Feliz año nuevo... ;)
Y para despedir el año como se merece, ¿qué mejor manera que "fangirleando" un poquillo? *cof cof* ♥ ;)
Para todos los fans Cal/Gillian, y muy especialmente para barbara_novak que lo hemos hecho pensando en ella... LOL! XD
¡Feliz Año Nuevo!
Autores: abaut_time & yokana_yanovick
Fandom: Lie To Me
Pairing: Cal/Gillian
Spoilers: Con suerte espero que sean futuros spoilers XD
Rating: PWBP (Plot?? What Bloody Plot???)
Palabras: 1.072
Medianoche
Lentamente se acercó a ella con todo el miedo que había estado acumulando en estos últimos años, con todo el amor y la pasión que le habían inhundado por dentro desde hacia tanto tiempo, demasiado. Sus manos la tocaron con ansia, prisa, desesperación y toda la emoción que en ese momento colmaba todo su ser. La respuesta de la mujer que tenia entre los brazos le hizo darse cuenta de que no era el único agradecido por lo que estaba pasando justo ahí, en su oficina, una noche de Diciembre que se había presentado como un día normal y que se estaba convirtiendo a marchas forzadas en un fecha difícil de olvidar.
Sus manos recorrieron su espalda tan lentamente que pensó que el tiempo se había detenido sin darse a penas cuenta, sus labios se fundían cada vez un poco más con los de una Gillian Foster dispuesta, y su erección amenaza con tomar las riendas desde la entrepierna de su pantalón. Acortó distancias, si que se podía considerar que quedaba alguna por cubrir, se coló entre sus piernas solo para sentirla jadear en su oído mientras recorría su cuello con su boca tan despacio como su excitación le permitía, su cabeza bajo lentamente hasta su pecho solamente para desabrocharle los botones de la camisa con la boca, las manos de Gillian se enredaron en su pelo, y el tacto de sus uñas en su cuero cabelludo mientras jugueteaba con su recién estrenado trozo de piel descubierta por poco lo hace morirse de placer, los sonidos que procedían de su boca de su compañera aumentaban su deseo hasta tal punto que no tuvo más que erguirse de nuevo frente a ella para besarla hasta robarle el aliento por completo.
Gillian aprovecho la pérdida de contacto para buscar la hebilla de su cinturón, poco a poco fue sacando la correa mientras las manos de Cal jugaban en sus caderas, cerró los ojos y se maldijo a si mismo por no poder contenerse, la espera le estaba matando, el sonido de la correa impactando en el suelo le hizo abrir los ojos y darse cuenta de que la Dr. Foster había decidido prescindir del cara a cara para prestarle atención a otras partes.
Toco la tela abultada de su pantalón muy suavemente, y desabrocho el botón casi sin tocarlo, sus dedos recorrieron su estomago muy lentamente hasta pararse justo a la altura de sus bóxers, acarició el borde de la goma de una forma que podría haberlo matado, y cuando por fin creía que el fin de sus días había llegado un gemido salió de su garganta para demostrarle que Gillian Foster nunca dejaría de sorprenderle.
Toco su barbilla lentamente para que lo mirara, pudo ver reflejado en sus ojos todo el deseo que le consumía cada célula de su cuerpo, con la toda entereza que le quedaba la levanto solamente para besarla mientras la empotraba de nuevo contra la pared, las ganas de hundirse en ella terminarían por volverlo loco, si es que no lo estaba ya. -¿Estás lista, amor? - le susurró al odio mientras sus manos levantaban su falda con todo la urgencia creada momentos atrás. - Ohh, Dios sí...
El sonido de su voz tan cerca de él, tan exitada, tan caliente, tan desesperada por un contacto más profundo le hicieron perder el poco juicio que pudiera haber tenido y entonces la miró a los ojos mientras se hundía en ella por primera vez.
Podía notar el pulso acelerado de su cuello en sus propios labios cuando la besó bajo el lóbulo de la oreja. Un gemido sensual le indicó que era el camino correcto y continuó arrastrando besos húmedeos por su clavícula. Sus manos acariciaron la tela suave de su sujetador hasta encontrar el punto más sensible que acarició con la yema de sus pulgares.
Descubrió uno de sus pechos con delicadeza y acaparó el pezón con su boca, lamiendo, chupando lascivamente, arrancándole gruñidos desde el fondo de la garganta. Su pelo era un amasijo de remolinos, Gillian había enterrado las manos en él, masajeándolo, presionándole contra sus senos, apretándose contra su cuerpo y su boca.
Sus caderas se balanceaban resbalando dentro y fuera de ella a una velocidad que le estaba haciendo perder la razón, cada acometida salía casi completamente para volver a penetrarla profundamente, hasta el final, quedándose unos segundos en ella, presionando, empujando todavía más una vez había llegado a tocar todas y cada una de sus paredes más íntimas, todo para retroceder y comenzar de nuevo.
Bajó su mano hasta tocar su clítoris y comenzó a masajearlo con cuidado, en círculos, acariciando, presionando mientras la continuaba penetrando cada vez un poco más rápido, más dentro. Los jadeos de Gill comenzaron a ser más intensos, le calentaron el oído, le excitaban hasta límites que no era consciente de que tuviera y la tarea se hacía más dificultosa a medida que las acometidas se hacían mas intensas. Estaba tan sumamente duro, tan excitado, que sentía un placer casi doloroso.
Las caderas de Gill se desbocaban contra su entrepierna, se frotaba contra él con lascivia, con locura, entre jadeos, suspiros, gruñidos de placer, que, para el suyo propio, sabía que no era capaz de controlar, y aun le causaba una satisfacción mayor saber que era él quien los provocaba, quien estaba dentro de ella haciéndole perder la compostura, la razón, la cordura, esa serenidad perenne que la caracterizaba …
Los gritos vibraban ya en alta voz cuando agarró sus muñecas y las puso a ambos lados de su cabeza, empotrándola con fuerza contra la pared en cada embestida, rozándose contra sus pechos, acariciándo sus pezones con su propio pecho cada vez que llegaba una y otra vez a lo más profundo de su cuerpo.
El orgasmo llegó casi como una bendición, como un mareo, como una explosión. Le hizo temblar por dentro y por fuera tanto que pensó que se desmayaría allí mismo de placer, las convulsiones y el grito contenido de Gill traspasaron sus paredes para colarse dentro de él, derretirse dentro de ella, correrse de una manera abrumadora y al mismo tiempo dulce y suave, un orgasmo que, sin lugar a dudas, llevaba la firma de su compañera.
Las respiraciones aun eran entrecortadas cuando Gillian habló -y he aquí la mejor manera de comenzar una nueva década... -Cal rió. -Feliz año nuevo, amor -y la besó apasionadamente al son de las últimas campanadas del 2010.
( Tabla de fanfics)
Para todos los fans Cal/Gillian, y muy especialmente para barbara_novak que lo hemos hecho pensando en ella... LOL! XD
¡Feliz Año Nuevo!
Autores: abaut_time & yokana_yanovick
Fandom: Lie To Me
Pairing: Cal/Gillian
Spoilers: Con suerte espero que sean futuros spoilers XD
Rating: PWBP (Plot?? What Bloody Plot???)
Palabras: 1.072
Medianoche
Lentamente se acercó a ella con todo el miedo que había estado acumulando en estos últimos años, con todo el amor y la pasión que le habían inhundado por dentro desde hacia tanto tiempo, demasiado. Sus manos la tocaron con ansia, prisa, desesperación y toda la emoción que en ese momento colmaba todo su ser. La respuesta de la mujer que tenia entre los brazos le hizo darse cuenta de que no era el único agradecido por lo que estaba pasando justo ahí, en su oficina, una noche de Diciembre que se había presentado como un día normal y que se estaba convirtiendo a marchas forzadas en un fecha difícil de olvidar.
Sus manos recorrieron su espalda tan lentamente que pensó que el tiempo se había detenido sin darse a penas cuenta, sus labios se fundían cada vez un poco más con los de una Gillian Foster dispuesta, y su erección amenaza con tomar las riendas desde la entrepierna de su pantalón. Acortó distancias, si que se podía considerar que quedaba alguna por cubrir, se coló entre sus piernas solo para sentirla jadear en su oído mientras recorría su cuello con su boca tan despacio como su excitación le permitía, su cabeza bajo lentamente hasta su pecho solamente para desabrocharle los botones de la camisa con la boca, las manos de Gillian se enredaron en su pelo, y el tacto de sus uñas en su cuero cabelludo mientras jugueteaba con su recién estrenado trozo de piel descubierta por poco lo hace morirse de placer, los sonidos que procedían de su boca de su compañera aumentaban su deseo hasta tal punto que no tuvo más que erguirse de nuevo frente a ella para besarla hasta robarle el aliento por completo.
Gillian aprovecho la pérdida de contacto para buscar la hebilla de su cinturón, poco a poco fue sacando la correa mientras las manos de Cal jugaban en sus caderas, cerró los ojos y se maldijo a si mismo por no poder contenerse, la espera le estaba matando, el sonido de la correa impactando en el suelo le hizo abrir los ojos y darse cuenta de que la Dr. Foster había decidido prescindir del cara a cara para prestarle atención a otras partes.
Toco la tela abultada de su pantalón muy suavemente, y desabrocho el botón casi sin tocarlo, sus dedos recorrieron su estomago muy lentamente hasta pararse justo a la altura de sus bóxers, acarició el borde de la goma de una forma que podría haberlo matado, y cuando por fin creía que el fin de sus días había llegado un gemido salió de su garganta para demostrarle que Gillian Foster nunca dejaría de sorprenderle.
Toco su barbilla lentamente para que lo mirara, pudo ver reflejado en sus ojos todo el deseo que le consumía cada célula de su cuerpo, con la toda entereza que le quedaba la levanto solamente para besarla mientras la empotraba de nuevo contra la pared, las ganas de hundirse en ella terminarían por volverlo loco, si es que no lo estaba ya. -¿Estás lista, amor? - le susurró al odio mientras sus manos levantaban su falda con todo la urgencia creada momentos atrás. - Ohh, Dios sí...
El sonido de su voz tan cerca de él, tan exitada, tan caliente, tan desesperada por un contacto más profundo le hicieron perder el poco juicio que pudiera haber tenido y entonces la miró a los ojos mientras se hundía en ella por primera vez.
Podía notar el pulso acelerado de su cuello en sus propios labios cuando la besó bajo el lóbulo de la oreja. Un gemido sensual le indicó que era el camino correcto y continuó arrastrando besos húmedeos por su clavícula. Sus manos acariciaron la tela suave de su sujetador hasta encontrar el punto más sensible que acarició con la yema de sus pulgares.
Descubrió uno de sus pechos con delicadeza y acaparó el pezón con su boca, lamiendo, chupando lascivamente, arrancándole gruñidos desde el fondo de la garganta. Su pelo era un amasijo de remolinos, Gillian había enterrado las manos en él, masajeándolo, presionándole contra sus senos, apretándose contra su cuerpo y su boca.
Sus caderas se balanceaban resbalando dentro y fuera de ella a una velocidad que le estaba haciendo perder la razón, cada acometida salía casi completamente para volver a penetrarla profundamente, hasta el final, quedándose unos segundos en ella, presionando, empujando todavía más una vez había llegado a tocar todas y cada una de sus paredes más íntimas, todo para retroceder y comenzar de nuevo.
Bajó su mano hasta tocar su clítoris y comenzó a masajearlo con cuidado, en círculos, acariciando, presionando mientras la continuaba penetrando cada vez un poco más rápido, más dentro. Los jadeos de Gill comenzaron a ser más intensos, le calentaron el oído, le excitaban hasta límites que no era consciente de que tuviera y la tarea se hacía más dificultosa a medida que las acometidas se hacían mas intensas. Estaba tan sumamente duro, tan excitado, que sentía un placer casi doloroso.
Las caderas de Gill se desbocaban contra su entrepierna, se frotaba contra él con lascivia, con locura, entre jadeos, suspiros, gruñidos de placer, que, para el suyo propio, sabía que no era capaz de controlar, y aun le causaba una satisfacción mayor saber que era él quien los provocaba, quien estaba dentro de ella haciéndole perder la compostura, la razón, la cordura, esa serenidad perenne que la caracterizaba …
Los gritos vibraban ya en alta voz cuando agarró sus muñecas y las puso a ambos lados de su cabeza, empotrándola con fuerza contra la pared en cada embestida, rozándose contra sus pechos, acariciándo sus pezones con su propio pecho cada vez que llegaba una y otra vez a lo más profundo de su cuerpo.
El orgasmo llegó casi como una bendición, como un mareo, como una explosión. Le hizo temblar por dentro y por fuera tanto que pensó que se desmayaría allí mismo de placer, las convulsiones y el grito contenido de Gill traspasaron sus paredes para colarse dentro de él, derretirse dentro de ella, correrse de una manera abrumadora y al mismo tiempo dulce y suave, un orgasmo que, sin lugar a dudas, llevaba la firma de su compañera.
Las respiraciones aun eran entrecortadas cuando Gillian habló -y he aquí la mejor manera de comenzar una nueva década... -Cal rió. -Feliz año nuevo, amor -y la besó apasionadamente al son de las últimas campanadas del 2010.
( Tabla de fanfics)