Feliz Navidad
Este año no parece Navidad.
Llevo repitiéndome eso desde que caí en la cuenta que la Nochebuena ya estaba aquí y me parecía increíble que hubiese llegado tan pronto y sin yo darme cuenta. De pequeña e incluso un poco más mayor, esperaba con ansias la llegada de esta noche. Nos reuníamos en mi casa o la de mi tía toda la familia y comíamos, cantábamos, contábamos chistes, reíamos, nos dábamos algún detallito (siempre hemos sido de Reyes Magos), los creyentes nos íbamos a la misa del gallo y los no creyentes se quedaban en casa con la fiesta, luego nos volvíamos a unir los demás, sorteábamos quién se disfrazaría de Santa... en fin, que la Nochebuena era una noche mágica. Pero desde hace unos años no es así. El grupo de gente ha quedado reducido a 6 personas y encima este año será la primera Navidad que pasemos sin ella, sin Pepa, la tía de mi madre que era la tía y abuela de todos.
Murió en marzo y pese a que he vivido ya la pérdida de gente cercana, nunca me ha afectado tanto como la pérdida de ella. Era una abuela para mí (y así se lo dije el día que enterramos a su hermana y me dijo "ya sólo te queda tu otra abuela") y aunque a veces se ponía un poco cabezota y cascarrabias, me sentía bastante unida a ella. Era un ser excepcional, que adoraba a sus sobrinos y nunca podré olvidar cada uno de sus gestos, su forma de sonreír, su voz... te quiero, Pepa y te echo de menos.
Será la primera noche sin ella, pero también la primera Nochebuena que paso con mi gorda. No sé si recordáis que papá la trajo a casa la Nochevieja del año pasado. Al principio fue super duro porque nunca habíamos tenido perro, ella extrañaba y no sabíamos tratarla y los primeros días nos planteamos devolverla. Finalmente decidimos tirar adelante con ella y creo que es la mejor decisión que he tomado en mi vida. Negrita me ha cambiado por completo, os lo juro. Antes ni siquiera me paraba a mirar un perro porque no me gustaban, y ahora me paro con todos los perritos que me encuentro, me he concienciado por completo del abandono animal y estoy metida de lleno en protectoras, refugios y me paso el día buscando hogar a perritos abandonados y denunciando situaciones de abandono y maltrato. Mi perra me ha hecho entrar en contacto con el mundo perruno y creo que jamás me apearé de él.
Y bueno, ¿qué decir de mi gorda? Pues que es un trasto, pero cuando hace algo y nos mira con esa carita taaaaaaan preciosa, somos incapaces de regañarla y así está ella, como la reina de la casa. Raro es el día que no llego a casa y la encuentro durmiendo en el sofá en brazos de mi padre o con mi madre cocinándole expresamente para ella su comida favorita. Sí, estamos locos con la perra, pero es nuestra niñita^^
Al final veía yo a reflexionar sobre mi falta de espíritu navideño y me ha salido un breve resumen sobre lo peor y lo mejor del 2013 :S en fin... se me va la pinza un rato.
Sólo quería decir que no parece Navidad porque veo el ambiente un poco enrarecido en las calles, como triste... no sé si será la crisis o que ya se están perdiendo tradiciones. Pero parece que el espíritu navideño brilla por su ausencia y aunque sea algo irreal, a veces creo que sería maravilloso vivir una Navidad como la de las series y pelis, simplemente por tener unos días de ilusión en nuestras vidas. Bastante asquerosa es la realidad los 365 días del año, que Navidad debería ser un momento de respiro y felicidad.
En fin, espero algún día recuperar el espíritu navideño que los años me han robado y a todos vosotros os deseo que paséis una buena noche, que Santa llegue a vuestras casas y para los philers, recordad que hoy toca ver How the ghosts stole Christmas!!
Llevo repitiéndome eso desde que caí en la cuenta que la Nochebuena ya estaba aquí y me parecía increíble que hubiese llegado tan pronto y sin yo darme cuenta. De pequeña e incluso un poco más mayor, esperaba con ansias la llegada de esta noche. Nos reuníamos en mi casa o la de mi tía toda la familia y comíamos, cantábamos, contábamos chistes, reíamos, nos dábamos algún detallito (siempre hemos sido de Reyes Magos), los creyentes nos íbamos a la misa del gallo y los no creyentes se quedaban en casa con la fiesta, luego nos volvíamos a unir los demás, sorteábamos quién se disfrazaría de Santa... en fin, que la Nochebuena era una noche mágica. Pero desde hace unos años no es así. El grupo de gente ha quedado reducido a 6 personas y encima este año será la primera Navidad que pasemos sin ella, sin Pepa, la tía de mi madre que era la tía y abuela de todos.
Murió en marzo y pese a que he vivido ya la pérdida de gente cercana, nunca me ha afectado tanto como la pérdida de ella. Era una abuela para mí (y así se lo dije el día que enterramos a su hermana y me dijo "ya sólo te queda tu otra abuela") y aunque a veces se ponía un poco cabezota y cascarrabias, me sentía bastante unida a ella. Era un ser excepcional, que adoraba a sus sobrinos y nunca podré olvidar cada uno de sus gestos, su forma de sonreír, su voz... te quiero, Pepa y te echo de menos.
Será la primera noche sin ella, pero también la primera Nochebuena que paso con mi gorda. No sé si recordáis que papá la trajo a casa la Nochevieja del año pasado. Al principio fue super duro porque nunca habíamos tenido perro, ella extrañaba y no sabíamos tratarla y los primeros días nos planteamos devolverla. Finalmente decidimos tirar adelante con ella y creo que es la mejor decisión que he tomado en mi vida. Negrita me ha cambiado por completo, os lo juro. Antes ni siquiera me paraba a mirar un perro porque no me gustaban, y ahora me paro con todos los perritos que me encuentro, me he concienciado por completo del abandono animal y estoy metida de lleno en protectoras, refugios y me paso el día buscando hogar a perritos abandonados y denunciando situaciones de abandono y maltrato. Mi perra me ha hecho entrar en contacto con el mundo perruno y creo que jamás me apearé de él.
Y bueno, ¿qué decir de mi gorda? Pues que es un trasto, pero cuando hace algo y nos mira con esa carita taaaaaaan preciosa, somos incapaces de regañarla y así está ella, como la reina de la casa. Raro es el día que no llego a casa y la encuentro durmiendo en el sofá en brazos de mi padre o con mi madre cocinándole expresamente para ella su comida favorita. Sí, estamos locos con la perra, pero es nuestra niñita^^
Al final veía yo a reflexionar sobre mi falta de espíritu navideño y me ha salido un breve resumen sobre lo peor y lo mejor del 2013 :S en fin... se me va la pinza un rato.
Sólo quería decir que no parece Navidad porque veo el ambiente un poco enrarecido en las calles, como triste... no sé si será la crisis o que ya se están perdiendo tradiciones. Pero parece que el espíritu navideño brilla por su ausencia y aunque sea algo irreal, a veces creo que sería maravilloso vivir una Navidad como la de las series y pelis, simplemente por tener unos días de ilusión en nuestras vidas. Bastante asquerosa es la realidad los 365 días del año, que Navidad debería ser un momento de respiro y felicidad.
En fin, espero algún día recuperar el espíritu navideño que los años me han robado y a todos vosotros os deseo que paséis una buena noche, que Santa llegue a vuestras casas y para los philers, recordad que hoy toca ver How the ghosts stole Christmas!!
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