Autora: lea1santome
Titulo: corazón en mil pedazos.
Fandom: Hawaii five -0
Fandom: HERMANDAD DE LA DAGA NEGRA (es una saga de la autora J.R Ward, y me he enganchado a sus novelas)
Pareja: Steve/Danny
ADvertencias: no hay nada de sexo.
BETA:
intimisky todos los sueños de Steve tenían como único protagonista al detective Daniel Williams, ese hombre se había adueñado de sus días (cuando dormía) y de sus noches, pues no paraba de pensar en él.
Pero no podía acercarse pues lo tenía prohibido por el rey (aunque no le obedecía completamente, algunos días espiaba al rubio) y el otro impedimento era el maldito sol.
Steve odiaba cómo la mortalidad del policía le golpeaba constantemente en su corazón impotente, amando a un hombre que jamás podría tener, que ni siquiera le recordaba a él ni a los sueños.
Estaba cansado de obedecer órdenes, tan cansado de no poder hacer nada, de ser tan conformista.
No, el vampiro sabía que tendría que dejar de engañarse así mismo, dejar de esconderse en su cobardía que le impedía averiguar si podría ser correspondido por el policía sin que huyera de él, sabiendo que era un monstruo.
*********
La vida de Danny cambió radicalmente cuando se separó de su mujer Rachel se llevó a su pequeña Grace a otra ciudad tratando de alejarla de él, cosa imposible, pues donde fuera Grace él iría detrás, iría al mismísimo infierno a recuperar a su hija.
Su corazón casi se rompe casi en mil pedazos, cuando vio cómo un coche se abalanzaba sobre ellos él y Grace y lo único que pudo hacer fue proteger a su pequeña con su cuerpo (aunque él muriera en el proceso).
Todo cambió de repente, sintió que alguien les empujaba lejos y cayeron sobre la acera.
- ¿Estáis bien tú y tu hija? -Danny puede detectar la preocupación en la voz del desconocido que les ayuda a levantarse- Me alegro de haber llegado a tiempo.
Comprueba que Grace no sufre ninguna lesión y, sin pensarlo dos veces, abraza fuertemente al hombre que ha salvado la vida de su hija (Grace siempre va en primer lugar) y a él y no para de repetir:
- ¡Gracias por salvar la vida de mi hija!
******
Steve estaba cansado de ser un cobarde y había decidido enfrentarse a La Virgen Escriba, al Rey, incluso a toda la Hermandad si fuera necesario. Moriría en el intento, pero todo fue extraño pues no hubo ningún enfrentamiento, todo lo contrario, casi le habían reprochado que no actuara antes.
- Deja de hablar y vete a salvar a tu humano y a su hija, cerca de su casa dentro de dos minutos...-La virgen Escriba no pudo continuar pues Steve se había se había tele transportado.
*****
Había pasado un mes desde que casi atropellaran a Danny y Grace, un mes desde el primer café, siendo amigos, los mejores amigos que pudieran existir, pero Danny quería algo más de Steve, tal vez un beso o mucho más, pero tenía miedo de la reacción de su amigo. De contarle los sueños que acudían a él desde hace una semana, pero una cosa estaba clara, su madre no dio a luz a ningún cobarde y aquella noche se enfrenaría a sus sentimientos.
- Steve, seguramente lo que te voy a contar no te va gustar nada, hasta sé que me podrías odiar -Tratando de mirar a los ojos a Steve, que ese momento llevaba puesta sus gafas. Extraña y sexy combinación del cuero y las gafas para ver (aunque sospechaba que su amigo no tenía ningún problema de vista)- Desde hace una semana he tenido sueños contigo, más bien fantasías, pero eso no es lo importante, siento decirte que me estás gustando mucho, tal vez puede que me esté enamorando de ti.- fue extraño decir su monólogo tratando de no mover las manos- Si quieres romper nuestra amistad, puedes hacerlo estás en tu...
El corazón de Steve galopaba como un caballo salvaje al oír que su amigo le correspondía. Y sin más preámbulo, le besó, un beso torpe para silenciar las palabras que no deben ser pronunciadas. Un beso que prometía más besos.
De buena gana Danny le correspondió al beso y a los siguientes.
- Recuerda -susurró Steve al oído de su amigo, cuando el beso llegó a su término.
- ¿Qué quieres que recuerde?- preguntó Danny separándose de Steve.
- Cómo nos conocimos.
Dicho y hecho, las imágenes le llegaban . La investigación sobre hombre de negocios llamado Reverendo, sobre esos extraños hombres vestidos de cuero sentados en una mesa y sentado en esa mesa destacaba Steve, mucho más bajo que el resto de sus amigos.
En cada momento podría sentir los ojos del hombre sobre él y le gustaba que le mirara.
Danny averiguó algo más, que todos de esa mesa eran vampiros, pero decidió callar.
- ¡Eres un vampiro! -Exclamó el policía. Cuando vio que el vampiro se iba alejar de él y salir corriendo se lo impendió... con un beso apasionado, húmedo, dejando que su lengua se adueñara de la boca del vampiro. La respiración es necesaria incluso para un vampiro, así que no les quedó otra que romper el beso.
- ¡Mi idiota y adorable vampiro! - exclamó Danny tocando la mejilla- ¿Acaso crees que te voy a dejar de mi vida tan fácilmente?
Steve no contestó hasta unos segundos más tarde.
- Tengo que decirte que eres mestizo, es decir, que eres medio vampiro y tu hija también...
- Calla y quiero que pienses que estaremos juntos los tres,y ahora ¡BÉSAME!