Algo sobre sexo, matrimonio y barrancos...

Apr 08, 2009 21:18

Mi querida apocrypha73, con la candidez que la caracteriza, me asignó tres personajes masculinos. Debo decir, foto mediante para ilustrar el punto, con cuál me casaría, con cuál me acostaría y a cuál lanzaría por un barranco.

Se supone que si alguien comenta esta entrada, entonces yo podré asignarle a su vez a tres personas para que haga lo mismo que yo haré ahora. O sea, elegir entre casamiento, tener sexo como conejo o lanzar a alguien por un barranco. Pero eso es opcional (el que les asigne a tres personas. Si se las asigno, no hay más opción que hacer las tres cosas)

Veamos, entonces, qué me depara el destino.

¿Con cuál me casaría?

Pues con Faramir.




¿Acaso podría haber alguna duda?

Este hombre lo tiene todo. Es buen hermano, buen hijo, asumo que será (por consiguiente) buen marido y buen padre. Es “shenshible”, leal, valiente, íntegro. No le gusta la guerra, pero hace lo que debe cuando debe, porque es un hombre de honor.

En los aspectos prácticos de la vida, una vez más tiene la gran ventaja de no tener madre (aunque asumo que salió así de bien por ella y no por el enfermo del padre), es un optimista, es paciente, sabe esperar y sabe conquistar. Y por sobre todas las cosas, porque es mi hombre irracional, por supuesto.

¿Con quién me acostaría?

Esta costó y bastante, pero creo que elegí bien.

Dean Winchester.




Por muchos motivos, pero por encima de todo, porque por ahí hay un dicho que reza que la práctica hace al maestro. Y creo que con eso resumo todo.

Además, Dean es alguien con quien sería tremendamente complicado tener una relación. No porque sea un cazador, sino porque jamás seríamos él y yo en la relación. Apuesto a que su hermano, todos los demonios del infierno y los ángeles del cielo, estarían siempre presentes.

¿A quién tiraría del barranco?

No me queda otra que a Wesley.




¿Por qué a él y no a los otros? Porque aún cuando creo que Dean se las arreglaría para volver a subir, Wesley no sólo subiría, sino que estaría lo suficientemente cabreado como para enseñarme por qué las chicas buenas no tiran a los chicos peligrosos por un barranco.

Y entonces, ¡voilá!, resulta que en lugar de sólo un muchacho en el punto B… ¡tendría a dos! ¡Ja!

Listo.

Cumplí con mi deber.

Desnudé mi alma.

Besos

Enia

(Nota del editor: la redacción de este livejournal no se responsabiliza por las idioteces que su columnista habitual exprese bajo los efectos de la fiebre y los antibióticos)

nada que aumente la cultura general, meme

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