[Fanfic] La vida que soñó.
Título: La vida que soñó.
Rating: PG
Extensión: 644 palabras
Personajes: David, Sebastian, Kurt y Blaine.
Advertencias: Ninguna.
Género: Fluff, comedia.
Resumen: “Cierra los ojos e imagina cómo podría ser la vida dentro de diez años.”
Disclaimer: Glee pertenece a RIB, este fic no tiene fin alguno de lucro.
Nota: Drabble escrito para el reto #8: Futuro de glee_esp
“Cierra los ojos e imagina cómo podría ser la vida dentro de diez años.”
Los diez años-y algunos más-habían pasado y Dave aun cerraba los ojos para imaginar aquello que había visto en su mente por primera vez en el hospital. Kurt tenía razón, el pensar en un gran trabajo, una pareja estable y un hijo visitándolo ahí, le daba ánimos para continuar.
Más de diez años habían pasado y David repetía la acción pese a que su vida era casi lo que imaginó entonces.
La oficina era más bien pequeña pero prácticamente era solo suya. Y tampoco era el agente deportivo que soñó, o siquiera sabía bien qué hacía-porque se ocupaba de tantos y tan diversos asuntos-y sin embargo, el llegar a ése lugar tras comenzar como un simple asistente era más que gratificante. Se había ganado un lugar en la empresa por sus propios méritos y eso le daba confianza para seguir ascendiendo. Tenía un gran trabajo.
Un trabajo donde para mayor sorpresa, se había encontrado con alguien. Alguien muy especial que ya lo había rechazado en el pasado, justo diez años atrás. Y que ahora solía trabajar cerca de él.
Quizá no podría llamarla relación “estable” pues la persona era algo complicada ya que…
-Han llegado, señor…
-Hágalos pasar de inmediato-interrumpió una voz a su espalda dirigiéndose al teléfono.-Ya debería saber que no me gusta que los haga esperar.
La puerta se abrió con rapidez y una niña de unos tres años corrió a los brazos del hombre que había contestado el teléfono.
-¡Paaaaapi! ¡Ya vine!-gritó la pequeña con emoción.
-¡Hola, Elise! Espero te haya ido bien en la escuela-le sonrió antes de dirigirse con seriedad al hombre que venía detrás de ella-Blaine, pensé que algo les había pasado porque ya era tarde y no venían. Estaba por hablarte al celular.
-Buenas tardes, también a ti, Sebastian. Buenas tardes, David-saludó Blaine entrando a la oficina.- Llegamos tarde porque…
-Llegamos tarde porque Elise quiso pasar por un pastel, para su papi-interrumpió con leve fastidio Kurt entrando con una mochila rosa al hombro y una caja en las manos-. Buenas tardes, David.
La sonrisa de Sebastian se hizo más grande mientras ignoraba a Kurt y volvía a enfocarse en la niña.
-Elise, ¿me trajiste un pastel? Qué linda eres con tu papi.
-Aun no sé cómo puede llamarte “papá” cuando no lo eres. Es mi hija. Mía y de Blaine.
-Lo será pero pasa mucho tiempo conmigo y es obvio que me quiere.
-Si pasa tanto tiempo aquí es porque Blaine trabaja en la oficina de al lado y le gusta tenerla un rato por las tardes antes de regresar a casa. Si por mí fuera, estaría en la guardería hasta que ambos saliéramos del trabajo.
-¡No más guardería! La pobre ya pasa todo el día ahí, ¡debería pasar más tiempo con su papi!
-Que no eres su padre…
-¡Pues casi lo soy!
David los miraba por encima de su computadora mientras trataba de continuar con su trabajo. Era una situación más que normal. Lo normal sería que Blaine y Sebastian no discutieran. Era una suerte que la empresa fuera del padre de Sebastian ya que así podían tomarse un poco de libertad.
Blaine por su parte, ya había sacado el pastel y lo repartía con ayuda de Elise, quien se había liberado de los brazos de su papi y tampoco prestaba atención a la discusión.
-¡En ese caso, David y yo también tendremos un hijo!
-Ya se estaban tardando. Aunque primero deberían ir más en serio…
-Pues iremos en serio. ¡Todo para que Elise tenga un hermanito con quien jugar!
-Que no es tu hija…
David trató de contener la sonrisa, aun si era por una discusión, Sebastian por fin había tocado el tema que había estado evitando.
Ahora sí, pensó, quizá muy pronto su vida ya sería la que soñó.
Rating: PG
Extensión: 644 palabras
Personajes: David, Sebastian, Kurt y Blaine.
Advertencias: Ninguna.
Género: Fluff, comedia.
Resumen: “Cierra los ojos e imagina cómo podría ser la vida dentro de diez años.”
Disclaimer: Glee pertenece a RIB, este fic no tiene fin alguno de lucro.
Nota: Drabble escrito para el reto #8: Futuro de glee_esp
“Cierra los ojos e imagina cómo podría ser la vida dentro de diez años.”
Los diez años-y algunos más-habían pasado y Dave aun cerraba los ojos para imaginar aquello que había visto en su mente por primera vez en el hospital. Kurt tenía razón, el pensar en un gran trabajo, una pareja estable y un hijo visitándolo ahí, le daba ánimos para continuar.
Más de diez años habían pasado y David repetía la acción pese a que su vida era casi lo que imaginó entonces.
La oficina era más bien pequeña pero prácticamente era solo suya. Y tampoco era el agente deportivo que soñó, o siquiera sabía bien qué hacía-porque se ocupaba de tantos y tan diversos asuntos-y sin embargo, el llegar a ése lugar tras comenzar como un simple asistente era más que gratificante. Se había ganado un lugar en la empresa por sus propios méritos y eso le daba confianza para seguir ascendiendo. Tenía un gran trabajo.
Un trabajo donde para mayor sorpresa, se había encontrado con alguien. Alguien muy especial que ya lo había rechazado en el pasado, justo diez años atrás. Y que ahora solía trabajar cerca de él.
Quizá no podría llamarla relación “estable” pues la persona era algo complicada ya que…
-Han llegado, señor…
-Hágalos pasar de inmediato-interrumpió una voz a su espalda dirigiéndose al teléfono.-Ya debería saber que no me gusta que los haga esperar.
La puerta se abrió con rapidez y una niña de unos tres años corrió a los brazos del hombre que había contestado el teléfono.
-¡Paaaaapi! ¡Ya vine!-gritó la pequeña con emoción.
-¡Hola, Elise! Espero te haya ido bien en la escuela-le sonrió antes de dirigirse con seriedad al hombre que venía detrás de ella-Blaine, pensé que algo les había pasado porque ya era tarde y no venían. Estaba por hablarte al celular.
-Buenas tardes, también a ti, Sebastian. Buenas tardes, David-saludó Blaine entrando a la oficina.- Llegamos tarde porque…
-Llegamos tarde porque Elise quiso pasar por un pastel, para su papi-interrumpió con leve fastidio Kurt entrando con una mochila rosa al hombro y una caja en las manos-. Buenas tardes, David.
La sonrisa de Sebastian se hizo más grande mientras ignoraba a Kurt y volvía a enfocarse en la niña.
-Elise, ¿me trajiste un pastel? Qué linda eres con tu papi.
-Aun no sé cómo puede llamarte “papá” cuando no lo eres. Es mi hija. Mía y de Blaine.
-Lo será pero pasa mucho tiempo conmigo y es obvio que me quiere.
-Si pasa tanto tiempo aquí es porque Blaine trabaja en la oficina de al lado y le gusta tenerla un rato por las tardes antes de regresar a casa. Si por mí fuera, estaría en la guardería hasta que ambos saliéramos del trabajo.
-¡No más guardería! La pobre ya pasa todo el día ahí, ¡debería pasar más tiempo con su papi!
-Que no eres su padre…
-¡Pues casi lo soy!
David los miraba por encima de su computadora mientras trataba de continuar con su trabajo. Era una situación más que normal. Lo normal sería que Blaine y Sebastian no discutieran. Era una suerte que la empresa fuera del padre de Sebastian ya que así podían tomarse un poco de libertad.
Blaine por su parte, ya había sacado el pastel y lo repartía con ayuda de Elise, quien se había liberado de los brazos de su papi y tampoco prestaba atención a la discusión.
-¡En ese caso, David y yo también tendremos un hijo!
-Ya se estaban tardando. Aunque primero deberían ir más en serio…
-Pues iremos en serio. ¡Todo para que Elise tenga un hermanito con quien jugar!
-Que no es tu hija…
David trató de contener la sonrisa, aun si era por una discusión, Sebastian por fin había tocado el tema que había estado evitando.
Ahora sí, pensó, quizá muy pronto su vida ya sería la que soñó.