U Destino Extraño...{1-5}
Bueno comento que aquí en argentina son las.....12:50 de la media noche jeje, con desty calculamos que mas o menosm hay ocho horas de diferencia con españa y que como principalmente nos guiamos por esa hora de postear... jeje, este es mi humilde aporte al MES DE MISHA!!! ES LA PRIMERA VEZ QUE PARTISIPO Y empece a adorar a mMish por taolee... con un fic donde aparecia Jen obvio; y como uh! en realidad no me cerraba la idea!! pero lo lei igual y aca me veis adicta al paring..y a muchos otros y bueno como no le hago asco a nada, les vengo a traer algo raro!!! O.O
Un parinG...Tacha Chan!!!
MISHA/DAMON
UHHHH CUIDADO CON LOS TOMATES SEÑORAS Y SEÑORES QUE SON COMIDA!!! Y AUN SIRVEN!!, OK PERO ESTOS ME LOS LLEVO A CASA QUE ESTOY POBRE *recoje los tomataso con pala*
Ok aqui ta!!
Titulo: Un Destino Extraño.
Autora: Elghin.
Betas: Evian y Nem.
Ranquing: NC-16.
Fandom: Crossover.
Pring: Misha/Damon.
Personajes adicionales: Stefan, Elena,Caroline, Bonny, jensen,jared. uhmmm Alaric Saltzman, Jeremmy, y nadi e mas creo a y mención de la perra de Katerine,Yemma(pony).
Resumen: Misha es un profesor de equitación en el pueblo de Mystic Falls, y alli nadie sabe guardar secretos.
Descargos de racionabilidades: los personajes no me pertenecen ni las personas descritas en el tampoco solo se deben a sus autores originales y a las personas con libre albedrío.
Wrninga: nada del otro mundo solo amor y recelo y mucho poni suelto.
NOTA:los arts son por la pura amabilidad de Evian que me vio compungida cuando no encontraba un modo de relacionar a estos dos personajes jejeje.
Capitulo 1.
Un destino extraño....
Nueva ciudad, nuevos dramas escolares, y un pony en el jardín...
Misha Collins es un profesor de equitación y llega a Mystic Falls una pequeña ciudad de Virginia, con toda la intención de cambiar su vida o encontrar una; el profesor se ha mudado de su antigua ciudad porque esta cansado de la vida que llevaba... nada interesante, ni prospectos de crecimiento laboral, ni amoroso, sus amigos son escasos... o sea dos. Jared y Jensen que viven felices y comiendo perdices en Nebraska, el no les envidia en absolutamente nada su permanente estado de felicidad, noooo!!! Para nada, solo verles tan enamorados le da náuseas... y no es que sea un malhumorado o esnob, nada que ver. Solo que no soporta cierta clase de gente, a los estirados, los que mienten, los que dicen mentiras a medias y los que se mienten a si mismo y los que con tal de no asumir responsabilidades huyen de las cosas o las ignoran. Pero el no es nada antisocial… no para nada.
Últimamente junto al profesor de gimnasia Jared Tristan Padalecki y su pareja estable súper feliz Jensen Ross Ackles otro profesor del instituto en el que trabajaba y el cual se ocupaba de las clases de trigonometría, el club de ajedrez y de matemáticas... sentía que el no pintaba mucho en ese lugar... aunque hacer de cupido para esos dos había sido divertido. Pero él realmente no era feliz allí y lo admite.
En su nueva escuela, todo parecía ir acomodándose normalmente, la escuela es normal, el alumnado es normal, los otros profesores son normales... aunque ese tipo que imparte Historia tiene una pinta de alcohólico que te volteaba de solo mirarle; Alaric Saltzman, pero que éste no tenga trato con el resto del profesorado del instituto, era el único punto a favor.
Lleva solo cuatro días en el lugar y le han impartido todos los chismes habidos y por haber del lugar... dios que esa profesora de música si que se fumo algo porque esa lengua no paraba de hablar en la hora de la comida.
El pueblito es agradable, ahora que lo recorre y se encuentra con la preciosa plaza central del pueblo llena de niños, se plantea traer a Yemma en el fin de semana. A su Pony le fascinan los niños, ha sido un cuarto día agitado y agotador, pero no podía dejar de recorrer el lugar donde vive ahora... cuando llegue a su casa seguro Jensen y Jared estarán espiándolo desde la pc; ¿¿como hizo Jensen para piratearle la pc y encenderla cuando el quiere y hacer con ella lo que quiere cuando el no esta... ?? No lo sabe, ni cree que lo llegue a saber nunca. Si no fuese porque los separan miles de kilómetros diría que Jen se mete a su casa.
Esta frío en Mystic Falls pero Misha camina distraído por las calles ya oscurecidas, planeando aceptar cualquier nuevo giro de su vida; sin notar que le observan detenidamente; su pulso es suave y su aroma muy tentador para ciertos habitantes de la pequeña ciudad, aun así el nuevo profesor de Mystic Falls ve a lo lejos en una de las calles laterales un letrero de un bar, cantina o lo que sea; son las ocho de la noche y le parece genial poder conocer mas gente fuera del ambiente del trabajo y su Pony.
No se tarda en llegar, su es paso ligero y en menos de unos minutos esta en plena puerta y al entrar, un grupete de estudiantes le asalta con preguntas de cuando llegaran los corceles de su clase a la ciudad y el responde amablemente, que en unos días pero que si están impacientes por aprender a montar. Les ofrece a Yemma, y todos se le quedan mirando… uno salta de nuevo con una nueva pregunta “¿Quien es Yemma prof. Collins??” Misha ríe a carcajadas y varios de los adolescentes del lugar se contagian de su risa; les explica que Yemma es un Pony marrón dorado, de crin rubia y larga, muy hermoso y que es de su propiedad y ahora mismo esta en su nuevo jardín, comiéndose las flores de la entrada. Todos ríen y se percatan de lo peculiar de ese profesor...
Media hora mas tarde, Misha cenaba en la barra del lugar, un enorme plato de ravioles con salsa de espinaca; iba por la mitad disfrutando del murmullo de la gente, miraba entretenido todo ese ir y venir del pueblo por el “El Grill”; cuando una chica rubia y su novio camarero le llama la atención; están peleando hace rato y a él le parece que la ha visto en el instituto estos días.
Suspira mientras continua cenando, se recuerda a si mismo no meterse en los amores de preparatoria o se meterá en líos otra vez; pero un hombre algo mas mayor que la chica, la toma del cuello y la saca de allí apenas entra al local, todo el lugar parece ajeno a lo acontecido como si fuese normal que un tipo vestido de negro, tan apuesto y con ese rostro perfilado y de malos modos se llevara a esa chica a los empujones del lugar.
Intenta no compenetrarse pero la postura de ese tipo le resulto muy interesante y si esa chica es alumna suya, tiene que saber que es lo que pasa, cual es su relación para que la trate como un hermano mayor molesto, según su parecer. Deja el dinero de su cena al lado del plato, haciendo nota mental de volver mañana, sortea a la gente tan rápido y disimuladamente tanto como puede, saliendo del lugar.
Nada, absolutamente nadie en la puerta trasera del Grill, su ceño se frunce y piensa si se equivoco de salida pero es por donde los vio salir, hace no más de cinco minutos... se rasca la mandíbula con las cortas uñas, pensativo con la mirada fija en el piso, y sale del callejón a paso lento, no lo entiende, no deberían estar a mas de 20 pasos...
La fría mirada celeste del otro lado del callejón brilla de emoción, de deseo y de hambre, el delgado hombre con saco azul oscuro, la corbata a cuadrille celeste y negro y la camisa blanca, le hacen imaginar como podría desgarrarle para beber esa preciosa sangre de su pecho; de tersa piel blanca.
Un golpe lo saca de sus pensamientos, de aquel tipo de negro y la Barby del pueblo, una niña de no más de 16 años, bajita y pelirroja, lo mira con sus enormes ojos celestes y le sonríe de manera rara, él le de vuelve la sonrisa y se quedan mirando por un momento, la situación le hace fruncir el ceño y decide irse, pero cuando la niña le retiene con fuerza absurda para esa pequeña mano, y le dirige las más extrañas palabras... piensa si esos ravioles tan sabrosos habrán estado en buen estado, porque lo que escuchan sus oídos es demasiado extraño.
- No dirás nada, si no te lo ordeno...- la voz chillona, oscura y autoritaria es como si de una vieja se tratase, lo deja catatónico en su sitio, no por obedecer, si no más que nada por el hecho de que le dejo sorprendido la desfachatez de la niña, al pensar que puede ordenarle a él algo que no quiera o piense hacer, pero los dedos de la niña... rosados, pequeños y fríos le recorrieron los botones de la camisa con clara intención de desabotonarlos.
Aparto la mano de la chica de un manotazo, estuvo a punto de retarla y mandarla a su casa con sus papis; cuando la pequeña lo agarro del cuello y lo levanto en el aire pegándolo contra la pared, sus ojos se oscurecieron, venas negras llenaron sus cuencas y un feroz gruñido salio de entre los dientes afilados de la hasta hace segundos antes, indefensa niña.
- ¡¡Quédate quieto!! - le grito - No quiero destrozarte en pedacitos...- dijo más suavemente con una sonrisa perturbadora, Misha pensó que eso no podía ser eso real!.
- ¡Si! ¡¡Claro, suéltame!! - soltó con la vos estrangulada.
- ¡Que mierda es esto!, ¿¿Llevas verbena encima?? ¿Es eso?, ¡Que te quedes quieto joder! - le arranco de cuajo y sin esfuerzo la corbata junto a la camisa ahora hecha jirones.
Vio los enormes caninos acercarse a él y de repente estaba con el culo en el piso helado y con un dolor de mi demonio en el huesito dulce, rememorando la primera vez que Yemma se asusto al montarla, tirándolo. Pero sabiendo que había algo más importante, se concentro en lo que pasaba a su alrededor, la voz de una joven algo furiosa y aguda, desvío su mirada enfocando justo delante de el y lo que vio tampoco era factible ¿¿¿o si???
La rubia que lloraba por su novio, dentro del Grill, esta frente a el con los ojos cubiertos de venas negras y sus ojos totalmente perdidos de una oscuridad empetrolada; tenia agarrada a la niña pelirroja del cuello, clavada en el poste de luz. Trago en seco, el frío le pego en el cuerpo inclemente y los jirones de su camisa colgaban sin remedio; se cruzo la chaqueta como pudo y se levanto. Dio un paso y una mano lo pego de nuevo contra la pared.
- ¡Oye!, oye, oye, mira, mejor te quedas quietito y te olvidas de todo esto. ¿Ok?, no queremos que el nuevito del pueblo se nos eche a perder tan rápido. - dijo el hombre de ojos turquesa frente a él, estaba tan cerca, que el aliento a Bourbon le llego directo a la nariz y noto como sus pupilas se dilataban de forma rara.
- ¿Eh? ¿El nuevito?…. ¿¿Y como que arruinarme?? - Misha ladeo la cabeza y fijo su mirada interrogante en esos impresionantes ojos, noto que lo que decía pasaba por debajo de un puente; el hombre de negro bufo molesto y empezó a buscar algo entre sus ropas, rozándolo y hurgándolo por doquier.
- ¡Damon! ¡¿Q-que haces?! - le chilla la chica intentando no ponerse roja de lo que ven sus ojitos inexpertos, sin que se le escape la intrusa.
- Tu encárgate de mantener a nuestra, no invitada bien agarrada, que este tío tiene verbena por algún lado, no puedo hipnotizarle - dijo buscando con mas ahínco apretándolo contra la pared, porque el profesor nuevo del pueblo no se estaba quieto.
- ¡Eh! espera que... jajaja...¡¡¡QUE haces, deja!! jaja ¡¡¡pero que me haces cosquillas!! jajajaja - Misha se retorció un poco mas, mientras este le revisaba el cuello por si tenia algún colgante, pulsera, algo que tenga la hierba que no le deja borrarle la memoria; tanto en los bolsillos como en cualquier cosa que lleve o la escasa ropa que le quedo encima.
- ¡¡Damon!!- la rubia le levanto la voz, cuando las risas se tornaron en jadeos y ambos hombre se miraban a los ojos sin saber bien por que.
- ¡¡Queee!! - se giro a verla exasperado por esa vocecita que tenia la rubia; aun sosteniéndole firmemente para que no se echara a correr, pero Misha solo miro curioso mientras se sujetaba de la muñeca de aquel hombre, del cual no se podía zafar a pesar de usar las dos manos; pero la manera en como se trataban esos dos era como si compartieran sangre, aunque no se parecían en nada.
- ¡Que tengas cuidado, joder! que en mi profe de equitación y quiero aprender a montar antes del verano -le dijo pero el vampiro solo rodó los ojos y sus ansias de matarla por pesada e insoportable crecían.
- ¡¡Me estas jodiendo!! Y para qué mierda quieres aprender eso...- le dijo agrandando los ojos dejando que la luz entre en ellos y se vean más fríos.
- Y a ti que te importa... - dijo montando un puchero y un hombrito de que me importa lo que pienses.
- Demonios eres la Barby mas tonta del pueblo - vocifero a la chica que acababa con su paciencia...
- ¡No! ¡No lo soy!- se defendió pero al mismo tiempo; planteándoselo y sujetando con mas vigor a la niña calabaza del cuello, estrangulándola si estuviera viva.
- ¡Mira tu! vete a tu casa y no se te ocurra decir nada de esto o te mato, así de simple, ¿esta claro?; ya arreglare cuentas contigo después...- dijo al oído, eso ultimo, casi susurrado … cuando todo su miedo se fue a los tobillos, al sentir su respiración sobre su lóbulo y cuello; el vampiro se alejo un palmo y le miro, el profesor Collins que le miraba sin entender nada de nada de esos tres sujetos, la situación o que mierda tienen en los ojos y aun así las piernas empezaban a temblequearle, como su mente a sacar hipótesis.
- Profesor usted váyase, ande...- dijo como mamá gallina, intentando proteger un polluelo la rubia.
- No te metas ¡¡joder!! - grito, frustrado y cansado de lidiar con la chica, mirándolo de cerca dijo -¡CORRE!- le grito en el rostro, con los ojos trasformados, lleno de venas negras y un profundo rojo mezclado con el turquesa que se teñía de negro abrumadoramente feroz.
Todo su cuerpo sintió el peligro, su piel se erizo y se desespero por salir de allí, Misha corrió todo lo que pudo, tan rápido como el cuerpo le respondió. Las ocho cuadras que lo separaban de su casa, no paro, ni miro atrás, todo eso era inverosímil sin sentido, imposible; esa era la palabra más exacta. No abrió la puertita blanca del cercado de su jardín, directamente la saltó para abrirse paso desesperadamente, agarro a Yemma del estribo y la empujo dentro de la casa, no podía dejarla fuera con eso seres “no” existentes, completamente palpables, acechando fuera de la casa...
Y si había aprendido algo de los vampiros, porque eso era lo que eran ¿no?, algo distinto a los de su serie de Ángel y de Buffy pero en fin, ellos no podrían entrar sin ser invitados y solo de día estaría seguro de que no les vería cerca...
Que equivocado estaba.
continuara....
Un parinG...Tacha Chan!!!
MISHA/DAMON
UHHHH CUIDADO CON LOS TOMATES SEÑORAS Y SEÑORES QUE SON COMIDA!!! Y AUN SIRVEN!!, OK PERO ESTOS ME LOS LLEVO A CASA QUE ESTOY POBRE *recoje los tomataso con pala*
Ok aqui ta!!
Titulo: Un Destino Extraño.
Autora: Elghin.
Betas: Evian y Nem.
Ranquing: NC-16.
Fandom: Crossover.
Pring: Misha/Damon.
Personajes adicionales: Stefan, Elena,Caroline, Bonny, jensen,jared. uhmmm Alaric Saltzman, Jeremmy, y nadi e mas creo a y mención de la perra de Katerine,Yemma(pony).
Resumen: Misha es un profesor de equitación en el pueblo de Mystic Falls, y alli nadie sabe guardar secretos.
Descargos de racionabilidades: los personajes no me pertenecen ni las personas descritas en el tampoco solo se deben a sus autores originales y a las personas con libre albedrío.
Wrninga: nada del otro mundo solo amor y recelo y mucho poni suelto.
NOTA:los arts son por la pura amabilidad de Evian que me vio compungida cuando no encontraba un modo de relacionar a estos dos personajes jejeje.
Capitulo 1.
Un destino extraño....
Nueva ciudad, nuevos dramas escolares, y un pony en el jardín...
Misha Collins es un profesor de equitación y llega a Mystic Falls una pequeña ciudad de Virginia, con toda la intención de cambiar su vida o encontrar una; el profesor se ha mudado de su antigua ciudad porque esta cansado de la vida que llevaba... nada interesante, ni prospectos de crecimiento laboral, ni amoroso, sus amigos son escasos... o sea dos. Jared y Jensen que viven felices y comiendo perdices en Nebraska, el no les envidia en absolutamente nada su permanente estado de felicidad, noooo!!! Para nada, solo verles tan enamorados le da náuseas... y no es que sea un malhumorado o esnob, nada que ver. Solo que no soporta cierta clase de gente, a los estirados, los que mienten, los que dicen mentiras a medias y los que se mienten a si mismo y los que con tal de no asumir responsabilidades huyen de las cosas o las ignoran. Pero el no es nada antisocial… no para nada.
Últimamente junto al profesor de gimnasia Jared Tristan Padalecki y su pareja estable súper feliz Jensen Ross Ackles otro profesor del instituto en el que trabajaba y el cual se ocupaba de las clases de trigonometría, el club de ajedrez y de matemáticas... sentía que el no pintaba mucho en ese lugar... aunque hacer de cupido para esos dos había sido divertido. Pero él realmente no era feliz allí y lo admite.
En su nueva escuela, todo parecía ir acomodándose normalmente, la escuela es normal, el alumnado es normal, los otros profesores son normales... aunque ese tipo que imparte Historia tiene una pinta de alcohólico que te volteaba de solo mirarle; Alaric Saltzman, pero que éste no tenga trato con el resto del profesorado del instituto, era el único punto a favor.
Lleva solo cuatro días en el lugar y le han impartido todos los chismes habidos y por haber del lugar... dios que esa profesora de música si que se fumo algo porque esa lengua no paraba de hablar en la hora de la comida.
El pueblito es agradable, ahora que lo recorre y se encuentra con la preciosa plaza central del pueblo llena de niños, se plantea traer a Yemma en el fin de semana. A su Pony le fascinan los niños, ha sido un cuarto día agitado y agotador, pero no podía dejar de recorrer el lugar donde vive ahora... cuando llegue a su casa seguro Jensen y Jared estarán espiándolo desde la pc; ¿¿como hizo Jensen para piratearle la pc y encenderla cuando el quiere y hacer con ella lo que quiere cuando el no esta... ?? No lo sabe, ni cree que lo llegue a saber nunca. Si no fuese porque los separan miles de kilómetros diría que Jen se mete a su casa.
Esta frío en Mystic Falls pero Misha camina distraído por las calles ya oscurecidas, planeando aceptar cualquier nuevo giro de su vida; sin notar que le observan detenidamente; su pulso es suave y su aroma muy tentador para ciertos habitantes de la pequeña ciudad, aun así el nuevo profesor de Mystic Falls ve a lo lejos en una de las calles laterales un letrero de un bar, cantina o lo que sea; son las ocho de la noche y le parece genial poder conocer mas gente fuera del ambiente del trabajo y su Pony.
No se tarda en llegar, su es paso ligero y en menos de unos minutos esta en plena puerta y al entrar, un grupete de estudiantes le asalta con preguntas de cuando llegaran los corceles de su clase a la ciudad y el responde amablemente, que en unos días pero que si están impacientes por aprender a montar. Les ofrece a Yemma, y todos se le quedan mirando… uno salta de nuevo con una nueva pregunta “¿Quien es Yemma prof. Collins??” Misha ríe a carcajadas y varios de los adolescentes del lugar se contagian de su risa; les explica que Yemma es un Pony marrón dorado, de crin rubia y larga, muy hermoso y que es de su propiedad y ahora mismo esta en su nuevo jardín, comiéndose las flores de la entrada. Todos ríen y se percatan de lo peculiar de ese profesor...
Media hora mas tarde, Misha cenaba en la barra del lugar, un enorme plato de ravioles con salsa de espinaca; iba por la mitad disfrutando del murmullo de la gente, miraba entretenido todo ese ir y venir del pueblo por el “El Grill”; cuando una chica rubia y su novio camarero le llama la atención; están peleando hace rato y a él le parece que la ha visto en el instituto estos días.
Suspira mientras continua cenando, se recuerda a si mismo no meterse en los amores de preparatoria o se meterá en líos otra vez; pero un hombre algo mas mayor que la chica, la toma del cuello y la saca de allí apenas entra al local, todo el lugar parece ajeno a lo acontecido como si fuese normal que un tipo vestido de negro, tan apuesto y con ese rostro perfilado y de malos modos se llevara a esa chica a los empujones del lugar.
Intenta no compenetrarse pero la postura de ese tipo le resulto muy interesante y si esa chica es alumna suya, tiene que saber que es lo que pasa, cual es su relación para que la trate como un hermano mayor molesto, según su parecer. Deja el dinero de su cena al lado del plato, haciendo nota mental de volver mañana, sortea a la gente tan rápido y disimuladamente tanto como puede, saliendo del lugar.
Nada, absolutamente nadie en la puerta trasera del Grill, su ceño se frunce y piensa si se equivoco de salida pero es por donde los vio salir, hace no más de cinco minutos... se rasca la mandíbula con las cortas uñas, pensativo con la mirada fija en el piso, y sale del callejón a paso lento, no lo entiende, no deberían estar a mas de 20 pasos...
La fría mirada celeste del otro lado del callejón brilla de emoción, de deseo y de hambre, el delgado hombre con saco azul oscuro, la corbata a cuadrille celeste y negro y la camisa blanca, le hacen imaginar como podría desgarrarle para beber esa preciosa sangre de su pecho; de tersa piel blanca.
Un golpe lo saca de sus pensamientos, de aquel tipo de negro y la Barby del pueblo, una niña de no más de 16 años, bajita y pelirroja, lo mira con sus enormes ojos celestes y le sonríe de manera rara, él le de vuelve la sonrisa y se quedan mirando por un momento, la situación le hace fruncir el ceño y decide irse, pero cuando la niña le retiene con fuerza absurda para esa pequeña mano, y le dirige las más extrañas palabras... piensa si esos ravioles tan sabrosos habrán estado en buen estado, porque lo que escuchan sus oídos es demasiado extraño.
- No dirás nada, si no te lo ordeno...- la voz chillona, oscura y autoritaria es como si de una vieja se tratase, lo deja catatónico en su sitio, no por obedecer, si no más que nada por el hecho de que le dejo sorprendido la desfachatez de la niña, al pensar que puede ordenarle a él algo que no quiera o piense hacer, pero los dedos de la niña... rosados, pequeños y fríos le recorrieron los botones de la camisa con clara intención de desabotonarlos.
Aparto la mano de la chica de un manotazo, estuvo a punto de retarla y mandarla a su casa con sus papis; cuando la pequeña lo agarro del cuello y lo levanto en el aire pegándolo contra la pared, sus ojos se oscurecieron, venas negras llenaron sus cuencas y un feroz gruñido salio de entre los dientes afilados de la hasta hace segundos antes, indefensa niña.
- ¡¡Quédate quieto!! - le grito - No quiero destrozarte en pedacitos...- dijo más suavemente con una sonrisa perturbadora, Misha pensó que eso no podía ser eso real!.
- ¡Si! ¡¡Claro, suéltame!! - soltó con la vos estrangulada.
- ¡Que mierda es esto!, ¿¿Llevas verbena encima?? ¿Es eso?, ¡Que te quedes quieto joder! - le arranco de cuajo y sin esfuerzo la corbata junto a la camisa ahora hecha jirones.
Vio los enormes caninos acercarse a él y de repente estaba con el culo en el piso helado y con un dolor de mi demonio en el huesito dulce, rememorando la primera vez que Yemma se asusto al montarla, tirándolo. Pero sabiendo que había algo más importante, se concentro en lo que pasaba a su alrededor, la voz de una joven algo furiosa y aguda, desvío su mirada enfocando justo delante de el y lo que vio tampoco era factible ¿¿¿o si???
La rubia que lloraba por su novio, dentro del Grill, esta frente a el con los ojos cubiertos de venas negras y sus ojos totalmente perdidos de una oscuridad empetrolada; tenia agarrada a la niña pelirroja del cuello, clavada en el poste de luz. Trago en seco, el frío le pego en el cuerpo inclemente y los jirones de su camisa colgaban sin remedio; se cruzo la chaqueta como pudo y se levanto. Dio un paso y una mano lo pego de nuevo contra la pared.
- ¡Oye!, oye, oye, mira, mejor te quedas quietito y te olvidas de todo esto. ¿Ok?, no queremos que el nuevito del pueblo se nos eche a perder tan rápido. - dijo el hombre de ojos turquesa frente a él, estaba tan cerca, que el aliento a Bourbon le llego directo a la nariz y noto como sus pupilas se dilataban de forma rara.
- ¿Eh? ¿El nuevito?…. ¿¿Y como que arruinarme?? - Misha ladeo la cabeza y fijo su mirada interrogante en esos impresionantes ojos, noto que lo que decía pasaba por debajo de un puente; el hombre de negro bufo molesto y empezó a buscar algo entre sus ropas, rozándolo y hurgándolo por doquier.
- ¡Damon! ¡¿Q-que haces?! - le chilla la chica intentando no ponerse roja de lo que ven sus ojitos inexpertos, sin que se le escape la intrusa.
- Tu encárgate de mantener a nuestra, no invitada bien agarrada, que este tío tiene verbena por algún lado, no puedo hipnotizarle - dijo buscando con mas ahínco apretándolo contra la pared, porque el profesor nuevo del pueblo no se estaba quieto.
- ¡Eh! espera que... jajaja...¡¡¡QUE haces, deja!! jaja ¡¡¡pero que me haces cosquillas!! jajajaja - Misha se retorció un poco mas, mientras este le revisaba el cuello por si tenia algún colgante, pulsera, algo que tenga la hierba que no le deja borrarle la memoria; tanto en los bolsillos como en cualquier cosa que lleve o la escasa ropa que le quedo encima.
- ¡¡Damon!!- la rubia le levanto la voz, cuando las risas se tornaron en jadeos y ambos hombre se miraban a los ojos sin saber bien por que.
- ¡¡Queee!! - se giro a verla exasperado por esa vocecita que tenia la rubia; aun sosteniéndole firmemente para que no se echara a correr, pero Misha solo miro curioso mientras se sujetaba de la muñeca de aquel hombre, del cual no se podía zafar a pesar de usar las dos manos; pero la manera en como se trataban esos dos era como si compartieran sangre, aunque no se parecían en nada.
- ¡Que tengas cuidado, joder! que en mi profe de equitación y quiero aprender a montar antes del verano -le dijo pero el vampiro solo rodó los ojos y sus ansias de matarla por pesada e insoportable crecían.
- ¡¡Me estas jodiendo!! Y para qué mierda quieres aprender eso...- le dijo agrandando los ojos dejando que la luz entre en ellos y se vean más fríos.
- Y a ti que te importa... - dijo montando un puchero y un hombrito de que me importa lo que pienses.
- Demonios eres la Barby mas tonta del pueblo - vocifero a la chica que acababa con su paciencia...
- ¡No! ¡No lo soy!- se defendió pero al mismo tiempo; planteándoselo y sujetando con mas vigor a la niña calabaza del cuello, estrangulándola si estuviera viva.
- ¡Mira tu! vete a tu casa y no se te ocurra decir nada de esto o te mato, así de simple, ¿esta claro?; ya arreglare cuentas contigo después...- dijo al oído, eso ultimo, casi susurrado … cuando todo su miedo se fue a los tobillos, al sentir su respiración sobre su lóbulo y cuello; el vampiro se alejo un palmo y le miro, el profesor Collins que le miraba sin entender nada de nada de esos tres sujetos, la situación o que mierda tienen en los ojos y aun así las piernas empezaban a temblequearle, como su mente a sacar hipótesis.
- Profesor usted váyase, ande...- dijo como mamá gallina, intentando proteger un polluelo la rubia.
- No te metas ¡¡joder!! - grito, frustrado y cansado de lidiar con la chica, mirándolo de cerca dijo -¡CORRE!- le grito en el rostro, con los ojos trasformados, lleno de venas negras y un profundo rojo mezclado con el turquesa que se teñía de negro abrumadoramente feroz.
Todo su cuerpo sintió el peligro, su piel se erizo y se desespero por salir de allí, Misha corrió todo lo que pudo, tan rápido como el cuerpo le respondió. Las ocho cuadras que lo separaban de su casa, no paro, ni miro atrás, todo eso era inverosímil sin sentido, imposible; esa era la palabra más exacta. No abrió la puertita blanca del cercado de su jardín, directamente la saltó para abrirse paso desesperadamente, agarro a Yemma del estribo y la empujo dentro de la casa, no podía dejarla fuera con eso seres “no” existentes, completamente palpables, acechando fuera de la casa...
Y si había aprendido algo de los vampiros, porque eso era lo que eran ¿no?, algo distinto a los de su serie de Ángel y de Buffy pero en fin, ellos no podrían entrar sin ser invitados y solo de día estaría seguro de que no les vería cerca...
Que equivocado estaba.
continuara....