Fragile Eternity - HunHan (Trad. en español) Parte 2

Sep 18, 2014 19:03



❈2❈

A la mañana siguiente, Luhan despierta por el sonido de un golpeteó al otro lado de su puerta y observa con cierta precaución, que el hielo está sellando el espacio entre su puerta y el marco. La mitad de su cuerpo cae de la cama.

“¿Qué estás haciendo?” solloza, golpeando en la madera con sus puños.

“¡Shh!” dice una voz familiar. “¡Silencio!”

“¡Qué estás haciendo, déjame salir!” dice, golpeando la puerta tan fuerte que el anaranjado polvo escapa de sus puños.

“¡Cállate Luhan!” Sehun dice. “Me dieron la orden de traerte de vuelta a las Cavernas de Hielo antes de que la batalla empiece de forma de que no te dieras cuenta cuando el castillo fuera abandonado. Les dije que si lo hacía, moriría allí, y ellos me dijeron que lo haga de todas formas, pero…”

Luhan queda en silencio. “¿Pero qué, Sehun?”

“Pero tú… Aún tienes un hogar al cual ir, ¿cierto?” Sehun dice. Hay algo en su voz que se amortigua en la puerta. “Quieres ver tu hogar nuevamente cuando esto acabe, ¿no? Después de todo eres un hada del verano.”

“Sí,” Luhan susurra.

“Entonces cállate y pretende que no existes,” Sehun dice, la voz endureciéndose. “No hay nadie que pueda atravesar el hielo mezclado con Magia Superior a excepción de Joonmyun, Yixing, Xiumin y yo, así que no lo intentes.” Hace una pausa, “Me voy.”

“¿Participarás en la batalla?” Luhan pregunta.

“¿Para qué crees que estaba practicando desde ayer?”

Luhan muerde el suave interior de su boca. “Ten cuidado.”

Sehun deja escapar una pequeña risita. “¿Supongo que estaría presionando mi suerte si te pregunto por estrategias de batallas?”

Y Luhan de repente se da cuenta que Sehun no le ha preguntado por estrategias de batalla hasta ahora. Ni siquiera le preguntó mayor información sobre los detalles de la Corte de Verano de los cuales solo alguien como Luhan estaría al tanto. Él solo se aseguró de que Luhan no muriera de frío, y que lo pudiera ocultar el tiempo suficiente hasta que pueda llevarlo a casa.

“Mantente lejos del báculo de Chanyeol” Luhan murmura, pero algo le dice que Sehun ya se ha ido.



“¿Murió?” Eunsook pregunta, con los ojos enormes.

“¿Quién?”

“¡El Príncipe Heredero!”

“No, pero otras hadas sí,” Kyungsoo dice, alejando su chocolate caliente del borde de la mesa. “Bébelo antes que se enfrié.”

Lo bebe, luciendo pensativa. “¿Por qué Luhan le dijo que se mantuviera alejado del báculo de Chanyeol? ¿Qué es un báculo?”

“Es una vara muy larga,” Kyungsoo dice, y Jongin ríe tan fuerte que se tiene que recostar. Kyungsoo le lanza una mirada asesina.



La primera batalla fue horrenda, como suelen ser las primeras batallas.

La nieve y el pasto estaban salpicados por polvo brillante de hadas muertas -es así como sus cuerpos se descomponían cuando sus espíritus dejaban el mundo, por explotar en ráfagas de brillo. Incluso en medio de la noche, después de acabada la batalla, allí había suaves sonidos de hadas convirtiéndose en polvo.

Las hadas invernales perdieron más que las hadas del verano -Luhan tenía razón cuando dijo que las hadas invernales aún eran débiles a pesar de tal aumento de poder en su Reino. Chanyeol era despiadado -el llameante báculo que empuñaba flameado con llamaradas naranjas y verdes, y podía derribar con todo a su paso al suelo. Ningún hada invernal hubiera sobrevivido, y una vez frente a él, ninguna lo hizo. No ayudaba que Chanyeol supiera que estaban teniendo a su mejor amigo como rehén.

Para ser honestos, el Príncipe Heredero habría muerto en esa batalla si su mejor amigo no lo hubiera puesto en aviso de mantenerse alejado de la vara del Rey del Verano.



Luhan se sienta alarmado en su cama cuando ve el hielo agrietarse en las vetas de la puerta, suenan mientras siguen su camino. Trata de centrar tanto calor en sus palmas como le es posible para que al menos pueda provocar algunas llamas con las que quemar lo que vuele hacia él, y se levanta, extendiendo sus alas para retirarse ante la primera señal de ataque.

Cuando la puerta se abre, nada se mueve hacia él, y se encuentra con un pelinegro hada invernal observándolo con curiosidad. “El Príncipe Heredero solicita ver a el hada de verano,” dice apaciblemente. “dijo que podría encontrarte aquí.”

“Sí,” Luhan dice. “Eh -¿Dónde está? ¿Quién eres tú?”

“Soy Yixing,” dice el hada invernal. “Y la cama se calcinará si no bajas tu temperatura corporal pronto.”

Rápidamente se baja de ella, y allí yacen dos marrones manchas de quemaduras donde estaban sus pies.

“El Príncipe Heredero sufrió algunas lesiones en la batalla de ayer,” Yixing dice y Luhan siente su piel enfriarse con cada respiración profunda que toma. “Está un poco confundido, supongo.”

Le dice todo esto de manera tan normal y con un aire ausente que Luhan se pregunta si está siendo sarcástico o si tiene motivos ocultos, pero da un paso hacia el pasillo y recuerda que Sehun mencionó que Yixing fue una de las únicas personas que podrían controlar la Magia Superior, por lo que confía en él.

“¿Confundido?”

“Solo está un poco acalorado,” Yixing dice en lo que lleva a Luhan por una serie de pasillos. “Nada serio.”

Luhan le cree hasta que llega a lo que se supone es la enfermería -está llena de actividad, y tiene que protegerse los ojos de toda esa intermitente luz blanca azulada que emiten las alas de todos. Algunas camas tienen cortinas cerradas alrededor de ellas, y otras no. Las hadas invernales lo observan mientras pasa, y Luhan baja la mirada hacia el piso, escondiendo el rostro. Todo el castillo debe estar enterado sobre el hada prisionera.

“Deja de poner el peso en tu pierna,” Yixing dice fugazmente, a una baja pero fuerte hada de cabello rubio claro. “Vas a estropear ese tobillo.”

Conduce a Luhan a la parte más tranquila de la enfermería, donde todas las camas están rodeadas por cortinas. Se detiene en la que está situada al final y le indica con gestos, que se coloque a unos pies de distancia.

“Déjame ver como se encuentra,” Yixing murmura, desapareciendo tras la cortina. Después de unos momentos, le hace señas con un dedo.

“Solo está desorientado,” Yixing susurra. “No te muevas muy rápido alrededor de él, y deja que descanse.”

Luhan se mueve alrededor de la cortina para ver a Sehun acurrucado a un lado, alas decaídas, ojos abiertos y observando. Casi parece muerto si no fuera por la suave pulsación de luz azul de la base de sus alas, y sus ojos se mueven cuando Luhan se le acerca. Entonces se mueve y Luhan observa con un poco de terror, una magnifica negra marca de quemadura con forma de mano alrededor del cuello de Sehun.

“Hey,” susurra.

“Hey,” Sehun responde con voz áspera. Luce más pálido de lo usual, y cuando Luhan se acerca a tomar su mano, él la retira.

“Tengo fiebre.”

“¿…y?”

“Mi temperatura interna es muy baja en este momento,” explica, mirando a sus dedos,  que están formando unos puños sueltos en frente de su rostro. “Si me tocas, vas a sufrir una congelación.”

Luhan toma aliento y deja bajar su propio calor hasta que la luz de sus alas se apaga, y toma la mano de Sehun. Está gélida al tacto, pero Luhan no percibe ningún dolor, así que se fuerza a no soltarlo. “¿Cómo te fue?”

“Fue horrible,” Responde, y Luhan nota que está tiritando. Tiene una manta enredada en sus piernas y está vistiendo ese delgado satén en el que Luhan lo vio la primera vez. “Luhan ¸asesiné hadas.” Elevó la mirada. “Asesiné hadas del verano. Asesiné a los de tu especie. ¿Por qué todavía sostienes mi mano?”

“La guerra involucra matanza,” Luhan dice densamente, tragando. “¿Heriste a alguno de mi Corte?”

“Yo…Yo no lo sé,” Sehun dice, “Oh no, ¿Y si lo hice?”

“¿Viste…al Rey del Verano?”

Entonces Sehun ríe, una carente de humor, gruñida risa. "Tu rey,” dice, "es otra cosa." Desliza su mano libre sobre la cama lentamente hasta que sus dedos están trazando la piel quemada de su garganta. "Me tuvo estrangulado. Estaba seguro de que iba a morir.”

"¿Qué hiciste?" Luhan pregunta. Sólo puede imaginar Chanyeol, a plena altura, colgándolo en el aire por la garganta. Y luego, cierra sus ojos.

“Pateé su báculo lejos de sus manos,” Sehun dice, riendo sombríamente. “Y él me soltó.”

“Chanyeol no está pensando claramente,” Luhan murmura. “No con Chen siendo el único consejero que tiene, y Baekhyun es demasiado débil como para persuadir en sus pensamientos.” Mira a Sehun “No debería estar aquí. Si me quedo aquí, el resultado será que todos ustedes sean asesinados.”

“¿Cómo tengo la seguridad de que no solo huiras a casa y esparcirás todos nuestros secretos?” Sehun dice “Estás hablando como si fueras una hada Invernal. No lo eres, Luhan”

“Sehun,” Responde, cayendo de rodillas. “Sehun déjame ir a casa.”

Sehun mira directamente a los ojos de Luhan -los cuales están brillando en fiebre, casi como reluciente zafiro en vez de índigo - “Tengo miedo de sólo pensar que me queires dejar.”

Luhan lo mira y los ojos de Sehun buscan su rostro. Abre su boca una vez, dos veces, pero aun así no puede encontrar qué decir. No puede entender porqué el Príncipe Heredero -un hada invernal con tan poco por perder -no querría que él, un hada del verano, retorne a casa.

Los párpados de Sehun revolotean cerrados ahora, y sus alas fijas contra la cama, la luz muriendo en ellas. Su respiración se ralentiza aún más, y Luhan se pone de pie, mirando fijamente al rostro dormido de Sehun. Las palabras se congelan como estalactitas dentro de su cabeza.

Luhan no visita a Sehun por dos días - dos días que están llenos de combates, puede oírlo en el horizonte. Ambas noches, tiene terribles pesadillas de Chanyeol explotando el dorado polvo en sus manos, Sehun de pie sobre él sin ningún remordimiento en el rostro. Pero luego ambas noches tiene pesadillas en la que Sehun explota en polvo azulado, así, Chanyeol alejándose de él diciendo Ya no eres del verano. Nunca lo has sido. Siempre has tenido demasiado invierno en ti.

Al tercer día, toma la decisión de volver a la enfermería. Está incluso más decidido está vez, y ve con cierta sorpresa que algunas camas no están más que ocupadas por polvo de hada. Corre temblando, luego vuela hacia la cama en la que hace dos días se encontraba Sehun, asustado de lo que encontrará.

Sehun está sentado, piernas cruzadas, observando hacia fuera de la ventana. No aparta la  mirada cuando Luhan se detiene al lado de su cama, y murmura, “Él sol está brillando.”

Luhan mira fuera de la ventana, y curiosamente, está nevando y lloviendo -pero como siempre en el día, el sol está alumbrando la nieve en un brillante blanco. Nunca ha observado algo tan bizarro.

“Las estaciones van sin control, ya que ninguna de los lados está gobernando,” Sehun dice suspirando. “Aunque creo que el hecho de que el sol esté en su máximo esplendor, significa que el Reino del Invierno está perdiendo la guerra.” Mira hacia Luhan. “No creo que yo esté hecho para gobernar un desquebrajado Reino si nosotros perdemos esto.”

“Sehun, déjame ir a casa,” Luhan dice. Intenta escasamente quitar la súplica de su voz. “Déjame ir a casa para así poder hablar con mi Corte.”

“¿Realmente quieres volver a casa para poder hacer que tu Rey vuelva a sus sentidos?” Sehun pregunta con duda. “¿O quieres regresar a casa porque odias estar aquí? ¿O quieres volver para arrastrarnos por el piso de una vez por todas?” Vuelve a mirar fuera de la ventana, y las marcas de quemadura aún son prominentes, aunque algo desvanecidas en su cuello. “Vuelvo a pelear mañana. Puedes encontrarme en el campo de batalla, ya sabes.”

“Sehun, no -“

“Porque no es que tú puedas pelear por nosotros,” Sehun balbucea. “Joonmyun jamás dejaría que vayas al campo de batalla como un hada invernal, porque podrías dejar la lealtad en cualquier momento. Y cuando dices que quieres ir a casa -No quiero que lo hagas, pero ni siquiera sé si es porque creo que le dirás a tu Reino el cómo destruirnos o tal vez por miedo a perderte-“

Sehun se detiene abruptamente cuando Luhan se inclina hacia delante y lo calla besándolo en la boca, y Sehun se retira después de unos segundos, presionando sus dedos en sus labios, “Ow,” murmura, y Luhan se da cuenta de que su calor interno está en completa explosión -lo que es extraño, porque Luhan se ha detenido realmente al notar el frío en la piel de Sehun. Sin embargo, cuando levanta la mirada, el color se está derritiendo en sus mejillas, sus labios, sus dedos, y Luhan aparta la mirada avergonzado levemente.

“Lo siento,” dice.

“Ven… Ven aquí,” Ordena Sehun suavemente, y cuando Luhan se inclina otra vez, Sehun no se aleja. En vez de eso, acerca más a Luhan, y Luhan quiere quedarse besando a Sehun y nunca parar.” Nunca ha sentido el tacto de un hada invernal sobre él, y es extraño y tan nuevo, es la sensación más increíble de todas. Sehun puede ser frío, pero suave y receptivo, gentil bajo los labios de Luhan y es tan incorrecto pero tan tan correcto.



“Tal vez quieras hacer mención del, umm,” Jongin dice, formando un circulo con sus dedos y empujando el índice de su otra mano a través del agujero. “Ya sabes.”

“Como iba diciendo,” Kyungsoo dice intencionalmente, “Luhan y Sehun estaban muy devastados. Y Jongin, ella tiene como, cinco años. No le vamos a contar cosas que no necesita saber justo ahora.”

“Tengo seis y medio,” Eunsook, cruza sus brazos.

“Pues eres una terriblemente pequeña cosita para tener seis años y medio,” Jongin dice, elevando una ceja. Cuando parece que Eunsook se está preparando para lanzar una impresionante rabieta, Kyungsoo rápidamente dice,

“Creo que esas paletas ya están listas, Jongin”

Jongin rueda los ojos y se dirige hacia el pequeño refrigerador bajo el mostrador.



El príncipe heredero de la las hadas de Invierno no debería haberse enamorado del primer caballero de la Corte de Verano. Simplemente no hay forma para el verano y el invierno, coexistir. Amar nunca puede suceder, el fuego derrite el hielo y el fuego sofoca el hielo.

Yo digo que no puede ocurrir nunca, ya que no sucede - jamás.

Pero hubo un tiempo, en que realmente lo hizo.


Sehun no vuelve con lesiones tan graves como la quemadura, pero vuelve de la batalla con lo suficiente para que le dijeran que no tiene permitido volver a luchar, porque ¿qué ocurriría si su príncipe heredero fuera asesinado?

"¿Qué está pasando ahí fuera?"

"Fíjate por la ventana y probablemente seas capaz de verlo", dice Sehun, mirando a los incendios que arden en el horizonte, bailando azul y naranja y verde en la noche. Los dos están en la habitación de Sehun - la enfermería está demasiado llena por hadas con lesiones más graves.

"No puedo," dice Luhan. "Yo..."

"Tienes miedo de ver a los polvos de la Corte", dice Sehun. "¿No es así?"

Luhan es silencioso. "¿Has matado a alguien de la Corte?”

"No lo hice. Lo dudo, por lo menos ", dice. "Las hadas que mate hoy, usaban espadas y armas físicas en lugar de magia y magia ++."

"¿Qué más pasó?"

"Estamos perdiendo," Sehun dice rotundamente. "El sol brilla con más intensidad que nunca a través de la ventisca. Joonmyun declaró que toda la manufactura  se convertirá en espadas para las hadas de los pueblos y todos los demás que no tiene dominio de la magia." Suspira. "Está empeorando".

Se sientan en silencio. Luhan mira la forma en que la tenue luz de las hogueras lejanas ilumina las curvas cansadas y los ángulos del cuerpo de Sehun. Hay una tristeza en la caída de sus hombros, y Luhan ha abierto la boca para decir algo cuando Sehun gira.

Incluso en la oscuridad, puede ver la derrota en sus ojos. "No quiero pelear más", susurra. "Luhan, ya no más."

"Sehun--"

"No somos tan diferentes, ¿verdad? Incluso si tienes frío, y yo estoy caliente, tenemos alas y ojos, y boca, ¿no?" De pronto, está muy cerca de Luhan, agarrando sus brazos en el interior suave de su codo. "A pesar de que eres un hada de verano y yo el próximo Rey del Invierno, que no somos tan diferentes, ¿verdad?"

Todo en Luhan grita no, son completamente diferentes y la Alta Magia nunca hubiera favorecido esto, pero Sehun se inclina hacia delante y presionando sus labios, encajando contra Luhan de manera tan perfecta que la duda ahuyenta todos sus instintos. Cuando Sehun lo apoya lo suficiente para que cayera sobre la cama, sus cuerpos se ciernen tan bien que Luhan piensa que no puede ser un hada de verano puro - después de todo, él nació de un rayo de sol, brillando a través de una gota de lluvia.

"No somos," susurra Sehun, alejándose para descansar su frente en la de Luhan, labios casi rojos, "Tan distintos, ¿realmente lo somos?"

Al final, Luhan piensa, no lo son - realmente no lo son. Las alas de Sehun se funden fuera de su piel justo donde están los omóplatos, piel suave oscureciendo en terciopelo negro. Cuando Luhan se inclina hacia adelante para presionar sus labios otra vez, la luz azul suave de los pulsos es incluso más brillante, y sonríe cuando siente que Sehun hace lo mismo con él, labios trazando bocanadas de aliento frío por su espalda.

Luhan se da cuenta de los destellos de color rosa suave en la boca de Sehun cuando lo tira de nuevo y él, tira un poco hacia atrás para elevar las cejas. "¿Qué es eso?", se pregunta.

"Tienes polvo de hadas alrededor de tus alas," murmura Sehun, empujando el flequillo de Luhan de sus ojos y rozando sus labios a través de sus párpados, como una pluma suave. "Huele a... ¿qué era? Néctar y vino. Flores".

Luhan se burla en voz baja y calla a Sehun tirando de él hacia abajo, su espalda encontrándose con el colchón. Alas siendo un poco aplastadas bajo el peso de los dos, pero Sehun es tan caliente que Luhan debe hacer una pausa con las manos sobre los hombros y maravillar el calor de la piel de Sehun bajo sus palmas.

"Estas tan caliente, Príncipe de Invierno," Luhan jadea, cuando Sehun presiona su cuerpo en él. Se ríe, un retumbar bajo en la parte posterior de su garganta. Desliza las manos por los planos lisos de su abdomen hasta el pecho, y Luhan siente que - el embriagador latido del corazón de Sehun, se encuentra justo bajo su piel.

"No es difícil conseguir mi ritmo cardíaco a la par," jadea Sehun, "si lo hacemos de ésta manera, hada de Verano."

Sehun no es suave - es como el invierno, áspero e impredecible y un poco tortuoso. Luhan va primero y lo atrae junto a él, arqueando la cama tanto que sus alas son liberadas. Siente la piel de Sehun enfriando rápidamente contra la suya, la habitación oscureciéndose y aligerando mientras que Sehun, abre y cierra sus alas perezosamente.

"Me vas a congelar", dice Luhan, y Sehun rueda fuera de él sin decir una palabra, cae sobre las sábanas revueltas. Su piel es tan fría que es azul, pero Luhan ha ralentizado su ritmo cardíaco lo suficiente, como para compensar la diferencia.

La mirada de Sehun, es tan intensa que tiene que mirar lejos - lejos hacia los fuegos de colores que salpican la noche. Puede ver, incluso desde aquí, el brillo natural de los que estaban desapareciendo en polvo de hadas muertas. Cuando mira hacia abajo, Sehun aún está observándolo.

"¿Qué estás pensando?”, pregunta.

"Podríamos correr."

Luhan parpadea. "¿Correr?"

"Exacto. Ya sabes, que no hay nadie que nos detenga en medio de la guerra ".

"Sehun. Tú eres el Príncipe de la Corona. No puedes correr".

"¿Y por qué no?"

"Tienes - deberes y responsabilidades, y hadas que gobernar", dice Luhan. "Tienes un Reino entero por vigilar, si estás listo o no, si lo quieres o no - te necesitan, no puedes simplemente correr."

El rostro de Sehun es tan carente de emociones que sacude algo en Luhan. Se desliza fuera de la cama y saca sus satenes de nuevo. "Vístete", dice. "Hay algo que tengo que mostrarte."

Luhan decía que los pueblos del Reino de Invierno solían ser hermosos. Muchos de ellos, hechos de nieve y hielo, los distritos más ricos con trozos de mármol blanco-azul también. Nadie se queda mirándolos cuando caminan - porque no queda nadie, pero los niños. Las calles están llenas de montones de azul, añil y blanco polvo de hadas y diminutas hadas - algunos parecen no más de ser unos bebés - los mira alrededor de las sombras.

"¿Qué pasó?" Luhan pregunta con horror en su voz.

"Tu Corte," Sehun dice. "El que tiene la habilidad de tormenta."

Luhan gira lentamente. "Chen", Sehun simplemente lo mira con ojos sin brillo.

"Y el otro - Baekhyun, ¿verdad? Destruyeron la mayor parte de estas ciudades ", dice Sehun, barriendo una mano a través del paisaje fantasmal. Hay un accidente en una pequeña choza y un destello de rayas azules hacia ellos, Sehun se golpea ligeramente hacia atrás por una pequeña hada. Le falta un ala, y a Luhan se le revuelve el estomago.

"¡Ayúdame!" El pequeño niño de las hadas grita hacia Sehun. "Mi madre acaba de ser herida y--" polvo azul cae de sus pequeños puños y sus lágrimas congelan en su rostro. "¡Ayúdame!"

Sehun se arrodilla, y es tan alto que el niño le llega a la boca. Lo recoge en su pecho, y mira a Luhan, ojos azul oscuro llenos de tristeza.

Ya no tengo un reino para gobernar, parecen decir.

El llanto del niño pequeño, rasga el silencio. Todo parece acabado entre el hielo sobre altos edificios, estructuras y mira hacia abajo, a sí mismo - aún vestido con sedas de color rosa y naranja de su hogar, el polvo color de rosa que siempre escarcha ligeramente un poco en su piel.

No importa qué tan similares son con Sehun - no importa el hecho de que ambos tienen alas, ojos, y boca - siempre van a ser diferentes. Retrocede, tropezando un poco en montones de polvo. Abre sus alas, los aletea duro y se eleva al cielo.

El sol está brillando.


"Aquí tienes", dijo Jongin, entregándole a  Eunsook una paleta de hielo. "Espero que te gusten los sprinkles."

Ella lo tomó, y Kyungsoo reprendió, "¿Qué se dice?"

"Gracias oppa", murmuró alrededor de la paleta. Jongin rió y revoloteo su pelo casi seco. "¿Así que Luhan huyó?"

"Él... no estaba pensando en eso", dijo Kyungsoo. "Realmente no tenía a donde ir, porque en caso de regresar al Reino de verano, Chanyeol no lo dejaría fuera de su vista. Sentía que había traicionado a su pueblo, pero al mismo tiempo, se sentía responsable de la destrucción del Reino del invierno, debido a que no había estado allí para detener a la corte antes de que infligieran el daño que hicieron".

"Básicamente, no sabía qué hacer," dijo Jongin cuando Eunsook miraba a ambos con curiosidad. Otro aplauso de truenos sobre ellos. "Fue muy triste, pero también, quiso descubrir algo."


Entre los dos mundos, había un lugar donde el espíritu muerto de las hadas se iba antes de ser enviado al Reino de la Alta Magia para ser embotellado. Se llamaba ‘El Valle de las Sombras’, casi legendaria en su abandono - muy rara vez, algún hada habitaba allí. Está ubicado en las llanuras blancas, entre el punto más al norte del Reino de invierno, y el punto más al sur del Reino del Verano - quizás, sólo unas pocas leguas del valle que había pasado Luhan.

Estaba lleno de los espíritus de las hadas muertas reprimidas - recuerdos, personalidades, todo - hasta que ellos no fueran más que los espíritus de sus reinos. Sólo llegando ahí, ganarían la entrada al Reino de Alta Magia, en la que los Arcángeles los embotellaban - algunos en grandes y otros en pequeños frascos.

La Alta Magia tiene que venir de alguna parte, ya sabes.


"¿Adónde vas?"

Luhan apenas oyó a Sehun encima del silbido del viento en sus oídos, y por primera vez en mucho tiempo, sintió un dolor leve en la piel a causa del frío. Se dio vuelta.

"No lo sé", dijo, volviendo a mirar a la nube. "Volando hacia el norte nada más."

"¿Volando a casa?"

"No creo que tenga una casa", dijo Luhan, casi para sí mismo. Sintió una ráfaga de viento por encima de él y Sehun bloqueó su camino - nunca se dio cuenta de lo grandes que eran las alas de Sehun. Las suyas eran ligeramente más pequeñas que las de Chanyeol y mucho más amenazantes.

"Estás volando sobre las llanuras blancas," Gritó Sehun. "¡Estás en la frontera!"

"¡Tal vez es donde pertenezco!" Respondió Luhan. "¡Yo no pertenezco a ningún reino!"

"Nosotros no pertenecemos a ningún reino."

Luhan entornó los ojos a Sehun. "¿Qué hiciste con el niño?"

"Salió corriendo. No podía... " Sehun miró hacia otro lado. "No podía hacer nada."
El frío se asentó en la sangre de Luhan y suspiró, yendo más abajo de las nubes hasta que sus pies se encontraron con la nieve gris. El clima es adecuado en otros lugares, pero aquí, Luhan sintió la más peculiar sensación - el calor familiar de su casa a un lado de su cuerpo, y el frío helado del invierno en el otro. Un poco más adelante era un plano lleno de remolinos de niebla.

"¿Alguna vez has estado aquí?" Preguntó y Luhan negó con la cabeza.

"Estuve", dijo Sehun en voz baja. "Tenía que asegurarme que el espíritu del Rey anterior, Joonmyun llegó al Reino de la Alta Magia. A veces... cuentan a los niños historias de terror sobre este lugar para mantenerlos alejados, es... triste. Más que terrorífico".

Luhan tomó su mano, y estaba fría, pero él no se inmutó. Sehun miraba fijamente hacia fuera en la niebla, y sus ojos estaban buscando - probablemente el resto de su Reino. Tan lejano que parecía una estatua, hasta que escuchó un grito agudo en la distancia y el suave sonido de un incendio. Cuando giró Luhan, vio el destello naranja en el horizonte otra vez.

"Podemos correr," susurró Sehun, casi inaudible.

"Sí, podemos", dijo Luhan. "Pero no de la verdad."

La luz azul en los hombros entre Sehun parpadeaba.

De esta forma, se encontraban volando hacia el norte a mediados del reino del invierno, donde el destello naranja había venido. Los ojos de Luhan lagrimeaban, y pensaba que el hielo debería estarse formando en sus pestañas de nuevo, pero ya no le importaba. Cuanto más se acercaban, más fuerte era el olor a acre de las flores después de que la lluvia cayera.

Oyeron la batalla antes de que lo vieran - truenos a través de las nubes y rayos de relámpago tan cerca de Luhan que podía oler el olor a quemado que tenían. El brillo del sol caía plomo sobre él, helados de rizo viento a su alrededor como serpientes.

No pasó mucho tiempo antes de ver la batalla, una mezcla desordenada de viento, nieve, fuego y armas. El estómago de Luhan hizo algo extraño cuando se dio cuenta de que Sehun no estaba detrás de él y volteó por completo cuando vio a alguien en la parte superior de Chanyeol con un apretón definitivo alrededor de su cuello. Se estaba formando hielo alrededor de sus labios y piel.

Luhan aceleró el batir de sus alas y formó un espiral vertiginoso de nubes. Su cuerpo chocó con la hada de invierno con un impacto tan fuerte que pensó que podría haber roto algo, pero no felizmente - sólo que el hada se deslizó por la colina, cubierto de nieve y polvo.

"Tú", el hada de invierno escupió. Se levantó, y Luhan vio con temor que había golpeado al ser supremo de piedra y hielo. El rey del invierno. "Tú eres el hada de verano que estaba en nuestro territorio. ¡Tú eres el hada que convirtió a mi príncipe heredero en un maldito traidor!"



Final

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Y como siempre les digo, muchas gracias por comentar... se viene la parte final ;o;!!!
-Admin Kissys

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