Título: Chris
Clasificación: Original
Géneros: Angst
Parejas: No
Resumen: Chris debe de matar a su pupilo Aaron porque se presenta como una amenaza, él lo ha tomado con cariño, le quiere como se quiere a un hijo...
Nota: Drabble de mi novela Darkness Lúa
Aviso: No hay indicio de amor estilo atracción sexual
-¿Podrías quererme alguna vez?
¿Podrías aprender a amar a algo como yo?
No lo creo...
Estaba totalmente destrozado, sus ojos se esforzaban por no llorar, y un brillo místico los bañó y los hizo todavía más hermosos si cabía; él era bello, realmente bello, era la cosa más bonita que jamás había visto, y a mi me hirieron esas palabras, esa palabras tan crueles sobre si mismo, escupidas de manera cruel por esos finos labios que me incitaban a acariciarlos; Aaron, mi lindo Aaron, ese niño tierno de espíritu obligado a ser oscuro, ese monstruo de la naturaleza al que amé y nunca jamás fui capaz de decírselo.
Extendí la mano y rocé esa cara pálida y suave, esa mirada de siete años recién cumplidos se derramó ante mi acto, y yo, le sonreí, fue una idiotez lo reconozco, pero fue lo único que se me ocurrió en ese momento.
-No digas eso - le dije- eres un niño estupendo, y pronto todos se darán cuenta; te querrá mucha gente y serás feliz- insistí- es posible que esto suceda lejos, lejos de aquí.
-¿Lejos de ti?- preguntó asustado, después de todo yo había sido la única persona que lo había tomado con cariño, a pesar de lo que verdaderamente debía haber hecho.
-Sí- le contesté tragándome las ganas de abrazarlo y llevármelo lejos de todos para que yo fuese el único que pudiese contemplar todo aquel resplandor que me cautivaba- sobre todo lejos de mi.
-Pero Chris- protestó- yo quiero estar contigo, tú, tú dijiste que eras mi amigo, no me dejes por favor, tú no.
Se abrazó con fuerza a mi, apretando su diminuto y escuálido cuerpo infantil contra mi pecho, hundiendo su cara húmeda contra mi ropa dejando que el frío de aquella noche nevada nos envolviese como una blanca y espectral manta de invierno; quise besarle, abrazarlo como él lo hacía conmigo, quise olvidarlo todo y por una vez hacernos felices , pero no podía, él no podía ser mío nunca, y yo lo sabía desde la primera vez que lo había visto cuando chocamos en la feria del pueblo y descubrió que yo sería su maestro desde la mañana siguiente.
Aaron, era mágico, deslumbrante, como un ser superior, la mirada de sus ojos, su dulce sonrisa me hipnotizaban, me dejaban embobado, por eso , aunque después de todo yo intente matarlo, se que él sobrevivirá lejos de mi, de mi locura y de mi amor por él, lejos de todos , como un ser inalcanzable, como siempre lo ha sido, como un ángel puro, como un demonio amenazante, con su belleza en lo alto, mientras todos lo contemplamos adoradores y no podremos tocarle nunca pues él se aleja siempre, lejos de todos, como debe ser.