Prólogo: LO VUESTRO NO ES NORMAL

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Prólogo



Para Misha Collins, sus compañeros de reparto (los protagonistas de “Supernatural”)  son dos tíos geniales. Nada que ver con la imagen preconcebida con la que llegó a la serie hace dos años. Tardaron segundos en incluirlo en su grupo, aunque lo que Jensen y Jared consideraban  “su grupo” era todo el staff de Sobrenatural.

Pero tenían un punto gamberro que en Jared es evidente y que no te esperabas de Jensen.  Porque el actor que hacía de Dean Winchester tenía esa aura medio mística de persona seria que cualquiera se iba a imaginar que era él el que arrastraba a Jared en sus maquinaciones.

Las bromas comenzaron el primer día de rodaje. De una aún llevaba la prueba en cada capítulo de la serie en que ha aparecido: La gabardina de Castiel.

El look del ángel iba a ser como el de todos los ángeles que aparecerían a continuación: traje negro, camisa blanca y corbata. Así venía especificado en el guión, así lo ensayó y así hubiese sido si no hubiera llegado Jared y le hubiera puesto de los nervios unos segundos antes de entrar en escena haciéndole creer que habían cambiado a última hora de idea y debía llevar gabardina. Claro que la broma terminó creando un nuevo icono de la serie.

Durante dos años sobrellevó como pudo las bromas, prácticamente diarias que aquel par de críos (porque lo eran, en serio) no dejaban de hacerle. Algunas no fueron tan divertidas: que cambien tu colonia por esencia de mofeta, que te birlen el móvil y twiteen en tu nombre, que se beban tu café y dejen en su lugar una taza de manzanilla…

Pero bueno, no era la única víctima de la parejita, ahí todos habían tenido su experiencia, que se lo preguntaran a Jim y a la chica de vestuario, cuando escondieron las gorras de Bobby y las sustituyeron por gorros de lana. O cuando hicieron creer a uno de los becarios de producción que lo despedirían si no se sabía de memoria el exorcismo que solían recitar en casi todas las temporadas.

También es cierto que llevaban bastante bien las bromas que también les hacían a ellos pero, ahí estaba otra vez ese halo de seriedad de Jensen que hacía que nunca fuesen a él directamente  (a menos que la cabeza pensante fuera Jared).

Así habían pasado un par de temporadas geniales pero el ambiente se había enrarecido desde el final de la quinta. Cuando Misha llegó al set para el inicio del rodaje del tercer capítulo de la sexta temporada notó la diferencia. Aunque Jared seguía siendo el mismo torbellino que arrasa con todo a su paso, se había quedado sin escudero (o más bien sin instigador).




Sebastian Roche era el nuevo fichaje de la serie, era diez años mayor que Misha pero tenía cierto encanto personal que hizo que en menos de veinticuatro horas todo el staff comiera de su mano. Incluido el actor que interpretaba a Castiel. Además Seb, tenía la ventaja de saber quién era y a dónde podía llegar, trataba a Jared como el crío que es y el protagonista de Supernatural parecía encontrar en el actor de raíces francesas el compañero de travesuras que sorprendentemente ya no era Jensen.

Pero no se trataba sólo de Jared, Jim, los técnicos, Singer, Ben… El único que no se había dejado engatusar ni un poco era Jensen. Vale, eso era algo normal, Jensen Ackles no es una persona que haga amigos fácilmente, pero eso Sebastian no podía saberlo. No es que no fuera amable, ni agradable, no se trataba de eso. Lo que ocurría era que apenas se relacionaba con nadie, dependía de sus amigos de una forma preocupante para empezar a conocer a las personas, Misha pensaba que su timidez era casi patológica.

­        - ¡Este tío es un genio! - Jared interrumpió el curso de los pensamientos del de ojos azules acercándose junto a Seb, por lo visto habían estado comentando algunas escenas y eso había llevado a una competición de abdominales… - ¿Oye Mish? ¿has visto a Ackles?

­        - Creo que estaba con Robert en la sala de edición - replicó el aludido algo sorprendido por cómo Jensen había pasado de ser Jen o “pecosín” a un impersonal y despectivo Ackles - Jay, ¿vosotros estáis bien?

­        - ¿Quién Seb y yo? Claro - a nadie le gustaba ver a Jared Padalecki serio, era algo que por no ser habitual impresionaba demasiado, y el chico sabía exactamente lo que había preguntado así que esa respuesta dejaba claro que sí ocurría algo entre las dos personas que mantenían la serie en pantalla.

­        - Venga chico busquemos al pecoso y obliguémosle a decidirse por cuales están más definidos ¿tienes miedo? Juegas con ventaja chaval… - intervino el nuevo dando un potente empujón al tejano de casi dos metros que tuvo la virtud de romper la tensión - ¿te apuntas Misha? ¿O te da miedo competir con estos cuerpos tan esculturales?

­        - En otra ocasión, ¿vale? Estoy esperando video llamada de Vicky - una sombra sorprendida surcó el rostro del francés - mi esposa, esperamos un bebé para septiembre

­        - Es genial Mish - sonrió algo distraído Jared - estoy deseando saber lo que se siente.

­        - Un hijo es lo más grande tío, estoy deseando tenerlo en brazos.




Jensen Ackles no paraba de hacer preguntas a Robert Singer, aterrorizado, pues no sabía si iba a estar a la altura de dirigir un capítulo, y ocultando el torbellino de emociones que era su cabeza desde el pasado junio.

Dos meses atrás

Jensen se había divertido con Misha en la convención, pero ya no era lo mismo. Cliff estaba más pendiente de él que de costumbre y las amenazas y los intentos de agresión habían aumentado tras la boda. Realmente se estaba planteando dejar de acudir a más convenciones aunque sabía que eso podía suponer una bajada en la popularidad de la serie que sólo seguía en antena por la fidelidad incondicional de sus fans.

Dannael también estaba muy agobiada. Habían hecho toda esa pantomima por ella y por su trabajo, si ya es difícil para un hombre… una mujer o era Ellen Degeneris o lo tenía imposible. Eran grandes amigos y podía hacerle ese favor mientras ambos estuviesen trabajando. Pero todo lo demás le mareaba: que Jared también decidiera casarse, que Chris y Steve se involucraran en el asunto de Danny liándolo más aún.

El puñetero juicio en el que se arruinaría su carrera...

­        - Oye chico, para ya - el director/productor Robert Singer también había observado el distanciamiento entre sus estrellas, y aunque de momento no afectaba al rodaje, le preocupaba bastante que llegase a ser insostenible - sé que lo harás bien, sabes que todos se volcarán para ayudarte, Jim, Jared…

­        - Bueno, sí - murmuró el pecoso apagando su excitación automáticamente - lo siento Robert, voy a repasar un poco el guión de hoy

­        - Jensen, se que algo ocurre entre tú y Jared…

­        - Es personal

­        - Deja de ser personal cuando nos afecta a todos, chico, arréglalo o finge ¿de acuerdo? El pan de mucha gente depende de ello - lamentaba ser tan directo pero no tenía otra opción que serlo.

­         -Si, lo siento - el actor salió de la sala sumido en sus pensamientos.

Prácticamente todos los miembros del equipo de grabación se habían dado cuenta, y aunque podía mirarse por el lado egoísta, la verdad es que no podían dejar de estar preocupados por la tensión entre los coprotagonistas.

Jared no entendía ese cambio tan radical de actitud. Eran amigos, los mejores del mundo, quería a Jensen como si fuese su hermano, incluso fue uno de los padrinos de su boda y Genevieve también lo apreciaba muchísimo, seguían compartiendo casa durante la temporada de grabación. Pero desde que acabó el rodaje de la quinta el rubio se había ido distanciando, encerrándose en sí mismo.

Al joven actor le repateaba ese distanciamiento. Habían discutido antes de la boda del pecoso porque sabía que no amaba a Dannael y que ella tampoco estaba enamorada de él. Venga ya, ¿Quién se va a una convención sólo cuando tendría que estar de luna de miel? No engañaban a nadie así.

Roche le señaló a su compañero de reparto que salía cabizbajo de su reunión con el director. Y por un momento deseó que todo fuese como un año antes o tan solo unos meses… Corrió hasta alcanzarlo y lo envolvió en uno de sus famosos abrazos de oso a los que absolutamente nadie se resistía.

­        - ¡Eh pecosín! ¿Dónde te habías metido? - exclamó gesticulando exageradamente hasta que Jensen murmuró algo sobre llevar mal el guión - oye, no me engañas, si no soportas que esté por aquí sólo…

­        - No te engaño… me… - El rubio suspiró desalentado durante un segundo, mientras Jared lo abrazaba había creído que todo volvía a la normalidad, pero no quería engañarse a sí mismo y tampoco se permitiría empeorar la complicada situación de su compañero - estoy un poco agobiado y no he podido estudiármelo en condiciones

­        - Eso tiene arreglo - intervino Roche - venga, vosotros sois los expertos y yo el nuevo, echadme un cable con el personaje y te servirá para memorizar tu texto

El veterano actor se quedó de piedra al notar la gratitud de Jensen después de los dos días en los que apenas le había dirigido la palabra. No le habían engañado los técnicos cuando le aconsejaron que no se amedrentara por la seriedad del intérprete de Dean Winchester, “No es antipático Seb” le había explicado una de las maquilladoras, “Sólo es tímido”.

Así que pasaron el resto del tiempo que tenían libre esa tarde repasando las escenas que tenían juntos. Era falso que Jensen no se supiera el guión, y si no lo era lo había memorizado con una lectura.

Al final de la tarde, cuando tocaba rodar la escena de la primera aparición de Balthazar todos los técnicos, maquilladores, regidores, todos los miembros del set de rodaje respiraron tranquilos por primera vez desde la vuelta al trabajo. Los “Jotas” volvían a ser ellos mismos.

­        - Tú terminabas hoy no ¿Seb? ¿te apetece ir a algún sitio a tomarte algo con el pecosín y conmigo? - preguntó Jared cuando terminó el largo día de rodaje

­        - Voy directo al aeropuerto, tengo un avión mañana por la mañana para Los Ángeles - explicó el veterano actor algo cansado - Oye chicos, ha sido genial trabajar con vosotros, ojalá se repita…

­        - Sí, ha estado genial - murmuró Jensen - ¿A qué hora sale tu vuelo? Puedes quedarte en nuestro piso hasta que sea la hora

Roche abrió unos ojos como platos, entonces ¿era cierto que vivían juntos durante el tiempo que duraba el rodaje en Vancouver? Había creído que eran exageraciones de las fans.

­        - Venga di que si Seb, el aeropuerto no es un buen lugar para descansar y podremos charlar un rato… - Añadió el castaño convencido - le diremos a Mish que se venga, lo pasaremos bien.

­        - ¿Y vuestras esposas? ¿No tienen nada que decir?

­        - Genny está en California ultimando algunas audiciones - afirmó Jared con una sonrisa

­        - Y Dannael también está en California - musitó Jensen sin ofrecer más explicaciones - no le importará.

El todo terreno del impresionante guardaespaldas  de los protagonistas dejó a los cuatro hombres frente a la bonita residencia de alquiler. Sebastian  murmuró unas ininteligibles palabras de asombro al entrar en el recibidor. Misha conocía el lugar, ya había estado alguna vez allí. Incluso, más de una, se había quedado a pasar la noche.

­        - No sé por qué esperaba encontrar un solárium portátil en la entrada y esos cuadros que imitan los retratos de Warhol con vuestras caras - se burló el rubio invitado

­        - Estuve a punto de poner uno mío y otro de Jensen, pero me juró que si lo hacía no pagaría su parte del alquiler - acusó el actor más joven frunciendo el ceño

­        - Venga Jay, no me seas paleto, si quieres un cuadro de esos lo pones dónde yo no tenga que verlo… como en tu cuarto o algo así - se quejó el otro inquilino

­        - Si claro, y si lo pongo no entras ¿no?  - gruñó el castaño sorprendiendo a los dos invitados que no sabían que pensar de aquello.

­        - Jay…

­       -  Jen…

­       -  Chicos, ¿no íbamos a encargar algo de comer para la cena?  - Misha interrumpió la discusión, había presenciado algunas desde que conocía a sus amigos, y si dejaba que fueran a más ya podía olvidarse de cenar.

­       -  Sí claro - Jared marcó un número en su móvil y realizó un pedido de tres pizzas sabor barbacoa y cerveza, después preguntó - Bueno ¿y para vosotros qué?

Después de cenar se tomaron unas copas y echaron unas manos de  póker, bromeando con una página de fanfictions guarros basados en Supernatural.

Continuará...