Dec 13, 2008 12:57
Titulo: Libros.
Fandom: Harry Potter.
Claim: El Trío de Oro.
Beta: Nekoham.
Palabras: 690.
Notas de Uko-chan: Respuesta a la última actividad del mini-período del Foro Los Malos Fics. Soy miembro de La Sociedad de Cancerberos.
Summary: Mediante una broma, Harry y Ron conocen un secreto de Hermione.
--------------------------------
-
Libros.
-
Harry Potter y Ronald Weasley estaban cansados de la actitud de Hermione Granger.
Ahora que la guerra había terminado, ella insistía en que estudiaran para tener sus EXTASIS aprobados. Porque sin ellos, no podrían conseguir ningún trabajo, a pesar de la fama que se habían labrado.
-¿Venganza? -preguntó Harry, pestañeando varias veces.
-Sí, Harry -murmuró Ron, cruzándose de brazos-. Una pequeña venganza. ¿Ella no paró hasta convencernos de que estudiáramos para pasar esos estúpidos exámenes, cierto? No estoy muy feliz con esto y quiero darle una lección.
-Pero, ¿cómo? Ella es demasiado inteligente y tampoco quiero dañarla.
El pelirrojo frunció el ceño.
-Ni yo, es mi novia después de todo.
-¿Entonces cómo?
-¿Qué es lo que Hermione ama más en este mundo?
-Er… -Dudó unos segundos. -¿Estudiar y leer libros de más de quinientas páginas?
Los ojos azules brillaron.
-¡Exacto! ¡Un libro! ¡Y sé perfectamente quién nos puede ayudar con ello!
Al día siguiente, los dos amigos se reunieron con Charlie Weasley y, mucho a la sorpresa de los dos muchachos, el domador de dragones les dio la idea perfecta para tomar su pequeña venganza.
El número doce de Grimmauld Place fue el lugar que ella eligió para que estudiaran para los exámenes y el mismo lugar donde sucedería la broma. Cuando Hermione llegó, su novio y mejor amigo ya se sentaban en la biblioteca, simulando estudiar y con una pila de libros viejos en una esquina de la mesa.
-¿Y éstos qué son? -preguntó ella, mientras dejaba su mochila en la silla al lado de Ron.
-Libros a los que no le encontramos ningún uso -dijo Harry, encogiéndose de hombros-. Estaban en el sótano de la casa y Kreacher me los trajo. Pienso tirarlos.
Obviamente, la reacción de Hermione fue violenta.
-¡No hay libro que no pueda tener uso, Harry Potter! ¡Si tú no le encuentras uso, alguien debe tener! ¡Los libros no se deben tirar!
-¿Eso piensas? -preguntó Ron, con un brillo malvado en sus ojos-. Lee los títulos y las contratapas y dinos qué piensas.
Ella bufó, tomó uno de los libros de la pila y comenzó a leer. A medida que iba pasando de los títulos y contratapas, la Gryffindor iba poniéndose más y más roja. Harry y Ron compartieron una sonrisa secreta. ¿Quién iba a pensar que Charlie pudiera tener libros sucios de sexo gay y heterosexual en su biblioteca?
-Ti-tienen razón -tartamudeó Hermione-. No creo que nadie le pueda encontrar uso a esto. Es denigrante y nadie lo debería leer.
Diciendo eso, ella transfiguró una hoja de papel en una caja y levitó los libros a ella.
Ella había caído en el truco, tal y como previsto.
Esa misma tarde, Ron y Harry entraron a hurtadillas a la cocina. Y, como lo esperaban, encontraron a la chica leyendo una de las novelas sucias. Los extrañó ver que la primera que había escogido era una de temática gay. Una historia entre un vampiro antiguo y un hombre lobo joven.
-¿Divirtiéndote? -susurró Ron al oído de su novia, haciéndola saltar de susto.
Ella se giró, con los ojos como platos, mirándolos con alarma.
-Y-yo… no es lo que piensan -masculló.
-Mmmhhh. -murmuró Harry-. Creo que no hay libro que pueda hacer retroceder a la gran Hermione Granger. Por más que vaya en contra de sus pensamientos.
-¡No es eso! -chilló-. ¡Sólo los estaba catalogando! -Frunció el ceño. -Pero no hay caso, no veo qué persona tendría gusto de leer ésta porquería. (1)
Potter y Weasley se rieron de ella, mientras Granger colocaba airadamente el libro devuelta en la caja.
A pesar de sus palabras, ni Harry ni Ron la vieron salir nunca con la caja de la casa. Es más, hubo días donde ella decretó que necesitaba aislamiento para estudiar y estaba horas encerrada en su habitación en la casa de Sirius. Cuando salía, ellos la veían algo acalorada y de vez en cuando dejaba salir risitas disimuladas, como si se acordara de algo.
El caso fue que los dos amigos a pesar que su broma les salió como esperaban, tuvieron que comprar copias de los libros que Charlie les había prestado, porque ellos desaparecieron “misteriosamente”.
¡¡¡Fin!!!
(1) Entiendan que no quiero hacer a Hermione homofóbica o algo por el estilo, ella simplemente desea ocultar de sus amigos que le gusta leer novelas sucias XD
hermione granger,
reto,
ron weasley,
mini periodo,
harry potter