La Ciudad de México tiene dos volcanes muy cerca: uno de ellos, Don Goyo (aka Popocatépetl, nombre azteca), está dormitando. No hay peligro de que haga erupción, pero resulta interesantísimo recordarlo cuando estás frente a brillantes ejemplos de lo que fue Pompeya en el 79 d.C., ese fatídico día de agosto.
Plinio el Joven contó que su tío, Plinio
(
Read more... )