Los Ura, además de bárbaros, son listos. Su guerra consiste en anular la voluntad y la esperanza de la gente, "asimilarlos" para asegurarse que olvidan los recuerdos que les empujarían a rebelarse, los recuerdos que evocan colores, alegría y libertad. Los despersonalizan y les quitan la identidad, los empujan a ser grises como ellos, a no cuestionarse nada. Aunque con el Chico parece que algo ha fallado porque conserva la rabia, las ansias de volar y la capacidad de pensar.
Me encanta la reacción de Brian, que ha sabido interpretar la mirada del niño y, generoso como es debajo de las capas de supuesto egoismo, que no es más que una forma de superviviencia, le ha regalado el corazón de caramelo. Y en el fondo, el Chico se lo ha pagado, porque esa sonrisa vale más que todos los argentos del mundo.
Era inevitable que el niño le recordara a sí mismo. Dos veces abandonado por las personas que tenían que quererlo y protegerlo. Muy triste. Si su corazón no se quedó en aquella habitación, como mínimo se resquebrajó y espero que cuando lo recupere las fisuras estén bien soldadas.
Ha sido un día intenso y triste, pero ha tenido de bueno que al final les ha envuelto una atmósfera cálida y Brian y Justin han vuelto a acercarse logrando un momento de intimidad precioso. Las defensas han caído y las palabras han hecho magia. Y todo conjuro puede romperse, si conoces las palabras adecuadas.
Lo de los Ura me parecía más y más triste a medida que avanzaba porque al fin y al cabo son eso, un negativo de todo lo que podemos perder y aquello en que nos convertimos al perderlo :(.
El chico y su inmensa voluntad, llegé a quererle muchísomo más de lo que nunca habría imaginado <3
Una de las cosas de las que qería hablar es el hecho de que a veces no estamos curados, pero pensamos que sí. Todas las cosas que arrastramos sin ser conscientes de ello, hasta que un día salen a flote. La vida que nos constituye y que a veces, nos restituye. Nuestras maldiciones personales y e hecho de que solo nosotros podemos romperlas (aunque a veces, con ayuda)
tengo aún muchas cosas que contestarte! Pero voy a cachitos ^^.
Los despersonalizan y les quitan la identidad, los empujan a ser grises como ellos, a no cuestionarse nada. Aunque con el Chico parece que algo ha fallado porque conserva la rabia, las ansias de volar y la capacidad de pensar.
Me encanta la reacción de Brian, que ha sabido interpretar la mirada del niño y, generoso como es debajo de las capas de supuesto egoismo, que no es más que una forma de superviviencia, le ha regalado el corazón de caramelo. Y en el fondo, el Chico se lo ha pagado, porque esa sonrisa vale más que todos los argentos del mundo.
Era inevitable que el niño le recordara a sí mismo. Dos veces abandonado por las personas que tenían que quererlo y protegerlo. Muy triste. Si su corazón no se quedó en aquella habitación, como mínimo se resquebrajó y espero que cuando lo recupere las fisuras estén bien soldadas.
Ha sido un día intenso y triste, pero ha tenido de bueno que al final les ha envuelto una atmósfera cálida y Brian y Justin han vuelto a acercarse logrando un momento de intimidad precioso. Las defensas han caído y las palabras han hecho magia.
Y todo conjuro puede romperse, si conoces las palabras adecuadas.
Besos ♥
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El chico y su inmensa voluntad, llegé a quererle muchísomo más de lo que nunca habría imaginado <3
Una de las cosas de las que qería hablar es el hecho de que a veces no estamos curados, pero pensamos que sí. Todas las cosas que arrastramos sin ser conscientes de ello, hasta que un día salen a flote. La vida que nos constituye y que a veces, nos restituye. Nuestras maldiciones personales y e hecho de que solo nosotros podemos romperlas (aunque a veces, con ayuda)
tengo aún muchas cosas que contestarte! Pero voy a cachitos ^^.
Mil besos amor!
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