Segunda parte de la magnífica novela que os comentaba anteriormente.
En mi opinión, esta segunda parte goza de un planteamiento mucho más maduro que la primera, que se ajustaba más al prototipo de "novela heroica" con su Dragón malvado, sus Héroes y tal (eso sí, desde el otro lado de la cortina en el que ni los héroes son tan héroes, ni los humanos tan personas). En Hombres de Armas se tratan temas como la muerte y el sexo, temas que en ¡Guardias! ¿Guardias? apenas llegaban siquiera a insinuarse (esto es relativo, ya que la Muerte siempre está presente en los libros de Pratchett) dándole a la historia un desarrollo más adulto, con pasiones, vilezas y traiciones más a flor de piel.
El estilo narrativo es el mismo. La comedia desgarrada; la historia triste que mantiene una sonrisa cínica y descarnada en la boca del lector; el chiste, a veces absurdo, a veces fácil, y a menudo agrio que se saca de casi cualquier situación; la parodia de los conceptos morales; la distorsión de los conceptos humanos... en fin, el estilo que caracteriza la obra de este magnífico escritor inglés.
En Hombres de Armas la trama nos devuelve a Ankh Morpork, brindándonos otra vez la maravillosa compañía de Vimes, Zanahoria y compañía. "Sé un hombre en la guardia de la ciudad". Esta frase aparecida al principio de la novela resume bastante el inicio de la misma. La Guardia Nocturna necesita hombres y así, la bella Angua, el fornido Detritus (Troll más estúpido de lo normal - que ya es decir) y Cuddy, el Enano se unen al peculiar grupo de guardias.
En esta ocasión, el problema no es algo tan vistoso como un Dragón de veinte metros. Es un problema en la sombra, en el silencio. He ahí la cuestión. Un Dragón de veinte metros es algo muy... tangible, por decirlo de alguna manera. Sí, desde luego es un problema muy grande, pero se puede ver y estudiar. En esta ocasión, sin embargo, la novela adquiere un tinte mucho más policial de investigación bajo los tejemanejes de Vetinari, el doctor Cruces, el doctor Carablanca, los alquimistas, los Enanos, los Trolls y los Perros. Sí, todos aportan una piedra más a la causa hasta construír los pilares sobre los que se erige la obra: el robo, y posterior uso, de un "rifle".
Al igual que en la historia anterior los personajes gozan de un desarrollo considerable durante el transcurso de los hechos y todos, y recalco, TODOS los personajes tienen detalles magistrales con los que ganarse la simpatía, o al menos, la sonrisa cómplice del lector más exigente. Es agradable ver que, además, los personajes que vienen del libro anterior siguen evolucionando y no se quedan estancados en la fórmula del éxito de ventas. Un punto más, en mi opinión, para el escritor de Beaconsfield.
Por madurez argumental y narrativa, este libro deja bastante atrás a su predecesor. No obstante veo conveniente leerlos en orden para apreciar, en la medida en la que los personajes se merecen, la evolución de los mismo.
En resumen, otra obra brillante, ingeniosa, agridulce y adictiva en el Mundodisco.
Citas:
- Los enanos amáis el oro, ¿verdad?
- Por supuesto que no. No seas bobo.
- Bueno...
- Lo decimos únicamente para llevárnoslo a la cama
¿Vas a salir o tengo que entrar y ser brutalmente despedazado?
"A veces es mejor encender un lanzallamas que maldecir la oscuridad"
"En conjunto, reflexionó Gaspode, hubiese podido ser mucho peor"
Links de interés:
http://mundodisco.dreamers.com/anot15.htm