Tabla: Estaciones
Fandom: Harry Potter
Claim: Mackenzie Bell/Samanta Adams
Título: Maldito calor
Personajes: Mackenzie Bell
Tema: #2 Verano
Extensión: 404 palabras
Advertencias: Femslash.
No era que ella odiara el verano. Todo lo contrario. En verano hacía un sol espectacular para dormirse en el parque, los profesores se ponían de buen humor, la gente comenzaba a faltar los días que faltaban para las vacaciones, el aire se llenaba de olor a flores, y demás cursilerías que decía Tonks cuando pasaba demasiado tiempo con Charlie- Mackie estaba convencida de que esa relación debía terminar por ser tóxica. No podía ser normal que ambos estuvieran tan idiotas.
Lo que a Mackenzie le molestaba del verano, era el calor. Y lamentablemente, el verano es indivisible del calor. Era algo que iba más allá de que Mackenzie tuviera o no el síndrome masculino de sufrir el calor como si fuera una morsa y tuviera una gruesa capa de grasa bajo la piel. Mackenzie tenía múltiples y variadas razones para odiar el calor.
El primer motivo era porque no se podía concentrar correctamente. El verano caía justo en época de exámenes, y Mackenzie se ponía de los nervios si no podía estudiar correctamente. Y, decididamente, en verano, con tanto calor, no podía estudiar correctamente.
El segundo motivo era que las hormonas masculinas se reproducían a una velocidad supersónica. El calor es caldo de cultivo para los gérmenes, maldita sea. Y Mackenzie estaba harta de dar contestaciones entre ácidas y amargas, y directamente hostiles. Si ya se ponía histérica por no poder estudiar, el tener que pasarse el día ahuyentándose moscardones de encima, la ponía insufrible.
El tercer motivo- pero no por eso el menos importante- tenía que ver, por supuesto, con Samanta. Porque Samanta también sufría muchísimo con el calor, pero se lo tomaba con mucha más filosofía que Mackenzie. Sam volvía sus túnicas indecentemente transparentes, y cuando no estaba en clases, y no debía llevar el uniforme puesto, acortaba sus faldas un par de centímetros y profundizaba el escote de la blusa. Problema solucionado. Si, problema solucionado para ella, pero no para Mackenzie. Porque si Mackie no podía vivir entre la falta de concentración y los moscardones propios, ¡imagínense el calvario que era su vida cuando debía espantar los moscardones de Samanta!
(Eso sin contar el tiempo inconmensurable que se le consumía cuando ya no soportaba más ver pasar a su novia con esa provocativa indumentaria, y sentía la obligación de follársela en un aula vacía, hasta obligarla a ponerse ropa de un largo decente… para ocultar las marcas que le había dejado por todo el cuerpo.)