(no subject)
Autor: briece
Historia Original: "Circunloquio".
Género: C. Ficción.
Claim: General.
Tabla: 30 Días
Prompt: # 13 - Un empujón.
Título: Empujón.
Extensión: 313 palabras.
Resumen: Qué fácil es acosar al nuevo en un banquete...
Advertencias:
Notas: Sin betear. Y todavía no encuentro un nombre que me guste para este personaje ...
* * * *
~Años atrás, en otro lugar de la galaxia, en un salón de banquetes~
Los comentarios de alrededor eran burlones y hostiles. Y mientras empezaba a sentirse acosada y rodeada por los hombres le era obvio que Kazimeras Zydrunas no iba a ser de ninguna ayuda. El pánico intentó asentarse en algún lugar por debajo de su bazo, mientras que músculos rígidos iniciaban una lucha propiciada bajo la premisa contradictoria de jugar al muerto y de huir de allí. Y Eli chilló de nuevo en algún lugar, sólo que nadie más que ella podía escucharle, así que le empujó hacia un lado, donde no estorbara y no le dañaran. Un musculo saltó un segundo en su mejilla en lo que podría haber pasado por una semisonrisa un segundo antes de que diera un paso atrás y la danza comenzara.
Su pierna derecha se enredó en el mantel largo que colgaba de la mesa llena de comida y copas Escuchó vagamente un resoplido de risa contenida de Zydrunas, aunque a él no lo estaba mirando, y luego su otra pierna libre pateó certeramente la pata de la mesa que daba hacia la pista, mientras que su brazo seguía el movimiento de volcamiento alzando el mantel como si estuviera levantando una tienda contra el viento. Y después sólo la soltó, apartándose.
Hubo un ruido tremendo y luego un silencio.
La gente alrededor miraba sin comprender en que momento los oficiales habían quedado bañados en comida y tragos, antes de que estallara una oleada de risas que le dieron ganas de cubrirse los oídos y dejar que Eli nada más chillara.
Sintió una mano firme en su brazo, y ella nada más se concentró en el anillo que tenía el hombre en uno de los dedos, dándose permiso para dejar el cuerpo laxo. Sobre su cabeza podía escuchar las preguntas del hombre que la sujetaba, y la respuesta de Zydrunas:
-¡Ahora sí vas a creerme que ella me empujó!
Historia Original: "Circunloquio".
Género: C. Ficción.
Claim: General.
Tabla: 30 Días
Prompt: # 13 - Un empujón.
Título: Empujón.
Extensión: 313 palabras.
Resumen: Qué fácil es acosar al nuevo en un banquete...
Advertencias:
Notas: Sin betear. Y todavía no encuentro un nombre que me guste para este personaje ...
* * * *
~Años atrás, en otro lugar de la galaxia, en un salón de banquetes~
Los comentarios de alrededor eran burlones y hostiles. Y mientras empezaba a sentirse acosada y rodeada por los hombres le era obvio que Kazimeras Zydrunas no iba a ser de ninguna ayuda. El pánico intentó asentarse en algún lugar por debajo de su bazo, mientras que músculos rígidos iniciaban una lucha propiciada bajo la premisa contradictoria de jugar al muerto y de huir de allí. Y Eli chilló de nuevo en algún lugar, sólo que nadie más que ella podía escucharle, así que le empujó hacia un lado, donde no estorbara y no le dañaran. Un musculo saltó un segundo en su mejilla en lo que podría haber pasado por una semisonrisa un segundo antes de que diera un paso atrás y la danza comenzara.
Su pierna derecha se enredó en el mantel largo que colgaba de la mesa llena de comida y copas Escuchó vagamente un resoplido de risa contenida de Zydrunas, aunque a él no lo estaba mirando, y luego su otra pierna libre pateó certeramente la pata de la mesa que daba hacia la pista, mientras que su brazo seguía el movimiento de volcamiento alzando el mantel como si estuviera levantando una tienda contra el viento. Y después sólo la soltó, apartándose.
Hubo un ruido tremendo y luego un silencio.
La gente alrededor miraba sin comprender en que momento los oficiales habían quedado bañados en comida y tragos, antes de que estallara una oleada de risas que le dieron ganas de cubrirse los oídos y dejar que Eli nada más chillara.
Sintió una mano firme en su brazo, y ella nada más se concentró en el anillo que tenía el hombre en uno de los dedos, dándose permiso para dejar el cuerpo laxo. Sobre su cabeza podía escuchar las preguntas del hombre que la sujetaba, y la respuesta de Zydrunas:
-¡Ahora sí vas a creerme que ella me empujó!