Día 020/100.

Aug 07, 2012 21:30

Número: 020/100.
Título: Canciones de la Infancia [06/15].
Fandom: A Song of Ice and Fire.
Claim: Joffey Baratheon, Sansa Stark.
Extensión: 504 palabras.
Advertencias: Situado en Juego de Tronos.
Notas: Para la Tabla Infancia de fandom_insano y el quinesob


Marionetas.

Un rugido pugna por escapar de sus labios, cual león de fina estirpe de la cual procede. Odia las lágrimas y el sólo verlas, surcando las mejillas de Sansa Stark, logra enfurecerlo aún más, hasta el punto en que su visión se vuelve roja como la sangre, que algo en su interior clama por derramar. Sin embargo, Joffrey permanece compuesto, calmado como un caballero, como su madre le ha enseñado a portarse. En compensación por todas las emociones que cruzan su cuerpo, una sonrisa satisfecha adorna sus facciones, grotescas para sus detractores y maravillosas para Cersei, que se niega a ver al monstruo que hay en él, pero que Joffrey vive y acepta todos los días.

-No llores -ordena con voz magistral, fuerte. Su poder se imbuye de la visión de Sansa Stark de rodillas ante él, llorando cual indefenso cachorro de lobo. Son tan débiles, le recuerda una voz, aunque él no puede precisarla. Las mujeres son tan débiles-. Quítenle la ropa.

En realidad no quiere verla, no tiene ningún interés en el tema de las faldas o lo que hay debajo de ellas, pero disfruta de la expresión de la lobezna cuando sus órdenes cruzan el aire, sus facciones llenas de manchas rojas de vergüenza, su cuerpo tembloroso cual inservible hoja de otoño.

-Por favor, mi señor -pide ella, cubriéndose como le es posible los pedazos de piel expuestos, piel blanca como el invierno, de loba. No tiene nada de su madre, piensa con desprecio el joven rey, nada de la gracia de su madre, de su compostura. Aunque bueno, ella también es una mujer estúpida. Su padre se lo demostró en más de una ocasión-. Por favor.

Las palabras se mezclan con la imagen de Robert Baratheon, su padre y antecesor. Un hombre ebrio y enorme, pero fuerte y respetable. No había nadie que se atreviera a hacerlo menos, a humillarlo, hacerlo llorar o derrotarlo. Una figura formidable para el joven Joffrey, un sueño inalcanzable para el chiquillo al que dicho rey nunca hizo caso, ni tomó en brazos, ni dio lecciones más valiosas que las del odio.

-Por favor...

-Te he dicho que no hables -ruge Joffrey, haciendo gala de su parte Lannister. En su mente, recuerda la primera vez que escuchó a su padre pronunciar las mismas palabras ante una aterrorizada Cersei primero y luego una furiosa, pero aún así mansa leona. Le había propinado un golpe esa vez, un golpe que logró que su cabeza diera un salto extraño, un golpe que en días posteriores dejaría una horrible marca en su rostro, prueba y monumento al poderío Baratheon.

-Guardias, castíguenla por su insubordinación.

Su sonrisa no desaparece ante el espectáculo que ven sus ojos. Sansa Stark siendo golpeada en repetidas ocasiones, desnuda, frágil e indefensa como corresponde a su género.

Su padre está muerto, pero le ha enseñado bien, piensa Joffrey. Le ha enseñado bien, le ha dado un buen ejemplo a seguir: las mujeres son marionetas, los hombres y los reyes juegan con ellas. Y para desgracia de Sansa Stark, él es tanto rey como hombre.

comm: reto_diario, comm: fandom_insano, comm: quinesob, a: a song of ice and fire

Previous post Next post
Up