Olvidar
Cuando le dije a el todo lo que pensaba creyó que sólo eran obsesiones mías.¿Será que nos obsesionamos con lo que en serio queremos? y yo te quería tanto. Será que nos estacionamos en donde nos sentimos bien, protegidos, no juzgados, incluso amados. Y yo me sentía tan bien contigo. Entonces sí, claro que me obsesioné, y te llamaba, te hacia detalles, te miraba dormir y te tocaba toda la noche para nunca olvidar, cómo eras; no sé, buscaba sentirte cerca; hacia tiempo para poder tenerte solo para mi y jamás pude, y está bien, eso me pasó por ser una egoísta.
Luego pienso que si no te hubiera querido tanto, nunca te hubiera dicho nada y seguiríamos juntos, entonces me odio.
Me parecía justo ir a dejar por las noches algo en tu cama, ahí adentro de ti para que no me olvidaras, pero hoy ya no quiero; me dueles tanto que hoy decidí olvidarte. Para que cuando tus amigos, o quien sea a quien le hayas hablado de nosotros te pregunten por mí, les contestes, con dolor: “Me olvidó”. Ese será tu castigo por no quererme como yo a ti.
Pondré empeño, en serio. Comenzaré por lo más básico: borrar toda la música que lleve tu recuerdo y cuando alguien se burle de lo que hice, le diré que no sabe nada de almas gemelas, ni de amor, y que por eso se ríe; también dejare de ir al bar al que fuimos cuando nuestra primera cita y hablare con el gerente, le diré que no es justo que nos hayan dejado entrar, por que ese día salí enamorada y eso no está bien, es más, ¡regréseme mi dinero que perdí! Hablare con mi mamá y le diré que no me convino haber nacido con buena memoria, ¿o fueron esas vitaminas que me dabas cuando era una niña? Pues a ver cómo lo resuelve porque sí que me ha traído problemas. Y no pienso desistir ni aunque me digan que estoy loca, que soy una ridícula o que no entiendo el pasado, el deseo o el amor. Te olvidaré, maldita sea, porque lo mereces.
Y si todo eso no resulta, mi amor, entonces optaré por llorar.