Séptimo período. 3er Reto. (1er Respuesta)
Titulo: Admiración.
Advertencias: indirectas de shonen-ai.
Beta: Loreto.
Palabras: 474.
Notas de Uko-chan: Respuesta al tercer reto del séptimo período expuesto por LMF. Basado en los juegos Olímpicos. Aquí se le puede encontrar: http://community.livejournal.com/lmf_torneo/38865.html#cutid1
Sumary: Él lo admira desde pequeño, aunque no se cree merecedor de su atención.
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Admiración.
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-Anda, vamos, vamos -incitó a su amigo a que corrieran hacia las instalaciones deportivas. Renuente, el moreno se dejó guiar hasta el lugar donde descansaban los competidores.
Ambos amigos corrieron agarrados de la mano, esquivando a los comerciantes, jugadores y espectadores que se reunían en la ciudad de Olimpia para poder ser un integrante más de los famosos juegos que se llevaban a cabo en el lugar.
-¿Y qué es exactamente lo que vamos a hacer? -murmuró agitadamente, mientras recobraba la respiración.
-Vamos a ver a mi participante favorito -el rubio bonito de ojos claros hizo muecas a su amigo y luego suspiró, mientras arrastraba al chico hacia la caballerizas. Una vez que estuvieron allí, el moreno pudo ver a un hombre parado junto a dos grandes y musculosos caballos negros que crispaban su cola y crin de vez en cuando-. ¿Puedes verlo?
-Sí -asintió-, ¿qué es lo que hace?
Su amigo sonrió y miró enamorado al hombre que acariciaba el hocico de los animales.
-Eso es lo que él hace siempre. Los acaricia, les habla, los alimenta con la mejor hierba que trae de su tierra y pide ayuda para darles masajes. Es como un ritual, con el que busca concentrarse y al mismo tiempo ser uno con sus principales ayudantes.
-¿Qué hace exactamente?
Puso los ojos en blanco.
-¿No es evidente?- susurró, para no incomodar al hombre que murmuraba en voz baja a los caballos-. Compite en la carrera de carros con esos dos magníficos animales.
-Bueno, yo no soy el fanático en este caso -dijo un tanto ofendido.- A ti es quien te gusta perder el tiempo en estas tonterías.
-Eres un amargo -le sacó la lengua-. Si te decidieras a participar, estoy seguro que ganarías en la competencia de poesía, eres un erudito para escribir el arte de los sentimientos. Tanto como él…- suspiró, de nuevo llevando sus ojos al hombre frente a ellos.
-No, gracias, no pierdo mi tiempo en tonterías, ya te lo dije -sacudió la cabeza-. Y deja de mirarlo así. Es molesto verte con esa cara de idiota.
Se ruborizó ligeramente.
-No me quites esto -hizo una mueca-. Es lo único que puedo hacer, verlo desde lejos. Personas tan apuestas y populares como él no ven a chicos pobres y tan poco agraciados como yo -sonrió tristemente-. He estado mirando los otros caballos y los suyos son los mejores. Seguro ganará, tal cual lo hizo en las dos competiciones anteriores.
El moreno miró largamente a su amigo, sintiendo pena por él. Muchas veces le había dicho que no era un poco cosa, como decía, pero nadie le sacaba eso de la mente, al parecer.
-¿Vas a ir a verlo a la competencia?
-Sip, seguro, no me lo perdería por nada.
-Entonces iré contigo.
Los ojos claros lo miraron con sorpresa y después se iluminaron.
-Muchas gracias.
¡¡¡Fin!!!