May 19, 2012 15:08
En mi habitual afán por hacer lo que sea excepto estudiar en cuando llega la época de exámenes hoy he decidido limpiar mi cuarto y me he encontrado con un retrato físico de mi personalidad. En mi escritorio y el suelo de la habitación están apiladas montañas de libros, cómics, revistas viejas, DVDs y trastos varios mezclados con apuntes de hace años, cuadernos de historias inacabadas y proyectos de manualidades que nunca llegué a terminar. Todo esto cubierto por una mano de polvo que lleva acumulándose desde la última vez que tuve exámenes en enero.
¿Y qué deduzco yo de esto? Que soy una vaga que nunca acaba lo que empieza y pospone las tareas más básicas todo el tiempo posible. Deprimente.
Por lo menos apartando las pilas de apuntes para poder pasar la aspiradora he encontrado un libro que había extraviado hace tiempo.
l.español,
lirianis