Los diferentes "consuelos" para Renji [4/6]

[kmiya]

¤ 4º Consuelo: El alcohol logra quitar las penas (Second Round)
¤ Fandom: Bleach.
¤ Claim: Renji (principal) + Matsumoto y ya saben quien más ♥ (secundarios).
¤ Palabras: 419.
¤ Advertencia: Spoiler de la saga SS (después del capítulo 181 y el episodio 63).
¤ Notas: *tiene un ataque de risa, así que no podría decir nada coherente* Ah si, gracias a Co-Co por el beteo =D

―Vamos, vamos, bebe sin pena, Renji. ¡Hasta el fondo! ―decía una animada Matsumoto, mientras bebía de un jalón el contenido de la botella que traía en la mano.

Renji le miraba, con una gotita en la nuca y una sonrisa nerviosa. Tenía intenciones de decirle que beber sake no le era mucha ayuda (recordando lo que le había sucedido con Kira y Hinamori), pero no se atrevía a romperle la ilusión a la shinigami, aunque ¿cómo se había enterado de que ocupaba consuelo? Renji suspiró, un poquito molesto, dándose cuenta de que en verdad la privacidad parecía no existir en Seireitei.

A insistencia de la mujer, le dio un trago al vaso que tenía, no de buen humor. Estaba cansado, pero eso no parecía verlo la vice-capitán del décimo escuadrón.

―No seas aguafiestas, Renji. ¡¡Bebe más!! ―Con una sonrisita un tanto gatuna, Matsumoto se le acercó, pasando su mano sobre sus hombros―. No estés desanimado, es más, tienes dos opciones: Te quedas esperando a que Rukia-chan te haga caso o buscas a alguien más que llene ese hueco. Mira que hay muchas shinigamis lindas por ahí. Están Hinamori y Yachiru-san... no, creo que Yachiru no es de tu tipo, además de que al Capitán Zaraki pueda que no le guste la idea.

―¡Rangiku-san! ―objetó Renji, pero fue callado por la mujer, quien lo estaba estrujando en aquel abrazo. Él no pudo evitar sonrojarse al darse cuenta de lo peligrosamente cerca que estaba del busto de la shinigami― Rangiku-san, estás borracha.

―¿Y eso qué? ―Le sonrió aún más, pellizcándole el cachete― ¿Qué tipo de mujeres te gustan? Si son como Kuchiki entonces a lo mejor tienes oportunidad con la hermana de Isane ¿cómo se llamaba?, o con la misma Isane. ¿Sabes? Nunca creí que fueras esa clase de chicos, muchos prefieren los pechos tan grandes como los míos.

―¡¡Rangiku-san!!

Matsumoto rió divertida, pero antes de que pudiera decir otra cosa tras ella apareció el capitán Hitsugaya, quien le dio un fuerte golpe en la cabeza, dejándola inconciente. La cargó como si fuera un costal de papas y miró a Renji, quien había observado todo sorprendido.

―Disculpa las molestias, Abarai. Me llevaré a esta loca.

Y sin más se fue, dejando a un (tanto) perturbado Renji, quién sólo atinó a beberse el líquido de la botella de un golpe y considerar que desaparecer por unos cuantos meses (o años) no sería mala idea. O, al menos, el tiempo necesario para que los demás se olvidaran de la idea de intentar consolarlo.