Título: Mira lo que el amor ha hecho.
Pairing: Wincest.
Género: Drama, Romance, General
Clasificación: NC-17
Advertencias: Mpreg, longfic. Angustia
Autor:
laminyBeta de la tradución:
nem_saTraductores: Mr Cuico, Alfer.
Sumario: Cuando a Sam le empiezan a apretar los jeans...
Anterior Capitulo veintiocho
John se aclaró su garganta y miró a su hijo menor - Sam… -
Sam asintió con lentitud y miró a Dean - Nos tenemos que ir -
- ¿Sí? - preguntó Dean, jugando con el control remoto - ¿Cómo así? -
- Sam tiene una cita - respondió John - Acerca de su mano -
Dean paró de jugar con el control y se sentó sobre el colchón, con una seria mirada en sus ojos - Oh bueno, espero que sean buenas noticias Sammy -
Sam sonrió y se sentó sobre el borde de la cama y se inclinó para besar a Dean - Gracias -
- Desaría poder ir contigo - continuó Dean - Es un asco no poder estar ahí para ti, espero que haya mejorado -
- Lo sé - dijo Sam con suavidad, antes de darle otro beso a Dean - Te amo -
- Te amo - le respondió - Buena suerte -
Sam se paró y caminó hasta la puerta, no sin girarse hacía Dean - La suerte no tiene nada que ver -
John le dio una pequeña a sonrisa y salió del dormitorio y siguió a Sam, ahora su sonrisa era triste - Espera Sam -
Sam suspiró y se giró a mirar a su padre - Vamos papá, solo quiero que terminemos con esto. Por favor, solo quiero saber de una vez -
John suspiró y asintió con lentitud - Sí lo sé, solo quería decirte que... No pasa nada si no son buenas noticias ¿Bien -
Sam se encogió de hombros - Para ti es fácil decirlo. No eres el que tal vez no pueda volver a usar su mano, vamos, acabemos de una vez con esto - le dijo y continuó caminando, sin siquiera voltearse a ver si su padre le estaba siguiendo.
…….
Sam suspiró y se reclinó contra la pared, esperando a que John deshiciera el cerrojo.
John le miró, aún tratando de abrir la cerradura - ¿Estás bien? -
El menor se inclinó de hombros, antes de asentir y empujarse de la pared - Sí, estoy bien - respondió entrando al departamento después de John y cerrándola detrás de él. Se sacó sus zapatillas y caminó hacía la sala de la habitación - Solo que no me gusta dejarlo solo allí -
John asintió, no muy seguro de que había hecho Sam con sus zapatillas, dejó la bolsa en la mesa y se giró a mirarle. No iba a tocar el tema de la mano, no en estos momentos - Lo sé, a mi tampoco pero no está solo, hay un montón de enfermeras sexys por ahí, estará bien -
Sam sonrió con tristeza y se sentó en el sofá, agarrando el control remoto - Eso es lo que me preocupa -
John le miró con confusión mientras se empujaba a sí mismo de la mesa y se sentaba junto a su hijo en el sofá - ¿De qué estás hablando? -
Sam suspiró y abrió su boca para decir algo pero finalmente se arrepintió, entonces sacudió su cabeza - Es estúpido, no te interesaría papá -
- Sam sé que hemos tenidos nuestros… problemas - sonrió con debilidad - A través de los años pero sigues siendo mi hijo -
Sam le miró, con una diminuta sonrisa de agradecimiento - Sí, lo sé -
John le acarició el hombro con gentileza - Así que ¿Qué pasa? Vamos cuéntame -
Sam suspiró y se recostó sobre el sofá, comenzando a jugar con su arnés ortopédico - Digo… Mírame, mi nariz está rota e hinchada. Mi mano está igual, morada y nunca la podre volver a usar… Estoy gordo, embarazado de cinco meses y ni siquiera paso el tiempo que puedo con la persona que quiero, se va a alejar de mi - se rascó su cuello y dejó reposar su cuello en el respaldo del sofá.
John comenzó reír con suavidad pero paró inmediatamente cuando vió la seria mirada en el rostro de Sam - ¿Es en serio? Sam no seas ridículo -
- Papá tu has visto a todas las personas con las que Dean ha salido, bueno… No exactamente - se corrigió encogiéndose de hombros - El punto es, que todas esas personas eran atractivas - le explicó - Y ahora mírame… tenía músculos y era fuerte - parándose de su asiento y haciendo énfasis en su vientre - ¿Quién querría amar a alguien así? -
John rodó su mirada, y lo agarró del brazo bueno, haciendo que se volviera a sentar - Yo lo haría y lo hice. Con tu madre -
Sam le miró, tragó saliva con dificultad y deshizo el agarre de su padre - ¿Amarías a alguien que tuviera la mano así? - respondió con dureza.
John superó y golpeó con suavidad la nariz de Sam - Samuel, necesitas calmarte. Dean me dijo una vez lo mucho que te amaba y cuanto… - tragó con dificultad, aún no se acostumbraba al tema - Dijo que te amaría por siempre, mira. Dean ha visto a mujeres embarazas antes, y sabía lo que pasaría. Sobre tu mano…. Bueno, eso no importa ¿Vas a amar a Dean de todas formas aún con su cojera? -
- Cla… claro que sí - respondió con suavidad - Sí, definitivamente lo haría ¿Ves? Te dije que era algo estúpido - dijo acomodándose en el sofá nuevamente y comenzó a cambiar los canales de la televisión - Tal vez debería leer un poco -
John le sonrió y palmeó la rodilla de Sam - Tal vez, porque antes de que te des cuenta Dean va a volver y estará trepándose por las paredes - se paró del sofá y caminó hasta la mesa, sacando un libro de la bolsa. Si la mano de Sam estuviera bien se lo habría lanzando pero no era así, por lo que caminó de vuelta al sofá y se lo tendió - Podrías leer un par de páginas antes de la cena - agarró el control remoto y apagó la televisión - Voy a calentar una pizza ¿Bien? -
Sam miró el libro y asintió - Esta bien - abrió el libro en la primera página y comenzó a leer.
John se dirigió a la nevera y sacó una piza congelada y la dejó sobre la mesa. El silencio en el departamento era un tanto incómodo, tal vez no para Sam pero sí para John - ¡Sam! -
Sam elevó su mirada del libro y se giró a su padre - ¿Si? -
- ¿Podrías prender la televisión? - pidió John - Solo bájale el volumen y ya -
Sam agarró el control remoto y prendió la televisión, dejando en el último canal antes de que la apagara y dejó el aparato a un lado.
John comenzó a leer las instrucciones al reverso de la caja de pizza y prendió el horno a temperatura baja. Entonces suspiró, ahora podía ver porque Sam se aburría tanto en el departamento. Abrió su boca para decirle que iba a tomar un baño pero se veía demasiado concentrado como para interrumpirlo, así que simplemente se dirigió al baño y entró.
Sam vio como su padre pasaba y le daba una sonrisa, entonces suspiró y miró a la televisión; Un estúpido programa talk show que probablemente le interesaría mucho más a su padre o Dean. Sacudió su cabeza y simplemente volvió a su libro. Y eso solo duró unos cinco minutos antes de que murmurara:
- Mierda - gruño. Dejó el libro a un lado y subiéndole el volumen a la televisión, tratando de buscar algo mejor que ver, se detuvo en lo que parecía ser un programa de juegos. Entonces dejó el libro en el piso y se acomodó en el sofá, con su brazo roto en el pecho.
John apagó el agua y salió de la ducha con cuidado, agarrando una de las toallas. Se la amarró alrededor de la cintura, agarró su ropa y caminó fuera del baño, apagando la luz tras él y entró a su habitación. Entonces se sentó sobre el borde de la cama, pensativo - Dean - murmuró con suavidad - Tienes que mejorar… - volvió a suspirar e intentó contener las lágrimas en sus ojos, entonces se dirigió a su closet y abrió el cajón - Por Sammy -
Sam gruñó y se paró del sofá, cada día que pasaba en el departamento lo sumía cada vez más en el abismo del aburrimiento. Atrajo su mano rota al puente de su nariz para rascarse, fue entonces cuando recordó que estaba rota. Entonces suspiró con cansancio y la alejó, no sin antes gruñir de dolor. Dolía horriblemente pero al menos ese dolor lo distraía un poco del aburrimiento por unos segundos.
John dejó la toalla en el baño y caminó hasta Sam - ¿Estás bien Sammy? - preguntó, mirando a Sam. Quien tenía una mueca de disgusto en su rostro.
Sam abrió rápidamente los ojos y se sentó en el sofá, entonces asintió - S... sí, estoy bien... solo pensaba -
John estudió a su hijo por un segundo, antes de encogerse de hombros y caminar hasta la cocina y meter la pizza al horno, puso el temporizador y posó su mirada en Sam. No estaba seguro de que decirle, desde el accidente tampoco es como si hablaran mucho, más bien solo hablaban de Dean y de su estado.
Pasaron unos segundos y se sentó en el sofá, Sam viendo la televisión y John leyendo el periódico mientras la pizza se calentaba. Para cuando estuvo listo ambos se sentaron sobre la mesa pero aún así, apenas hablaron.
John le dio un sorbo a su cerveza mientras echaba una mirada sobre Sam quien luchaba con todas sus fuerza de mantener el pedazo de pizza en su mano, tenía una expresión de disgusto en su rostro - Puedo cortarla en pedazos si quieres -
Sam le quemó con la mirada y entonces volvió su mirada a la pizza, un pedazo de pepperoni estaba apunto de caerse, entonces les dio un rápido mordisco y mastico - No, estoy bien - respondió, tragando - Solo que aún no me acostumbro a usar la otra mano - rápidamente le vinieron los recuerdos de aquella noche y algo en su garganta se rompió, intentó contener un sollozo pero John lo notó.
- ¿Estás bien? -
Sam asintió con lentitud y se limpió uno de sus ojos - Sí - respondió con suavidad y dejó el pedazo de pizza junto a su vaso de agua, entonces le dio un sorbo de agua y tiró su silla hacía atrás - Solo… mejor me voy a dormir -
- ¿Sam? - dijo John viendo como su hijo comenzaba a caminar por el pasillo, con rapidez tiró de su silla e iba tras su Sam - ¿Sam? ¿Qué sucede? - agarró a su hijo del hombro, de forma que Sam se girara a verle.
- Solo… solo déjame solo ¿Vale? - le pidió, retirando la mano de John de su hombro - Solo quiero irme a dormir. Papá - suspiró y se giró nuevamente.
- Sam, soy tu padre - dijo John con voz alta y le siguió - No te alejes de mi de esa forma y respóndeme que sucede -
Sam se volvió a su padre y se mordió su labio inferior, tratando de contener la ganas de llorar - ¿Qué pasa? ¿Qué pasa? Ni siquiera puedo comer una estúpida pizza, soy como un puto retardado o algo así -
John dio un pasó adelante, no muy seguro de que decir - Sammy… -
Sam sacudió su cabeza - No papá, no empieces porque… porque no es tu culpa y no hay nada que puedas hacer. Él dijo que probablemente no volvería a usar mi mano nunca más -
John suspiró y asintió con lentitud - Lo sé Sammy pero… -
Sam comenzó a llorar, sus piernas flaquearon y no pudo evitar caer contra la pared - Papá… ¿Y sin no puedo siquiera sostener al bebé? -
John se mordió su labio y se sentó junto al lado de Sam - Sam… Sammy no sé que hacer para hacerte sentir mejor, digo yo sé que podrás sostener al bebé pero… tal vez debas dejarle las cosas pesadas a Dean -
- No bromees sobre eso - le dijo con un sollozo - No es divertido.
- Lo sé, lo sé - dijo John con suavidad - Es solo que no sé como lidiar con esto Sam, lo siento, lamento que tal vez nunca puedas volver a usar tu mano, lamento no haberte podido proteger de esos tipos. Lo siento Sam, lo siento -
Sam se limpió su nariz y respiró hondo - Dean y yo no podremos volver a cazar de nuevo -
John tragó con fuerza y asintió - Lo sé -
- ¿Es que no te molesta? - dijo Sam con molestia en su voz - Es todo lo que siempre quisiste y ahora no podemos hacer nada por nosotros mismos -
John sacudió su cabeza - No es todo lo que siempre quise para ti Sam, por Dios - dijo en voz baja - Sam la primera vez que te sostuve en mis brazos, cuando te vi por primera vez ¿Sabes lo que pensé? ¿Lo que imagine para tu futuro? Te veía en la universidad, con una esposa, hijos con un trabajo y una casa. Lo mismo que quise para Dean cuando lo vi por primera vez. Quería que tuvieran lo mismo que yo tuve, claro que no salió como yo quería -
- Sí, bueno ¿Y de quien es la culpa? - murmuró Sam con disgusto.
- Mía - respondió sin dudarlo - Mía, eso lo sé. Sé que si hubiera tomado una decisión diferente aquel día, habrías tenido esa vida… Pero ahora Sammy, ahora sé que no habrías tenido todo esto ¿Qué hubiera pasado si tu madre nunca hubiese muerto y no hubiéramos terminado como cazadores? ¿Crees que tendrías lo que tienes con Dean? ¿Crees que te hubieras enamorado de él? - hizo una pausa, como si esperara por una respuesta aunque no esperaba ninguna en realidad - No tendrías a tu bebé -
Sam suspiró, tratando de calmarse, estaba temblando - No importa saber lo que hubiera perdido, porque simplemente no pudo ser pero ahora, he perdido casi todo… mi infancia, mi inocencia… Jess… Ahora mi mano… Casi pierdo a Dean también -
- Sam tu mano aún podría funcionar, el doctor dijo que aún puedes recuperar una parte de su movilidad, y eso es muy bueno hijo. Si te sometes una operación o algo… Tal vez podrías volver a usarla - le recordó John, dando un suspiro - Tal vez… Tal vez debería llevarte al hospital y dejarte con Dean, eres más fácil con él a tu lado… Creo que arruine todo para ti - suspiró y se empujó a sí mismo del suelo, y entonces le tendió su mano a Sam - ¿Necesitas ayuda para pararte? -
Sam negó con su cabeza - Estoy bien, tal vez tenga cinco meses de embarazo y una mano rota pero puedo pararme por mi mismo -
John elevó una ceja y bajo su brazo - Vale, entonces ¿Quieres que te lleve a ver a Dean o no? -
Sam sacudió su cabeza nuevamente, suspiró y poso su mano izquierda sobre la alfombra, tratando de parase. Gruñó incomodo e intentó pararse pero su estómago se le interpuso y simplemente cayó al piso - Mierda -
- ¿Sam? - preguntó John, ofreciendo su mano nuevamente.
- ¡No! - gritó Sam, intentó pararse nuevamente sin importarle la molestia en su mano, posó su mano derecha contra al piso y se empujó pero terminó gritando de dolor al intentar pararse - ¡Mierda! -
- ¡Sam! - exclamó John, dejándose caer en sus rodillas y posando sus manos sobre los hombros de Sam - Oh mierda, lo siento lo siento - agarró la mano de derecha de Sam y la dejó sobre su pecho - Iré a traerte tú arnés -
Sam simplemente lloró aún más fuerte a causa del dolor mientras John se incorporaba y corría hasta la sala para agarrar el arnés de Sam, una vez volvió Sam parecía estar intentando controlar su llanto - ¿Puedes hacerlo ti mismo? -
El menor asintió y tomó el aparato - Sí, puedo hacerlo. Ya lo he hecho - dijo con un hilo de voz mientras empezaba a acomodarse el lazo alrededor de su cuello, sin embargo no dejó de llorar aunque lo intentara y algunas lágrimas terminaron manchando su camiseta. Un segundo después de posicionarlo terminó cayendo sobre el pecho de su padre, manchando su camisa con sus lágrimas.
John suspiró contra el castaño cabello de Sam y lo atrajo más hacía él - Mi pequeño hijo… - dijo con voz baja, aferrándose lo más que podía a Sam - Dios Sammy, desearía simplemente hacer que todo fuese mejor para ti -
Sam continuó sollozando, pasando su brazo bueno alrededor de cuello de su padre - Te quiero papá -
John asintió con su cabeza - Lo sé, lo sé. Yo también te quiero - presionó sus labios contra la frente de Sam y lo amarró contra él - Te voy a ayudar a levantarte ¿Bien? -
Sam asintió y comenzó a levantarse, apoyándose en su padre - Gracias - dijo con suavidad.
- Está bien Sammy - le respondió John con la misma suavidad - Vamos a la cama ¿Bien? - empujó la puerta del dormitorio y prendió las luces - Bien, ponte el pijama mientras voy por los calmantes, vuelvo en un segundo - dijo mientras corría hasta el baño a buscar los calmantes preescriptos que estaban en el botiquín, cuando volvió al dormitorio Sam tenía sus vaqueros bajados y con la camiseta a medio sacar, obviamente iba a necesitar ayuda para poder sacársela - Déjame ayudarte ¿Vale? -
Sam volvió a asentir y sonrió débilmente mientras John lo ayudaba con su brazo para luego remover por fin la camiseta de Sam - ¿Estás bien? - preguntó mirando a la cama y luego a Sam - Te vamos a conseguir un mejor colchón ¿Bien? Antes de que Dean este de vuelta, además de que con el bebé van a necesitar dormir más cómodos -
Sam bostezó y volvió a asentir audiblemente.
John sonrió y caminó hasta el vestidor, sacando las pastillas y el agua - Aquí tienes Sam - posó su mano sobre la mano buena de Sam, en menos de un segundo Sam se tragó los medicamentos seguido del agua. Se llevó a la boca el resto de las pastillas y se terminó el agua, devolviendo el vaso de agua a John y caminó con lentitud hasta la cama, dejándose caer con suavidad para no lastimarse.
- ¿Estás bien? - preguntó John, acuclillándose junto a la cama.
Sam se acomodó contra el catre y asintió con lentitud - Lo siento papá -
John sonrió ligeramente y acarició el cabello de Sam - Está bien Sammy, está bien. Ahora duerme ¿Vale? - dijo parándose de la alfombra y caminando hasta la puerta pero Sam le hizo detenerse - ¿Qué pasa? -
- ¿Trabajas mañana? - le preguntó con voz débil, casi infantil.
John sacudió su cabeza - No, así que si me necesitas mañana estaré por aquí. Y está bien si me despiertas durante la noche ¿Bien? -
- Esta bien papá, buenas noches - dijo Sam dando un suspiro, entonces rodó sobre sí mismo, mirando el lado vacío donde Dean solía dormir.
- Buenas noches Sammy - le dijo John con suavidad caminando fuera del dormitorio, dejando la puerta media abierta tras él. Caminó de vuelta a la cocina y dejó el vaso usado por Sam en el fregadero, entonces suspiró y se apoyó contra la encimera, frotándose un ojo con cansancio - Mierda - murmuró - Mierda - murmuró nuevamente, entonces se sentó en su silla frente a la mesa y le dio un mordisco a su pedazo de pizza, luego un sorbo a su cerveza.
Entonces empujó su silla hacía atrás y fue por las llaves al final del pasillo, sentía que podía dejar a Sam un rato solo. Porque definitivamente iba a necesitar algo más fuerte para pasar la noche.
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