Titulo: Alguien como tú.
Autor: Ania
Personajes o parejas: Puck/Kurt - Santana/Brittany - Kurt/Santana - Puck/Otra, Sue Sylvester, Mr Schuster, New Direction.
Beta:
kyra_theurge .
Resumen: Santana está decida a recuperar a Brittany y sus lady kisses, así que decide que los celos son el camino adecuado, y después de ver que con Sam no funciona, recurre por ayuda a quien Santana sabe que Brittany reacionará, Kurt Hummel, su ex novio con manos de bebé.
.
::
::::
Parte 3. El bueno, el malo y Sue.
-Porcelana, sientate-
Sue observó a Kurt, su nuevo líder Cheerio acomodarse; espalda recta, piernas cruzadas, las manos relajadas sobre sus piernas, sin una pizca de temor visible en su rostro.
Ella había elegido bien al traerlo de vuelta a sus Cheerios, después de que Porcelana había regresado a McKinley de su estadía en Gaylandia, sabía que lo necesitaba para liderar a sus animadoras. Kurt Hummel era el único que las niñas respetaban y tenía sospechas de que muchas realmente lo apreciaban. "Hormonas adolescentes", pensó con sorna.
También era el único hombre que no haría nada con ninguna de ellas. O al menos lo había sido. No le gustaba que quisiera cambiar eso ahora. Le había dado su momento y lo había desaprovechado. "No hay reembolso, Porcelana".
- ¿Por qué finjes salir con Pechos, Porcelana? ¿Es por la coincidencia de la letra P de sus nombres clave? - directa y burlona, así se comienza un conversación con Sue Sylvester.
- No finjimos, Entrenadora- Hummel, siempre voz suave y bien educado, eso le agradaba de él.
Estaba intrigada. ¿Qué podría conseguir él de esto? Podía ver claramente a través de Pechos, la niña estaba tan desesperada por el amor de Barbie que le daban ganas de esterilizarlas. A ambas.
Con la barbilla apoyada en sus manos, Sue lo miró en silencio. Ella apoyaba la manipulación. Es más, la alentaba. Nadie que no pudiera urdir un buen plan y salirse con la suya serviría para sus propios planes.
Con un gran suspiro, Porcelana la miró un momento y pareció elegir sus palabras para continuar después del largo silencio.
- Santana puede o no haberme reclutado para dominar la escuela- Sue alzó una ceja y Kurt continuó -¿Por qué dejar que la pareja de poder de esta escuela sea una cheerio y un deportista sin cerebro, cuando podrían ser solo los Cheerios de Sue Sylvester dominando los pasillos? -
Sue sopesó sus palabras. Le gustaba el plan. Le molestó que intentaran ocultárselo. Santana había sido mal influenciada por Schuester al creer que sus estúpidas canciones podrían cambiar al mundo. Pero parecía estar volviendo al buen camino.
Además, podría burlarse de Schue por aún creer que canciones cursis podían cambiar algo. Seguramente la grasa de su pelo le estaba afectando la visión y no podía ver que solo la mano dura contra los perdedores haría el cambio.
Se recostó contra su silla. Su dulce Porcelana estaba creciendo y Pechugas Mcfly debía volver a comprender que solo Sue Sylvester podía decidir como debe moverse el mundo.
- Puedes irte, Porcelana - cuando Kurt se levantó, esperó a que le diera la espalda. -Debo recordar que nada de lo dicho saldrá de aquí, ¿me oyes?- amenazó una última vez mirándolo fijamente.
- Por supuesto, Entrenadora- respondió Kurt.
- Intenta no salir herido - el niño la miró, sorprendido junto a la puerta. - Necesito a mi líder Cheerio perfecto para las regionales de este año, Sue Sylvester no volverá a perder- Porcelana sonrió y ella lo vió salir de su oficina con confianza.
"Va a funcionar", pensó Sue. Porque eran sus Cheerios despues de todo. Y Sue Sylvester no crea perdedores, solo Ganadores.
---
Estaba preocupado, no, William Schuester estaba preocupadísimo.
Sue de nuevo estaba haciendo algo para dañar el Club Glee, y de nuevo involucraba a Kurt. No podía
imaginar que retorcido plan estaba cocinando, pero lo detendría.
Arregló su corbata y se paso una mano por el pelo. Se dispuso para ir en busca de Sue.
Después de todo, el bien siempre vence al mal, ¿no?.
---
La cafetería de los maestros estaba casi vacía mientras Sue preparaba un aperitivo especial para William y Bestie. Unos pocos maestros comían silenciosamente tratando de pasar desapercibidos. Silvando animadamente Sue le daba los últimos retoques a la merienda cuando apareció el maestro de español. Parecía listo para una batalla.
- ¡Tienes que detener esto, Sue!-
- ¿Tu pelo, William? Lo sé, escuché que hizo que dos alumn.. -
- ¡Sue, Detente! Kurt ya pasó por mucho el año pasado, necesita tranquilidad y estabilidad, no ser forzado en un falsa relación con una de tus Cheerios!-
Will la miró fijamente esperando una respuesta. Sue le devolvió la mirada, esperando que pensara en lo que dicho, pero al notar que no veía nada malo en sus palabras entrecerró los ojos, molesta.
- Oh, ¿ahora es mi cheerio?- avanzó despacio hacia Will, quien lucía asquerosamente acorralado -Cuando cantan alrededor como un montón de cachorros perdidos en un centro de la tercera edad son tus niños, pero cuando no, ¿son mis cheerios de nuevo? Eres un ser curioso Schuester-
- Aterrorizar y humillar a los estudiantes no es forma de enseñar valores útiles, tienes que comprenderlo, Sue-
- Guarda tu basura para tu junta de gnomos en lo que llamas pelo Schue, puedo escucharlos quejarse del exceso de grasa en tu cabeza-
Will la miró, horrorizado. Antes que pudiera recuperarse, Sue continuó.
-Yo creo que la humillación es un método de enseñanza tan bueno como cualquier otro- lo acorraló Sue contra el mostrador - Cuando son humillados por algo, William, nunca lo olvidan- le sonrió burlona. - Tengo entendido que enseñar lecciones que no se olviden es parte de ser un buen docente-
Sonriéndole, Sue esperó un momento viendo al profesor de español tratando de responder, abriendo y cerrando la boca. Nada salió. "Ugh, parece ese ratón con el que pruebo las dietas de mis Cheerios, desagradable"
Después de eso dio media vuelta y salió. "Un buen día", pensó con satisfacción. No podía esperar para compartirlo con su diario.
---
--
-
Continuara Pronto.