Tabla Ventura: 16, 18, 21, 25, 27
Esto es la fiebre del Death Note. Y no, no tiene nada wue ver con el hecho de que quiera acabar la tabla en los tres meses correspondientes, usease, antes del 9 de febrero. Qué va. Dejadme en paz, que viene Misa:
16. Regalo
Misa Amane estaba perdida en un extraño universo vacío. Faltaban cosas. Faltaba algo. No sabe cómo ha establecido ese vínculo que tiene con Light. Sabe que son novios, sabe que hay una razón. Pero si la piensa de verdad, ahí falta algo.
Puede que Light lo encuentre todo normal. El hecho de estar con la policía no es extraño, sobretodo si persiguen a un tal Kira que hace tanto daño. Pero para Misa, el cuaderno de muerte representaba mucho. Demasiado como para no pensar que falta algo. Sin llegar más lejos, claro. No recuerda nada y hay días en los que piensa sinceramente que se está equivocando.
Seguramente sea mentira. Seguramente no falte nada. Simplemente le falla la memoria. A Light no le quiere preguntar. Se supone queson novios por algo. Si a rlla se le ha olvidado, a lo mejor le sienta mal. Pero Light tampoco sabría resolver su problema. Piensa que está con ella porque le gusta. Aunque no sabe qué es lo que le gusta de ella.
Tocar el cuaderno es entonces como un regalo. Un regalo caído de algún lugar de la mente de Light. Él lo ha recordado y ha hecho que ella lo recuerde. Ahora ya sabe por qué. Ahora entiende. Y es feliz de seguir con Light, con Kira. Sus recuerdos perdidos son un regalo de Kira. Un regalo de novios.
18. Consejo
L te ha pillado, Misa. Te ha pillado ya la primera vez. ¿Quién no dice que vayas a caer otra vez en alguna trampa suya? L es listo de narices. Es más listo que nadie. Puede que Kira alcance su lucidez... Pero lo que cuenta ahora es L.
Cada vez que aparece con Light en su suite de hotel la mira. Medio milisegundo. Como tentándola: mueve un solo dedo. Intenta mover un solo dedo y verás. Misa no se encoge de miedo ni mucho menos. En esos momentos está realmente contenta.
Por las noches, cuando repasa todas esas miraditas, no parecen ninguna amenaza. No con Kira tan cerca protegiéndole, claro. Pero la mradas de L parecen llevar un mensaje en la retina, un mensaje que no puede transmitir, si no que se siente.
No sigas por ese camino, parece que dicen. Parecen consejos de conducta. Consejos. Contra Light. Contra Kira. Para seguir el modo de vida que a L le parece correcto... Esas miradas dan un miedo terrible.
21. Búsqueda
Light quiere el nombre de L. Lo quiere ahora. Lo quiere ya. Se supone que cuando vuelves a tocar el cuaderno, vuelven los recuerdos de todo lo que has vivido con él. Misa recuerda caras. Mil caras. Mil nombres. Más de mil números que pasan delantede su cara. Números, caras nombres. ¿Cual es de quién?
Pero los criminales que ha borrado de la faz de la tierra dan igual. Están todos muertos. Los ha escrito uno tras otro en el cuaderno. Uno y otro y otro. Muerte, muerte, muerte. Los ha eliminado. Como le dijo Kira. Como le dijo Light. Y ahora Light quiere un nombre. No una lista. No una cara. No una esperanza de vida. No. Quiere el nombre de L.
Misa recuerda la escena a la perfección. Ve los jardines de la Universidad, recuerda el suelo asfaltado y la hierba intentando abrirse paso por algún resquicio. Recuerda a Light miràndola con aprensión. Recuerda la cara de L. Recuerda hasta su esperanza de vida pero no ve el nombre. Se le ocurre Higurashi, pero no es, porque no empieza por L. Se le ocurre Ren, que es como si tuviese una L en vez de la R. Se le ocurren muchos nombres con sus apellidos y no tiene ni idea de cual era. Seguramente haya matado a todos esos nombres. No son el de L.
Se esfuerza en buscar. Recuerda que se repetía el nomnre en la celda, muy de vez en cuando. Para verificar que se acordaba. Pero la búsqueda es inútil y lo sabe. Mira a Kira ante ella: no me acuerdo.
25. Alegría
Por alguna razón que no alcanza a entender, está contenta. Se pasa las tardes en esa suite de hotel soñando despierta. Va a las actuaciones como en una ensoñación. Y vuelve en una nune a tiempode ver a Light. Viene con L.
Misa deja de prestarle atención a L. Antes era todo más normal. Ahora le ve la cara e intenta recordar su nombre una y otra vez. Nada de nada.
Es gracioso que cuando muere L, cuando muere Rem, lo recuerda. Recuerda el nombre. Está segura de que es eso. De que es ese. Pero ya da igual. Kira ya ha matado a su mayor enemigo. Ya le ha mirado con la cara más sádica que ha podido. Rem ya ha desaparecido. Ya nadie la protege. Pero da igual.
Da igual porque está con Kira. Kira es L. Y todos ellos son Light. Su amado y adorado Light. Así que, ¿como se puede estar triste si la vida te sonríe de esta forma?
27. Ídolo*
Una chica curiosa, Misa Amane. Se muda a Tokyo tras la aparición del segundo Kira, y mantiene una relación estrecha con Light Yagami. Es de dominio público que simpatiza con las ideas de Kira porque vengó a sus padres asesinados. El hecho de encontrar el pelo de un mismo gato y la misma cinta adhesiva en los sobres del segundo Kira como en su apartamento son pruebas incriminatorias suficientes para arrestarla.
Antes de eso, sin embargo, no era más que una modelo bastante guapa que salía en las revistas de adolescentes. L las veía de vez en cuando. Si tiene algún punto débil (Kira añadiría su obsesión por la legalidad, claro) ese son las revistas de jóvenes. No mintió cuando, frente a Misa en los jardines de la Universidad, le dijo que era fan suyo. Lo era.
Lo era y puede que lo siga siendo pero distingue sin problemas a un ídolo imaginario que aparece en revistas de un sospechoso encerrado, con camisa de fuerza y los ojos vendados... Sin posibilidad alguna de moverse. Quizás, en algún punto de su día - esos en los que el sueño casi le vence, por mucho miedo que le tenga - piensa que es una pena. Una chica tan guapa. Pero la justicia prevalece. El hacer de poli es siempre más fuerte que el ser un medio adolescente medio hombre. Los ídolos son para los estúpidos.