Nubes que te atrapan si te dejas arrastrar...

Feb 22, 2010 20:14


Fandom: Supernatural
Pareja: Dean/Cas
Rating: PG-13
Spoilers: si sabes que el Apocalipsis esta a la vuelta de la esquina, entonces nop XD
Notas: 4 pequeñas piezas, ordenadas de una manera más o menos cronológica, basadas en 4 canciones. Link al yutube para escuchar cada canción si asi lo deseáis

Hoobastank - Escape

We're stuck in a hole and we're searching for anything to hold onto
There has to be somewhere that we can be safe from the lives we live each day
There has to be somewhere that we can be far away...

Cada día parece una repetición del anterior, levantarse, desayunar si se puede y salir hacia un destino desconocido en busca de pistas sobre cómo matar a Lucifer. Cualquier cosa, hasta el más mínimo rumor o la más descabellada de las ideas, es bienvenida e inútil. Nada parece poder hacerse para evitar el Apocalipsis y pasan los días uno tras otro en un espiral que crece y crece alimentándose de su desesperación.
Castiel también está anclado en su propio laberinto, su búsqueda de Dios no parece dar más frutos que la de los hermanos. Por eso, una noche estrellada de verano, con Sam durmiendo bajo el influjo de los calmantes para su brazo roto, Dean sale al patio del motel y se sienta en un banco a mirar las estrellas, esperando que Castiel se una y le acompañe en su pequeña ilusión. Dean le cuenta cómo, aunque ama cazar monstruos y fantasmas, cada vez más siente la necesidad de huir, de escapar hacia algún lugar en el que pueda hacer lo que le venga en gana, arreglar coches, beber cerveza, dormir hasta tarde, conocer chicas guapas, ir a un rodaje de Dr. Sexy M.D… Hacer cualquier cosa, pero por que quiera, no por que se sienta obligado. Castiel contesta que seguro que hay un lugar así, un sitio secreto que nadie conozca, donde Dean pueda ver su sueño hecho realidad. Le contesta que seguro que se encuentra tras la batalla, tras su victoria.
Los dos se miran y sonríen son tristeza. Saben que es verdad, que puede existir ese lugar al que escapar, pero si uno de los dos no decide liderar la huida, si no pueden estar juntos, no sirve de nada. Y como ninguno cree lo suficiente en sí mismo nadie da el primer paso, y es la monotonía la que coge el mando de sus vidas; haciéndoles vivir en un oscuro agujero con la vaga idea de lo que podría ser la felicidad como único pilar en el que apoyarse.

Miranda! - Agua

Agua clara bajo el puente y en el puente vos y yo
Enturbiando nuestras almas, complicándonos los dos
Quisiera llevarme algo, siempre pienso que hoy es la última vez
Siempre es la última vez

El agua fluye con calma, tan clara y transparente que el cielo sobre sus hombros se ve perfectamente reflejado en el río. Dean reposa con los codos sobre la barandilla y una cerveza en la mano derecha, un perfecto instante de calma en el torbellino que es su vida. Desvía la mirada un instante hacia la izquierda, donde al inicio del puente descansa su querido Impala, y al volverla a dirigir al frente se da cuenta de que ya no está solo. Castiel no dice nada, simplemente está allí, como cada vez que Dean necesita ayuda o se siente perdido, calmándole con su presencia.
Y así, con los dos en el puente observando el río, Dean pretende permanecer callado, pensando en todo aquello que podría decir o hacer pero que jamás pronunciará ni llevará a cabo. Tampoco importa, Castiel se quedará con él hasta que sienta que el cazador se encuentra mejor y cuando Dean quiera hablar le abandonará, como la última vez. Dean da un último sorbo a la cerveza y la deja en el suelo con un suspiro, notando como el alcohol se mezcla con los secretos que recorren sus venas, envenenándole la sangre.
Castiel se ha acercado, aun más, y la tentación de dejar caer la cabeza y recostarla en el hombro del ángel es tan grande que Dean se ve obligado a apretar fuertemente la barandilla hasta sentir las astillas clavársele en las palmas de las manos. Sería tan fácil acercarse a él, abrazarle, besarle… reclamar algo tan solo para él, un acto completamente egoísta por una vez en su vida. Tan fácil…Ninguno de los dos sabe qué sucederá al día siguiente, quizá no habrá lugar para encuentros incómodos, explicaciones o peleas… Sería todo tan fácil, que Dean se gira en dirección al Impala y oye a Castiel desaparecer a su espalda.

Second - Nuevos secretos.

Se desliza sobre el hielo, movimientos elegantes
Llévame hasta el cielo, todavía no es tan tarde.
Gotas de lluvia cayendo…

Finas gotas de lluvia caen del cielo gris sobre piedras de un imperio que hace siglos fue grande; la humanidad, con su evolución desenfrenada hacia su propio fin, y Dean se pregunta por última vez si esta haciendo lo correcto.
Fantasmas, espíritus, vampiros… Todo eso esta muy bien, demonios ya no tanto. ¿Pero ángeles? ¿Dios? Parece casi imposible de creer, un secreto que ha querido permanecer oculto durante tanto tiempo que ahora, si piensa demasiado sobre él, le intimida. Es todo demasiado grande, demasiado nuevo, y ha aceptado entrar a formar parte de ello.

Castiel se le acerca rápido y elegante, con la gabardina oleando al viento, inmune a la lluvia o al hielo que todo lo cubre. Cualquiera hubiera pensado que Lucifer envolvería la Tierra en llamas, pero al parecer el Demonio se ha cansado del calor del Infierno. Esos ojos azules, oscuros y brillantes, le observan como llevan años haciendo, eternos e hipnóticos, mientras pronuncia las palabras que tanto se ha empeñado en negar.
De repente, en medio del cielo, se forma un claro entre las nubes grises y Dean tan solo puede pensar en la llegada de los ángeles, dispuestos a atraparle ahora que ha cedido, ahora que ha aceptado ser arrastrado y usado. Le invade una sensación de calma y tranquilidad que nunca ha sentido antes y empieza a perder la consciencia. Algo suave le envuelve, le obliga cálidamente a doblarse sobre si mismo, y lo último que puede pensar es que hace lo correcto para salvar a la humanidad. Y entre ellos a Sammy, y a Bobby, y…

Llévame hasta el cielo, Castiel. Todavía no es tan tarde.

Snow Patrol - Just say yes

I'm running out of ways to make you see
I want you to stay here beside me
I won't be ok and I won't pretend I am
So just tell me today and take my hand

El Apocalipsis ha acabado, aun no se lo puede creer. Dos semanas en cama sin poder moverse a causa de las heridas y ahora, por fin, puede celebrarlo.
Dean sabe que todos le creen en algún bar de carretera, ligando e intentando conseguir una chica con la que pasar la noche, pero no es verdad. Dean se encuentra en medio de un descampado, rezando como una vez lo hizo frente a una máquina expendedora, para que Castiel aparezca. Dean sabe que los ángeles, los que lucharon junto a los humanos, han ido marchándose poco a poco en los últimos días, pero también sabe, o quiere creer que sabe, que Castiel no se iría sin despedirse de él. No después de tantas cosas pasadas juntos...
Intentó confesar sus sentimientos miles de veces, a solas, frente a Sam, en la habitación de un motel o dos, en medio del fervor de la batalla, pero nunca conseguía hacer salir las palabras y ahora duda que pueda pronunciarlas. Por eso, cuando Castiel aparece, con su gabardina de siempre en perfecto estado y su cabello desaliñado, Dean sonríe y le tiende la mano para que Castiel entrelace sus dedos en los suyos y se quede con él.

Esa noche, cuando Dean llega a casa de Bobby de la mano de Castiel, nadie dice nada; Sam sonríe y Bobby asiente. Esa noche, mientras se desnudan lentamente, mientras sienten el deseo reprimido durante años estallar y salir a la superficie de manera tan explosiva que hasta duele, mientras sienten la piel cálida del otro en la propia y respiran el mismo aire al unísono, descubren, sienten, que han hecho lo correcto, que nada de eso es una trampa, una prueba o un truco, es amor. Todo lo que siempre desearon, late a ritmo de un corazón frenético a través de sus camisetas.


supernatural, fanfic, dean/cas

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