Viñeta: Chuparse los dedos II
Título: Nada de lo que ocurre en TV es verdad.
Grupo: SHINee.
Viñeta: Chuparse los dedos II.
-Jongtae-
Le mira tirado en su cama y respira hondo para armarse de paciencia. Taemin lleva un tiempo que, cada vez que se enfada, se apodera de su cama sin su permiso, en realidad, Taemin lleva mucho tiempo haciendo las cosas sin pedir permiso alguno.
Jonghyun no sabe si es que está en una etapa de revolución o qué, él nunca ha tenido que lidiar con este tipo de situaciones. Desde que se producen, Jonghyun se siente como el hermano mayor que tiene que mediar entre su hermano pequeño y su padre y, la verdad, es que no le gusta ni un pelo.
Se sienta en la cama y se le queda mirando hasta que se digne a dejar de ignorarle. Taemin está tumbado de cara a la pared, con los auriculares puestos y los ojos cerrados, pero pronto los abre y se quita un casco.
-¿Qué? -le dice con brusquedad.
-Nada -se encoge de hombros Jonghyun, sin inmutarse lo más mínimo, acostumbrado ya a sus malas contestaciones.
Taemin le mira desconfiado unos segundos y luego trata de ignorarle otra vez. Se da cuenta de que Minho está también en la habitación, poniéndose el pijama sin prestarles atención alguna. Pasa de canción en el iPod, pero no llega ni a oír el estribillo cuando se quita ambos cascos y se incorpora bruscamente en la cama.
-Di lo que tengas que decir de una vez, Jonghyun -le espeta.
Jonghyun guarda silencio unos segundos en los que se miran a los ojos sin parpadear.
-¿Está todo bien? -le pregunta serio.
Taemin parpadea porque se había esperado cualquier cosa menos eso.
-Claro -le dice, y no es consciente de que ha suavizado el tono de voz.
-¿Seguro? -insiste Jonghyun, cambiando su semblante serio por uno preocupado.
-Que sí -le sonríe Taemin, y Minho ve que su hyung ha conseguido apaciguar a la pequeña fiera.
-Vale -asiente Jonghyun-, no hace falta que te diga que...
-No hace falta -le corta Taemin, desviando la mirada porque ese tipo de cosas le avergüenzan.
-Está bien -Jonghyun le revuelve los cabellos en un gesto que sabe que el maknae detesta, pero que él lleva haciéndole desde que le conoció-. Puedes dormir aquí esta noche -le dice, como si le hubiera pedido permiso.
Jonghyun se levanta y le hace un gesto a Minho para que le siga, sin tratar de disimular para que Taemin no le vea. El maknae vuelve a ponerse los auriculares y se evade del mundo.
-¿Por qué no tratas de que Jinki venga a hablar con él? -le dice Jonghyun en voz baja, una vez que ha cerrado la puerta de la habitación.
-¿Por qué yo? -se sorprende Minho.
-Porque eres bueno manejando los enfados de Jinki -le contesta y le da una palmada en el brazo antes de meterse en la habitación de los otros tres integrantes del grupo, sin dejarle tiempo a Minho para negarse.
Minho se asoma al salón y ve a Jinki cambiando de canal con el ceño ligeramente fruncido. Está enfadado y Minho no quiere comerse el marrón, pero suspira resignado y, por una vez, se lo come.
Grupo: SHINee.
Viñeta: Chuparse los dedos II.
-Jongtae-
Le mira tirado en su cama y respira hondo para armarse de paciencia. Taemin lleva un tiempo que, cada vez que se enfada, se apodera de su cama sin su permiso, en realidad, Taemin lleva mucho tiempo haciendo las cosas sin pedir permiso alguno.
Jonghyun no sabe si es que está en una etapa de revolución o qué, él nunca ha tenido que lidiar con este tipo de situaciones. Desde que se producen, Jonghyun se siente como el hermano mayor que tiene que mediar entre su hermano pequeño y su padre y, la verdad, es que no le gusta ni un pelo.
Se sienta en la cama y se le queda mirando hasta que se digne a dejar de ignorarle. Taemin está tumbado de cara a la pared, con los auriculares puestos y los ojos cerrados, pero pronto los abre y se quita un casco.
-¿Qué? -le dice con brusquedad.
-Nada -se encoge de hombros Jonghyun, sin inmutarse lo más mínimo, acostumbrado ya a sus malas contestaciones.
Taemin le mira desconfiado unos segundos y luego trata de ignorarle otra vez. Se da cuenta de que Minho está también en la habitación, poniéndose el pijama sin prestarles atención alguna. Pasa de canción en el iPod, pero no llega ni a oír el estribillo cuando se quita ambos cascos y se incorpora bruscamente en la cama.
-Di lo que tengas que decir de una vez, Jonghyun -le espeta.
Jonghyun guarda silencio unos segundos en los que se miran a los ojos sin parpadear.
-¿Está todo bien? -le pregunta serio.
Taemin parpadea porque se había esperado cualquier cosa menos eso.
-Claro -le dice, y no es consciente de que ha suavizado el tono de voz.
-¿Seguro? -insiste Jonghyun, cambiando su semblante serio por uno preocupado.
-Que sí -le sonríe Taemin, y Minho ve que su hyung ha conseguido apaciguar a la pequeña fiera.
-Vale -asiente Jonghyun-, no hace falta que te diga que...
-No hace falta -le corta Taemin, desviando la mirada porque ese tipo de cosas le avergüenzan.
-Está bien -Jonghyun le revuelve los cabellos en un gesto que sabe que el maknae detesta, pero que él lleva haciéndole desde que le conoció-. Puedes dormir aquí esta noche -le dice, como si le hubiera pedido permiso.
Jonghyun se levanta y le hace un gesto a Minho para que le siga, sin tratar de disimular para que Taemin no le vea. El maknae vuelve a ponerse los auriculares y se evade del mundo.
-¿Por qué no tratas de que Jinki venga a hablar con él? -le dice Jonghyun en voz baja, una vez que ha cerrado la puerta de la habitación.
-¿Por qué yo? -se sorprende Minho.
-Porque eres bueno manejando los enfados de Jinki -le contesta y le da una palmada en el brazo antes de meterse en la habitación de los otros tres integrantes del grupo, sin dejarle tiempo a Minho para negarse.
Minho se asoma al salón y ve a Jinki cambiando de canal con el ceño ligeramente fruncido. Está enfadado y Minho no quiere comerse el marrón, pero suspira resignado y, por una vez, se lo come.