La última vez que había ido a La Riviera
TODO salió bien. Esta noche prometía ser (y así fue) muy distinta. Sucedió el 23 de enero. Ambas, no obstante, tienen puntos en común: ambas las repetiría.
A Red Fang no los conocía. Y estuve a punto de cometer el error de irme al concierto sin escucharlos... porque realmente están guapos, y realmente dieron un buen concierto. Si vinieran sólos valdría la pena verlos dando un show completo.
A Mastodon les tenía muchas ganas desde un Festimad maldito en el que (casi) TODO salió mal. Han madurado, y para mal o para bien ya no me atrevo a decir que son la actualización del thrash metal que Machine Head prometieron pero no cumplieron. Leviathan quizá sí lo era, The Hunter es un disco adulto y más lento, pero que igualmente me engancha.
El concierto fue una barbaridad y no faltó nada: repasaron desde Remission (Where strides the behemoth) o el grandísimo Leviathan (Seabeast, Iron Tusk, Blood and Thunder, I Am Ahab, ¿me dejo alguna? Seguro). Dieron un buen repaso a lo mejor de su flamante The Hunter, pero no aburrieron tocándolo completo y, mejor aún, tuvieron la decencia de tocar medios tiempos adorables como Crack the Skye. Personalmente, es mi única pega: yo cruzaba los dedos por algo más de ese disco, quizá Oblivion o Quintessence. Pero no se puede tener todo.
Y mañana volvería, por supuesto.
Come on! Feel the Mastodon!