Título: The Perfect World
Fandom: EXO
Pairing: Sehun/Luhan
Genre: Fluff, Slight!Angst, AU
Rating: T (9+)
Palabras: 1,280
Summary: Luhan tiene el mundo perfecto que siempre deseó.
A/N: Un pequeño Hunhan que había dicho que escribiría. Recién lo terminé y está sin betear, así que espero que les guste y bueno, está algo sencillo pero me pareció lindo. En fin, disfrutenlo.
Pd: Escribí Hunhan porque alguien en el Ask me pidió Hunhan.
The perfect world
En la vida de Luhan eran constantes los gritos, insultos y golpes. Él lo odiaba porque prefería mil veces el silencio antes que todo el bullicio que había a su alrededor. Luhan hubiera preferido tener otros padres en vez de los suyos; ellos eran unos drogadictos en recuperación, pero el muchacho sabía que la rehabilitación de sus padres se había ido a la mierda desde hace mucho tiempo.
Él era el único que había sufrido tanto tiempo. Agradecía a Dios que, al menos, su hermanito pequeño ya no estaba con vida, porque Luhan hubiese preferido mil veces eso antes de que Yixing sufriera el abuso verbal y físico de sus padres.
“En un mundo de plástico y ruido, quiero ser de barro y de silencio”
Recuerda esa frase que una vez había visto en algún lado-no recuerda donde- del escritor Eduardo Galeano. Esa frase le caló en lo más profundo de su ser. Porque él prefería el silencio antes que el ruido. El ruido siempre fue su enemigo desde que Luhan recuerda.
Nunca supo lo que era paz y tranquilidad. Sus padres se encargaron de enseñarle cosas que un niño pequeño no debía saber, no al menos a una temprana edad. Los padres de Luhan siempre fueron irresponsables, estaban mal tanto físico como mentalmente. Habían matado a Yixing, porque sí, ellos fueron culpables de la muerte de su hermano. ¿Quién deja a un niño de dos años en una tina del doble tamaño que el cuerpo de un bebé? Los odio y lo continúa haciendo. Si por Luhan fuese él ya se hubiese largado, pero no podía, no aún porque era menor de edad.
A veces Luhan se preguntaba si los del servicio infantil eran idiotas. Ellos llegaban a visitarlo dos veces al mes, miraban lo deplorable que era su hogar, lo encontraban en la soledad de su casa y sin alimentos. Luhan, con el tiempo, comprendió que los del servicio infantil se hacían de la vista gorda. Eran de igual que estúpidos con sus padres.
Entonces Luhan lo comprendió. Si los del servicio infantil no le importaban una mierda que él estuviese o no, él podía irse. Sus padres no tomarían acción sobre ello porque simplemente ellos eran egoístas, no les importaba nada ni nadie que no fuesen ellos mismos.
Esa noche empacó lo poco que tenía, cogió unas cuantas cosas que eran de Yixing y se marchó. Lejos, muy lejos de esas personas que una vez llamó padres y que ahora no eran más que desconocidos. Luhan no los quería más en su vida, ya suficiente habían hecho.
A sus diecinueve años de edad, Luhan lo sabía todo. Tuvo que vivir de una forma mediocre después de huir de su casa; se prostituyó, robó e intentó suicidarse, porque él había perdido el rumbo de su vida, se había denigrado a sí mismo por la necesidad y entonces volvió el mismo odio, rencor y dolor que había sentido cuando Yixing murió. Él ya no tenía a nada ni nadie por quien vivir, por eso quiso morir. Pero el destino le tenía preparado algo diferente.
Una mano amiga se le fue extendida. El día que Luhan decidió acabar con su vida, la ayuda que había pedido llegó a su rescate. Recuerda como ese día Oh Sehun apareció para cambiar el rumbo de las cosas y regresarlas al lugar que debió ser desde un principio.
Sehun le ayudó muchísimo en su recuperación. Comenzó dándole un techo en donde dormir y luego un trabajo, el cual era en la biblioteca pública. La familia Oh eran dueños de esa biblioteca y otras sedes en diferentes estados. Luhan entendió que Sehun y su familia nadaban en dinero. Luhan fue un poco reacio a recibir la ayuda que Sehun le ofrecía, pero con el tiempo y con lentitud aceptó lo que Sehun le daba.
Un tiempo después, cuando un nuevo Luhan había nacido que ahora podía continuar sin resentimientos y odio en su vida, que el pasado era el pasado y que tenía que vivir el presente aunque claro, nunca se olvidaría de su hermano Yixing porque fue ese niño que nació de un desliz por sus padres quien le trajo la alegría que Luhan pedía cuando tenía trece años, Sehun se confesó. Recuerda esa noche todos los días.
» Luhan estaba en la biblioteca arreglando unos cuantos libros antes de irse a casa, lo que significa ir a casa de Sehun porque, no sabe cómo, los señores Oh decidieron darle un techo en su casa, cuando el único hijo de los Oh, Sehun apareció. Luhan siempre había pensado que Sehun era un muchacho muy apuesto, había adquirido unos genes hermosos y le encantaba. Estaba enamorado de él en secreto y no planeaba decirlo nunca.
Sehun se acercó hasta donde él estaba, dedicándole una sonrisa, de esas que Luhan amaba. Cuando ambos estaban frente a frente, Sehun se inclinó y besó la mejilla de Luhan, haciendo que el último se sonrojara. Siempre era así y terminaban en Luhan chillando como adolescente mientras golpeaba a Sehun.
-Detén eso.-Reprochó Luhan -Es vergonzoso.-se excusó pero en realidad significan un detén eso porque me enamora más de ti.
-No.-Contestó Sehun, riendo en el proceso -Es lindo y me encanta hacerlo.
-A mí no.-Soltó Luhan, enfurruñándose.
- ¿Qué tal si te beso en los labios, Luhan?-Cuestionó Sehun, descolocando totalmente a Luhan por esa pregunta.
- ¿Qué?-Preguntó incrédulo.
- ¿Preferirías que te besara en los labios?-Luhan se sonrojó inevitablemente. ¿Es que acaso Sehun sabía que él lo quería? No, imposible.
-No es gracioso, Sehun.-Respondió el más bajito -Detente con tu broma porque enserio no es para nada gracioso.-le dolía que Sehun sacara esos temas como broma porque no sabía cuánto le quería. Escuchó suspirar a Sehun.
-Hay algo que quería decirte desde hace un tiempo, Luhan,-Comenzó Sehun -y creo que ahora es conveniente que te lo diga. Yo te quiero.-sí, Luhan lo sabía, ¿por qué lo sacaba ahora? Él más que nadie sabia que Sehun sentía un cariño fraternal hacia él y, claro, él lo odiaba.
-Sí, ya lo sé Sehun.-Respondió Luhan girándose para continuar con lo que hacía.
-No Luhan, no entiendes.-El nombrado suspiró porque, obviamente, él lo entendía -Te quiero, compréndelo.
-Y yo también Sehun.-Respondió Luhan mientras arreglaba los libros. Cogió el último del carrito cuando sintió unos fuerte brazos rodear su cintura y el aliento del otro chocar en su oreja.
-Te quiero Luhan, te quiero pero de manera romántica.-Luhan jadeó -Siempre lo hice, desde el primer momento que comenzamos a tratarnos pero sabía que no estabas preparado para una relación, así que decidí apoyarte como amigo pero ya no puedo seguir así, necesito salir de la friendzone ¿sabes?-el más alto rió, tratando de aligerar el ambiente.
-Por Dios, Sehun.-Soltó Luhan mientras las lagrimas comenzaban a formarse en sus ojos. El nombrado se asomó para ver el rostro de Luhan lleno de lágrimas y lo giró entre sus brazos para luego besarle la nariz.
- ¿Por qué estás llorando, tontito?-Le cuestionó y Luhan negó.
-Es que yo también te quiero.-Respondió entre sollozos. Sehun rió divertido y luego lo besó. «
Diez años después Luhan comprendió que su lugar predilecto era la biblioteca porque ahí podía encontrar calma con la compañía perfecta. Sehun siempre fue una agradable y perfecta compañía para Luhan en el silencio de la biblioteca. Un lugar lleno de silencio y calma, donde podía compartir furtivamente su amor con Sehun.
Ahora ellos llevaban cinco años de casados. Se casaron cuando cumplieron los veinte años y ahora, con veinticinco años de edad, la feliz pareja esperaba a su primogénito. Entonces Luhan pensó que estar con Sehun y formar una familia era el perfecto mundo que siempre deseó.