Cosas de las que hablar...
El otro día estaba pensando en los comentarios y en las discusiones que se suscitan de vez en cuando respecto a ellos y fue como si encontrara las palabras exactas que definen lo que pienso de ellos. Es obvio que la cantidad de comentarios no mide si un fic es bueno o malo, pero sí mide si un fic es popular. Y con independencia de la calidad, ser popular es algo bueno en sí mismo. Ningún escritor escribe un libro y piensa "ojalá sólo lo lean un selecto grupo de eminencias". Ningún director rueda una película, aunque sea una obra en tiempo real sobre el crecimiento de la hierba, pensando "ojalá sólo la vean diez personas, no diez millones". Aunque la obra no sea mainstream o convencional, todos aspiran/aspiramos a que le guste a la mayor cantidad de gente posible. Así que en resumen, creo que la cantidad tb importa.
Pero bueno, yo en realidad venía a hablar de libros.
9.-La marcha zombi, de Max Brooks. Esto es lo que espero encontrar cuando me compro un libro sobre historias de zombis, muchas gracias. Son todo historias enmarcadas en el canon de Guerra Mundial Zombi y uno de los cuentos me tiene el corazón dividido. Introduce vampiros en el universo, y por un lado, vale, los vampiros son siempre bienvenidos, pero la verdad es que no pegan, le resta credibilidad a un universo donde los zombis tenían una explicación "científica".
10.-Cordero, de Christopher Moore. Esta es una de las historias más entrañables e hilarantes que he leído en mucho tiempo. El libro narra el Evangelio según Levi, al que llaman Colleja, mejor amigo de Joshua de Nazaret desde los once años hasta el final. Te partes. Y aunque sea un libro de humor, es muy respetuoso con la figura de Jesús y con la religión. El autor sigue la teoría de muchos expertos que creen que entre su infancia y su lanzamiento oficial como Mesías estuvo viajando por Oriente y entrando en contacto con las religiones de la época. El modo en el que mezcla los hechos bíblicos y los inventados es genial, muy ingenioso.
Joshua es totalmente adorable, es que te lo comerías. Y Colleja también, me encanta; es más trasto y mucho más cínico, pero el modo en el que trata de proteger a Josh incluso de su propia bondad y generosidad es enternecedor. Pero al mismo tiempo, en serio, pocas veces me he reído tanto con un libro. La escena en la que los dos están escribiendo el Sermón de la Montaña es una de las cumbres de la literatura de humor. Yo tuve que parar un par de veces porque las lágrimas no me dejaban leer las palabras.
En fin, totalmente recomendado.
Ya que menciono a los zombis, un saludo a los tontainas de TWD, que siguen en su línea. Y digo yo, el zombi que ya sabéis, ¿era Harry con su Capa de Invisibilidad aún encima o un invasor romulano con su dispositivo de ocultamiento? Porque si no, no me lo explico.
Pero bueno, yo en realidad venía a hablar de libros.
9.-La marcha zombi, de Max Brooks. Esto es lo que espero encontrar cuando me compro un libro sobre historias de zombis, muchas gracias. Son todo historias enmarcadas en el canon de Guerra Mundial Zombi y uno de los cuentos me tiene el corazón dividido. Introduce vampiros en el universo, y por un lado, vale, los vampiros son siempre bienvenidos, pero la verdad es que no pegan, le resta credibilidad a un universo donde los zombis tenían una explicación "científica".
10.-Cordero, de Christopher Moore. Esta es una de las historias más entrañables e hilarantes que he leído en mucho tiempo. El libro narra el Evangelio según Levi, al que llaman Colleja, mejor amigo de Joshua de Nazaret desde los once años hasta el final. Te partes. Y aunque sea un libro de humor, es muy respetuoso con la figura de Jesús y con la religión. El autor sigue la teoría de muchos expertos que creen que entre su infancia y su lanzamiento oficial como Mesías estuvo viajando por Oriente y entrando en contacto con las religiones de la época. El modo en el que mezcla los hechos bíblicos y los inventados es genial, muy ingenioso.
Joshua es totalmente adorable, es que te lo comerías. Y Colleja también, me encanta; es más trasto y mucho más cínico, pero el modo en el que trata de proteger a Josh incluso de su propia bondad y generosidad es enternecedor. Pero al mismo tiempo, en serio, pocas veces me he reído tanto con un libro. La escena en la que los dos están escribiendo el Sermón de la Montaña es una de las cumbres de la literatura de humor. Yo tuve que parar un par de veces porque las lágrimas no me dejaban leer las palabras.
En fin, totalmente recomendado.
Ya que menciono a los zombis, un saludo a los tontainas de TWD, que siguen en su línea. Y digo yo, el zombi que ya sabéis, ¿era Harry con su Capa de Invisibilidad aún encima o un invasor romulano con su dispositivo de ocultamiento? Porque si no, no me lo explico.