Love me until the sun goes down
Fandom: Supernatural & The Vampires Daries
Pairing: DamonSalvatore/SamWinchester.
Personajes: DamonSalvatore, Sam Winchestr, Dean Winchester, Ruby Cassidy (obviamente Katie Cassidy), Alaric Saltzman, entre otros.
Genero: AU X-Sover
Plot: Sam es un estudiante de leyes el cual conoce a su Nuevo compañero de cuarto, Damon Salvatore, ¿Que les deparara el destino a estas almas tan diferentes?
Theme: Curve of the Earth - Matt Nathason (esta cancion isnpiro toooooooodo el fic, fue escucharla y pensar en Sammy, escucharla la segunda vez y relacionarla con Damon, y pues a la tercera ya se imaginaran XD con los dos rondando fue un flash en mi vida)
1 -
2 -
3 -
4 Capitulo Uno: Sol de media noche. (Midnight Sun)
Los rayos del sol llegan hasta su rostro, iluminando sobre sus delicados ojos verdes, que hasta ahora permanecían cerrados, descansando de la pesada noche que había tenido, con la discusión de su hermano, la pelea con su, ahora ex, novia, el Bar de su padre, y la policía llevándose a su medio hermano, si, había sido una jodidamente larga noche, con un montón de problemas para encargarse hoy en la mañana.
- Así que al fin despiertas. - la voz desconocida le hace pegarse a la pared del susto, llevándose un gran golpe, justo un segundo después de recordar que ahora su cama no estaba pegada a la pared, sino en el medio de la habitación, así que se golpeo fuerte contra el piso de cerámica. - Uhh…eso debió doler amigo, mi scusi por asustarte, no era mi intención. - su fuerte tono americano con italiano hacen que Samuel frunza el ceño, levantándose del suelo y sentándose en la cama para mirarle.
El hombre en cuestión, le mira con sus fuertes ojos azules, traviesos, al igual que su sonrisa maliciosa, y esas cejas que solo resaltan su malicia, debe ser un tipo atrevido, esos de los que a las chicas tanto les gusta.
- ¿Quien eres? - pregunta con la voz ronca por el sueño, poniéndose de pie con dificultad, intentado arrancar las sabanas de su cuerpo, que parecen haberse pegado con todo su sudor.
- Damon, Damon Salvatore.
Quien pensaría que su vida cambiaria tanto solo por un nombre.
- Te digo es su culpa, fue todo su culpa, ella fue quien me engaño. - suspira pesadamente mientras se deja arrullar por los delgados brazos de Ruby.
- Es una perra, no le hagas tanto caso, hay alguien bueno para ti allá afuera. - su voz es reconfortante, pero no es lo que espera, no quiere que le reconforten, quieren que le digan que fue un idiota y que todo es su culpa.
- Pero Ruby… - intenta, pero ella no le deja.
- No lo intentes, Dean es un maldito que se cree muy macho por que tiene a todas las mujeres de Stanford locas por su polla. - Sabe que ella tiene toda la razón del mundo, pero aun así, quiere pensar que es su culpa, que su amada novia, Jess, le haya engañado con su hermano mayor.
- No es culpa de Dean. - susurra, y se lleva un capón por ello. - Se lo que piensas Rub…pero, no es culpa de Dean, el solo quiere demostrarme…lo de-
- ¿Débil que son las mujeres a el?, o ¿Qué el puede tener todo lo que tu tengas?
Se mantiene en silencio por un rato, solo sintiendo el calor que la chica rubia desprende contra el, su mejor amiga del alma, ¿razón?, es lesbiana, y aunque al principio le hablo con la intención oculta de verla enrollarse con otra persona, en realidad su amistad empezó con los estudios, el es un nerd, y ella una jock por cuenta propia, Sam aun se ríe de eso.
Ruby es como la luz al final del túnel, en muchos sentidos, ella le hizo ver que la vida estaba mas allá que servir, desde los dieciocho, en la barra del bar de su padre, el cual afortunadamente estaba muerto, si, podía sonar cruel que Sam pensara eso, pero era lo mejor para el, quizás no para su hermano, pero si para el.
- Quizás debería ir hablar con el. - Con Dean, pero decir su nombre parecía un poco dificultoso ahora.
- No lo creo, no te dejare. - para probar sus palabras sus brazos se aprietan mas contra su pecho. - Oh… ¿Hoy no llegaba tu nuevo vecino? - recuerda de pronto.
- Oh…si, tristemente si. Y no es vecino es compañero de cuarto.
- Joder, eso si que es una mierda, espero te pongan a un cerebrillo, o una caliente lesbiana que quiera que la lama como una chica sedienta. - dice, sucio, al oído de Sam, que se estremece con el pensamiento, pero no dice nada, eso se lo deja a Dean, que coquetee de esa manera tan sucia que tiene, el prefiere el amor sincero, aunque su ultimo romance no haya salido tan bien.
- En realidad, luce mas como un cabrón. - suelta una pequeña risita compulsiva, no puede evitarlo.
- ¿Estilo Dean? - pregunta ella, robando unas papas fritas del plato grande que tiene al lado.
- No lo se todavía, pero presiento que lo conoceré pronto. Su nombre es Salvatore, Damon Salvatore. - su nombre suena como de película vieja, al menos su apellido. - Es italiano, creo.
- Suena lindo, y me da tanta lastima que no sea un chica. - suspira contra su cuello antes de ponerse de pie. - Tenemos literatura hoy, ¿Cierto?
- Si, con Alaric.
- Con tal y no se ponga nostálgico con esa mierda de literatura romántica, estaremos bien, vamos Sam. - sonríe Ruby, jalándolo de la pequeña esquina donde los dos tienen por costumbre esconderse, cada vez que toca el pequeño espacio de tiempo entre el almuerzo y la siguiente clase.
La clase es aburrida, y Sam nota que el chico nuevo, Damon, ya esta sentado allí, viendo clases, sin ningún cuaderno encima, sin lápiz, sin nada, y aparentemente no es el único que lo nota, por que toda la clase le mira con curiosidad, incluidos Ruby, que se acerca a su oído, sigilosamente, para que Alaric no le vea.
- ¿El es?
- Sip.
- Uhhh…es caliente, ¿no desearías tener su polla perforándote Sam? - pregunta a su oído, susurrándole.
- ¡Oh por dios! - la exclamación le vale la mirada de todos, incluido la del profesor.
- ¿Oh por dios? ¿Qué esta viendo Winchester? ¿Porno? - pregunta Saltzman, alzando una ceja a su estudiante favorito, para disgusto de Ruby.
La clase se ríe, y a Sam no le queda mas remedio que reírse también, así que el tema pasa por alto, pero por alguna razón, Damon Salvatore no lo hace, solo estudia sus facciones con curiosidad.
- Es tiempo de regresar Ruby. - murmura Samuel mientras salen de la facultad de derecho, sorprendente que la perra mayor, como le gusta llamarla, solo le mire con molestia y no le suelte alguna barbaridad.
- Bien, bien, ve a conocer a tu… ¿Cómo se dice en italiano, novio? - pregunta, alzando una ceja, hablando mas para si misma que para Sam, como casi siempre.
- Findanzato.
- ¿acabas de insultarme? - pregunta, haciendo una mueca exagerada de sorpresa.
- Idiota.
- ¡Lo acabas de hacer! ¡Pagaras por esto Winchester! - le persigue hasta el estacionamiento de bicicletas, donde se pelean por ver quien abre el candado de cada una mas rápido.
- ¡Ja! Gane. - exclama excitado, subiéndose a ella, y justo cuando esta a dos metros de la “salida” del estacionamiento, se da de bruces con Damon, cayendo los dos al piso, Sam sobre el, con su cuerpo gigante sobre el chico nuevo.
Damon gruñe algo debajo de el, pero no puede entenderlo por que las risotadas de Ruby son demasiado altas.
- Perra. - gruñe Samuel, mientras se levanta del cuerpo duro que aplasta. Este chico debe ir al gimnasio o algo, por que esta bien firme.
- No te preocupes, no me ofendo, me han llamado cosas peores. - su voz es pura diversión, mal sana, pero diversión al fin, sus ojos azules parecen sonreír con el.
- ¡OH! ¡Lo siento, no era contigo! Era con…Ruby, mi amiga. - dice todo de corrido, poniéndose de pie, lleno de vergüenza.
- Esta bien, no te preocupes, Sam. - el chico se levanta, gracias a la mano que Samuel tiene extendida hacia el, realmente es pesado.
- ¿Regresabas a las residencias también? - Ruby es quien pregunta, acercándose con su bici a ellos. - Sam y yo vamos de camino allí, pero de camino íbamos a pasar por el Bar de su familia, ¿Quieres venir?
Y ahí esta su habilidad nata de conocer gente, y también su otra habilidad de pasarle por encima a los miedos de Sam, como el hecho de que no planeaba ver a Dean en los próximos cien años, y ahora tiene que verlo por que ni loco planea dejar sola a Ruby en un bar, donde probablemente acabe borracha a mas no poder.
Así que allí están, en el estúpido Bar familiar, si, nada como el negocio de la familia. Con Dean dándole miradas preocupadas, si, el cabron aun tiene la dignidad de hacerlo, incluso hasta le deja los tragos gratis, y Ruby acepta sin dudarlo, mientras le cuenta a Damon lo increíble que es la vida en el campus, en lo que se refiere, claro esta, a como de salvaje puede ser.
- Y las fiestas de Grecia…son lo mejor, puedes tener sexo con todo el campus…es lo mejor Damon, lo mejor. Deberías ver a las chicas…
Damon parece no estar siguiéndole el juego, por que probablemente para el chico, no sea un juego, parece verdaderamente interesado. Su sonrisa se ensancha cada vez mas, con cada palabra que sale de la boca de Ruby, parece que este es su campo.
- Así que, Damon. ¿Por qué elegiste leyes? - pregunta Sam, atrayendo su atención, que el de ojos azules no duda en darle.
- Era interesante, y Stanford fue la única universidad a la que pudieron transferirme mis padres. - responde, con su voz relajada, recostándose de la silla, su mirada es penetrante, y Sam no puede evitar sentir una pequeña punzada de celos por esos ojos tan azules.
- ¿Son ricos? - pregunta Sam sin poder aguantarse la curiosidad.
- Si, hasta el punto de dar asco. - Damon se encoje de hombros. - Aunque no me importa, si me dan vueltas por todo el país con tal y no verme a la cara.
Huele como a un pasado triste, o quizás una historia complicada.
- Eres demasiado complicado para ellos.
Damon le ve por un momento, con esa provocativa sonrisa, levanta su copa hacia Sam y asiente con la cabeza.
- Así es mi amigo
Esto arranca una risa de Ruby, quien le guiña un ojo a Sam, dejándolo un poco confundido con el gesto.
- Justo como Sam, demasiado complicado para su familia, ese es nuestro Sammy. Debe ser el destino quien los junto.
Estúpida Ruby y su amor por los gays.
- Ruby… - su tono de advertencia hace reír a ambos, risa que muere cuando el mayor Winchester se acerca a la mesa, sin ser llamado, solo atraído por esa inmensa sonrisa en el rostro de Sam.
Sus ojos verdes fijos en Sam, que no levanta la mirada.
- Estoy sirviendo tequila de nuevo. ¿Quieren algo? - esto es claramente para Ruby, por que Sam, Sam no resiste muy bien al tequila, lo convierte en una babosa andante, que termina siempre sobre la espalda de Dean, y dejando su baba por todo el pecho de su hermano, el cual se levanta muy temprano en la mañana para quitarse de encima a su pequeña babosa con resaca.
- ¡Tequila! ¡Uno por aquí! - grita Ruby, sirviéndose un poco mas de cerveza en su pequeño vaso, su sonrisa demuestra que todo el enfado con Dean se le ha quitado.
- ¿Uno gratis para mi también? - pregunta Damon, estudiando con su mirada a Dean, que le mira curioso, como si notara que el chico había estado sentado al por primera vez.
- ¿Y tu eres? - pregunta, con toda la desconfianza del mundo, estúpido hermano mayor.
- Es Damon, el nuevo compañero de Sam, nuevo miembro del club de Salem. - El comentario de Ruby hace cagarse de la risa a Sam, la estúpida perra aun sigue con su jueguito de que ella y Sam son brujas de Salem, pero la verdad es que Sam se ve mas como un cazador de brujas que como una.
- Prefiero ser un vampiro. - dice, incrementando las risas de Sam.
- Ok, Damon entonces. Un placer.
- Mio también. - responde Damon estrechando la mano del bartender, que le devuelve una sonrisa traviesa.
Ahora el momento incomodo. Dean dirigiéndose hacia Sam, girando su vista mientras suelta la mano de Damon.
- ¿Quieres algo Sammy? - pregunta, su voz suena insegura, como si temiera el rechazo de Sam.
No esta equivocado, Sam gira la vista a otro lado, un sitio vacio en algún punto de la pared izquierda del bar. Dean solo asiente, bajo la mirada curiosa de Damon y la mirada un poco divertida de Ruby.
- Les mandare a traer su orden. Adiós Ruby, Damon. - ambos despiden a Dean con una sonrisa.
- Ruby…maldición. - gruñe Sam, intentado mantener a la chica bien colgada de su espalda.
- ¿Quieres que te ayude? - pregunta Damon, esta sonriendo, eso es seguro, Sam se debe verse gracioso con la babosa en la espalda.
- No es gracioso. - reprocha un poco enfadado con Damon.
- Lo se, ya he estado allí, las mujeres son tan desastrosas. - el tío es realmente gracioso cuando da respuestas así.
Ese comentario le hace reírse.
- Eso es por que no me has visto ebrio.- es lo que responde Sam, recordando todas las veces que su hermano se ha quejado en la mañana, de cómo Sam se abraza a el en la noche y de toda la mierda que sale de su boca, cuando balbucea en su delirio.
- Uhhh…eso suena interesante. - Damon deja escapar un silbido.
- MI hermano… - comienza con una sonrisa, hasta que recuerda en menos de un segundo por que esta furioso con Dean, su sonrisa desapareciendo con el recuerdo.
- ¿Por que presiento que esta rivalidad con tu hermano es…desde hace años? - pregunta, tensando la voz, mientras se acerca mas a Sam, Ruby dando un suspiro.
- No es rivalidad. - contesta apenado de que este tema allá tenido que salir tan rápido.
- ¿Enfado? Tiene que ser algo. - Parece sinceramente interesado.
- No es nada…solo…
- ¿Solo?
- Es… - Dios, el nunca ha sido de ls que duda.
- ¿una chica? - se aventura a preguntar el Salvatore, mirando con detención el rostro de Sam.
- …
- Joder, tu sucio perro, ¿Una chica? ¿Con tu hermano? ¿Novia o amante? - se atreve a preguntarle, no es que vaya a molestarle si Sam le pega un puñetazo o dos.
- Novia. - contesta Sam en un suspiro.
- Mierda, es un lobo ¿no? - Ese tipo va a agradarle, pero aun así no puede evitar sentir simpatía por Sam.
- Mas como un imbécil que no sabe cuales son sus limites.
- Si, como yo. - Damon se encoge de hombros, sonriéndole a Sam que el ve con una mirada acusadora.
- Lo sospeche desde el principio. - Sam sonríe luego de un minuto, haciendo a Damon sonreír también, pero con superioridad.
- No soy tan predecible.
- Soy listo. - responde rápidamente Sam.
- Puedo notarlo, eres interesante Sam, ¿Ahora me prestas a nuestra pequeña borracha?
- Toda tuya, hombre.
Continua...
La gente debe asustarse cada vez que pongo un continua aqui...............