Tabla Oscar Wilde: 2
He aqui, la tabla Oscar Wilde, o parte de ella. Con Molly II y James II como protagonistas.
[Te lo diré si prometes solemnemente contárselo a cualquier otro.
Molly Weasley II tiene un padre, una madre y una hermana de la que ha esperado durante diez años el nacimiento. Ella quería ser como su primo James II, que es de su misma edad - han nacido el mismo día - y tener hermanos. Al fin lo consiguió. Bueno, ya que hablamos de James, se puede decir que esos dos son inseparables. A donde vaya uno, va el otro y si alguien tiene la desgracia de tenerlos en su casa no los verá separados, sino juntos - y haciendo alguna trastada que se le ocurra a James. Él suele ser el que lleva las riendas en cuanto a trastadas se refiere. Ella es un poco más razonable, aunque nunca cuestione a su primo.
A Molly II le gusta sentarse en el borde de la silla, sin apoyarse en el respaldo, mientras que James se sienta en el borde y usa la silla de tumbona. A Molly le gusta fijarse en los detalles que nadie más ve y demostrados a James que los detalles son importantes. A Molly le gusta llevar el pelo liso y naranja largo y bien cuidado mientras que James se lo corta siempre para no dejar ver el desorden que se le forma en la coronilla pelirroja. A Molly le gusta sentirse identificada con su abuela y tocaya, igual que James siente mucho honor al llevar los nombres de dos merodeadores. A Molly le gusta emparejar a la gente y sobretodo a James con quien menos te lo esperes. A James le gusta sufrir los castigos de sus bromas y no le importa hacer el doble de trabajo y dejar libre a Molly.
Y esas son las preferencias que les llevaron a la situación que nos concierne.
Molly estaba sentada a la mesa de Gryffindor mirando su plato sin saber muy bien qué hacer. Estaba en sexto curso y llevaba los dos meses de clase intentando seguir el trabajo que había dejado en el aire al final del curso anterior. Había en su curso, casa Ravenclaw, rubia, pelo rizado y ojos marrones, una chica que se llamaba Julie. La había conocido el año anterior cuando estudiaban juntas para los TIMOS. Se había dado cuenta de que a Julie le gustaba su primo James y se había metido en la cabeza emparejarlos. Claro que las vacaciones se lo habían impedido. En ellas, James había estado con dos chicas y ella con un chico. Todo había acabado y ahora Molly tenía puestas sus esperanzas en esos dos. Qué más decir que no pegaban ni con cola. Por su lado, James ideaba una nueva trampa para su némesis: Kyle Smith, Slytherin, pomposo y egocéntrico. Un mimado.
Molly estaba sentada mirando al vacío y James se dirigía a ella por inercia, cuando pasaron dos cosas a la vez: Julie, el objetivo de Molly, se sentó en la mesa de Ravenclaw justo en frente de ella; y Smith, el objetivo de James, se levantó de su mesa para acercarse a Julie. Los dos primos Weasley reaccionaron pegando un bote. Nada más. Pero cuando James se sentó al lado de Molly, los dos miraban al mismo punto.
-Mo... Dime cómo puedo cabrear verdaderamente a Smith.
-Hola Jim, que bien verte aquí.
-¿Desde cuando me saludas?
-Creo que la mejor manera y la que le llegará más adentro es quitándole su nueva presa-Molly señaló sin disimulo a Julie y Kyle Smith. El chico estaba a las claras ligando con ella y Julie se daba cuenta y le hacia más gracia que otra cosa, con lo que se burlaba de él, lo que provocaba mayor interés en el chico.
-¿Cómo se llama esa chica? Jane.. Judith...
-Julie.
-Eso. Parece que se lo pasan bien.
-Ay, James, es divertidísimo verlos. Julie se está burlando de Smith en sus narices y el otro solo pone cara de embobado.
-¿Qué dices? ¿De dónde sacas eso?
-Se ve a las claras.
James se levantó. No pensaba sinceramente en la chica que le había señalado su prima sino en joder lo más posible a Kyle Smith. Llegó a la mesa de Ravenclaw en un santiamén, y se inventó la primera excusa que le vino a la cabeza.
-Hola Julie. Me preguntaba si sigues teniendo esos horarios autorellenables -por lo menos recordaba que era ella la que le había ayudado a aprobar más TIMOS de los que había previsto analizando sus notas.
-Potter.
-Smith. No te había visto.
-Estaba hablando yo con ella.
-Julie, si te molesto dímelo y ya vendré más tarde.
-No pasa nada James, solo hablábamos. Si quieres los horarios, debo de tener unos cuantos en la Sala Común.
-Gracias, pero no quiero molestar.
-Ya ves, Potter...-empezó a decir Smith saboreando la victoria.
-No pasa nada, vente y te los doy. Kyle, nos vemos en Pociones, ¿vale?
James siguió a Julie con el regustillo a gloria que le había dejado la cara de frustración de Kyle Smith.
Molly II dio su trabajo diario por concluido. Ya seguiría más tarde. Y añadió a su mente que el primer paso: que James se fije en Julie, estaba hecho. Algún día tendría que agradecer a Kyle Smith. Aunque dudaba que le hiciera ningún tipo de gracia.
Así, Molly se tiró el resto del día de muy buen humor. Tanto que sus amigas le preguntaron qué era lo que la ponía tan eufórica.
-Os lo diré pero es un secreto. No podéis contarlo.
-Ya, ya...
-Al fin conseguiré juntar a James con Julie.
-Mo... ¿Tú crees que pegan?
-Son contrarios, se complementan... ¡Es perfecto!
-Bueno, sea como sea, inténtalo si te hace ilusión.
Asi, la noticia fue corriendo por Hogwarts, variando y tergiversándose.
Una de las amigas de Molly se acercó a su hermana pequeña y confidente y le dijo:
-Molly está emparejando a James con esa Julie, la de Ravenclaw. ¿Te parece normal? ¿Es que no se acuerda que estuve saliendo con él?
-Eso fue hace dos años.
-Aún me duele.
La conversación se quedó ahí. La nueva portadora de la noticia se quejó a sus amigas de lo pesada que era su hermana:
-Solo porque James Potter ya no se fija en ella y va con Julie...
Una amiga de la hermana de la amiga de Molly fue a cotillear con la cotilla del curso superior:
-¿Sabes que a James Potter le gusta Julie?
La siguiente lo comentó con los chicos de su curso.
-Al parecer James Potter está saliendo con Julie.
Y cada componente de el grupo se lo contó a alguien, pero sin olvidar jamás decir:
-Pero no se lo digas a nadie.
Y así a los tres días, un amigo de James se le acercó y le preguntó:
-¿Eh, estás con Julie?
-¿Ella? No, ¿quién te lo ha dicho?
-Lo dicen por ahí...
-Pues que dejen de hacerles caso a los cotilleos.-James se caracteriza por lo poco que le importa lo que piensen de él los demás.
Ese mismo día, James habló con Molly sobre el tema:
-Oye Mo, ¿sabes que dicen por ahí que estoy saliendo con Julie? Pero no es verdad. Esperemos que Kyle se lo crea y se cague en mí.
-¿Qué dices? ¿Quién te ha dicho eso?
-Un amigo.
-Pero... Ahora vuelvo.
Molly había detectado a las dos chicas a las que les había contado lo de James y les preguntó directamente cuál de las dos había soltado prenda. Pero obviamente, las dos lo negaron. Y como eran amigas, se creían entre si.
Después del encuentro, sin embargo, la chica que le había contado a su hermana el cotilleo sobre James fue a preguntarle si había dicho algo por ahí.
-Lo mencioné de pasada...
Se había enterado todo el colegio. Mejor para James. Mejor para...
Molly pensaba en Julie y en que pasaría si se enteraba. Así que puso en practica otro cotilleo:
-James y Julie han cortado, por que todo el mundo se enteró.
Y no olvidó el aliciente que incita a cualquiera a ir a contárselo a cualquier otro:
-Pero no se lo digas a nadie.]
[Te lo diré si prometes solemnemente contárselo a cualquier otro.
Molly Weasley II tiene un padre, una madre y una hermana de la que ha esperado durante diez años el nacimiento. Ella quería ser como su primo James II, que es de su misma edad - han nacido el mismo día - y tener hermanos. Al fin lo consiguió. Bueno, ya que hablamos de James, se puede decir que esos dos son inseparables. A donde vaya uno, va el otro y si alguien tiene la desgracia de tenerlos en su casa no los verá separados, sino juntos - y haciendo alguna trastada que se le ocurra a James. Él suele ser el que lleva las riendas en cuanto a trastadas se refiere. Ella es un poco más razonable, aunque nunca cuestione a su primo.
A Molly II le gusta sentarse en el borde de la silla, sin apoyarse en el respaldo, mientras que James se sienta en el borde y usa la silla de tumbona. A Molly le gusta fijarse en los detalles que nadie más ve y demostrados a James que los detalles son importantes. A Molly le gusta llevar el pelo liso y naranja largo y bien cuidado mientras que James se lo corta siempre para no dejar ver el desorden que se le forma en la coronilla pelirroja. A Molly le gusta sentirse identificada con su abuela y tocaya, igual que James siente mucho honor al llevar los nombres de dos merodeadores. A Molly le gusta emparejar a la gente y sobretodo a James con quien menos te lo esperes. A James le gusta sufrir los castigos de sus bromas y no le importa hacer el doble de trabajo y dejar libre a Molly.
Y esas son las preferencias que les llevaron a la situación que nos concierne.
Molly estaba sentada a la mesa de Gryffindor mirando su plato sin saber muy bien qué hacer. Estaba en sexto curso y llevaba los dos meses de clase intentando seguir el trabajo que había dejado en el aire al final del curso anterior. Había en su curso, casa Ravenclaw, rubia, pelo rizado y ojos marrones, una chica que se llamaba Julie. La había conocido el año anterior cuando estudiaban juntas para los TIMOS. Se había dado cuenta de que a Julie le gustaba su primo James y se había metido en la cabeza emparejarlos. Claro que las vacaciones se lo habían impedido. En ellas, James había estado con dos chicas y ella con un chico. Todo había acabado y ahora Molly tenía puestas sus esperanzas en esos dos. Qué más decir que no pegaban ni con cola. Por su lado, James ideaba una nueva trampa para su némesis: Kyle Smith, Slytherin, pomposo y egocéntrico. Un mimado.
Molly estaba sentada mirando al vacío y James se dirigía a ella por inercia, cuando pasaron dos cosas a la vez: Julie, el objetivo de Molly, se sentó en la mesa de Ravenclaw justo en frente de ella; y Smith, el objetivo de James, se levantó de su mesa para acercarse a Julie. Los dos primos Weasley reaccionaron pegando un bote. Nada más. Pero cuando James se sentó al lado de Molly, los dos miraban al mismo punto.
-Mo... Dime cómo puedo cabrear verdaderamente a Smith.
-Hola Jim, que bien verte aquí.
-¿Desde cuando me saludas?
-Creo que la mejor manera y la que le llegará más adentro es quitándole su nueva presa-Molly señaló sin disimulo a Julie y Kyle Smith. El chico estaba a las claras ligando con ella y Julie se daba cuenta y le hacia más gracia que otra cosa, con lo que se burlaba de él, lo que provocaba mayor interés en el chico.
-¿Cómo se llama esa chica? Jane.. Judith...
-Julie.
-Eso. Parece que se lo pasan bien.
-Ay, James, es divertidísimo verlos. Julie se está burlando de Smith en sus narices y el otro solo pone cara de embobado.
-¿Qué dices? ¿De dónde sacas eso?
-Se ve a las claras.
James se levantó. No pensaba sinceramente en la chica que le había señalado su prima sino en joder lo más posible a Kyle Smith. Llegó a la mesa de Ravenclaw en un santiamén, y se inventó la primera excusa que le vino a la cabeza.
-Hola Julie. Me preguntaba si sigues teniendo esos horarios autorellenables -por lo menos recordaba que era ella la que le había ayudado a aprobar más TIMOS de los que había previsto analizando sus notas.
-Potter.
-Smith. No te había visto.
-Estaba hablando yo con ella.
-Julie, si te molesto dímelo y ya vendré más tarde.
-No pasa nada James, solo hablábamos. Si quieres los horarios, debo de tener unos cuantos en la Sala Común.
-Gracias, pero no quiero molestar.
-Ya ves, Potter...-empezó a decir Smith saboreando la victoria.
-No pasa nada, vente y te los doy. Kyle, nos vemos en Pociones, ¿vale?
James siguió a Julie con el regustillo a gloria que le había dejado la cara de frustración de Kyle Smith.
Molly II dio su trabajo diario por concluido. Ya seguiría más tarde. Y añadió a su mente que el primer paso: que James se fije en Julie, estaba hecho. Algún día tendría que agradecer a Kyle Smith. Aunque dudaba que le hiciera ningún tipo de gracia.
Así, Molly se tiró el resto del día de muy buen humor. Tanto que sus amigas le preguntaron qué era lo que la ponía tan eufórica.
-Os lo diré pero es un secreto. No podéis contarlo.
-Ya, ya...
-Al fin conseguiré juntar a James con Julie.
-Mo... ¿Tú crees que pegan?
-Son contrarios, se complementan... ¡Es perfecto!
-Bueno, sea como sea, inténtalo si te hace ilusión.
Asi, la noticia fue corriendo por Hogwarts, variando y tergiversándose.
Una de las amigas de Molly se acercó a su hermana pequeña y confidente y le dijo:
-Molly está emparejando a James con esa Julie, la de Ravenclaw. ¿Te parece normal? ¿Es que no se acuerda que estuve saliendo con él?
-Eso fue hace dos años.
-Aún me duele.
La conversación se quedó ahí. La nueva portadora de la noticia se quejó a sus amigas de lo pesada que era su hermana:
-Solo porque James Potter ya no se fija en ella y va con Julie...
Una amiga de la hermana de la amiga de Molly fue a cotillear con la cotilla del curso superior:
-¿Sabes que a James Potter le gusta Julie?
La siguiente lo comentó con los chicos de su curso.
-Al parecer James Potter está saliendo con Julie.
Y cada componente de el grupo se lo contó a alguien, pero sin olvidar jamás decir:
-Pero no se lo digas a nadie.
Y así a los tres días, un amigo de James se le acercó y le preguntó:
-¿Eh, estás con Julie?
-¿Ella? No, ¿quién te lo ha dicho?
-Lo dicen por ahí...
-Pues que dejen de hacerles caso a los cotilleos.-James se caracteriza por lo poco que le importa lo que piensen de él los demás.
Ese mismo día, James habló con Molly sobre el tema:
-Oye Mo, ¿sabes que dicen por ahí que estoy saliendo con Julie? Pero no es verdad. Esperemos que Kyle se lo crea y se cague en mí.
-¿Qué dices? ¿Quién te ha dicho eso?
-Un amigo.
-Pero... Ahora vuelvo.
Molly había detectado a las dos chicas a las que les había contado lo de James y les preguntó directamente cuál de las dos había soltado prenda. Pero obviamente, las dos lo negaron. Y como eran amigas, se creían entre si.
Después del encuentro, sin embargo, la chica que le había contado a su hermana el cotilleo sobre James fue a preguntarle si había dicho algo por ahí.
-Lo mencioné de pasada...
Se había enterado todo el colegio. Mejor para James. Mejor para...
Molly pensaba en Julie y en que pasaría si se enteraba. Así que puso en practica otro cotilleo:
-James y Julie han cortado, por que todo el mundo se enteró.
Y no olvidó el aliciente que incita a cualquiera a ir a contárselo a cualquier otro:
-Pero no se lo digas a nadie.]