The Reflektor Tapes
#664 - Arcade Fire - Flashbulb Eyes
Ayer noche tuve la rara oportunidad de disfrutar en pantalla grande de un documental de una banda de rock. Aunque el documental musical es uno de mis géneros favoritos, la verdad es que rara vez estas cintas llegan a la gran pantalla. Algunos ejemplos que se han podido ver en los últimos tiempos son los relativos a artistas con finales trágicos y leyendas negras - Amy Winehouse y Kurt Kobain -, y otros se deben a la importancia social o artística de los retratados en cuestión - Pussy Riot o Nick Cave-.
Bien, aunque de forma muy limitada, hemos podido disfrutar en muchos cines de España de The Reflektor Tapes, la cinta de Kahlil Joseph que retrata a Arcade Fire entre la grabación de su último álbum entre Jamaica, Haití y Nueva York hasta la puesta de escena en el mismo alrededor del mundo. Desde su estreno en el Festival de Toronto has tan sólo unos días, las críticas han sido muy polarizadas, y es que convencional no es no adjetivo que se pueda aplicar a este trabajo.
Joseph hace uso de un estilo visual apabullante en el que las fronteras entre el documental, el video musical, y el cine experimental se funden y confunden constantemente. La estructura tiende más al collage de imágenes y sonidos que a la sucesión concreta de una narración o un concierto, lo que hace que la sensación del espectador sea algo asfixiante. A pesar de esto, hay que decir que la belleza de las imágenes es increíble, y es que pocas veces se ha filmado a una banda tanto de forma íntima, como encima del escenario con semejantes técnicas y resultados. Los episodios en las calles de Jamaica y Haití nos muestran un universo que pocas veces tenemos la oportunidad de ver en Occidente, con sus espectaculares colores y la intensidad de su cultura; mientras que las escenas de directo están tomadas desde el mismo escenario, y con un detalle y fotografía que te deja noqueado.
En fin, que aunque la factura impresionista y de vanguardia pueda resultar excesiva en ciertos momentos, la experiencia estética bien vale los 6€ de la entrada de cine.
Ayer noche tuve la rara oportunidad de disfrutar en pantalla grande de un documental de una banda de rock. Aunque el documental musical es uno de mis géneros favoritos, la verdad es que rara vez estas cintas llegan a la gran pantalla. Algunos ejemplos que se han podido ver en los últimos tiempos son los relativos a artistas con finales trágicos y leyendas negras - Amy Winehouse y Kurt Kobain -, y otros se deben a la importancia social o artística de los retratados en cuestión - Pussy Riot o Nick Cave-.
Bien, aunque de forma muy limitada, hemos podido disfrutar en muchos cines de España de The Reflektor Tapes, la cinta de Kahlil Joseph que retrata a Arcade Fire entre la grabación de su último álbum entre Jamaica, Haití y Nueva York hasta la puesta de escena en el mismo alrededor del mundo. Desde su estreno en el Festival de Toronto has tan sólo unos días, las críticas han sido muy polarizadas, y es que convencional no es no adjetivo que se pueda aplicar a este trabajo.
Joseph hace uso de un estilo visual apabullante en el que las fronteras entre el documental, el video musical, y el cine experimental se funden y confunden constantemente. La estructura tiende más al collage de imágenes y sonidos que a la sucesión concreta de una narración o un concierto, lo que hace que la sensación del espectador sea algo asfixiante. A pesar de esto, hay que decir que la belleza de las imágenes es increíble, y es que pocas veces se ha filmado a una banda tanto de forma íntima, como encima del escenario con semejantes técnicas y resultados. Los episodios en las calles de Jamaica y Haití nos muestran un universo que pocas veces tenemos la oportunidad de ver en Occidente, con sus espectaculares colores y la intensidad de su cultura; mientras que las escenas de directo están tomadas desde el mismo escenario, y con un detalle y fotografía que te deja noqueado.
En fin, que aunque la factura impresionista y de vanguardia pueda resultar excesiva en ciertos momentos, la experiencia estética bien vale los 6€ de la entrada de cine.