fandom: Twilight
claim: Leah Clearwater/Sam Uley
tabla:
Emociones resumen: ¿Acaso la evitan por eso? ¿Esa era la razón detrás del extraño comportamiento?
géneros: Drama, Angst.
advertencias: T. Insinuación de lemmon muy leve, sangre, escenas un tanto violentas.
extensión: 471 palabras.
link:
ff@net disclaimer: Twilight no me pertenece, es de Stephanie Meyer.
¿Qué clase de persona oculta algo así? Más bien ¿quién confesaría eso? El aroma del pan recién horneado llegó a su nariz y su boca comenzó a salivar, dividida entre el hambre y el asco. Su estómago se revolvía de sólo recordar lo que vio, afortunadamente nunca desayunaba antes de ir a clase y ese día no había sido la excepción. Nada de lo que pensó antes de llegar tuvo sentido ahora…
¿Ahora qué haría? No podía volver a casa; era demasiado temprano y de inmediato sabrían que nunca había llegado a clases. Y también era demasiado tarde para que le creyeran que estaba en cita médica. Vagó por los límites del bosque, no se sentía valiente como para entrar; y menos sabiendo lo que había allí.
Jamás pensó que algo así fuera real. ¿Quiénes son ellos en realidad? ¿Qué son? Es decir, en qué clase de mundo viven. Definitivamente los límites entre la ficción y lo real son cada vez más difusos; quién se imaginaría lo que había visto. ¿Acaso sus padres o Seth le creerían si les contaba? No. Sólo la internarían sin hacer preguntas.
Siendo sincera, ni ella misma se creería. Pensaría que a la pobre chica al fin le había pasado la factura el estrés y las películas de terror en la madrugada. Oh, claro; sin olvidar también los tenebrosos libros sobrenaturales. En definitiva tenía un problema grave.
Se dirigió a su casa sin ánimo, quizá si jugaba bien sus cartas podría decir que no estaba bien. A pesar de que no mentiría: no estaba bien. El sonido de las garras clavándose en la tierra, y aquellos bramidos ensordecedores le hicieron taparse los oídos ahí, en plena calle. Ni se molestó en preguntarse que dirían los vecinos, ya la tildaban de loca ruidosa; aunque al menos no la consideraban peligrosa. Todavía le pedían que cuidara al gato cuando salían de vacaciones. Leah gritó cuando la sirena de una ambulancia pasó por aquel lugar, su corazón dio un salto frenético. ¿Y por qué esta tan asustada? No es normal lo que vio, y es comprensible que tenga los nervios crispados.
¿Acaso la evitan por eso? ¿Esa era la razón detrás del extraño comportamiento? Sus pasos se apresuraron en cuanto vio el coche estacionarse en la mitad de su portal. Su mente dejó de funcionar en ese momento, los sonidos representaban un eco muy lejano que no podía entender; y ni siquiera supo en que momento había llegado alguien hasta ella y la abrazaba con fuerza.
En los ojos castaños de Leah se reflejaba la escena: una camilla siendo metida a la ambulancia con evidente premura; en ella yacía su padre. Parpadeó mecánicamente y no reaccionó hasta que sintió una tibia estela de agua recorrer su mejilla, el llanto sofocado de su madre trajo el mundo auditivo de regreso.
fandom: Twilight
claim: Leah Clearwater/Sam Uley
tabla:
Emociones resumen: Se sentó en la cama, y aún sin tranquilizarse se paró todo lo rápido que pudo, tomó su chaqueta y salió en medio de la noche oscura, extrañamente con un rumbo fijo...
géneros: Drama, Angst.
advertencias: T. Insinuación de lemmon muy leve, sangre, escenas un tanto violentas.
extensión: 366 palabras.
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ff@net disclaimer: Twilight no me pertenece, es de Stephanie Meyer.
El enorme lobo negro se irguió sobre sus patas traseras. El gesto le pareció extraño, más propio de un ser humano que de un animal. No le tomó importancia y avanzó un paso más cerca de él…
Retrocedió asustado el animal, intimidado por el coraje de la chica. Eso la descolocó completamente, sintió como su corazón se contrajo y se sorprendió al notar sus ojos acuosos; impresionante, el dolor que le produjo aquel rechazo fue horrible. Como si hubiera tocado un atizador hirviendo con las manos congeladas…
La pelambrera negra del gigantesco lobo se erizó cuando una brisa sopló entre ellos y la cabellera azabache de Leah se agitó en dirección a él. Él frunció la nariz dejando sus dientes al descubierto en una mueca sádica pero ella no tenía miedo de él...
El lobo saltó pero en el último momento se dio cuenta de que no era ella, su rostro no se sentía como suyo y tampoco era el mismo que acababa de ver sangrante en las pupilas de Sam. Estaba destrozado, el antes hermoso rostro de su prima Emily. Algo dentro de Leah se rompió, oleó el regocijo como un maremoto en su interior y se sintió asqueada de sí misma, las lágrimas salieron a borbotones junto con los sollozos.
¡Dios, era su prima a quien destrozaban el rostro! ¡A quien herían! ¡Era su prima! ¡Había sido marcada de por vida! ¡Siempre vivirían ambos con la cicatriz del dolor ajeno! ¡Era su Sam atacando a su Emily!
Leah despertó de golpe.
Su mente no había dejado de repetir ese recuerdo, aquel que atormentaba a Sam. Y que había hallado en un oscuro rincón al que sin duda se había arrepentido de entrar. Se sentó en la cama, y aún sin tranquilizarse se paró todo lo rápido que pudo, tomó su chaqueta y salió en medio de la noche oscura, extrañamente con un rumbo fijo… la casa de Emily.
Tocó como desesperada cuando estuvo frente a la puerta, la chica abrió con la preocupación en el semblante. Al instante Leah se echó a sus brazos y se largó a llorar.
─Seré la madrina…, lo haré bien… lo prometo… ─habló entre sollozos haciendo de tripas corazón.