Amigo Invisible para Lanthir_fanfics

Dec 16, 2011 01:32

De: darkkaya
Para: Lanthir_fanfics

Título: De sentimientos y dudas.
Universo: Movieverse (RPS)
Personaje/pareja: RDJ/Jude Law
Clasificación y/o Género: PG-14
Resumen: Una noche después de una fiesta de presentación de la película, Robert y Jude se entretienen en la habitación de este último.
Disclaimer: Nada es mío, ellos se pertenecen a sí mismos.
Advertencias: Irrealidad pura, porque Robert Downey Jr. está felizmente casado y sólo mantiene un precioso bromance con Jude Law. Me imagino que OoC.


De sentimientos y dudas

Quizás todo había comenzado como una forma de enloquecer a ese factor de las fans que siempre habían relacionado a Holmes y Watson como algo más que como amigos y compañeros de habitaciones, pero había llegado un momento en que ambos habían pasado la raya. Todas aquellas entrevistas en las que no podían evitar sacar a colación siempre el mismo tema, los roces indiscretos de manos o los gestos cariñosos y, sobre todo, esas miradas que transmitían demasiado entre ellos; en cada una de ellas se iban incrementando sus sentimientos. Desde el comienzo del rodaje de la película habían sentido una conexión especial, y sus sentidos del humor se habían amoldado desde el inicio mismo. Todos se habían dado cuenta de ello. Eran inseparables a la hora de rodar, incluso cuando terminaban de grabar las escenas que compartían y uno de ellos debía quedarse aún un rato, el otro le esperaba con un vaso de café preparado hasta que terminase para seguir conversando y bromeando.

Tal vez fuese por eso que, ni a Robert o a él mismo, les hubiese extrañado en ningún momento el que sus sentimientos cada vez se hiciesen más intensos. Habían compartido casi veinticuatro horas durante todos los meses que duró el rodaje y, cuando finalmente, terminó las llamadas del uno al otro no habían parado. Todas aquellas premieres promocionando la película, las fotografías juntos mientras bromeaban, todo aquello no era nada comparado con las fiestas a las que después iban y podían estar tranquilamente charlando sin nadie que les interrumpiera. Muchas veces incluso continuaban en una de sus habitaciones, preferentemente la suya, hasta las tantas de la noche. Siempre hablando de tonterías, compartiendo bromas o recuerdos del rodaje, no se cansaban nunca de hablar o de interrumpirse el uno al otro, no podían evitarlo.

En una de esas ocasiones, en que volvían de una de las fiestas de promoción, el moreno se dirigió directamente a la habitación de Law arrebatándole la tarjeta para abrir la puerta de la mano. Estaban un poco enardecidos por la felicidad que les daba el hecho de que la película estuviese teniendo tanto éxito y Downey, siendo como era, se había aflojado la corbata y desabrochado los primeros botones de la camisa. Realmente para Jude esa vista era magnífica, llevaba muchos meses sintiendo atracción por el americano y se había contenido durante todo ese tiempo por la amistad que había llegado a crear con éste durante la grabación. Una vez dentro Robert se acomodó directamente en el sofá después de tirar la chaqueta del traje y el sombrero sobre la mesa de recepción, Jude colocó la suya en el perchero junto al pañuelo que había llevado y procedió a sentarse también en el sofá. Una vez se sentó el moreno se recostó sobre su hombro y comenzó a desvariar. Siempre empezaban así, uno sentado al lado del otro soltando una palabra tras otra sin saber si tenía la suficiente coherencia para encontrarles sentido, o al menos para que alguien más aparte de ellos pudiera comprenderles.

Sin darse cuenta comenzó a mesar el pelo del otro con su mano mientras escuchaba al otro soltar comentarios sobre la gente diciendo o haciendo tal o cual cosa. Las dudas siempre habían estado en su cabeza, conocía a Robert y Susan de poco tiempo, pero ambos se complementaban tan bien que eso hacía que no tuviese el valor necesario para confrontar al otro con total sinceridad sobre sus sentimientos. Por eso le sorprendía haber podido compartir, y seguir haciéndolo, con el moreno a solas. Estaba tan metido en sus pensamientos que no percibió como el otro se le quedaba mirando fijamente a la cara con una sonrisa pícara extendiéndose por su cara.

Robert se había fijado en que el inglés siempre se quedaba pensativo, daba igual el momento o el lugar, solamente lo hacía con una facilidad que no le había visto a nadie. Notaba que el otro tenía dudas sobre algo y le encantaría saber qué era, pero, por una vez, no seguía esos impulsos que le caracterizaban para preguntarle qué era. No sabía por qué, pero era como si notase que de preguntarle algo cambiaría en su camaradería. Sin estar dispuesto a que Jude siguiese con esos pensamientos profundos que le acechaban, le encaró mientras le hacía cosquillas en los costados. El rubio tomado por la sorpresa pegó un pequeño brinco en el sofá y comenzó a carcajearse mientras escuchaba la risa maliciosa del otro y cómo murmuraba un “estos ingleses tan estirados como siempre” con su mala imitación del acento británico. Terminaron cayendo al suelo entre el sofá y la mesa por no dejar de moverse, uno intentando evitar que el otro le hiciese cosquillas y éste por querer seguir haciéndoselas. Sin pensar mucho en lo que hacía, y motivado por la emoción del juego, Jude alzó el cuello para posar sus labios en los del otro.

Vio los ojos abiertos del otro por la sorpresa en un principio, pero después sintió como le correspondía profundizando más el beso. Rodeó el cuello fuerte del americano para acercarlo más a él, cosa que el otro hizo acabando por entero sobre él. Las manos de Downey se posaron sobre sus caderas, acariciándolas ligeramente, masajeándolas. Eso logró que un jadeo escapara de su boca junto al quejido cuando el moreno dejó de besarle los labios para seguir por su cuello. Escurrió una de sus manos hasta el pecho del otro para terminar de desabrochar la camisa y poder acariciar esa piel tan tentadora, recorrerla hasta el borde de los pantalones de vestir, borde que recorrió hasta llegar a la parte trasera y acariciar el trasero del mayor. Su mano ascendió por la espalda cuando el otro se deslizó más abajo, mordiendo su clavícula.

Cuando pensaba que no podía haber nada que impidiese que pasase algo, Robert se levantó de encima de él, llevándoselo consigo y sentándolo en el sofá después de desabrocharle los pantalones y bajárselos. No creía al otro capaz de hacer lo que pensaba que iba a hacer, pero se equivocó al percibir el aliento del americano sobre su miembro erecto. Un pequeño gemido salió de su boca, no terminaba de concebirlo. Otro gemido escapó de entre sus labios al sentir la barba incipiente del mayor contra sus muslos. No podía controlar los sonidos que producían sus cuerdas vocales, así como tampoco podía negar que el otro sabía perfectamente lo que hacía. Estaba completamente seguro que todo ese conocimiento debería estar terminantemente prohibido, porque las sensaciones que le provocaba la meticulosa lengua de Downey no eran, ni dentro de lo científico, posibles. Otro espasmo recorrió su columna al notal los fríos dedos del moreno rozando sutilmente su erizada piel.

Mientras que con su mano derecha intentaba acallar los gemidos y jadeos que brotaban de su boca, los dedos de la izquierda se enredaban en ese revuelto cabello moreno que le hacía ligeras cosquillas en el vientre. Definitivamente todo aquello debía ser un sueño para que estuviese sucediendo, porque si no lo era, no sabía qué había hecho para merecerlo. De repente sintió tal sensación que culminó sin tener tiempo de avisar al otro. El moreno levantó la vista para fijarla en la cara que expresaba el placer que todavía sentía Law y sonrió sabedor de que él había provocado ese efecto en el estoico británico. Notando que el otro se estaba amodorrando en el sofá, lo cargó hasta la cama donde lo depositó y tapó con el cobertor de la cama. Después de eso se dirigió a la mesa donde cogió su chaqueta y sombrero y, sin abrocharse siquiera la camisa, abrió la puerta mientras miraba una vez más al rubio en la cama. Quizás no hubiese sido mala idea el dejarse llevar finalmente por ese loco sentido no-tan-común que tenía, sobre todo si podía conseguir que el otro dejase de sumirse en sus sombríos pensamientos.

fanfiction, pelicula: guy ritchie, work: fanfiction, *amigoinvisible2011, actor: jude law, actor: robert downey jr

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