(no subject)
Autor: autumnxdawn
Fandom: Historia Original (Sogno).
Claim | Personajes: Ágape | Alexis Orwell, Pandora Vilavé, Achilles.
Tabla | Temas: Tiempo | #01 - Pasado, #02 - Presente, #03 - Futuro
Advertencias: El claim es spoiler, pero por lo demás nada, y el último prompt, futuro contiene spoilers pero no contiene nombres de los spoilers.
#01 - Pasado
Al igual que todo el mundo, Ágape se arrepentía de haber hecho muchas cosas en su vida, tanto la humana como en la otra; pero más vale empezar por el principio.
Ágape nació en una familia rica de barbaros, con otro nombre y con otra cara. Era preciosa, como un ángel caído del cielo, su largo cabello dorado le llegaba hasta la cintura, y sus sinuosas curvas hacían que cualquiera que pasará a su lado la mirará. Todo el mundo la amaba, todo el mundo menos las concubinas del príncipe, que veían peligrar su posible trono como reina, y así fue. Al cumplir los dieciséis años, fue casada con el príncipe, transformándola en reina. Era tan preciosa que se rumoreaba por el palacio que el rey no necesitaba concubinas, pues su mujer se lo daba todo. Fue entonces cuando las cosas empezaron a cambiar.
Una de las muchachas que habían sido concubinas del rey fue criada en el bosque, junto a su tía, que pocos años antes había sido matada por bruja, y esta, antes de morir le enseño a Jylia todo lo que sabía hacer, así que sin ni siquiera pensárselo dos veces, Jylia utilizó sus poderes para transformar a la reina en una mora sin figura y fea, pero lo que la concubina no sabía, era que la persona que más amaba a la reina, era la mismísima reina, y cuando s vio transformada en eso, salió corriendo, dejándolo todo mucho más fácil.
Ágape se escondió todo el tiempo que pudo, hasta que un día la encontraron unos romanos y se la llevaron a casa para hacer de sirvienta; pero no sabía hacer nada, la habían educado para que le sirvieran a ella la sopa, no que ella la sirviera, así que rápidamente se deshicieron de ella, dejándola tirada en la calle. Entonces fue cuando conoció al que hasta el momento de su muerte, fue su mejor amante, un joven de pelo rojo y ojos verdes, que afirmaba ser diferente, aunque de hecho lo era, ya que fue capaz de ver que esa no era la verdadera mujer que se dejaba mostrar, no era más que algo ficticio, algo hecho para dañar, así que no dudo a darle el don de la inmortalidad.
Gracias a los grandes poderes de Achilles, el vampiro que la transformó, la muchacha recuperó su cuerpo hermoso, y rápidamente se hizo la amante de la persona a la que más había amado, después de ella misma, claro. Fue entonces cuando el la llamo Ágape, al igual que la diosa de la religión de su abuela materna, al diosa del amor incondicional.
Para la nueva Ágape, el tiempo pasaba en balde, los días le parecían minutos, y las semanas simples horas, y vivió en su utopía particular hasta que pasó lo indeseable.
Dicen las voces antiguas que hay un tipo de persona de la cual no te puedes alimentar, pues su sangre te produce la muerte; ni Achilles ni Ágape lo creyeron, pero al final resultó ser cierto. Y así fue como el amado de Ágape murió, haciendo que de esa manera, el hechizo que había efectuado para que ella volviera a su cuerpo desapareció, al igual que el cuando la sangre le consumió, haciendo añicos todas las ilusiones de Ágape, y sumiéndola en una temible depresión.
Pero por muy extraño que parezca, esto sirvió a Ágape, abriéndole la vista y haciendo que se diera cuenta que existía mundo después de su nariz. Este fue su principio, amargo y cruel, pero gracias a él, todo cobró vida y forma, gracias a la desdichada princesa del norte, Lillith.
#02 - Presente
Para Ágape nunca existió un presente.
Cuando era reina, pasaba demasiado tiempo en la cama con su marido, así que no sabía cuando era de día o no; cuando vivía con su amado Achilles perdía la cuenta del tiempo y de los días; al encontrar a Pandora, Ágape no pensaba en enseñarle lo necesario, sino en el futuro, en lo que acabaría sabiendo, y pasó igual con los otros hermanos de Pandora. Por eso, para Ágape, el único presente que existía era cuando, en el sillón de su gran mansión, acariciaba el pelo de Alexis, mientras este y Pandora leían.
#03 - Futuro
Aunque Ágape lo sabía, no le dijo nada a ninguno de sus hijos, les amaba demasiado. No le dijo a Pandora que ese alguien algún día se dejaría ver la cara, y que se daría cuenta de que lo había tenido al lado todo el tiempo, y tampoco le diría a Alexis que aquella sombra no le dejaría de acechar y que caería en la trampa, tal y como esta quería. Y por supuesto, no les diría a ninguno que moriría, eso era lo único que no diría a nadie, ni siquiera lo pensaba, eso era secreto; para ella y para todos.
Por que quizás esa era la mejor manera de que todo sucediera, que ella no estuviera; porque al fin y al cabo en algún momento tenía que acabar su vida, ¿no?
Fandom: Historia Original (Sogno).
Claim | Personajes: Ágape | Alexis Orwell, Pandora Vilavé, Achilles.
Tabla | Temas: Tiempo | #01 - Pasado, #02 - Presente, #03 - Futuro
Advertencias: El claim es spoiler, pero por lo demás nada, y el último prompt, futuro contiene spoilers pero no contiene nombres de los spoilers.
#01 - Pasado
Al igual que todo el mundo, Ágape se arrepentía de haber hecho muchas cosas en su vida, tanto la humana como en la otra; pero más vale empezar por el principio.
Ágape nació en una familia rica de barbaros, con otro nombre y con otra cara. Era preciosa, como un ángel caído del cielo, su largo cabello dorado le llegaba hasta la cintura, y sus sinuosas curvas hacían que cualquiera que pasará a su lado la mirará. Todo el mundo la amaba, todo el mundo menos las concubinas del príncipe, que veían peligrar su posible trono como reina, y así fue. Al cumplir los dieciséis años, fue casada con el príncipe, transformándola en reina. Era tan preciosa que se rumoreaba por el palacio que el rey no necesitaba concubinas, pues su mujer se lo daba todo. Fue entonces cuando las cosas empezaron a cambiar.
Una de las muchachas que habían sido concubinas del rey fue criada en el bosque, junto a su tía, que pocos años antes había sido matada por bruja, y esta, antes de morir le enseño a Jylia todo lo que sabía hacer, así que sin ni siquiera pensárselo dos veces, Jylia utilizó sus poderes para transformar a la reina en una mora sin figura y fea, pero lo que la concubina no sabía, era que la persona que más amaba a la reina, era la mismísima reina, y cuando s vio transformada en eso, salió corriendo, dejándolo todo mucho más fácil.
Ágape se escondió todo el tiempo que pudo, hasta que un día la encontraron unos romanos y se la llevaron a casa para hacer de sirvienta; pero no sabía hacer nada, la habían educado para que le sirvieran a ella la sopa, no que ella la sirviera, así que rápidamente se deshicieron de ella, dejándola tirada en la calle. Entonces fue cuando conoció al que hasta el momento de su muerte, fue su mejor amante, un joven de pelo rojo y ojos verdes, que afirmaba ser diferente, aunque de hecho lo era, ya que fue capaz de ver que esa no era la verdadera mujer que se dejaba mostrar, no era más que algo ficticio, algo hecho para dañar, así que no dudo a darle el don de la inmortalidad.
Gracias a los grandes poderes de Achilles, el vampiro que la transformó, la muchacha recuperó su cuerpo hermoso, y rápidamente se hizo la amante de la persona a la que más había amado, después de ella misma, claro. Fue entonces cuando el la llamo Ágape, al igual que la diosa de la religión de su abuela materna, al diosa del amor incondicional.
Para la nueva Ágape, el tiempo pasaba en balde, los días le parecían minutos, y las semanas simples horas, y vivió en su utopía particular hasta que pasó lo indeseable.
Dicen las voces antiguas que hay un tipo de persona de la cual no te puedes alimentar, pues su sangre te produce la muerte; ni Achilles ni Ágape lo creyeron, pero al final resultó ser cierto. Y así fue como el amado de Ágape murió, haciendo que de esa manera, el hechizo que había efectuado para que ella volviera a su cuerpo desapareció, al igual que el cuando la sangre le consumió, haciendo añicos todas las ilusiones de Ágape, y sumiéndola en una temible depresión.
Pero por muy extraño que parezca, esto sirvió a Ágape, abriéndole la vista y haciendo que se diera cuenta que existía mundo después de su nariz. Este fue su principio, amargo y cruel, pero gracias a él, todo cobró vida y forma, gracias a la desdichada princesa del norte, Lillith.
#02 - Presente
Para Ágape nunca existió un presente.
Cuando era reina, pasaba demasiado tiempo en la cama con su marido, así que no sabía cuando era de día o no; cuando vivía con su amado Achilles perdía la cuenta del tiempo y de los días; al encontrar a Pandora, Ágape no pensaba en enseñarle lo necesario, sino en el futuro, en lo que acabaría sabiendo, y pasó igual con los otros hermanos de Pandora. Por eso, para Ágape, el único presente que existía era cuando, en el sillón de su gran mansión, acariciaba el pelo de Alexis, mientras este y Pandora leían.
#03 - Futuro
Aunque Ágape lo sabía, no le dijo nada a ninguno de sus hijos, les amaba demasiado. No le dijo a Pandora que ese alguien algún día se dejaría ver la cara, y que se daría cuenta de que lo había tenido al lado todo el tiempo, y tampoco le diría a Alexis que aquella sombra no le dejaría de acechar y que caería en la trampa, tal y como esta quería. Y por supuesto, no les diría a ninguno que moriría, eso era lo único que no diría a nadie, ni siquiera lo pensaba, eso era secreto; para ella y para todos.
Por que quizás esa era la mejor manera de que todo sucediera, que ella no estuviera; porque al fin y al cabo en algún momento tenía que acabar su vida, ¿no?