Pasada la fiebre de los Oscars *baila el Jai Ho*, vuelvo con mi gusto simplón y sin criterio para hablaros de mi última y vergonzosa obsesión: Merlin. He pasado las vacaciones de Carnaval que me otorga el aguantar educar a los hijos de los demás viendo esta serie con mi estilo característico: zamparme 13 capítulos en dos días (LOL). Dos días más dedicados a buscar iconos y leer fanfic me convierten en uno de los seres más patéticos de la Tierra pero, ¡ey!, estoy de vacaciones, dejadme en paz con mi tiempo libre.
Merlin es una serie tontuna al estilo de Robin Hood y es ahí donde radica su encanto: tiene una fotografía preciosa, banda sonora de cuento, efectos especiales que te dan risa (como los de Buffy) y un H&M medieval algo más discreto que el de Robin pero con auténticos puntazos (como cuando Morgana pide prestadas las túnicas al guardarropa de Rome o su abuela la del pueblo le teje los puños de punto de su capa de invierno, bwajajaja!). Trata de la juventud del mago Merlín y su relación con Arturo (Arthur en la serie, obviously), y se toma toda la libertad del mundo con las leyendas artúricas, haciendo que ambos tengan la misma edad, que Arturo ya sea príncipe de Camelot, que Ginebra (no sólo Guinevere en la serie, sino Gwen, para partirse) sea la hija del herrero y que Morgana sea AWESOME a secas, que no haya lazo sanguíneo entre ella y Arturo y que la UST se desvíe de tal forma que te olvides por completo de que, según la leyenda, Arturo y Ginebra estaban casados.
¿Importa este poco respeto a la leyenda original? La respuesta es: NO.
¿Y por qué no importa?
Fácil.
Porque Merlin es gay, está enamorado de Arthur, Morgana tiene el corazón más bueno de la corte, Gwen es negra y Arthur llega a unos niveles de polvorosidad que ahsfdajkdaljhsgdfjksgñ. ¿He mencionado que el padre de Arthur Pendragon, Uther, es Anthony Head, o sea, Giles (Buffy), GILES, con corona y con capa y con guantes de piel y con espada y haciendo de cabrón con pintas y, o sea, GILEEES!!!!!1? Pues eso, que Merlin es gayer, pero no tan gayer como su maestro Gaius. O bueno, igual sí que es más gayer Merlin, que literalmente dice en una escena Faster, Arthur, faster! y no me invento nada *SE DESPIPORRA*
Oh, man. Qué serie tan graciosa.
Gwen es mona y adorable pero no me chinguen la OTP, hoygan, que no hay química por ningún lado (y si no, haber cambiado las actrices cuando hicísteis el casting), y sin embargo Morgana y Arthur se conocen desde niños porque ella es la protegida del Rey (protegida, que no hijastra) y se chinchan y flirtean y se miran y no se soportan y SE MIRAN, y el día que estos dos se rocen sin querer van a terminar comiéndose la boca empotrados en la pared, ai telyu.
Morgana es una mezcla entre Kate Winslet y Keira Knightley con acento irlandés y es PRECIOSA, y hasta que no avance MIL la historia y se convierta en la némesis de Arthur, está llena de buenos sentimientos y de AMOR DEL PURO Y DEL VERDADERO por el Prince of Prathood este super afdsfdjaklñfd, que no sé ni cómo ni cuando acabará con la Gwen porque habría que meter la UST con calzador, EN FIN.
Y Arthur, ARTHUR *se abanica*, que en primer episodio piensas "Bah, un wannabe de Brad Pitt" pero en el cuarto ya le has tirado las bragas a la pantalla irremediablemente porque es un canalla arrogante que enseguida demuestra ser mejor que su padre (¡Giles!) y estar lleno de valor, nobleza y justicia, y tiene un pelo precioso que le brilla bajo el sol y maneja super bien cualquier arma y tiene LA VOZ y ASDFGHJKLÑSDFGKJHASHLÑ.
Porque tiene un castillo:
Colores bonitos:
Sombras bonitas:
Paisajes que cortan las respiración:
Fantasía:
Caballeros de brillante armadura:
Chicas que merecen la pena:
Gente guapa que queda bien junta:
Gente guapa que queda bien sola:
Gente a la que le queda bien la luz de las ventanas:
Y un chico al que le queda bien cualquier cosa, francamente *asdfghjklñamjhgfghjasdñlkj*
Keep the magic secret.
¿Pero sabéis qué es lo mejor de esta serie? Que es tonta y fácil y cuenta cosas bonitas y hay magia y aventuras y espadas y bestias mitológicas y ¡magia! y El Acento y leyendas y, ¿he dicho que sale Giles?, ¿y que Arthur me pone potrísima? Merlin es todo lo que fue Robin Hood antes de que la echasen a perder, aunque la historia es un poco más oscura que la del proscrito saltimbanqui. Si te gustó Robin, dale una oportunidad. Tengo la absoluta tranquilidad de que no me defraudará porque, para mí, la leyenda de Arturo nunca trató de una OTP mítica, sino de un rey que se ganó el trono con su nobleza y, además, esta serie al menos ha tenido la decencia de pasarse la leyenda por el forro desde el principio, así que no mienten a nadie.
Y si no, siempre me quedarán Giles, El Acento y Arthur con armadura, sin ella, con camisas abiertas y con LA VOZ *drools*.
Aunque de lo que de verdad trata esta serie es de
las cejas de Gaius, no nos engañemos.