"Solo soy una chica"
Decidí escribir esto porque ya son varias las personas (lectores en su mayoría) que me preguntan por qué me gusta Mikasa. Yo siento que la pregunta no debería ser "por qué nos gusta Mikasa" sino "qué motivos encontramos para que no nos guste un personaje”.
[No soy una dama]De hecho ¿nunca se sentaron a pensar por qué les gusta un personaje o por qué un personaje es popular en un fandom? (Sí, es hasta el día de hoy que por más que lo pienso no logro entender muy bien la fascinación por Mukuro de KHR!, por Fran sí, aunque no sea de mis favoritos tampoco)
Y es que con Mikasa fue gritar un “¡Al fin! Una mujer que se trata de representar de una manera que no responde a un estereotipo machista”. Es como que alguien me pregunte por qué uno de mis personajes femeninos favoritos es Kagura de Gintama o por qué considero que Sanji de One Piece no es machista.
Aclaro, antes de empezar, que no soy feminazi, porque no va a falta el de turno que lo diga. No lo soy, pero sí soy mujer y es normal que me moleste ver al género mal representado, como también debe ser normal que a los afroamericanos, a los homosexuales, a los gordos o a los judíos les moleste que los estereotipen. A todos nos molesta que nos encasillen en algo que quizás no somos. Soy mujer, pero eso no implica que por ser mujer no pueda partirle la cara a un chico (le he hecho varias veces) o que no pueda ejercer determinados trabajos que en teoría son solo para hombres (habrá que ver, quizás en algún momento se necesite usar el pene y por pudor no te lo dicen).
En fin... comencemos advirtiendo que esto va a estar plagado de spoilers (soy un amor, lo sé) y que para hablar de Mikasa también hablaré de la serie y de otros personajes (es importante entender el contexto en donde está el personaje), sin dejar de lado otras obras shonen (no lo puedo evitar, saben que divago mucho).
Por empezar, para aquellos que no conozcan la obra, diré que Shingeki no Kyojin (SNK) es un manga ambientado en un mundo aparentemente distópico en donde la raza humana, al borde de la extinción, se ha visto obligada a refugiarse tras enormes murallas de más de cincuenta metros a fin de evitar a unas criaturas enormes conocidas como “titanes” y cuyo pasatiempo es asediar humanos.
Dentro de este universo hay fuerzas militares que capacitan a personas para enfrentar la amenaza que son los titanes; los personajes que integran este ejército especial son los protagonistas. Como es de esperar, el manga posee una alta dosis de tragedia, violencia y muerte. Sin embargo, siempre me gusta resaltar que, pese a lo atrayente que pueda ser la sangre o el gore para muchos, en SNK las muertes no se representan de una manera habitual.
Estamos acostumbrados a ver en muchos mangas como la violencia es enaltecida (matar al malo suele ser visto como algo positivo, dejando de lado lo efímero que es la vida), incluso podemos ver como los personajes mueren y por diversas causas reviven, como si pudiéramos tratar a la muerte de manera más ligera y hasta burlarnos de ella. En SNK no pasa eso, cuando un personaje muere, muere.
Por otro lado no hay súper poderes, a excepción de la capacidad de convertirse en titán, algo que merece una mención aparte porque pese a que uno pueda decir "guay, los personajes pueden convertirse en titanes", dentro de la obra esto es una calamidad y conlleva más dramas que soluciones (pregúntenle a Eren, el protagonista principal, si su vida es más sencilla u obtuvo soluciones-respuestas desde que puede convertirse en uno).
Se podría decir que los personajes son comunes, tan normales como lo puede ser cualquiera de nosotros. Eso dota a todos los personajes de una humanidad muy pocas veces vistas en el género en el que está encasillado. No, los personajes secundarios no sacarán un poder de la nada para vencer al malo de turno, dependerán de sus habilidades limitadas y de su astucia (y a veces una pizca de suerte) para salir indemnes de los enfrentamientos. Es un elemento con el que en SNK se juega mucho porque constantemente sabes que el personaje es débil ante una amenaza tan significativa como lo son los titanes (miden de cinco a cincuenta metros) y por esto también sabes, comprendes con claridad, que los soldados que los enfrentan son frágiles como cualquier humano real. Una bala, una caída de varios metros, un golpe certero, y adiós vida. No hay magia, no hay médicos milagrosos. El único resquicio de "magia" o de "súper poder" reitero, está en los titanes. Ellos pueden regenerarse con relativa rapidez y no mueren salvo que les den en su punto vital; razón por la que son un hueso duro de roer para simples humanos que no cuentan con cetros mágicos o armaduras especiales, sino con simples cuchillas (si no eres Rambo, quiero verte en medio de la selva con un Tramontina entre los dientes). Sí, en el manga hay titanes "buenos", pero de todos los personajes “importantes”, hasta ahora, solo conocemos cinco titanes y solo uno sigue activo, que casualmente es el protagonista.
Como decía anteriormente, tampoco tener este poder va simbolizar que el prota tendrá la vida más fácil o las peleas le resultarán más sencillas, al contrario. Desde que Eren consigue ese poder solo descubre lo vulnerable y dependiente que es. No va por la vida salvando a sus amigos con dicho poder, por el contrario, en SNK suele ser el prota quien debe recibir ayuda de los secundarios (que no se pueden convertir en titanes).
Tengamos presente que la fórmula no es: “damisela en peligro/secundario en peligro - héroe al rescate”, sino que la fórmula en este caso es: “héroe en peligro - secundarios al rescate”.
Y es aquí donde quería llegar, porque entre los secundarios relevantes está Mikasa Ackerman, su hermanastra, fuente de un odio francamente inexplicable (al menos para mí).
De entrada se nos presenta a una niña que sale del estereotipo de personaje femenino secundario del que estamos habituados, el de ver a la chica como débil y dependiente del protagonista o de otro personajes (que siempre suele ser masculino), a veces este personaje puede cumplir el rol de un familiar o de un amigo antiguo. Por el contrario, Mikasa resulta ser más fuerte que su hermano y que su amigo Armin, a tal punto que los niños matones de su ciudad le temen más a ella que a Eren.
Pero aquí no comienza a construirse el personaje de Mikasa, sino cuando su vida da un giro al aparecerse unos secuestradores que matan a sus padres y la raptan. En ese entonces Mikasa es una niña, y como cualquier niña de su edad tiene miedo y dudas, podemos inferir que Eren es algo o alguien distinto por su comportamiento en ese entonces, y si bien está allí para rescatar a Mikasa, ella no cumple el papel habitual de damisela en peligro que espera a que su héroe mate al villano y desate las cuerdas, es ella quien, sobre el final, salva a Eren matando al tercer secuestrador.
Ahí ya podemos ver como se tuerce el eterno cliché de la dama en apuros que es inútil y solo se limita a profesar el nombre del protagonista alternándolo con un "sálvame" o "ayuda". (Quiero mucho a Orihime de Bleach, pero su “Kurosaki-kun” quedará por siempre en mi memoria).
Mikasa cambia en ese momento, tiene un clic porque, como en la vida real, atravesar un momento tan traumático deja huellas en la personalidad, no es que con amistad o amor ella va a sanar las heridas. Mikasa se construye poco a poco, pero ese es un punto de inflexión muy importante.
Es un personaje femenino fuerte dentro de un universo controlado por hombres. Y no solo eso, es incluso más fuerte que los hombres que pueblan dicho universo. No en balde termina el entrenamiento con el puesto número uno sobrepasando a personajes que representan nada más y nada menos que a los antagonistas más fuertes de la obra: los titanes.
Eren mismo siendo el prota no supera Reiner o a Bertholdt, incluso a Annie, que es mujer.
Es un motivo para sentirse contenta, desde nuestro lugar, por poder ver, al fin, al género representado de una manera positiva. Podría tirarme a hablar de Annie, pero lo dejaré para más adelante porque se supone que esto está centrado en Mikasa :p Sin embargo me da pie para hablar de otro cliché que en el manga es torcido a medias. Y digo a medias porque pese a que Mikasa es fuerte, tampoco es toda-poderosa e inmortal como muchos argumentan. Hay cierta tendencia a creer que ella es perfecta y si bien tiene cualidades que hablan muy bien de sus aptitudes, necesitó en su momento que Jean interviniera para salvarse e incluso antes necesitó de la experiencia y de la habilidad de un personaje como Levi para rescatar a Eren de Annie.
Y permítanme que lo resalte: RESCATAR A EREN DE ANNIE, porque no es algo muy usual ver al prota ocupando el papel de la damisela en peligro y (para echarle más condimento al asunto) el antagonista sea, además, una mujer.
Annie cumple un papel fundamental en la obra al ser un antagonista. Eren la derrota aprendiendo la técnica que ella misma le enseñó, incluso él reconoce esa superioridad y resalta más adelante que fue un error por parte de Annie haberle enseñado a luchar.
Annie no cumple el papel secundario de antagonista "débil" por el simple hecho de ser mujer, ni tampoco necesita que un hombre-compañero aparezca para salvarla o ayudarla en la pelea como sucede en otras obras (Reiner se limita a escribirle en la mano la ubicación de Eren).
Y si buceamos en otros personajes femeninos de la obra también podemos encontrar a Sasha, quien se tuvo que enfrentar a un titán con tan solo un par de flechas y no hubo allí un personaje secundario que saliera a su rescate. Ymir misma cumple la función de un fiel caballero. Historia busca, por todos los medios, no caer en el papel de damisela (aunque falla). ¿De verdad hay personas que no pueden ver la construcción de los personajes femeninos en esta obra? ¿De verdad hay MUJERES que me preguntan por qué me gusta Mikasa?
Otra cosa que he notado es la mala percepción sobre Mikasa al afirmar que es linda. Busquemos y tratemos de encontrar menciones en las que se asegure que Mikasa es linda, ¿encuentran una siquiera? No, porque no hay. Solo Jean comenta que le gusta el pelo de Mikasa, punto. Ni siquiera él en esa escena dice algo sobre una supuesta belleza. Podemos verla linda nosotros, como lectores, pero dentro del universo jamás se resalta esa cualidad como algo que define al personaje (solo se menciona que es "exótica" o de una raza diferente), de hecho, SNK es lo menos sexista que hay sobre la tierra del shonen: Las mujeres no tienen curvas pronunciadas y no andan con ropas escotadas o faldas cortas. Utilizan exactamente la misma ropa que los hombres y, cuando andan de civil, visten como en su época. Tampoco obtienen beneficios por su feminidad, no ganan batallas de acuerdo a su estatus de belleza.
Mikasa no es un "objeto" sexual, no está para cumplir un mero papel secundario de chica tetona o de chica en peligro. Uno de mis mangas favoritos que es One Piece lamentablemente ha caído en eso, solo basta ver las curvas pronunciadas de Nami y Robin, aun así son personajes que no necesitan ser salvadas, como quizás sí sucede con personajes como Saori Kido de Saint Seiya, quien está siempre en eterno peligro, aunque disiento con la visión que el fandom suele tener porque ella -al menos- se pone en ese lugar por propia decisión; pasa también con Aerith de Final Fantasy quien, incluso sabiendo que va a morir, toma la opción de enfrentar al antagonista sin la ayuda del héroe (muriendo, por supuesto, no todo puede ser perfecto, sin embargo no falla porque su muerte en la historia tiene un fin claro que solo ella conocía en ese momento); y cito dos ejemplos más de mangas que me gustan muchísimo y que lamentablemente no escapan de la fórmula de la princesa en peligro: en Get backers, Himiko siempre es ayudada por Ban Midou y en KHR! Chrome depende de Mukuro para luchar. Ni tratemos de buscar razones por las cuales muchos fans de Bleach no quieren a Orihime (yo la amo, pero uno cuando escribe fics y busca hacerlos IC se sienta a estudiar a los personajes y debe admitir los defectos y virtudes de dichos personajes).
Lo que rescato de mangas como One Piece o SNK no es solo la inclusión de personajes femeninos, sino que estos tengan un papel en el que no se le degrade, que no sean blanco de burlas o de violencia solapada en chistes, incluso que no se las trate como un objeto. Si bien Oda, en estos últimos años, tiende a fallar un poco (basta con ver el diseño de ropa de Nami y Robin), sigo insistiendo que rescato que ellas no necesitan de los hombres del grupo para ganar sus batallas y en general, a excepción de las películas, tampoco suelen ser las damas en peligro. Cuando Nami necesitó ayuda, la recibió luego de atravesar por situaciones que la definían como una chica que sabía valerse por sus propios medios. Cuando Robin necesita ser rescatada, ella decide en primera instancia irse por cuenta propia para salvar a sus camaradas. No son la clásica mujer inútil que es secuestrada por el malo de turno y solo se sienta a esperar ser rescatada; ellas no se apartan de la pelea y además buscan la manera de luchar por su propia cuenta. No es algo que se suela ver en los manga shonen, por eso algunas obras como SNK en este aspecto sobresale con sus personajes femeninos y, en especial, con Mikasa.
Mikasa es la que va tras el protagonista en apuros, es la que toma las riendas, es la que sobresale en un mundo plagado de hombres, demostrando así que las mujeres podemos cumplir con otro papel más allá del de la enamorada de turno del protagonista o la doncella en peligro que necesita ser rescatada. Las mujeres somos más que mero seres que solo piensan en el amor y necesitan de los hombres para ser protegidas, podemos tener inteligencia y saber luchar incluso sin tener una fuerza física excepcional. No dependemos de los hombres, dependemos de nosotras mismas.
Es lindo tener a un chico fuerte que nos cuide y también es lindo ir en busca del amor, pero somos más que eso. Podemos estudiar, podemos trabajar y podemos defendernos. Mikasa misma quiere mucho a Eren y va tras a él, pero ella es más que una chica enamorada del protagonista. Así que dejen de preguntarme qué me gusta ella, porque al menos yo siento que es más que obvio. La pregunta es “¿por qué no debería gustarme?”.
Esto que escribí no es ninguna verdad absoluta, puede que sea una visión muy subjetiva y que, de hecho, Hajime termine haciendo un desastre con su obra. No lo tomen como una ley inamovible, es solo mi opinión. Reflexionar sobre diversos temas, así sean personajes de ficción, hace bien de vez en cuando. Porque no se trata solo de personajes de ficción sino de cómo vemos el mundo.
[No soy una dama]De hecho ¿nunca se sentaron a pensar por qué les gusta un personaje o por qué un personaje es popular en un fandom? (Sí, es hasta el día de hoy que por más que lo pienso no logro entender muy bien la fascinación por Mukuro de KHR!, por Fran sí, aunque no sea de mis favoritos tampoco)
Y es que con Mikasa fue gritar un “¡Al fin! Una mujer que se trata de representar de una manera que no responde a un estereotipo machista”. Es como que alguien me pregunte por qué uno de mis personajes femeninos favoritos es Kagura de Gintama o por qué considero que Sanji de One Piece no es machista.
Aclaro, antes de empezar, que no soy feminazi, porque no va a falta el de turno que lo diga. No lo soy, pero sí soy mujer y es normal que me moleste ver al género mal representado, como también debe ser normal que a los afroamericanos, a los homosexuales, a los gordos o a los judíos les moleste que los estereotipen. A todos nos molesta que nos encasillen en algo que quizás no somos. Soy mujer, pero eso no implica que por ser mujer no pueda partirle la cara a un chico (le he hecho varias veces) o que no pueda ejercer determinados trabajos que en teoría son solo para hombres (habrá que ver, quizás en algún momento se necesite usar el pene y por pudor no te lo dicen).
En fin... comencemos advirtiendo que esto va a estar plagado de spoilers (soy un amor, lo sé) y que para hablar de Mikasa también hablaré de la serie y de otros personajes (es importante entender el contexto en donde está el personaje), sin dejar de lado otras obras shonen (no lo puedo evitar, saben que divago mucho).
Por empezar, para aquellos que no conozcan la obra, diré que Shingeki no Kyojin (SNK) es un manga ambientado en un mundo aparentemente distópico en donde la raza humana, al borde de la extinción, se ha visto obligada a refugiarse tras enormes murallas de más de cincuenta metros a fin de evitar a unas criaturas enormes conocidas como “titanes” y cuyo pasatiempo es asediar humanos.
Dentro de este universo hay fuerzas militares que capacitan a personas para enfrentar la amenaza que son los titanes; los personajes que integran este ejército especial son los protagonistas. Como es de esperar, el manga posee una alta dosis de tragedia, violencia y muerte. Sin embargo, siempre me gusta resaltar que, pese a lo atrayente que pueda ser la sangre o el gore para muchos, en SNK las muertes no se representan de una manera habitual.
Estamos acostumbrados a ver en muchos mangas como la violencia es enaltecida (matar al malo suele ser visto como algo positivo, dejando de lado lo efímero que es la vida), incluso podemos ver como los personajes mueren y por diversas causas reviven, como si pudiéramos tratar a la muerte de manera más ligera y hasta burlarnos de ella. En SNK no pasa eso, cuando un personaje muere, muere.
Por otro lado no hay súper poderes, a excepción de la capacidad de convertirse en titán, algo que merece una mención aparte porque pese a que uno pueda decir "guay, los personajes pueden convertirse en titanes", dentro de la obra esto es una calamidad y conlleva más dramas que soluciones (pregúntenle a Eren, el protagonista principal, si su vida es más sencilla u obtuvo soluciones-respuestas desde que puede convertirse en uno).
Se podría decir que los personajes son comunes, tan normales como lo puede ser cualquiera de nosotros. Eso dota a todos los personajes de una humanidad muy pocas veces vistas en el género en el que está encasillado. No, los personajes secundarios no sacarán un poder de la nada para vencer al malo de turno, dependerán de sus habilidades limitadas y de su astucia (y a veces una pizca de suerte) para salir indemnes de los enfrentamientos. Es un elemento con el que en SNK se juega mucho porque constantemente sabes que el personaje es débil ante una amenaza tan significativa como lo son los titanes (miden de cinco a cincuenta metros) y por esto también sabes, comprendes con claridad, que los soldados que los enfrentan son frágiles como cualquier humano real. Una bala, una caída de varios metros, un golpe certero, y adiós vida. No hay magia, no hay médicos milagrosos. El único resquicio de "magia" o de "súper poder" reitero, está en los titanes. Ellos pueden regenerarse con relativa rapidez y no mueren salvo que les den en su punto vital; razón por la que son un hueso duro de roer para simples humanos que no cuentan con cetros mágicos o armaduras especiales, sino con simples cuchillas (si no eres Rambo, quiero verte en medio de la selva con un Tramontina entre los dientes). Sí, en el manga hay titanes "buenos", pero de todos los personajes “importantes”, hasta ahora, solo conocemos cinco titanes y solo uno sigue activo, que casualmente es el protagonista.
Como decía anteriormente, tampoco tener este poder va simbolizar que el prota tendrá la vida más fácil o las peleas le resultarán más sencillas, al contrario. Desde que Eren consigue ese poder solo descubre lo vulnerable y dependiente que es. No va por la vida salvando a sus amigos con dicho poder, por el contrario, en SNK suele ser el prota quien debe recibir ayuda de los secundarios (que no se pueden convertir en titanes).
Tengamos presente que la fórmula no es: “damisela en peligro/secundario en peligro - héroe al rescate”, sino que la fórmula en este caso es: “héroe en peligro - secundarios al rescate”.
Y es aquí donde quería llegar, porque entre los secundarios relevantes está Mikasa Ackerman, su hermanastra, fuente de un odio francamente inexplicable (al menos para mí).
De entrada se nos presenta a una niña que sale del estereotipo de personaje femenino secundario del que estamos habituados, el de ver a la chica como débil y dependiente del protagonista o de otro personajes (que siempre suele ser masculino), a veces este personaje puede cumplir el rol de un familiar o de un amigo antiguo. Por el contrario, Mikasa resulta ser más fuerte que su hermano y que su amigo Armin, a tal punto que los niños matones de su ciudad le temen más a ella que a Eren.
Pero aquí no comienza a construirse el personaje de Mikasa, sino cuando su vida da un giro al aparecerse unos secuestradores que matan a sus padres y la raptan. En ese entonces Mikasa es una niña, y como cualquier niña de su edad tiene miedo y dudas, podemos inferir que Eren es algo o alguien distinto por su comportamiento en ese entonces, y si bien está allí para rescatar a Mikasa, ella no cumple el papel habitual de damisela en peligro que espera a que su héroe mate al villano y desate las cuerdas, es ella quien, sobre el final, salva a Eren matando al tercer secuestrador.
Ahí ya podemos ver como se tuerce el eterno cliché de la dama en apuros que es inútil y solo se limita a profesar el nombre del protagonista alternándolo con un "sálvame" o "ayuda". (Quiero mucho a Orihime de Bleach, pero su “Kurosaki-kun” quedará por siempre en mi memoria).
Mikasa cambia en ese momento, tiene un clic porque, como en la vida real, atravesar un momento tan traumático deja huellas en la personalidad, no es que con amistad o amor ella va a sanar las heridas. Mikasa se construye poco a poco, pero ese es un punto de inflexión muy importante.
Es un personaje femenino fuerte dentro de un universo controlado por hombres. Y no solo eso, es incluso más fuerte que los hombres que pueblan dicho universo. No en balde termina el entrenamiento con el puesto número uno sobrepasando a personajes que representan nada más y nada menos que a los antagonistas más fuertes de la obra: los titanes.
Eren mismo siendo el prota no supera Reiner o a Bertholdt, incluso a Annie, que es mujer.
Es un motivo para sentirse contenta, desde nuestro lugar, por poder ver, al fin, al género representado de una manera positiva. Podría tirarme a hablar de Annie, pero lo dejaré para más adelante porque se supone que esto está centrado en Mikasa :p Sin embargo me da pie para hablar de otro cliché que en el manga es torcido a medias. Y digo a medias porque pese a que Mikasa es fuerte, tampoco es toda-poderosa e inmortal como muchos argumentan. Hay cierta tendencia a creer que ella es perfecta y si bien tiene cualidades que hablan muy bien de sus aptitudes, necesitó en su momento que Jean interviniera para salvarse e incluso antes necesitó de la experiencia y de la habilidad de un personaje como Levi para rescatar a Eren de Annie.
Y permítanme que lo resalte: RESCATAR A EREN DE ANNIE, porque no es algo muy usual ver al prota ocupando el papel de la damisela en peligro y (para echarle más condimento al asunto) el antagonista sea, además, una mujer.
Annie cumple un papel fundamental en la obra al ser un antagonista. Eren la derrota aprendiendo la técnica que ella misma le enseñó, incluso él reconoce esa superioridad y resalta más adelante que fue un error por parte de Annie haberle enseñado a luchar.
Annie no cumple el papel secundario de antagonista "débil" por el simple hecho de ser mujer, ni tampoco necesita que un hombre-compañero aparezca para salvarla o ayudarla en la pelea como sucede en otras obras (Reiner se limita a escribirle en la mano la ubicación de Eren).
Y si buceamos en otros personajes femeninos de la obra también podemos encontrar a Sasha, quien se tuvo que enfrentar a un titán con tan solo un par de flechas y no hubo allí un personaje secundario que saliera a su rescate. Ymir misma cumple la función de un fiel caballero. Historia busca, por todos los medios, no caer en el papel de damisela (aunque falla). ¿De verdad hay personas que no pueden ver la construcción de los personajes femeninos en esta obra? ¿De verdad hay MUJERES que me preguntan por qué me gusta Mikasa?
Otra cosa que he notado es la mala percepción sobre Mikasa al afirmar que es linda. Busquemos y tratemos de encontrar menciones en las que se asegure que Mikasa es linda, ¿encuentran una siquiera? No, porque no hay. Solo Jean comenta que le gusta el pelo de Mikasa, punto. Ni siquiera él en esa escena dice algo sobre una supuesta belleza. Podemos verla linda nosotros, como lectores, pero dentro del universo jamás se resalta esa cualidad como algo que define al personaje (solo se menciona que es "exótica" o de una raza diferente), de hecho, SNK es lo menos sexista que hay sobre la tierra del shonen: Las mujeres no tienen curvas pronunciadas y no andan con ropas escotadas o faldas cortas. Utilizan exactamente la misma ropa que los hombres y, cuando andan de civil, visten como en su época. Tampoco obtienen beneficios por su feminidad, no ganan batallas de acuerdo a su estatus de belleza.
Mikasa no es un "objeto" sexual, no está para cumplir un mero papel secundario de chica tetona o de chica en peligro. Uno de mis mangas favoritos que es One Piece lamentablemente ha caído en eso, solo basta ver las curvas pronunciadas de Nami y Robin, aun así son personajes que no necesitan ser salvadas, como quizás sí sucede con personajes como Saori Kido de Saint Seiya, quien está siempre en eterno peligro, aunque disiento con la visión que el fandom suele tener porque ella -al menos- se pone en ese lugar por propia decisión; pasa también con Aerith de Final Fantasy quien, incluso sabiendo que va a morir, toma la opción de enfrentar al antagonista sin la ayuda del héroe (muriendo, por supuesto, no todo puede ser perfecto, sin embargo no falla porque su muerte en la historia tiene un fin claro que solo ella conocía en ese momento); y cito dos ejemplos más de mangas que me gustan muchísimo y que lamentablemente no escapan de la fórmula de la princesa en peligro: en Get backers, Himiko siempre es ayudada por Ban Midou y en KHR! Chrome depende de Mukuro para luchar. Ni tratemos de buscar razones por las cuales muchos fans de Bleach no quieren a Orihime (yo la amo, pero uno cuando escribe fics y busca hacerlos IC se sienta a estudiar a los personajes y debe admitir los defectos y virtudes de dichos personajes).
Lo que rescato de mangas como One Piece o SNK no es solo la inclusión de personajes femeninos, sino que estos tengan un papel en el que no se le degrade, que no sean blanco de burlas o de violencia solapada en chistes, incluso que no se las trate como un objeto. Si bien Oda, en estos últimos años, tiende a fallar un poco (basta con ver el diseño de ropa de Nami y Robin), sigo insistiendo que rescato que ellas no necesitan de los hombres del grupo para ganar sus batallas y en general, a excepción de las películas, tampoco suelen ser las damas en peligro. Cuando Nami necesitó ayuda, la recibió luego de atravesar por situaciones que la definían como una chica que sabía valerse por sus propios medios. Cuando Robin necesita ser rescatada, ella decide en primera instancia irse por cuenta propia para salvar a sus camaradas. No son la clásica mujer inútil que es secuestrada por el malo de turno y solo se sienta a esperar ser rescatada; ellas no se apartan de la pelea y además buscan la manera de luchar por su propia cuenta. No es algo que se suela ver en los manga shonen, por eso algunas obras como SNK en este aspecto sobresale con sus personajes femeninos y, en especial, con Mikasa.
Mikasa es la que va tras el protagonista en apuros, es la que toma las riendas, es la que sobresale en un mundo plagado de hombres, demostrando así que las mujeres podemos cumplir con otro papel más allá del de la enamorada de turno del protagonista o la doncella en peligro que necesita ser rescatada. Las mujeres somos más que mero seres que solo piensan en el amor y necesitan de los hombres para ser protegidas, podemos tener inteligencia y saber luchar incluso sin tener una fuerza física excepcional. No dependemos de los hombres, dependemos de nosotras mismas.
Es lindo tener a un chico fuerte que nos cuide y también es lindo ir en busca del amor, pero somos más que eso. Podemos estudiar, podemos trabajar y podemos defendernos. Mikasa misma quiere mucho a Eren y va tras a él, pero ella es más que una chica enamorada del protagonista. Así que dejen de preguntarme qué me gusta ella, porque al menos yo siento que es más que obvio. La pregunta es “¿por qué no debería gustarme?”.
Esto que escribí no es ninguna verdad absoluta, puede que sea una visión muy subjetiva y que, de hecho, Hajime termine haciendo un desastre con su obra. No lo tomen como una ley inamovible, es solo mi opinión. Reflexionar sobre diversos temas, así sean personajes de ficción, hace bien de vez en cuando. Porque no se trata solo de personajes de ficción sino de cómo vemos el mundo.