Tus sueños son veleros...
Hace tan sólo unas 24 horas que me encontraba en sala Joy Eslava disfrutando del directo de Dorian. Volvían a Madrid para presentar su nuevo álbum, tan sólo unos meses después de que cerraran la gira de La ciudad subterránea el pasado mes de septiembre en el festival DCode. Esta vez sí que tuve acompañante, lo que hizo que la siempre intimidante primera fila - sobretodo en conciertos sin valla entre la pista y el escenario, como anoche - lo fuera bastante menos.
#490 - BB Brunes - Grande Rio
El grupo francés BB Brunes abrió una noche que, ya desde ese momento prometía que iba ser muy especial, y es que éstos hicieron un despliegue de pop energético de corte británico con grandes estribillos y guitarras que recuerdan a los mejores tiempos de Franz Ferdinand, pero con ese savoir faire tan característico de los músicos del país vecino. En unos 10 temas condensaron lo mejor de sus tres álbumes, siendo Grande Rio, Dis-Moi o la más melosa, LaLaLove You algunas de las más destacadas del set.
#491 - Dorian - La Tormenta De Arena
Después les tocó el turno a Dorian, con un público que les esperaba hambriento de hits e himnos generacionales para berrear colectivamente. Y eso fue lo que tuvimos, una hora y media en la que se condensaron prácticamente todos los temas de La velocidad del vacío, salvo El sueño eterno; la mitad de La ciudad subterránea y algunos guiños a El futuro no es de nadie. Los temas nuevos fueron recibidos de forma calurosa por el público, de entre los que destacaron la potente Tristeza, la evocadora El temblor, y Las palabras, que supuso uno de los momentos más épicos y poéticos de la noche, con recitado de la letra incluido. Veleros, Paraísos Artificiales y A cualquier otra parte estuvieron entre las más memorables, aunque el clímax absoluto de la noche llegó con La tormenta de arena, con el público -y una servidora- fuera de sí, y encauzando el final del concierto que terminó con una lluvia de globos blancos mientras sonaba Los amigos que perdí, y un último bis que llevó a la banda a bajarse del escenario para tocar en acústico Tan lejos de ti rodeados por sus fans.
El haber girado incesantemente durante los últimos años ha hecho que su directo sea mucho más pulido y suenen más limpios y compactos que nunca, además, la saturación de graves tan característica de Joy Eslava jugó a su favor a la hora de darle contundencia al sonido. Pero, por encima de la mejoría técnica, el concierto de anoche brilló por el alto contenido emocional del mismo, alcanzado gracias a la complicidad de un grupo modesto pero que cree en lo que hace y un público que le ha sido fiel desde el principio. Y, sí, puede que Dorian no sean el mejor grupo del mundo, ni siquiera de España, pero si te gusta su música, ellos ofrecen una de las experiencias en vivo más especiales que se pueden tener hoy en día.
#490 - BB Brunes - Grande Rio
El grupo francés BB Brunes abrió una noche que, ya desde ese momento prometía que iba ser muy especial, y es que éstos hicieron un despliegue de pop energético de corte británico con grandes estribillos y guitarras que recuerdan a los mejores tiempos de Franz Ferdinand, pero con ese savoir faire tan característico de los músicos del país vecino. En unos 10 temas condensaron lo mejor de sus tres álbumes, siendo Grande Rio, Dis-Moi o la más melosa, LaLaLove You algunas de las más destacadas del set.
#491 - Dorian - La Tormenta De Arena
Después les tocó el turno a Dorian, con un público que les esperaba hambriento de hits e himnos generacionales para berrear colectivamente. Y eso fue lo que tuvimos, una hora y media en la que se condensaron prácticamente todos los temas de La velocidad del vacío, salvo El sueño eterno; la mitad de La ciudad subterránea y algunos guiños a El futuro no es de nadie. Los temas nuevos fueron recibidos de forma calurosa por el público, de entre los que destacaron la potente Tristeza, la evocadora El temblor, y Las palabras, que supuso uno de los momentos más épicos y poéticos de la noche, con recitado de la letra incluido. Veleros, Paraísos Artificiales y A cualquier otra parte estuvieron entre las más memorables, aunque el clímax absoluto de la noche llegó con La tormenta de arena, con el público -y una servidora- fuera de sí, y encauzando el final del concierto que terminó con una lluvia de globos blancos mientras sonaba Los amigos que perdí, y un último bis que llevó a la banda a bajarse del escenario para tocar en acústico Tan lejos de ti rodeados por sus fans.
El haber girado incesantemente durante los últimos años ha hecho que su directo sea mucho más pulido y suenen más limpios y compactos que nunca, además, la saturación de graves tan característica de Joy Eslava jugó a su favor a la hora de darle contundencia al sonido. Pero, por encima de la mejoría técnica, el concierto de anoche brilló por el alto contenido emocional del mismo, alcanzado gracias a la complicidad de un grupo modesto pero que cree en lo que hace y un público que le ha sido fiel desde el principio. Y, sí, puede que Dorian no sean el mejor grupo del mundo, ni siquiera de España, pero si te gusta su música, ellos ofrecen una de las experiencias en vivo más especiales que se pueden tener hoy en día.