Taboo
Esta película inglesa inició toda una saga de hasta 21 títulos, tal fue su éxito. Protagonizada en 1980 por Kay Parker, interpretando a una mujer abandonada por su marido, Taboo significó toda una revolución en la industria del porno, siendo la primera película en tratar el tema del incesto (madre-hijo) de una manera tan abierta. De hecho, fue todo un éxito, y sigue siendo una de las películas porno más vendidas.
La película empieza con una escena entre el marido y Barbara. Él no deja de encender la luz, y ella la vuelve a apagar diciendo que no puede hacerlo con la luz encendida. La relación sigue hasta acabar, pero se nota que no hay ninguna química entre ellos. Entonces el marido anuncia que se va de casa, que está harto de que sea una mojigata y que se va con su secretaria. Basrbara se queda desolada. Entonces conocemos a su hijo, Paul, interpretado por Mike Ranger. Ella le da la noticia, y Paul asegura que prefiere quedarse a vivir con su madre, que dejará la escuela para trabajar y ayudar en casa. En este momento, la bata de Barbara deja ver sus enormes tetas, y se ve a Paul (recordemos que es su hijo) mirándo con lascivia. Está claro que Paul está atraído por su madre, pero eso no le impide participar en un trío en la escena siguiente.
Barbara, tras consultar con su terapeuta, que es de poca ayuda ya que es una depravada sexual, acude a una fiesta con un conocido. Antes se la ve preparándose para salir, dándose una ducha bajo la secreta mirada de su hijo, muy excitado. La fiesta resulta ser una orgía, en la que Barbara no participa, pese a la insistencia de algunos hombres y mujeres. Cuando vuelve a casa no para de pensar en sexo, y no puede evitar ir a la habitación de su hijo, en lo que acaba siendo una de las escenas más calientes. Los protagonistas habían afiermado sentir atracción mutua en la vida real, y eso se refleja muy bien en esta escena. Al final, no queda más remedio que dar por zanjada la relación, para nuestro disgusto.
La saga, plagada de nombres famosos (en la segunda parte aparece el gran Ron Jeremy) cuenta con la participación de Kay Parker hasta la cuarta entrega. Hay que destacar los atributos de esta actriz, sobre todo su naturalidad. Hoy en día, que las actrices porno están todas operadas, teñidas y rasuradas, es un alivio ver protagonizando una película así a una mujer distinta, pero estupenda. Kay Parker fue una de las grandes de su época, participando en películas porno desde 1977 hasta finales de los 80.
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