Bienvenido
Fandom: Twilight
Titulo: Bienvenido
Claim: Jacob/Leah
Comunidad: musasenelclaro
Advertencias: spoilers BD
Nessie había insistido demasiado en que quería hacer el viaje a Canadá para su cumpleaños. Finalmente, sus padres habían cedido, y entonces, la chica había dicho que el viaje no estaría completo si Jacob no iba con ellos.
Él tampoco estaba muy dispuesto a dejarla ir. Sin embargo, tenía sus responsabilidades en casa. Una manada con cuatro lobos más que él, para ser exactos.
-Agh, es tu imprimada. Ya hemos aguantado muchas cosas por ella, creo que podré aguantar hacerme cargo de estos vagos un tiempo - había dicho Leah con los ojos brillantes de expectación ante la idea de mandar sobre los otros de la manada mientras Jacob no estuviera.
Al menos Jacob no había querido darle otra interpretación a ese brillo.
El viaje había resultado bien, aunque se había extendido un poco más de dos meses. Nessie lo había disfrutado mucho, aunque en ocasiones notaba a Jacob distraído. Generalmente le decía que estaba bien cuando le preguntaba si algo le molestaba, pero ella lo conocía. Sabía que a ratos pensaba en su manada, y extrañaba a los suyos, aunque nunca se lo dijera.
Eso no le molestaba, sin embargo, a veces Nessie tenía la sensación de que recordaba a un miembro de su manada más que al resto. En especial cuando sonreía burlón ante algo y no compartía lo que le hacía tanta gracia. Nessie podía imaginarlo, casi como si estuviera en su mente, la manera en que se inclinaría sobre el oído de Leah para susurrarle algún comentario sarcástico y burlón, y como ella se reiría y sabría qué contestarle.
A veces a Nessie le gustaría poder hablar con Jacob como ella lo hace.
-.-.-.-.-.-
En La Push, la manada no tenía problemas en reconocer que le echaban en falta. Para Quil y Embry, estar bajo el mando de Leah era algo casi intolerable. La chica se había divertido bastante con su cuota de poder. Era la única que no se quejaba de la situación.
-Si por ella fuera, se quedaría a cargo para siempre - había refunfuñado Quil un día.
Seth lo había escuchado y había negado.
-Leah también extraña a Jacob, sólo que no lo dice como nosotros.
-Claro, a ella nadie la tiraniza - apuntó Embry.
Seth rodó los ojos. No iba él a revelarles a sus amigos los sentimientos que con tanto cuidado Leah había logrado reservar para sí.
-Lo que tenemos que hacer es ocuparnos en algo. Tengo una idea.
Seth sonrió al notar que tenía la atención de sus compañeros.
-.-.-.-.-.-
-No sé cómo te dejé convencerme de hacer esto.
Seth había perdido la cuenta de cuántas veces había dicho eso su hermana en las últimas semanas. Sin embargo, ahí estaba, corriendo de un lado a otro, acomodándolo todo para que estuviera perfecto. La otra manada ya estaba allí, la comida estaba en su punto, y el clima parecía que sería favorable.
Una fiesta de bienvenida había sido el canal perfecto ideado por Seth para dirigir las fuerzas de la manada, y en especial, de su hermana. Habían decidido hacer la actividad al aire libre, en las afueras de La Push.
Seth se había puesto de acuerdo con Edward de manera que se las ingeniara para llevar a Jacob allí sin que sospechara nada. Cuando escucharon acercarse el auto, se reunieron para recibirlo.
Jacob había sospechado que algo andaba mal, pero no había pensado que se trataría de eso. Al bajar del carro parecía sorprendido y algo abochornado. Edward y Nessie lo acompañaban, pero se quedaron atrás mientras sus amigos lo recibían.
Sin embargo, Jacob notó que faltaba alguien allí.
-¿Dónde está Leah? - le preguntó a Seth después de que pudo soltarse de Quil y Embry, quienes parecían dispuestos, a pesar del ambiente festivo, a empezar a quejarse sobre el trato recibido por la beta.
El chico miró a su alrededor buscando.
-¡Estaba acá hace un momento! Trabajó un montón organizando esto, pero ya sabes como es, no quería estar en la “emotiva y lacrimógena” bienvenida.
Jacob sonrió, era una expresión propia de ella. Cerró los ojos y se concentró en las esencias presentes. Finalmente, la localizó. Abrió los ojos y miró en la dirección correcta. Allí estaba, distanciada del grupo, recostada al tronco de un árbol, indiferente en apariencia a la emoción colectiva.
Se dirigió hacia Nessie un momento y le dijo que ya volvía. Luego, se dirigió hacia allí.
Vio cómo la quileute esbozaba una sonrisa de medio lado al verlo acercarse.
-Te estás perdiendo la fiesta - dijo él cuando estuvo prácticamente junto a ella.
-Dicen que está buena - comentó ella cambiando su peso de un pie a otro.
-Me dijeron que tuvo una gran organizadora.
-Eso he oído.
Jacob sonrió y se acercó un poco más. Ella lo miró a los ojos.
-Bienvenido.
-Gracias.
Empezaron a oír música, acompañada por risas y el lejano murmullo de la conversación de las personas reunidas en el claro. Jacob se giró y vio que habían empezado a bailar.
-No esperaba esto - declaró con sinceridad.
-Fue idea de Seth - aclaró Leah de inmediato - Creo que quería que me concentrara en algo más que en Quil y Embry.
-Vi que tienen algunas quejas - dijo él en tono acusatorio. Ella realizó un fingido gesto de desdén.
-Son unos lobeznos llorones.
Jacob rió.
-Tengo mucho que contarte del viaje.
-Y yo de lo que pasó en tu ausencia.
Se miraron un momento, como si dudaran sobre quien debía hablar primero. Finalmente, Jacob tomó la iniciativa.
-Creo que podemos dejarlo para luego. Sabes, hay una fiesta aquí cerca, y creo que debería estar allí.
-Eso creo. - dijo Leah - Sino tu novia tendrá que bailar con su padre, eso es triste. Incluso para una vampiro-humana-mutante.
Jacob se giró y vio que efectivamente, Nessie y Edward estaban juntos todavía, cerca del automóvil. Sonrió, como siempre hacía cuando la veía. Leah desvió la mirada, como siempre que lo veía verla.
Sin embargo, Jacob se giró y le tendió una mano.
-Ellos disfrutan el tiempo padre-hija. Bailaré con ella al rato. A ti no te veo desde hace meses. ¿Bailas?
-¡En tus sueños! - dijo ella rechazando la mano, pero él logró agarrarla y la arrastró a la pista.
-¡Es tu deber de beta!
-¿Hacer el ridículo con el alfa? Prefiero reírme del ridículo de otros, gracias.
Entre discusiones y algunas risas terminaron bailando en la improvisada pista de baile. Leah hacía comentarios sarcásticos que hacían a su compañero reír más, y él le daba complicadas vueltas que salvaban aceptablemente bien.
Seth sonrió al ver el buen resultado de su idea.
-.-.-.-.-.-
Alguien más observaba a Jacob y Leah bailar con atención. De hecho, los había observado todo el rato, desde que habían llegado.
-No tiene sentido que estés celosa, hija - dijo Edward con dulzura a su lado, cuando Nessie se estremeció ligeramente - Eres el mundo para Jacob.
Nessie sonrió con cierto deje de tristeza que no era característico suyo.
-Puede que sea el mundo para él, papá… Pero no soy Leah Clearwater.
Edward no supo qué replicar.
Titulo: Bienvenido
Claim: Jacob/Leah
Comunidad: musasenelclaro
Advertencias: spoilers BD
Nessie había insistido demasiado en que quería hacer el viaje a Canadá para su cumpleaños. Finalmente, sus padres habían cedido, y entonces, la chica había dicho que el viaje no estaría completo si Jacob no iba con ellos.
Él tampoco estaba muy dispuesto a dejarla ir. Sin embargo, tenía sus responsabilidades en casa. Una manada con cuatro lobos más que él, para ser exactos.
-Agh, es tu imprimada. Ya hemos aguantado muchas cosas por ella, creo que podré aguantar hacerme cargo de estos vagos un tiempo - había dicho Leah con los ojos brillantes de expectación ante la idea de mandar sobre los otros de la manada mientras Jacob no estuviera.
Al menos Jacob no había querido darle otra interpretación a ese brillo.
El viaje había resultado bien, aunque se había extendido un poco más de dos meses. Nessie lo había disfrutado mucho, aunque en ocasiones notaba a Jacob distraído. Generalmente le decía que estaba bien cuando le preguntaba si algo le molestaba, pero ella lo conocía. Sabía que a ratos pensaba en su manada, y extrañaba a los suyos, aunque nunca se lo dijera.
Eso no le molestaba, sin embargo, a veces Nessie tenía la sensación de que recordaba a un miembro de su manada más que al resto. En especial cuando sonreía burlón ante algo y no compartía lo que le hacía tanta gracia. Nessie podía imaginarlo, casi como si estuviera en su mente, la manera en que se inclinaría sobre el oído de Leah para susurrarle algún comentario sarcástico y burlón, y como ella se reiría y sabría qué contestarle.
A veces a Nessie le gustaría poder hablar con Jacob como ella lo hace.
-.-.-.-.-.-
En La Push, la manada no tenía problemas en reconocer que le echaban en falta. Para Quil y Embry, estar bajo el mando de Leah era algo casi intolerable. La chica se había divertido bastante con su cuota de poder. Era la única que no se quejaba de la situación.
-Si por ella fuera, se quedaría a cargo para siempre - había refunfuñado Quil un día.
Seth lo había escuchado y había negado.
-Leah también extraña a Jacob, sólo que no lo dice como nosotros.
-Claro, a ella nadie la tiraniza - apuntó Embry.
Seth rodó los ojos. No iba él a revelarles a sus amigos los sentimientos que con tanto cuidado Leah había logrado reservar para sí.
-Lo que tenemos que hacer es ocuparnos en algo. Tengo una idea.
Seth sonrió al notar que tenía la atención de sus compañeros.
-.-.-.-.-.-
-No sé cómo te dejé convencerme de hacer esto.
Seth había perdido la cuenta de cuántas veces había dicho eso su hermana en las últimas semanas. Sin embargo, ahí estaba, corriendo de un lado a otro, acomodándolo todo para que estuviera perfecto. La otra manada ya estaba allí, la comida estaba en su punto, y el clima parecía que sería favorable.
Una fiesta de bienvenida había sido el canal perfecto ideado por Seth para dirigir las fuerzas de la manada, y en especial, de su hermana. Habían decidido hacer la actividad al aire libre, en las afueras de La Push.
Seth se había puesto de acuerdo con Edward de manera que se las ingeniara para llevar a Jacob allí sin que sospechara nada. Cuando escucharon acercarse el auto, se reunieron para recibirlo.
Jacob había sospechado que algo andaba mal, pero no había pensado que se trataría de eso. Al bajar del carro parecía sorprendido y algo abochornado. Edward y Nessie lo acompañaban, pero se quedaron atrás mientras sus amigos lo recibían.
Sin embargo, Jacob notó que faltaba alguien allí.
-¿Dónde está Leah? - le preguntó a Seth después de que pudo soltarse de Quil y Embry, quienes parecían dispuestos, a pesar del ambiente festivo, a empezar a quejarse sobre el trato recibido por la beta.
El chico miró a su alrededor buscando.
-¡Estaba acá hace un momento! Trabajó un montón organizando esto, pero ya sabes como es, no quería estar en la “emotiva y lacrimógena” bienvenida.
Jacob sonrió, era una expresión propia de ella. Cerró los ojos y se concentró en las esencias presentes. Finalmente, la localizó. Abrió los ojos y miró en la dirección correcta. Allí estaba, distanciada del grupo, recostada al tronco de un árbol, indiferente en apariencia a la emoción colectiva.
Se dirigió hacia Nessie un momento y le dijo que ya volvía. Luego, se dirigió hacia allí.
Vio cómo la quileute esbozaba una sonrisa de medio lado al verlo acercarse.
-Te estás perdiendo la fiesta - dijo él cuando estuvo prácticamente junto a ella.
-Dicen que está buena - comentó ella cambiando su peso de un pie a otro.
-Me dijeron que tuvo una gran organizadora.
-Eso he oído.
Jacob sonrió y se acercó un poco más. Ella lo miró a los ojos.
-Bienvenido.
-Gracias.
Empezaron a oír música, acompañada por risas y el lejano murmullo de la conversación de las personas reunidas en el claro. Jacob se giró y vio que habían empezado a bailar.
-No esperaba esto - declaró con sinceridad.
-Fue idea de Seth - aclaró Leah de inmediato - Creo que quería que me concentrara en algo más que en Quil y Embry.
-Vi que tienen algunas quejas - dijo él en tono acusatorio. Ella realizó un fingido gesto de desdén.
-Son unos lobeznos llorones.
Jacob rió.
-Tengo mucho que contarte del viaje.
-Y yo de lo que pasó en tu ausencia.
Se miraron un momento, como si dudaran sobre quien debía hablar primero. Finalmente, Jacob tomó la iniciativa.
-Creo que podemos dejarlo para luego. Sabes, hay una fiesta aquí cerca, y creo que debería estar allí.
-Eso creo. - dijo Leah - Sino tu novia tendrá que bailar con su padre, eso es triste. Incluso para una vampiro-humana-mutante.
Jacob se giró y vio que efectivamente, Nessie y Edward estaban juntos todavía, cerca del automóvil. Sonrió, como siempre hacía cuando la veía. Leah desvió la mirada, como siempre que lo veía verla.
Sin embargo, Jacob se giró y le tendió una mano.
-Ellos disfrutan el tiempo padre-hija. Bailaré con ella al rato. A ti no te veo desde hace meses. ¿Bailas?
-¡En tus sueños! - dijo ella rechazando la mano, pero él logró agarrarla y la arrastró a la pista.
-¡Es tu deber de beta!
-¿Hacer el ridículo con el alfa? Prefiero reírme del ridículo de otros, gracias.
Entre discusiones y algunas risas terminaron bailando en la improvisada pista de baile. Leah hacía comentarios sarcásticos que hacían a su compañero reír más, y él le daba complicadas vueltas que salvaban aceptablemente bien.
Seth sonrió al ver el buen resultado de su idea.
-.-.-.-.-.-
Alguien más observaba a Jacob y Leah bailar con atención. De hecho, los había observado todo el rato, desde que habían llegado.
-No tiene sentido que estés celosa, hija - dijo Edward con dulzura a su lado, cuando Nessie se estremeció ligeramente - Eres el mundo para Jacob.
Nessie sonrió con cierto deje de tristeza que no era característico suyo.
-Puede que sea el mundo para él, papá… Pero no soy Leah Clearwater.
Edward no supo qué replicar.