Título: Canciones de la infancia.
Original: SSN.
Dimensión: A través del espejo.
Claim: Sorpresa. Ingrid.
Advertencias: Pre-canon.
Summary: Tres minutos costó que tu escudo perfectamente construido se derrumbara por aquellos pensamientos surgidos de la nada, por aquellas melodías suaves acompañadas de la más pura de las verdades. Tres minutos, y nada más queda.
Cuando las canciones tranquilas alcanzan tus oídos cargadas de imágenes, se vuelve imposible evitar la verdad. Sucede que realmente no hay nada que evitar, pero la costumbre ha arraigado en ti esa incesante necesidad de evadir obstáculos, de correr lejos de todo, donde nadie pueda encontrarte.
La verdad hoy es una guía que intentaste evadir a toda costa, pero que se ha derramado sobre tu mente, gritándose constantemente sin importar donde estés, transmutándose en la rima de una canción sin letra.
La realidad que no puedes superar llega a ti con toda la suavidad de aquellas notas en las que se alojó, como si intentase amortiguar en vano el golpe. Aquellos meses de sonrisas y distracciones acabaron. Ya no habrá realidades exóticas para descubrir, historias fantásticamente ciertas para escuchar, o preguntas que se agolpen en tu garganta y que cueste formular, todo lo que queda es un silencio únicamente usurpado por la verdad.
Tal vez sería lógico llorar, de no ser porque eres consciente de que tu cuerpo se encuentra en esa calle casi vacía, con esa gente lo suficientemente curiosa como para notar cualquier rastro de tristeza que cruce por tu rostro. Incluso aunque tu mente esté en otro lado, en esos vívidos recuerdos de la peor de las verdades, aquella que te va a completar.
Correr hasta casa, llorar durante días, aguantar la tortura de meses (que nunca te abandonará realmente), y luego avanzar. Avanzar con la certeza de que ‘ya nada peor podría ocurrir’, incluso si sabes que estás equivocada.