo mira deliberadamente sus manos con pintura endurecida, haciendo gestos que significan algo así como "lavabo" y "lavarse" y "no en los muebles". Sehun opta por ignorarlo y al contrario se inclina contra el brazo del sofá, con los brazos cruzados, y escuchando descaradamente. Kyungsoo rueda sus ojos.

"No, por supuesto que valoro tu opinión." Dice. "Puedo trabajar en unos nuevos planos hoy y podemos empezar a trabajar en otro modelo. Voy a hacer que funcione".

Sehun toma una decisión en una fracción de segundo. Balancea una pierna sobre los muslos de Kyungsoo, colocándose en su regazo y haciendo caso omiso de las manos que tratan de apartarlo. Está satisfecho de notar la sobresaltada respiración de Kyungsoo cuando simplemente descansa sus labios sobre su cuello, justo debajo de la oreja y justo en la parte superior de su pulso, no se mueve todavía, solo está bromeando.

"Vete." Murmura Kyungsoo.

Sehun saca la lengua para lamer sus labios, capturando un poco más del cuello desnudo junto con él, lo que ocasiona un placentero sonido de Kyungsoo.

"No, no tú, Junmyeon." La voz de Kyungsoo es tranquilizadora, podría decir Sehun, ya que es sumamente cuidadoso de que lo parezca. "¿Te puedo llamar más tarde?"

Sehun oye una voz apagada desde el teléfono diciendo algo así como: "¿Está todo bien?"

"No es nada." Dice Kyungsoo, por lo que Sehun lo muerde.

Tiene la esperanza de que Junmyeon no haya oído el repentino grito ahogado, y espera que entienda que esta es su señal para cortar. Nada, ¿verdad? Pone las manos en alto para colocarlas sobre los hombros de Kyungsoo. Se resiste a la tentación de pasarlas a través del suave pelo castaño, ya que todavía están recubiertas de pintura, aunque piensa que sería bueno poner pedazos de cielo en el pelo de Kyungsoo.

"Ha pasado algo." dice Kyungsoo.

Claro que ha sucedido, piensa Sehun, sonriendo en el hueco del cuello de su novio.

"¿Qué tal mañana? Te llamo luego."

Hay manchas de pintura en su cuello que parecen un beso del lápiz labial de color gris. Sehun quiere dejarlas en cada una de las camisetas de Kyungsoo para que todo el  mundo fuera pueda verlas. Recuerda que el lápiz labial en el cuello es un cliché que evidencia una relación ilícita, y se pregunta si dice algo sobre lo tan desesperado que se encuentra para dejar cualquier marca, cualquier signo de su presencia, cualquier indicio físico de su relación. Impulsa sus caderas abajo, sintiendo el estremecimiento de Kyungsoo y levantándose del sofá a su encuentro.

Puede sentir el roce del pantalón y anhela fricción, pero frena y en vez de ello mueve sus caderas en círculos, lo suficientemente lento para que Kyungsoo enrosque un puño entre los lados de la holgada camiseta de Sehun, tratando de arrastrarlo con más fuerza. Es bueno saber que todavía lo desea, por lo menos.

Junmyeon todavía está en la línea, preguntando, "¿Estás seguro? ¿Suenas raro?"

Sehun está aproximadamente a dos segundos de arrebatarle el teléfono y colgarle el mismo a Junmyeon, pero una parte de él quiere esperar y ver qué dirá Kyungsoo y ver  hasta dónde tiene que llegar para hacerle cortar la prolongada amabilidad. Le gustaría ver a su novio hacer  que Junmyeon sea el que espere  por una vez y no él. Es una especie de enferma fascinación que lo está  haciéndose mover más moviéndose más insistentemente, fusionándose contra el hombre debajo en un fácil ritmo, dejando caer su cabeza mientras observa el teléfono en la mano de Kyungsoo a través de sus pestañas bajadas. Traga saliva y está respirando con dureza, no hace ningún movimiento para colgar hasta que Sehun llega a agarrar el respaldo del sofá.

"Te llamo mañana."

Su voz casi se quiebra en la última palabra, pero el teléfono apenas ha salido de su mano, dejándolo caer en el piso en algún lugar entre los cojines, antes de que Kyungsoo agarre  ambas muñecas de Sehun y las ponga de nuevo a sus lados.

"No en los muebles." Dice, con toda su atención finalmente, en Sehun.

Sehun gime ante el mandato de su voz. Esto es lo que quiere se da cuenta. Más que cualquier deseo de demostrar a Junmyeon quien es más importante, quiere  que Kyungsoo le  demuestre que él es importante. Quiere que Kyungsoo se lo diga no solo con  palabras, sino también con sus ojos y su sola presencia. Con su boca y dedos en su piel.

"Te deseo." Jadea Sehun. "Quería que me prestes atención a mí."

"Te estoy prestando atención ahora." Extiende sus piernas un poco más amplias, colocando a Sehun más cerca de él.

Coloca las manos de Sehun detrás de su espalda. Establece su propio ritmo presionando sobre la base de la columna vertebral de quien sigue su ritmo, moviéndose con más fuerza ahora, y sintiendo el roce de sus erecciones vestidas juntas.

"Esa era una llamada telefónica importante." Se queja.

Sus uñas se clavan en las muñecas de Sehun mientras los arrastra juntos violentamente. Sehun oye el viento resoplando en sus oídos.

Yo soy importante, piensa. Dime que soy importante también.

Gime cuando Kyungsoo mueve sus manos de sus muñecas para  deslizarse por debajo del elástico en la parte de atrás de sus pantalones, palpando su trasero mientras se inclina adelante para arrastrar su boca abierta a lo largo de la descubierta  clavícula.

"¿Qué deseas?" Murmura Kyungsoo.

Que cortes a Junmyeon para siempre. Para que estés  cuando  te necesito. Que me digas que te importo.

"A ti." Sehun no llora - no lo hace. "Te deseo a ti, hyung."

Está moviéndose frenéticamente ahora ya que el calor y la presión crece bajo su estómago y piensa que el dolor de opresión en su  pecho quizás sea muy insistente, pero descansa su frente contra la de Kyungsoo, tratando de  notar el cálido aliento en su rostro, el rubor esparciéndose a través de los pómulos de Kyungsoo, y el placer palpitante clavándose  entre ellos.

"Estoy aquí." Responde y sus caderas tiemblan ahora: y él está, pero no está aquí lo suficiente, no para Sehun.

Se pregunta si alguna vez lo estará.

"Lo siento." Kyungsoo se ahoga cuando llega.

Sehun también lo siente. No sabe por qué. Luego solloza una vez, y se derrumba después, derramándose entre sus pantalones de chándal y sintiendo el calor húmedo entre sus muslos.

Entierra su cara en el cuello de Kyungsoo. Respirar aquí es más fácil de lo que ha sido durante días, algo acerca de ese olor que es tan intrínsecamente que su novio corta a través del espeso bloque de aire que se forma en su garganta y pulmones cada vez que inhala.

Kyungsoo intenta sacarlo de la ducha, pero los brazos de Sehun cuelgan alrededor de su cuello y permanecen cerrados allí hasta que maniobra para hundirlos bajo el agua. Ahora que tiene su atención, tiene miedo de renunciar a su presencia en caso de que desaparezca de nuevo en su capullo de trabajo - un mundo en el que a Sehun no se le concede la admisión, aunque si a Junmyeon. Si ahora es capaz de aferrarse a él durante el tiempo suficiente, tal vez algo de su presencia se quedé cuando se encierre en la oficina, una vez más fuera de su alcance.

No debe haber tenido el tiempo suficiente, porque cuando despierta a la mañana siguiente, Kyungsoo ya se ha ido.

Cuando se da cuenta de que está acurrucado sobre el borde de la cama con las piernas sobre el colchón y la cabeza en el suelo mirando a los barrotes de la cama, decide que probablemente está acabado. Es al mismo tiempo miserable e inquieto y lleno de energía, todo lo cual se combina  dejándolo  en su situación actual, que mira con interés preocupante los resortes del colchón vibrando suavemente. Quiere correr y gritar y poner locamente a trabajar esta insoportable energía que está zumbando a través de sus miembros, pero es demasiado miserable y solitario para  levantarse. El hambre finalmente lo obliga a ir a la cocina en busca de sustento. Con un pop tart colgando de su boca, mira fijamente la pintura a medio terminar del día anterior, sintiéndose absolutamente sin ninguna motivación para terminarlo. Una gruesa capa de púrpura está por encima de toda  pintura, habiendo decidido que no hay razón para tener dos cuadros casi idénticos de bruma gris, a continuación, dibuja un acartonado doodle de la lisonjera sonrisa de Junmyeon por encima de eso. Gasta casi una feliz media hora lanzando dardos en la nariz de la caricatura antes de caer de nuevo en el electrizante aburrimiento. Piensa que prácticamente puede ver las cuatro paredes de la habitación cada vez más juntas, no muy diferente de una compactadora de chatarra amenazando con aplastarlo lentamente y convertirlo en un pequeño cubo.

Nunca en su vida le ha sido tan molesto tener el día libre. Cuando llega a la conclusión de eso, pasa a toda velocidad a través de la puerta del restaurante, gritando para que alguien le entregue platos para lavar, probablemente no es el plan más seguro para mantener su reputación o su puesto de trabajo, la única otra opción que se le ocurre es ir a alguna parte. Otra semana está llegando a su fin, lo que significa que las calles y los bares se llenarán de gente tan aburrida y desesperada por emoción como él. Se pregunta de brazos cruzados si va a llegar a ver una pelea de bar. Tal vez la empiece si ninguna se aproxima.

No importa lo terrible que su plan pueda ser, al momento en que el sol se pone está en la calle, siguiendo  los sonidos de voces donde quiera que suenen  más prometedoras. La música golpeando e incesante movimiento lo dirigen a la oscura entrada de un club, y no está usando ropa especialmente hecha para ir a discotecas  - para empezar ni siquiera tiene una - pero el casi desgastado bivirí blanco y jeans demasiado pegados parecen pasables. No hay una cara alrededor que reconozca, lo cual normalmente le habría desconcertado, excepto la música ensordecedora y el  torbellino de cuerpos a su alrededor parece succionar algo de la energía abrumadora que ha estado doliéndole en todas sus articulaciones. Una tercera copa sigue rápidamente la segunda y la primera en una rápida sucesión después, toma un asiento en la barra del bar. Los haces de luz se lanzan como reflectores alrededor de la habitación, que muestra colores brillantes casi primarios contra la niebla de luz que se vierte en la habitación, antes de cruzarse entre sí para combinar y crear profundos matices variados de verde azulado-púrpura y escarlata, y un apagado cerceta azul que raya en aguamarina. La energía no es tan desagradable ahora que puede concentrarse en sentir el ritmo de la música contra sus tímpanos con un ritmo constante, y está casi demasiado atrapado en el pacífico trazado de la composición de figuras oscuras contra un fondo amorfo color claro para notar lo que alguien dice en el asiento de al lado.

"Te ves como-"

Sehun parpadea en sorpresa cuando una voz inmediatamente a su izquierda se dirige hacia él. Podría decir lo mismo porque conoce ese rostro, sabe que está en lo cierto, simplemente no puede recordarlo...

"Sehun?"

Le toma unos quince segundos antes de que finalmente pueda reconocerlo, lo cual atribuye al hecho de que Jongin luce tan increíblemente diferente ahora que al aspecto que tenía cuando se conocieron, y no todo debido a las bebidas ahora causan  cierto hormigueo bajo su piel.

"Casi no te reconocí." Dice Jongin incrédulo. " Ya sabes, ahora tienes el cabello color algodón de azúcar.”

Sehun lleva una mano para arreglarse el flequillo.

"¿Qué?" Dice con una estridente mueca de horror. "¡El desaparecido hombre de la tienda dijo que use champú normal!"

Jongin ríe, abierto y sincero. Sehun también se encuentra riendo.

"Los clientes esporádicos me entristecen, ¿Sabes?" Lo mira increíblemente feliz. "¿Fue la curita que te di? Sé que fue un poco raro pero esperaba que no te asustase tanto al extremo de nunca vuelvas a la tienda."

"No," Sehun se apresura a asegurarle. "Quiero decir, sólo he estado muy ocupado con la pintura y otras cosas."

"Ah, cierto. El famoso pintor, Sehun.  Solo lo dije  ya  que quería saber cómo había resultado todo. ¿Te ayudaron en algo los libros?"

"Sí, mucho, en realidad." Mira al techo. "Me di cuenta de  un montón de cosas que estuve haciendo mal y todo eso. Supongo que sólo tengo que esperar a que llueva otra vez para que pueda empezar la siguiente."

"Pensé que se suponía iba a llover mañana o pasado o algo así."

"Sí."

Se pierden en el silencio.

"No esperaba verte aquí" Le dice finalmente.

"¿Eso es malo, acaso?" Pregunta Jongin.

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