[merlin] morgana/gwen | de leyendas [...] | {E.A.I.F.}

Jul 21, 2009 15:59

Fandom: Merlin
Título: De leyendas y cuentas matemáticas
Palabras: 709
Advertencias: PG13 | femslash |
Personajes: Gwen/Morgana
Resumen: future!fic. Cuantan las leyendas: hechos reales trastabillados por el tiempo, retorcidos y acaramelados para ocultar la verdad de los sucesos. Deformaciones que queman la historia a su paso. [gwen/arthur y morgana/mordred de fondo]
Notas: Para maromeh, aquí.



Gwen. Diminutivo de Guinevere. Reina de Camelot. Una vez, simple criada. Esposa de Arthur Pendragon. Amiga y confidente de Merlín, supremo mago de la corte. Amiga leal de Sir Lancelot, caballero de primera orden de la mesa redonda. Amante de Morgana Le Fay, traidora de Camelot.

Es una simple cuenta matemática. Cuando a uno se le suma uno da dos, cuando a dos se le suman dos más, da cuatro y cuando un quinto elemento se suma a la operación, el castillo de naipes que sostiene todo se desmorona. Es una simple hipótesis y teoría, que concluye, bajo todas las miradas, en que traición lleva a traición.

La leyenda, es leyenda y no es más que mística superstición, hechos reales trastabillados por el tiempo, retorcidos y acaramelados para ocultar la verdad de los sucesos. Deformaciones que queman la historia a su paso, como una vez lo hicieron ellas.

Gwen. Diminutivo de Guinevere. Clave de la caída del mejor reino en nunca haber pisado Albion. Llave de entrada a la traidora de sangre, a la magia maldita, a los besos prohibidos en las propias sábanas del Rey Arthur.

Gwen, quien abre las puertas a Morgana cuando se presenta envuelta en trapos y con una sonrisa opaca. Gwen, quien intercede ante el rey, ante su mejor amigo, cuando quieren echarla fuera. Gwen, quien se niega aunque Merlín le jure que no es la misma, que está contaminada y que él lo lamenta tanto como ella. Gwen, quien le abre las puertas a Camelot, a su habitación y a ella.

Gwen, inocente niña una vez, dulce y esperanzada le abre sus brazos al caos, a la tempestad que se refleja en los ojos de la maga, aquella que a Merlín le recuerda otros ojos más fríos y perversos pero igual de buenos en algún momento. Gwen, quien le cuenta todo lo que ha pasado hasta ahora en el reino a la bruja, la que le alimenta de historias, de información casi sin darse cuenta. Son el rey y su mago incapaces de romper su corazón aunque de alguna forma lo intenten.

Gwen, diminutivo de Guinevere, se sienta junto a quien fue una vez su dama y le presta sus ropas, porque Lady Morgana nunca mereció los trapos que hoy lleva. Es Gwen, y no la reina, quien se acuesta con ella en la noche, toma su mano y duerme con el miedo en la garganta. El miedo de que Morgana, su Morgana, vuelva a desaparecer como lo hizo hace ya demasiados años para contarlos.

Es Guinevere, la reina, la que le presenta a Camelot, la que ilusamente le cuenta de sus barreras y sus debilidades. Es Guinevere, la reina, la que falla en su deber, la que ciega de amor por su dama, por su memoria, se olvida del pueblo al que quiere y protege con su alma. Alma que se ha robado el diablo. Diablo que lleva el nombre de Morgana.

Sin darse cuenta, se deja llevar por los besos y las caricias, por los recuerdos falsamente representados, incapaz de ver maldad bajo los ojos de quien inspiró su bondad y su coraje.

Pero las cuentas son claras, son únicas, y sus resultados son simplemente esperados. No por Gwen, la vieja criada. No por Guinevere, la reina de Camelot. Pero si por aquellos cuyos ojos abiertos no se han cerrado, ni cuyo temple ha sido alimentado por el amor innatural ante aquel ser de magia y belleza, de largos cabellos, de ojos fríos y de alma perdida hace demasiado tiempo como para llevar cuenta. Por que uno más uno es dos, pero tres menos uno en Camelot, no significa más que nada.

Cuenta la leyenda, que Guinevere, una vez conocida simplemente como Gwen, engañó a su rey y trajo la perdición sobre su reino. Cuenta la leyenda lo que el hombre quiso contar, pero nadie cuenta de la noche donde Guinevere, reina absoluta de Camelot, cayó bajo las propias manos de su amante, bajo la magia de una bruja poderosa. Una mujer que lloró su muerte mientras acompañaba a un hombre, una vez niño indefenso y perseguido, a conquistar su victoria.

Gwen, diminutivo de Guinevere, no es ahora más que un nombre que el tiempo ha ocultado en las sombras.

character: morgana le fay, !español, !presents, warn: femslash, length: ficlet, character: guinevere (gwen), tv: merlin

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