yay~
Nombre: Aquella vez
Fandom: Code Geass
Claim: V.V./C.C.
Advertencias: ninguna
Aquella vez, simplemente no se lo pudo creer.
Ahí estaba C.C., sentada en su majestuoso trono, con un talle digno de una emperatriz. Su mirada se perdía en un lugar del techo que él no podía definir, parecía nostálgica.
La noticia recorrió El Culto a una velocidad digna de admirar. C.C. dejaba el poder y entregaba todo a V.V. así nada más, sin ningún motivo aparente. Hubo protestas, claro, no porque V.V. fuese un mal líder, simplemente la preferían.
- ¿Por qué?
C.C. sabía que la pregunta no tardaría en llegar, pero aún así se tomó su tiempo en contestar.
- Porque estoy cansada.
Aún no entendía, pero eso no parecía importarle a la majestuosa mujer.
Luego de una despedida digna de admirar, V.V. asumió el puesto de líder. Durante mucho tiempo, El Culto se mantuvo en completa armonía. Los experimentos avanzaban notablemente, V.V. se sentía orgulloso.
Pero todo cambió cuando esa oveja negra decidió interferir.
Lelouch Vi Britannia.
V.V. nunca se esperó que aquel mocoso descubriera el escondite de El Culto, tampoco llegó a imaginar que su antiguo aliado, Jeremiah Gottwald, se uniera al enemigo alegando que su lealtad solo estaba con Marianne.
Hijo de puta.
Es por eso que, cuando ve aquel lugar en ruinas, se pregunta qué hizo mal. ¿Dónde estuvo el error? ¿Acaso no debió aceptar la decisión de C.C. y admitir que él no estaba capacitado para tal fin…?
No, eso jamás.
El Culto se cae en ruinas, su gente está muerta, toda la información que ha recaudado durante más de cincuenta años está a punto de perderse y él prácticamente no puede hacer nada, solo arrastrarse, luchando por llegar a la puerta.
V.V. quiere creer que no es culpa suya, que en realidad aquello es un sueño y que cuando despierte El Culto permanecerá intacto, con su resplandeciente gloria.
Quiere creer que no pasará nada y C.C. aparecerá entre las sombras, informándole que traicionó a Lelouch para volver a su lado.
Nombre: La ley del más fuerte
Fandom: Shaman King
Claim: Hao Asakura!céntrico, ligero Hao/Yoh
Advertencias: shonen-ai, insinuaciones incestuosas
Destruido, todo está destruido.
Hao ríe sin disimulo. Su risa se expande en el horizonte, llegando a cada rincón posible de aquella ciudad, o al menos, lo que queda de ella.
Está orgulloso, los edificios están en llamas, hay gente corriendo histéricamente por las calles, algunos intentan ocultarse y los cuerpos de unos cuantos shamanes quienes, inútilmente, trataron de detenerlo.
Esos imbéciles….¡¡No saben lo que hacen!!
No saben que el purgatorio ha dado inicio. Desconocen que el mundo necesita ser limpiado de todo rastro de falsedad, hipocresía y debilidad. Ésa es la regla de la vida. En este mundo, sólo los más fuertes sobreviven y en ese grupo no destacan los simples humanos.
Aquellos que no son shamanes.
El Espíritu del Fuego, pletórico, arrasa todo a su paso. Sus seguidores le observan, desde lejos, algo intimidados y al mismo tiempo increíblemente fascinados. Hao no tiene piedad, no importa si son niños, mujeres embarazadas, ancianos. Él acaba con todos, dejando solo cuerpos calcinados en el camino.
Pero Hao sabe que nada de esto será suficiente, la verdad es que él no quiere acabar y reinar solo.
Necesita su otra mitad. O al menos, impedir que acabe con sus planes.
Aquello, en cierto modo, le enfurece. Porque algunas veces la dependencia equivale a un desequilibrio que provoca la debilidad, y él no es débil. Esa ciudad es una prueba irrefutable de ello.
-Amo Hao -uno de sus discípulos se acerca, haciendo una pequeña reverencia-. Los Soldados X se acercan ¿Qué debemos hacer?
Se ríe, nuevamente. Lo hace porque la vida llega a ser tan divertida, que cuando ve en el horizonte al mencionado grupo de shamanes que intentarán detenerlo, lo único que hace es reírse aún más, mofándose de ellos en su propia cara.
Hao también sabe que no debería perder el tiempo con unos idiotas como ellos, pero está de buen humor y por eso se dará el pequeño lujo de acabar con sus vidas.
Nombre: La Villa del Sonido
Fandom: Naruto
Claim: Sasuke Uchiha!céntrico
Advertencias: ninguna
La villa del Sonido está hecha mierda.
Sasuke lo tiene muy en claro, aún y cuando camine entre sus calles y no dirija ni una sola mirada a esa pobre gente, quienes cada día se mueren de hambre. Es, definitivamente, todo lo contrario a la poderosa villa de Konoha.
En ese lugar no hay mucho qué obtener. La tierra cada día está más infértil, el agua está contaminada, no hay hospitales, los edificios se derrumban solos.
La villa del Sonido, o al menos, Orochimaru, se dedica únicamente a atender la academia ninja. La cual no se compara en nada a la de su aldea natal.
Sasuke se esfuerza en demostrar que aquello no le importa. Mas sin embargo, le es imposible sentir algo de lástima por aquella villa destruida y su miserable gente.
Y continúa caminando, con la mirada en alto y aquella aura que inspira miedo y respeto entre la gente de aquel lugar.
No es su intención ayudarlos, él no abogará por ellos ante Orochimaru por una simple y sencilla razón: esto es algo que ellos se buscaron.
¿Por qué no pelean?
Esa es una pregunta que ronda su mente desde hace mucho; una pregunta que parece intensificarse cuando les ve escondiéndose o hablando de él entre susurros, como si realmente no lo notara.
Sasuke odia la servidumbre, por eso también comienza a odiar a esa gente. Ellos, quienes aún cuando pueden hacer algo para salvar sus vidas, todo lo que hacen es llorar y esperar en aquella villa en ruinas.
De repente, el sentimiento de lástima es remplazado lentamente por uno de repulsión.
Repulsión ante aquellos que se dejan manejar tan fácilmente, como si la vida se reduciera sólo a lo que quieren los de arriba y no lo que tú deseas. Sasuke sabe que no puede depender de nadie y que solo se tiene a sí mismo para no dejarse vencer nadie.
Porque, a diferencia de ellos, él sí sabe pelear.
Nombre: Camino en ruinas
Fandom: D.Gray-man
Claim: Komui/Lenalee/Allen, no hay parejas
Advertencias: ninguna
Komui siempre supo que Lenalee tomaría su propio camino.
Lo sabe desde que ella era pequeña. Lenalee, atada a una cama, rebelde de las decisiones tomadas por la Orden Oscura y ese maldito inspector. Sabe que las palabras de Lverrier resuenan en su cabeza y que para ella es una tortura su simple presencia.
Por eso, cuando viaja en una de los barrios desechos de Londres, le es inevitable recordar a Lenalee. Ella, que recorre las calles en ruinas de un mundo podrido.
Observa, con disimulo, a su hermanita; ella permanece sentada en el sillón de atrás junto con Allen, hablando animadamente acerca de lo interesante que será visitar aquel puerto, con los hermosos colores del atardecer.
Cierra los ojos y suspira, al menos, el inspector Howard Link no los acompañó, ya que sería una presencia incómoda para un paseo que se supone debe relajarlos a ambos.
El combate con el nivel 4 dejó en un estado terrible a los exorcistas, principalmente a Allen quien peleó hasta llegar a su límite, sin contar a Lavi y Kanda. El recuerdo se hace vívido en su mente, esa terrible pelea en donde incluso la inocencia tuvo que intervenir para mover su propio cuerpo.
La inocencia.
Komui la detesta. Así de simple. La detesta porque de no ser por ella, no se tendría que ver obligado a dirigir aquel ejército sagrado y podría compartir algo más de tiempo con Lenalee. Quizás, también, porque si la inocencia no hubiese existido los akuma y -con un poco de suerte-, el Conde del Milenio, tampoco.
Quizás, sin ella, pudiera ser un poco más feliz.
-Llegamos.
Pero entonces, recuerda, la ciudad en ruinas dará paso a un reconfortante final. Lo sabe porque cuando los ve a ambos con los ojos iluminados de la emoción, fascinados por un espectáculo tan poco apreciado, reconoce que la vida es un camino que no siempre será bonito, pero que el resultado final siempre valdrá la pena.
Nombre: Visión
Fandom: Earth Maiden Arjuna
Claim: Juna!céntrico, ligeros toques Chris/Juna
Advertencias: ninguna
Juna tuvo una visión.
Se despertó jadeante, sudorosa, con lágrimas en los ojos y la desesperación reflejada con abrumadora facilidad en sus ojos.
La Gota del Tiempo brilla incesantemente, pero no como acostumbra a hacerlo normalmente. Juna lo nota por eso corre hacia el espejo de su habitación, notando de inmediato aquella terrible tonalidad carmesí.
Se llena de terror y Ra-jer se intensifica en su mente. El pánico se apodera de sí misma y todo comienza a volverse borroso, hasta caer en el suelo de su habitación.
El recuerdo de aquel devastador sueño.
Una calle hermosa, los edificios bien cuidados, la gente sonriente. Le recordaba a la ciudad de Tokio y por eso en sus sueños sonrió, diciéndose que todo estaba bien. No había Ra-jer, ni sombras, tampoco tristeza.
Parecía el sueño de Chris, un mundo limpio y cálido. Sin contaminación, ni esperanzas rotas.
Pero de repente, todo comenzó a cambiar. Los edificios, de inmaculados colores, comenzaron a volverse negros por algo que parecía hollín, había gente muerta en las calles, sangre por todos lados, fuego que consumía todo a su paso. La gente moría.
Y entonces lo comprendió.
Aquello no era un sueño, sino una visión del futuro.
Esa era su ciudad, esa era su gente.
El cielo se volvía negro y Ra-jer se hacía presente. Y entonces luchaba, pero no importaba cuántas veces disparara, Ra-jer volvía y no solo, sino que cada vez se hacían más y más. De repente, Chris aparecía, caminaba con dificultad y justo cuando se disponía a ayudarlo, Ra-jer lo devora.
Era el futuro, su futuro.
Llora desconsoladamente, sintiéndose impotente y débil. No se merecía el título del Avatar del Tiempo, en ese momento se sentía incapaz de comprender a la vida y a Chris.
Chris.
Quiere culparlo, quiere llamarlo. ¿Por qué no le dejó morir? ¿Por qué ella? ¿Es que acaso era Juna la única humana que había muerto aquel día? Por mucho que lo intentara, no entendía.
Fandom: Code Geass
Claim: V.V./C.C.
Advertencias: ninguna
Aquella vez, simplemente no se lo pudo creer.
Ahí estaba C.C., sentada en su majestuoso trono, con un talle digno de una emperatriz. Su mirada se perdía en un lugar del techo que él no podía definir, parecía nostálgica.
La noticia recorrió El Culto a una velocidad digna de admirar. C.C. dejaba el poder y entregaba todo a V.V. así nada más, sin ningún motivo aparente. Hubo protestas, claro, no porque V.V. fuese un mal líder, simplemente la preferían.
- ¿Por qué?
C.C. sabía que la pregunta no tardaría en llegar, pero aún así se tomó su tiempo en contestar.
- Porque estoy cansada.
Aún no entendía, pero eso no parecía importarle a la majestuosa mujer.
Luego de una despedida digna de admirar, V.V. asumió el puesto de líder. Durante mucho tiempo, El Culto se mantuvo en completa armonía. Los experimentos avanzaban notablemente, V.V. se sentía orgulloso.
Pero todo cambió cuando esa oveja negra decidió interferir.
Lelouch Vi Britannia.
V.V. nunca se esperó que aquel mocoso descubriera el escondite de El Culto, tampoco llegó a imaginar que su antiguo aliado, Jeremiah Gottwald, se uniera al enemigo alegando que su lealtad solo estaba con Marianne.
Hijo de puta.
Es por eso que, cuando ve aquel lugar en ruinas, se pregunta qué hizo mal. ¿Dónde estuvo el error? ¿Acaso no debió aceptar la decisión de C.C. y admitir que él no estaba capacitado para tal fin…?
No, eso jamás.
El Culto se cae en ruinas, su gente está muerta, toda la información que ha recaudado durante más de cincuenta años está a punto de perderse y él prácticamente no puede hacer nada, solo arrastrarse, luchando por llegar a la puerta.
V.V. quiere creer que no es culpa suya, que en realidad aquello es un sueño y que cuando despierte El Culto permanecerá intacto, con su resplandeciente gloria.
Quiere creer que no pasará nada y C.C. aparecerá entre las sombras, informándole que traicionó a Lelouch para volver a su lado.
Nombre: La ley del más fuerte
Fandom: Shaman King
Claim: Hao Asakura!céntrico, ligero Hao/Yoh
Advertencias: shonen-ai, insinuaciones incestuosas
Destruido, todo está destruido.
Hao ríe sin disimulo. Su risa se expande en el horizonte, llegando a cada rincón posible de aquella ciudad, o al menos, lo que queda de ella.
Está orgulloso, los edificios están en llamas, hay gente corriendo histéricamente por las calles, algunos intentan ocultarse y los cuerpos de unos cuantos shamanes quienes, inútilmente, trataron de detenerlo.
Esos imbéciles….¡¡No saben lo que hacen!!
No saben que el purgatorio ha dado inicio. Desconocen que el mundo necesita ser limpiado de todo rastro de falsedad, hipocresía y debilidad. Ésa es la regla de la vida. En este mundo, sólo los más fuertes sobreviven y en ese grupo no destacan los simples humanos.
Aquellos que no son shamanes.
El Espíritu del Fuego, pletórico, arrasa todo a su paso. Sus seguidores le observan, desde lejos, algo intimidados y al mismo tiempo increíblemente fascinados. Hao no tiene piedad, no importa si son niños, mujeres embarazadas, ancianos. Él acaba con todos, dejando solo cuerpos calcinados en el camino.
Pero Hao sabe que nada de esto será suficiente, la verdad es que él no quiere acabar y reinar solo.
Necesita su otra mitad. O al menos, impedir que acabe con sus planes.
Aquello, en cierto modo, le enfurece. Porque algunas veces la dependencia equivale a un desequilibrio que provoca la debilidad, y él no es débil. Esa ciudad es una prueba irrefutable de ello.
-Amo Hao -uno de sus discípulos se acerca, haciendo una pequeña reverencia-. Los Soldados X se acercan ¿Qué debemos hacer?
Se ríe, nuevamente. Lo hace porque la vida llega a ser tan divertida, que cuando ve en el horizonte al mencionado grupo de shamanes que intentarán detenerlo, lo único que hace es reírse aún más, mofándose de ellos en su propia cara.
Hao también sabe que no debería perder el tiempo con unos idiotas como ellos, pero está de buen humor y por eso se dará el pequeño lujo de acabar con sus vidas.
Nombre: La Villa del Sonido
Fandom: Naruto
Claim: Sasuke Uchiha!céntrico
Advertencias: ninguna
La villa del Sonido está hecha mierda.
Sasuke lo tiene muy en claro, aún y cuando camine entre sus calles y no dirija ni una sola mirada a esa pobre gente, quienes cada día se mueren de hambre. Es, definitivamente, todo lo contrario a la poderosa villa de Konoha.
En ese lugar no hay mucho qué obtener. La tierra cada día está más infértil, el agua está contaminada, no hay hospitales, los edificios se derrumban solos.
La villa del Sonido, o al menos, Orochimaru, se dedica únicamente a atender la academia ninja. La cual no se compara en nada a la de su aldea natal.
Sasuke se esfuerza en demostrar que aquello no le importa. Mas sin embargo, le es imposible sentir algo de lástima por aquella villa destruida y su miserable gente.
Y continúa caminando, con la mirada en alto y aquella aura que inspira miedo y respeto entre la gente de aquel lugar.
No es su intención ayudarlos, él no abogará por ellos ante Orochimaru por una simple y sencilla razón: esto es algo que ellos se buscaron.
¿Por qué no pelean?
Esa es una pregunta que ronda su mente desde hace mucho; una pregunta que parece intensificarse cuando les ve escondiéndose o hablando de él entre susurros, como si realmente no lo notara.
Sasuke odia la servidumbre, por eso también comienza a odiar a esa gente. Ellos, quienes aún cuando pueden hacer algo para salvar sus vidas, todo lo que hacen es llorar y esperar en aquella villa en ruinas.
De repente, el sentimiento de lástima es remplazado lentamente por uno de repulsión.
Repulsión ante aquellos que se dejan manejar tan fácilmente, como si la vida se reduciera sólo a lo que quieren los de arriba y no lo que tú deseas. Sasuke sabe que no puede depender de nadie y que solo se tiene a sí mismo para no dejarse vencer nadie.
Porque, a diferencia de ellos, él sí sabe pelear.
Nombre: Camino en ruinas
Fandom: D.Gray-man
Claim: Komui/Lenalee/Allen, no hay parejas
Advertencias: ninguna
Komui siempre supo que Lenalee tomaría su propio camino.
Lo sabe desde que ella era pequeña. Lenalee, atada a una cama, rebelde de las decisiones tomadas por la Orden Oscura y ese maldito inspector. Sabe que las palabras de Lverrier resuenan en su cabeza y que para ella es una tortura su simple presencia.
Por eso, cuando viaja en una de los barrios desechos de Londres, le es inevitable recordar a Lenalee. Ella, que recorre las calles en ruinas de un mundo podrido.
Observa, con disimulo, a su hermanita; ella permanece sentada en el sillón de atrás junto con Allen, hablando animadamente acerca de lo interesante que será visitar aquel puerto, con los hermosos colores del atardecer.
Cierra los ojos y suspira, al menos, el inspector Howard Link no los acompañó, ya que sería una presencia incómoda para un paseo que se supone debe relajarlos a ambos.
El combate con el nivel 4 dejó en un estado terrible a los exorcistas, principalmente a Allen quien peleó hasta llegar a su límite, sin contar a Lavi y Kanda. El recuerdo se hace vívido en su mente, esa terrible pelea en donde incluso la inocencia tuvo que intervenir para mover su propio cuerpo.
La inocencia.
Komui la detesta. Así de simple. La detesta porque de no ser por ella, no se tendría que ver obligado a dirigir aquel ejército sagrado y podría compartir algo más de tiempo con Lenalee. Quizás, también, porque si la inocencia no hubiese existido los akuma y -con un poco de suerte-, el Conde del Milenio, tampoco.
Quizás, sin ella, pudiera ser un poco más feliz.
-Llegamos.
Pero entonces, recuerda, la ciudad en ruinas dará paso a un reconfortante final. Lo sabe porque cuando los ve a ambos con los ojos iluminados de la emoción, fascinados por un espectáculo tan poco apreciado, reconoce que la vida es un camino que no siempre será bonito, pero que el resultado final siempre valdrá la pena.
Nombre: Visión
Fandom: Earth Maiden Arjuna
Claim: Juna!céntrico, ligeros toques Chris/Juna
Advertencias: ninguna
Juna tuvo una visión.
Se despertó jadeante, sudorosa, con lágrimas en los ojos y la desesperación reflejada con abrumadora facilidad en sus ojos.
La Gota del Tiempo brilla incesantemente, pero no como acostumbra a hacerlo normalmente. Juna lo nota por eso corre hacia el espejo de su habitación, notando de inmediato aquella terrible tonalidad carmesí.
Se llena de terror y Ra-jer se intensifica en su mente. El pánico se apodera de sí misma y todo comienza a volverse borroso, hasta caer en el suelo de su habitación.
El recuerdo de aquel devastador sueño.
Una calle hermosa, los edificios bien cuidados, la gente sonriente. Le recordaba a la ciudad de Tokio y por eso en sus sueños sonrió, diciéndose que todo estaba bien. No había Ra-jer, ni sombras, tampoco tristeza.
Parecía el sueño de Chris, un mundo limpio y cálido. Sin contaminación, ni esperanzas rotas.
Pero de repente, todo comenzó a cambiar. Los edificios, de inmaculados colores, comenzaron a volverse negros por algo que parecía hollín, había gente muerta en las calles, sangre por todos lados, fuego que consumía todo a su paso. La gente moría.
Y entonces lo comprendió.
Aquello no era un sueño, sino una visión del futuro.
Esa era su ciudad, esa era su gente.
El cielo se volvía negro y Ra-jer se hacía presente. Y entonces luchaba, pero no importaba cuántas veces disparara, Ra-jer volvía y no solo, sino que cada vez se hacían más y más. De repente, Chris aparecía, caminaba con dificultad y justo cuando se disponía a ayudarlo, Ra-jer lo devora.
Era el futuro, su futuro.
Llora desconsoladamente, sintiéndose impotente y débil. No se merecía el título del Avatar del Tiempo, en ese momento se sentía incapaz de comprender a la vida y a Chris.
Chris.
Quiere culparlo, quiere llamarlo. ¿Por qué no le dejó morir? ¿Por qué ella? ¿Es que acaso era Juna la única humana que había muerto aquel día? Por mucho que lo intentara, no entendía.