¡Hola a todos!
¡Por fin estoy de vuelta!
Ya sé que he tenido el blog prácticamente abandonado desde hace... ¿un mes? ¿o más?
Lo siento mucho, ya sé que no soy una “bloguera” responsable, y que tengo “a mi niño” (este blog) desatendido.
Pero es que tengo tanto que hacer, y tantas cosas que quiero hacer y que no tengo tiempo de hacer.
Ahora mismo me estoy poniendo como el “quico” de leer libros. Este sábado me fui con Chema de compras “bibliográficas”... y tengo las estanterías que van a reventar de libroooooos. ¡Buaaaa! ¡Y no me los puedo leer todoooos! Compro más que tiempo me da a leer. Chema, que iba cargado con las bolsas, me ha llamado “compradora compulsiva”.
La verdad es que había decidido dejar el blog “en modo espera” porque lo tengo asociado a Zeitgeist, y estoy de Zeitgeist hasta la última punta del último pelo... y como que ya no le veía ni interés ni ná de ná.
Pero... me he decidido a volver por una circunstancia en concreto. Ayer recibimos una serie de amenazas... en otra página. Amenazas de muerte, en concreto. Aquí tenéis la historia completa, en el blog de Chema:
http://chemazdamundi.wordpress.com/2009/07/20/%C2%BFamenazas-a-nosotros-%C2%A1%C2%A1%C2%A1ja-os-vais-a-enterar-de-lo-que-vale-un-peine-conspiranoicos/ Se ve que hay gente a la que le hemos tocado las narices con nuestros artículos (y, voy a admitirlo, con la forma que tiene Chema de contestar los comentarios conspiranoicos), y se ponen frenéticos (yo más bien diría berserker en plan vikingo jotumlandés) cuando ven esos mismos artículos nuestros difundiéndose por internet...
Chema ha tomado las oportunas medidas judiciales y se ha despachado a gusto en su blog.
La nena, que es más fisna y más femenina, ha decidido optar por otro tipo de respuesta.
¿No dicen que o cerramos los blogs o nos pegan un tiro?
Pues no sólo no lo voy a hacer, sino que voy a seguir escribiendo, ea.
Pa chula, yo.
Eso es como cuando los etarras amenazan con atentar contra la construcción de un ferrocarril. Pues ahora vamos y hacemos DOS ferrocarriles o acabamos el proyecto por cojones. Por dar por culo y mostrar que no nos “arrugamos” ante las amenazas.
Si no hubieran venido a tocar las narices, ahora yo seguiría tan ricamente en otros menesteres. Pero como a algunos les revientan los higadillos de ver cómo los ponemos a la altura del betún de Judea (a ellos y sus ridículas conspiranoias), no se pueden estar calladitos, y acaban metiendo la pata al hacerme enfadar con amenazas de niño chico.
Así que voy a volver a escribir.
Seguiré escribiendo sobre los atentados del 11-S y las teorías de la conspiración que los rodean, no os preocupéis, pero lo haré más espaciadamente en el tiempo y con más calma. A fin de cuentas, hay muchas mejores páginas que la mía para hablar de ello (en inglés la mayoría de ellas, eso sí).
A petición popular (en los comentarios, claro), el tema elegido sobre el que continuar escribiendo va a ser las sociedades utópicas.
Es un tema muy interesante, que da para mucho, que no rompe con la crítica y análisis a Zeitgeist que estaba haciendo (de hecho, hablaremos y mucho del utópico Proyecto Venus, que sale en Zeitgeist Addendum), y que enlaza con lo que ya os he escrito en otras entradas sobre lo que siempre he querido hablar: de cómo mejorar el mundo.
Así pues, vamos a hablar de utopías.
Un saludo y permanezcan atentos. Quién sabe: lo mismo empiezo a actualizar más a menudo.